Partida Rol por web

Cuando Philipp me coge la linterna dejándome libre, saco las bridas y la cinta de embalar y acercándome a donde Sven esta le paso una brida para que ate las muecas del herido, mientras yo cortando la cinta de embalar le tapo la boca dándole una vuelta completa a la cabeza para que no se la pueda quitar.
Después voy donde el chulo que ha hablado y cogiéndole las manos se las ato a la espalda con una brida.
Después reúno a Carss y a Allan y les digo:- Soldados, colocaros a unos 50 metros de este punto, ocultos. Tu Carss hacia el norte, y tu Allan hacia el sur, (llévate la ametralladora), si veis algo acercándose, o que os llama la atención hacernos dos señas con las linternas que se oculten a unos 20 metros en cada dirección de la carretera y que avisen con las linternas si ven llegar algo.
-Venga, a moverse.
Philipp estaba ocupado, pero se debía ampliar el circulo de vigilancia, los disparos y los gritos podrían atraer a alguno a ver que pasaba. La perdida del vehículo era un desastre, pero tenían uniformes, y sabían de que unidad eran, incluso el nombre de uno, ahora le tenían que sacar el lugar del radar, cabía la posibilidad de que no lo supiera, pero deberían hacer todo lo posible para hacerlo.

Wolfram empezaba a ponerse nervioso, el tiempo iba pasado y no conseguían nada, si había que hacerles hablar a Wolfram se le empezaban a ocurrir unas ideas muy absurdas sacadas de las películas que había visto en Alemania, pero si era el único recurso, las tendría que hacer, aunque alguna le revolvía el estomago. Pero todo por reponer el honor familiar.

¿Acaso aspiran a héroes? - pregunta sorprendido el cabo mientras lo atais - Hay mas de 20.000 soldados aliados en esta isla. Imagino que no habrán traido bridas suficientes para todos. En fín, aunque sea solo por comodidad podrían sacar a mi compañero de la carretera y ponerlo a un lado con la pierna en mejor posición. Solo para que deje de chillar, ya saben.

- SON LAS 03:00hs - 2ºC -

- Querrá decir que son 20.000 ovejas a las que han echado a patadas de Grecia y que están embotelladas en esta roca. Los griegos no tienen armas. Los neozelandeses no han pegado un tiro aún en esta guerra. Somos nosotros quienes no podemos aceptar la rendición de todos. Ahora Where is the radar?

Ziska hace el numerito del buen patriota, aunque en el fondo preferiría ser él quien se rindiera...

Bien. Ya había escuchado suficiente. A la orden de Philipp, me cuelgo el fusil a la espalda y pido una cuerda a quien la tenga. Canturreando Lily Marlene, paso la cuerda por el cuello del soldado herido, después le vuelvo a atar las manos con la misma cuerda y me lo llevo a rastras hasta el borde del río.
Una vez allí, ato el otro extremo de la cuerda a el árbol más cercano al río.
Después me doy la vuelta y con una gran sonrisa miro al sargento ese y digo:- Ziska. Dile a ese imbécil que contesté bien y rápido todo lo que quiera saber Philipp o si no su amigo irá al río y después ya se me ocurrirá algo para él.

Allan se dirigió hacia el sur y, tras la puntualización de Wolfram, recogió la ametralladora con el resto de bártulos.
No sabía donde había puesto la linterna, ¿le habían dado una? en fin pensó que ya se la apañaría de cualquier manera. Buscó un sitio donde tuviera buena visión, con buena cobertura y esperó a nuevas órdenes.
- Siempre nos toca currar a los mismos, dos vigilando y seis divirtiéndose con el enemigo

Ahhhhhh!

- Her Bauer, por favor, cuelgue al sargento primero también.- Dijo encendiendo un cigarrillo y ofreciéndole otro a Ziska y von Bray. 

¡Hijo Putas! ¡Nazis de mierda!

Me alejo unos pasos de la escena, no quiero ni presenciar lo que amenazan con hacer, pero ahora soy sólo un soldado así que me limito a expresar mi profundo desagrado con una mueca, a la vez que me enciendo un cigarrillo tras el coche.

Ziska traduce lo que le habían ordenado. El cabo se pone cada vez mas serio. Te ayudaré con la soga rademacher.

No os diremos nada. Podeis torturarnos pero no os diremos nada, nazis de mierda.

Me acerco sin decir palabra y con la culata metálica del MP40 se lo estampo en medio de la nariz partiendosela, la cual empieza a sangran abundantemente.
Luego me doy media vuelta y digo:- Siga con la pregunta. Si se pone impertinente, úselo como cenicero, en la academia tenia compañeros de las SS y de vez en cuando les hoy hablar de torturas.

Hans bajo al rio donde estaba el coche, empezó a mirarlo con el agua llegándole hasta la cintura, el motor estaba anegado y el eje roto.

Era inservible…

Escucho a Philipp preguntarle si en el vehículo había una radio, se asomo y rebusco a ver si veía algo decente, y ya que estaba registro al muerto por si tenía cualquier cosa que mereciese la pena. Ya que iba a pillar una pulmonía por estar con esa temperatura dándose un baño por lo menos que se llevara algo a cambio. 

Parecía que el suboficial no tenía ganas de hablar, así que había que hacer algo. Cogí un piedra grande y sólida y con ella en la mano le dí un golpe en la cabeza... o dos, hasta que el soldado quedó inconsciente.
Después, con la ayuda de otro y con toda la brutalidad que me fue posible tiré el cuerpo del soldado inconsciente al río.

Philipp se acercó al sargento apuntándole con el subfusil, mientras le iluminaba la cara bien cerca de los ojos:

— ¡Habla de una puñetera vez! ¡Es tu última oportunidad! ¿Quieres pudrirte en el río como tu compañero? Dinos dónde está ese radar... y tendrás una oportunidad de ver a tu familia. Dices que sois más que nosotros. Seguro... pero no van a venir tus amigos a buscarte. Soy el único que te puede salvar, cabronazo. Tienes un minuto para empezar a decirnos dónde está esa instalación o acabaremos con esto de una manera dolorosa... jodidamente dolorosa. El soldado Bauer sabe hacer su trabajo de forma lenta y precisa. De hecho está aquí para eso. Y nos sobra todo el tiempo del mundo para oír como cantas. — Luidl mentía, pero era imposible que el neozelandés supiera de sus planes. 

Luego le golpeó con violencia en el bazo, con la culata de su arma:

— ¡Habla, coño! ¿Quieres pasar a la historia como el gilipollas que murió por defender un radar? ¡Dummkopf!

Procuró que no se notase demasiado que era vital conseguir las coordenadas de la instalación o sino sus hombres comenzarían a impacientarse... más.

El soldado brutal e inhumanamente asesinado cae al rio manando sangre. Seguramente morirá ahogado en unos segundos.

Ahhhh! - se sigue quejando el soldado - What guarantees do I have that do not kill me? You are murderers, not soldiers. If I tell you where the radar is also will kill me.

Bueno bueno. Que se entretengan con los Tommis, Ausis o lo que sean esos. Me quedo vigilando, tumbadito y cómodo. Espero que sean algo más convincentes, porque si no, ...

- Remata al que chilla y así los asustarás para que hablen. Si no dicen nada, por lo menos nos habremos librado de sus gritos. Dice, en tono de broma.