Partida Rol por web

— Hola — También saludo. Se notaba que solo debía tener poco más de un año, quizás dos. — ¿Tienen un momento para que les hablemos de nuestra señora, Asfalto?

Por pura casualidad, Luna Nueva se dirigió hacia una ventana en la cual estaba pasando algo menos corriente que el típico pajarillo que se posa del otro lado del vidrio para comer la comida de aves que el humano colocaba. Un gato estaba allí sentado, mirando hacia el interior. Cuando te ve entrar en la habitación suelta un maullido y araña el cristal en un gesto para atraerte.

— Hola — Saludó una vez Luna Nueva se hubiera acercado lo suficiente. Estaba sentado por lo que era más difícil interpretar señales en su cola pero esta se encontraba tiesa y estirada pegada al suelo, al menos no indicaba que estuviera irritado o amenazante. — ¿Tienes un momento para que pueda hablarte de la señora, Asfalto?

-¿Asfalto?- Pregunto, extrañada por sus palabras, mientras me muevo en silencio hasta ponerme a su misma altura y sentándome al otro lado del cristal de la ventana,  con disimulada curiosa por la presencia del gato desconocido continúo hablando- ¿Estás seguro de que no te has equivocado de casa?

Estaba caminando con el pequeño cuando dos mas se acercan y estos empiezan hablar... Lo unico que faltaba que unos gatos vengan profesando sobre su señora, parecían esos humanos que se levantaban temprano e iban tocando casa por casa.

- Buenas noches, el pequeño es el que dice que quiere hacer. - Yo solo estaba acompañandolo nada mas, solo porque me preocupaba que su cuerpo fuera encontrado muerto. Me quede esperando que el domestico dijera algo.

— Espera... — Dijo de pronto el callejero más maduro ni bien Sombra dijo aquello. — Tu no eres... ¿Sombra? — Entonces pasó estirar un poco el cuello hacia el otro olfateando el aire. — Creo que eres Sombra, nunca nos hemos visto, pero te pareces al gato que mencionan los habladores, parece que tu reputación te precede. Se cuentan chismes en las calles sobre que te metes a pelear con perros y gatos por igual, si la mitad de lo que se dice es cierto entonces esta claro que eres un superviviente.

— ¿En serio? — Pregunto asombrado mirando a su compañero, pero enseguida volvió a mirar a Sombra y desde ese momento no aparto sus ojos bien abiertos como si estuviera atontado — Ohhh... Sombra...

espero la respuesta del gato que me acompaña cuando otros 2 llegan profesando sobre una diosa antes que pudiera hablar el gato contesta por mi dejandome a mi la decision de saber quienes son, pero una vez mas los otros 2 hablan y dicen que lo conocen asi que se llama sombra no sabia si a sombra le molestaba pero tenia curiosidad por esos 2 y su diosa para llegar al punto de pareserse a los humanos que tanto le molestaban  a mi dueño escucharemos sobre su diosa pero necesitamos informacion de un gato en concreto un favor pata a pata les parece muevo mi cola para que sepan que estoy interesado 

— No. — Responde simplemente. — Yo soy uno de los enviados de Asfalto. Mi tarea es visitar las casas que aun no han sido visitadas para comunicar a gatos y perros por igual de nuestra amada señora Asfalto. Ella es la gata más vieja de este pueblo, ha sido madre de muchos y abuela de muchos más, yo mismo soy uno de sus muchos nietos. — Entonces dedica una larga mirada por todo el cuerpo de la gata, con una expresión que parecía ser una mezcla de condescendencia con un creciente interés — Me llaman Sal, es un placer ver a una hembra tan bella, ojalá pudiera olerte... ehh... pero volviendo a lo que vine: ¿Debo asumir que como minina doméstica no estas enterada de nada de lo que ha estado sucediendo en Roland desde hace muchas estaciones ya?

— Ohhh... es Sombra... no puedo creerlo... creí que sería más grande... y viejo...

— !Ejem! — Suelta una especie de bufido disimulado con una tos.

— ¡Oh! Si, claro... ehh... Ay... yo me lo sabía, ¿como era? — Dice bajando la mirada al suelo y poniendose cada vez más nervioso.

Me quedé escuchando sus palabras, pensaba que el olor del doméstico me ayudaría pero eran buenos. Sombra era mi nombre aunque no me interesaba ya, era un callejero que ayudaba pero al saber de mis historias los mire.

-Tengo mi edad pero si soy yo. No sé qué cuentos habrán comentando pero si soy un sobreviviente. Dije mirándolos.

-No soy la gran cosa, y por favor el crío les pregunto algo. Miren lo pequeño que es no les dará ternura. Me daba asco hablar así pero no quería más ojos sobre mi.

— Ufff... — Suelta con irritación al ver que su compañero no hablaba, entonces se adelanta un paso empujando intencionalmente a un lado al otro. — Me llaman Tiz, y a este Flaco. ¿No saben que ha estado ocurriendo desde hace varias estaciones aquí? — Pregunta, aunque no espera respuesta — Asfalto es la gata más vieja del pueblo, madre de muchos y abuela de muchos más. A ella seguimos porque es la más sabia. Ella es la que a empezado todo esto, la que empezó a organizar a todos sus hijos y luego a atraer a los demás. A nosotros se nos ha encargado la tarea de transmitir su nombre para atraer a más a la causa que cada vez necesita de más. — Entonces dirigió una mirada analítica a ambos. Una más respetuosa a Sombra, evitando mirarlo a los ojos, y una más desdeñosa y atenta a Little Cloud. — ¿Alguna vez han visto algún ser fuera de toda relación con el mundo natural? ¿Han oido historias de sus madres al menos?

Su deducción fue acertada, su compañero de especie tenía planes carnívoros para el y no quería formar parte de ellos.

La persecución fue intensa, prado a lindero, lindero a túneles y túneles a arboledas, este zorro lo igualaba en manejo del terreno.—Rayos, es bueno, es muy bueno.—penso sorprendido. Pronto llegaron al punto en que se arriesgo e intento saltarle encima.

—Rayos, no te lo dejaré fácil muchacho.

Pensado así intento hacerle una finta y evadirle en plena faena. Tal vez no tendría suerte.

Una rápida y molesta sacudida de la cola traiciona el resto de mi en apariencia indiferente lenguaje corporal cuando Sal menciona el término minina doméstica -Llevo aquí desde principios del invierno pasado, así que tendrás que disculpar el hecho de que no esté muy enterada de lo que haya pasado fuera de esta casa-contesto quedamente cuando el final de la frase vuelve a llamarme la atención.

me siento frente a los gatos flaco y tiz haciendo que me miren en vez de a sombra, coloca mi cola rodeando mis patas, mi tamaño es bastante menor al suyo asi que los miro desde abajo y prosigo que interesante, nos planteremos unirnos pero antes ¿conocen de un gato negro que lucho con "monstruos"  hace poco?