Partida Rol por web

Live Without Limits

Día 1 - Bienvenidos a Westworld - Sweetwater

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08/05/2017, 12:10
Douglas Merry

- Pero qué... 

Douglas se sorprendió ante el experimento de Jacobi. Luego se echó a reír.

- Venga ya ¡no me jodas! ¡Así no tiene puta gracia! - le dijo al aire - Entiendo que no podamos palmarla pero al menos debería haber alguna penalización: una parada del sistema, expulsión, yo que sé... ¿qué gracia tiene ser superman?

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08/05/2017, 15:56
Director
Sólo para el director

Notas de juego

Mientras la chica me respondía, mi otro foco de atención se centraba en el Jacobi y su experimento. Sonreí al ver el resultado - Vaya amigo, tiene valor, se jugó el físico – Sonreí de medio lado.

Douglas se sorprendió ante el experimento de Jacobi. Luego se echó a reír.

- Venga ya ¡no me jodas! ¡Así no tiene puta gracia! - le dijo al aire - Entiendo que no podamos palmarla pero al menos debería haber alguna penalización: una parada del sistema, expulsión, yo que sé... ¿qué gracia tiene ser superman?

XD han picado!

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08/05/2017, 14:54
Ethan Bullock

Todavía podía sentir el aroma de la pólvora incrustado en mis fosas nasales y la adrenalina por lo visto en el piso de abajo latía con fuerza en mis venas dejando a su paso una sensación ácida y dulce al mismo tiempo. Me excitaba sólo de recordarlo, joder. Las caricias de las tres chicas ayudaban, por otro lado. Me dejaba hacer, sentado en la cama, disfrutando de sus manos, sus pechos y sus labios.

Y de pronto me pregunté qué pasaría si cogiese la peacemaker y le disparase a una de ellas. ¿Se desplomaría de una forma tan real como las otras «muertes» que había visto? La sensación de poder fue indescriptible con la idea, a pesar de que no creía que fuese de verdad —o tal precisamente vez por ello—. 

Fue ese pensamiento el que me provocó ganas de ser yo quien tomase el mando. Así que sin dejar de besar a la rubia me puse en pie y después las coloqué a las tres en la cama, a cuatro patas. La pelirroja en el medio, la morena a la izquierda y la rubia a la derecha. Las miré, así expuestas para mí y mi sonrisa fue creciendo en lascivia al mismo tiempo que se me ponía cada vez más dura. 

Ahí se me fue la olla, joder. Empecé a follarme a la del medio como si no hubiera mañana mientras le metía los dedos a las de los lados. Y luego cogí la pistola y mientras seguía bombeando acaricié la espalda y las nalgas de la rubia con el cañón, incluso rozando su entrada con el arma. En mi mente jugueteaba con la idea de disparar y con ese pensamiento mi mente se nublaba con el olor de la pólvora y era suficiente para excitarme más y más. 

Me puse a mil, a punto de estallar, pero entonces salí de la monada pelirroja. No quería acabar todavía. Iba a pagar por ellas, así que quería que fuese inolvidable. Me hice sitio para subirme de nuevo al jergón y tiré de la muñeca de dos de ellas para que me la chuparan mientras yo le comía la boca a la otra.  

Notas de juego

He manejado un poco a las chicas dando por hecho que al ser de pago harán un poco lo que yo quiera, para poder avanzar un poquito. Pero si he hecho mal, avisadme y yo corrijo lo que haga falta sin problemas :). Igualmente, si queréis que siga hasta que termine la situación, decidme y sigo.

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08/05/2017, 22:33
Ruby Rose Petterson

La carnicería estaba servida. Sin duda, se habían montado performances de cojones. Los "cadáveres" daban el pego. De ser una persona impresionable, quizá estaría ahora mareandome o deseando irme a la puta como Rick, al que por cierto parece dan una solución. Miro todo, aun sintiendo el sabor nauseabundo del tabaco de mascar en la boca. Al menos sería mejor que aguantar un monazo de narices, aunque tenga que hacer algún mohín que otro a veces.

Una detonación me sobresalta y doy un bote en el sitio. El señor barbas había perdido la cabeza y se había autodisparado... ¿que coño esperaba? ¿que fueran pistolas de verdad? De ser así aquí caerían de verdad personas y no creo que eso convenga al parque.

- Mierda... ¿Pero que coño hace? - me sale decir, en modo ladrido, me pitaban los oidos del tiro. 

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09/05/2017, 13:07
Sarah Winters

Estaba sentada en la barra junto a otro de los chicos del tren cuando sonó el disparo. La impresión me hizo agacharme de repente y cubrirme la cabeza. Miré a todos lados, buscando al que se había disparado, y al ver que estaba bien respiré aliviada. Joder, qué loco debía estar alguien para probar algo así. Salvo que fuera otro actor, claro, y nos estuviera dejando más o menos claras las normas del juego. ¿Eso podía ser?

Poco a poco fui volviendo a mi postura. Miré al chico que me acompañaba. Con el susto me había puesto pálida, y no roja por lo que me había dicho. No supe muy bien qué decir a eso, pero me tomé un momento antes de contestar a lo demás.

—Tampoco creo que se lo tomasen mal —dije con cierto optimismo, mirándole comprensiva—. Vamos, eso espero. Piensa que si te han aceptado tienes tanto derecho a estar aquí como ellos. Y no es como si aún estuviéramos en el siglo pasado, ni nada de eso. Pero de acuerdo —sonreí un poco, con complicidad—, John.

En ese punto miré a los recién llegados. Ese era el nuevo sheriff, ¿no? Ese y la mujer callada del tren. Los saludé con la mano, pero no llegué a decirles nada.

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09/05/2017, 19:51
Lydia Orlova

Reí ante la ocurrencia del tanga. Imaginarme con ropa interior que picara me daban ideas de cómo iba a acabar de rozada por todas partes solo tratando de ponerme la ropa interior de la época. Sacudí levemente la cabeza, no quería ni pensar en esa cosa puesta bajo la ropa.

Fuera vi a algunos de nuestros compañeros de viaje yendo de acá para allá, parecía que se concentraban en el saloon, donde hacía no tanto había visto el tiroteo.

-No sé si miedo, no creo que nos hayan traído a un sitio donde podamos morirnos. Es decir, el contrato de confidencialidad no decía nada al respecto de armas de fuego- miré a Sophie, deseando que realmente fuera así. –En realidad…- me quedé pensativa un momento y luego bajé mi voz, como si aquello fuera una confidencia. -… Creo que en cierto modo esto es excitante. Ya sabes, como en las películas. Los tipos rudos con sus armas, de alguna forma me atraen.

Nuestros pasos nos llevaron hasta lo que parecía una tienda de ropa y sombreros. Ahí había de todo y tras el mostrador una pareja de edad avanzada eran los dueños del lugar. Paseé mis ojos por todas partes antes de posarlos en un par de vestidos preciosos.

  

  

-Como aparezca un tipo guapo y con abdominales para rayar queso en ellos, me quedaría una temporada sin dudarlo- dije con humor, antes de acercarme a mirar los vestidos de cerca. –El tipo que iba a ser sheriff no estaba mal, tenía unos ojos bonitos.

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09/05/2017, 20:17
Samuel Millay

El borracho de dentro de la celda apestaba a alcohol y cosas rancias. Pero no solo sus ropas olían a algún tipo de licor vertido sobre ellas de forma descuidada, lo peor era su aliento, ¡apestaba! a un caldo primigenio de inmundicias innombrables, olía a destilería a la cual se le había picado todo el producto final.

Aquel hombre de color no estaba borracho, lo suyo era un nivel mas allá de eso, uno para el cual aun no había sido inventada una definición.

Ciertamente era toda una proeza verle aun de pie y más si uno comenzaba siquiera a imaginar lo que debería llevar dentro y aquello daba a pensar.

O el negro tenía unos redaños grandes como montañas o aquello del tesoro era algo realmente importante que le dotaba de una determinación sobrehumana.

En este momento boqueaba como pez fuera del agua pues al parecer un vomito incipiente se le había trabado a mitad de camino pero, cuando Rick le dirigió la palabra el borrachín se vuelve hacia él y tras escucharle atento – y aferrarse a los barrotes con fuerza para no caer – dice a viva voz:

¡CLARO, CLARO AMARILLO! dice animado, ¡SÁCAME DE AQUÍ Y NOS CONSEGUIRÉ UNOS CABALLOS A AMBOS!, ¡IREMOS POR EL ORO, COMO AMIGOS AMARILLO!, gritaba, ¡A PARTES IGUALES, ES UNA PROMESA!, ¡ÁBREME!.

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09/05/2017, 20:38
Narrador

Había un murmullo, difuso, lejano, apagado bajo el sonido de los latidos de su propio corazón bombeando ahora desbocado.

La presión en su cabeza y la eléctrica sensación que recorría su cuerpo al completo le habían llevado hasta un sitio extraño pero a la vez excitante.

Pero todo lo que comenzaba tenía un final y este momento – de profundo descubrimiento existencial -, también concluyó.

Los sonidos se hicieron más comprensibles a su alrededor.

Vio a la gente cercana al apeadero gritando horrorizada o corriendo lo más lejos posible de aquel sitio. (De el).

Miedo.

Le temían.

El olor ferroso de la sangre pegajosa en sus manos y rostro, humedeciendo sus ropas. Brillando hermosamente en tonos de escarlata profundo bajo el inclemente sol de aquel límpido cielo.

El puré de materia gris, desparramada caóticamente entre fragmentos de huesos y tendones, - por todas partes- , brotando como una serpentina horripilante de la cosa que hasta hace un momento había sido la cabeza de un sujeto vivo.

Al que acababa de matar.

¡NO, MATAR NO!.

Al que había ASESINADO a sangre fría.

Y le gustaba.

Lo había descubierto ahora.

Quitar una vida, porque si, porque podía, le ponía a tope mil.

Vivir Sin Límites. ¡Ja!, quizás comenzaba a cogerle el tranquillo a esto.

Archer se volvió hacia el tren, a terminar aquello que había empezado antes de ser interrumpido por la escoria sin cabeza que ahora yacía despatarrada sobre las viejas y polvorientas tablas de madera.

Eso es lo que pasa cuando…

Sin embargo, ninguna de las malditas puertas de aquel armatoste cochino que era el asqueroso tren se abría y entonces finalmente la revelación le estallo en la cabeza.

La maquina y los vagones.

TODO EL PUTO TREN.

No era más que una jodida maqueta a escala 1:1.

!Una falacia de tren antiguo! y el mismo en el que habían llegado a SweetWater,

Hacia poco nada mas.

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09/05/2017, 20:46
Rick Hyung Adams
Sólo para el director

¿Amarillo? Ese impresentable representaba su papel con demasiada inmersión en el personaje. El olor, también. Rick no sabía si el actor estaba borracho de verdad o lo habían impregnado de sustancias olorosas para simularlo. El comportamiento, sí, se podía fingir sin problemas. Incluso si llegara a vomitar.

Rick dio unos pasos atrás, fuera del alcance de las manos del borracho y de su tufo. Empezaba mal el borracho, si lo hacía insultando.

– Amigo, dígame dónde encontrar el caballo más cercano ahora mismo o me voy. No le abriré antes de saberlo. Y si no me lo dice, le dejo aquí y me voy. Solo tengo que preguntarle a cualquiera que pase por la calle o buscar por mí mismo. No me haga perder el tiempo. Se puede quedar su tesoro, no me interesa.

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09/05/2017, 20:55
Jacobi Freeman

Jacobi se salía de sí mismo por la alegría de su exitoso descubrimiento.

El saber, ahora, que no podían herirles les causaba un gran alivio puesto que no le había gustado nada estar tan rodeado de gente con armas por todas partes.

Quizás para otros fuera algo de todos los días no así para él. El era un hombre de gustos sencillos y vida tranquila. Ya había sufrido mucho de joven y ahora solo quería dedicarse a pasarla tan bien como pudiera hacerlo.

Se acerco hacia los presentes bien dispuesto a zamparse una buena cantidad de bebida en el sistema y poco a poco fue respondiendo a todos aquellos que le dirigieron la palabra.

 Vaya amigo, tiene valor, se jugó el físico – Sonreí de medio lado.

El que no arriesga no gana, dijo entre risas, pero ahora sabemos, al menos, explico llegando a la barra y tomando un chupito al ras de güisqui, que no hay nada de qué preocuparse, ¡brindo por eso!, propuso antes de tomarse de un solo trago el ambarino líquido.

- Pero qué... 

Douglas se sorprendió ante el experimento de Jacobi. Luego se echó a reír.

- Venga ya ¡no me jodas! ¡Así no tiene puta gracia! - le dijo al aire - Entiendo que no podamos palmarla pero al menos debería haber alguna penalización: una parada del sistema, expulsión, yo que sé... ¿qué gracia tiene ser superman?

Amigo, le dijo al nuevo Sheriff tras girarse hacia él y luego de cerciorarse de que su vaso estaba nuevamente lleno, pues yo lo prefiero así. El dolor y yo no nos llevamos muy bien que digamos. Amén a las balas que no hacen daño hermano; ¡Brindo por eso!, volvió a proponer y rápidamente se zampo otro trago buche adentro.

Por cierto, pregunto entonces profundamente interesado – y luego de indicarle al tabernero una nueva ronda -, ¿Qué les está pareciendo todo? pregunto a todos y nadie en particular– a Sarah, Douglas, Ruby y Vicente -, por mi lado puedo decir que esta jodida cosa ha sido montado magníficamente, incluso uno ya se ha ido a Follalandia con tres zorras, dijo sin tapujo alguno.

¡BRINDO POR ESO!, grito entre carcajadas y volvió a beber.

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09/05/2017, 21:03
Narrador

No había pasado ni quince minutos desde que el nuevo sheriff y sus acompañantes habían llegado al Maripoosa cuando una nueva actuación (?) pareció gestarse.

Las dobles puertas batientes se estremecieron y por ellos se abalanzo taberna dentro un sujeto de sombrero bombín que venía muy nervioso y agitado.

Tras buscar con sus ojos café entre los presentes fijo su vista en el sheriff y corrió hacia donde este estaba.

Todos pudieron comprobar que aquel hombre estaba pálido y con cara de haber visto lo más horroroso que pudiera pasarle en su vida. Apenas podía formular palabra alguna y debió apoyarse en la barra para recobrar el resuello perdido.

-Sheriff…- dijo en un susurro casi ahogado por el sofoco. –Ha ocurrido algo… espantoso- habló con la boca pastosa, seguramente sediento de un trago que el camarero pudiera ofrecerle y que le ayudara a aclarar sus ideas. Y eso hizo el mismo, sirviendo un pequeño vaso cargado de bourbon.

El hombre se bebió el licor como si llevara años sin probar del elemento líquido y enfocó en su mirada de nuevo al sheriff. –Han matado a golpes al maquinista en el apeadero. Un forastero le ha golpeado hasta que…- se llevó una mano a la boca y, sin poder reprimirlo más ante el recuerdo de lo visto, vertió el contenido de su estómago en una de las escupideras.

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09/05/2017, 21:28
Narrador

Ahora bien a aquellas tres “señoritas” se les pagaba por complacer y eso hacían (la mayoría de las veces), pero resultaba ser Ethan uno de esos escasos buenos momentos de curro que se sucedían cada muerte de obispo.

Es que, ¡joder!, era un hombre joven, bien parecido, conservaba todos los dientes y no apestaba como el común de los hombres e incluso, - déjame ver -, ¡si, bingo!, tenía una polla de buen tamaño y con poco pelo.

Esta vez, casi lo pensaron al mismo tiempo, no iban a dejar pasar la magnífica oportunidad que tenían.

Iban a disfrutarlo también, tanto como aguantara el condenado adonis que ahora tenían por delante.

Así que mientras Ethan le comía la boca a la pelirroja esta se dedico a enseñarle lo que era un buen beso garganta abajo y por ello le enterró – virtualmente -, la lengua tan adentro como pudo y mientras la movía como un puto huracán hacia todas partes.

Por su parte, de las dos muchachas a las que le había tocado “aceitar el sable” y tras una breve – e intensa – lucha de miradas muy en la onda “veamos quien tiene los ovarios mejor puestos”, la rubia fue la ganadora y, ¡por Clint Eastwood! si para Ethan aquella chupada de polla no fue la mejor de su vida.

Como mamaba la borrega, ¡que arte!, Ethan casi sentía que sus ojos podían írsele para adentro.

Finalmente la morocha, tramposa y cochina morocha, le fue besando los muslos por delante y por detrás para pasar luego a los glúteos y finalmente, comenzar a internar la lengua regordeta, pequeña y caliente entre sus cantos.

Beso negro le decían.

¡Molaba mazo!.

Notas de juego

XD

No sabes lo que me he reído. 

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09/05/2017, 21:38
Rick Hyung Adams
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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10/05/2017, 08:20
John Smith (Vicente Navarro)

Entró más gente, tras el tiroteo parecía que pronto esto volvería a estar animado. Y entre los que entraron reconocí alguno de con los que llegamos.

La chica con la que había iniciado la conversación dio un respingo con el sonido de la detonación, pero pronto se repuso. Cuando me respondió esbocé una sincera sonrisa, me pareció un comentario entrañable.

- Eso espero, de todos modos acabamos de llegar ¿No? - Dije un poco más animado - ¿Y tú cómo lo llevas? Lo de estar aquí me refiero, Evangelin – Quise saber y quise compartir con ella la complicidad del nombre.

El tipo extraño se puso muy contento, no era para menos y levanté mi baso en el aire brindando con él simbólicamente. Además al final me hizo reír con lo de “follilandia”, que tipo, su desparpajo hacía que me cayese bien.

Al cabo de un poco entró una persona pidiendo ayuda al que parecía ser el nuevo Sheriff, parecía ser que alguien si había aceptado cubrir la vacante.

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11/05/2017, 03:43
Sarah Winters

Las palabras del hombre que se había disparado a sí mismo me dejaron un momento pensativa. La verdad, yo prefería y con mucho que las balas no hicieran daño. Ya no pensando en matar, lo que me parecía inconcebible, sino aunque sólo fuera algo que dejase un hematoma. Yo no necesitaba ese tipo de emoción. Para jugar a eso yo creía que era como en tantas otras cosas parecías: si era suficiente para saber que te habían dado, bastaba. Estabas muerto. Además, cualquier otra cosa dejaba espacio a los accidentes.

Tardé un instante en darme cuenta en que el chico del que hablaba era Ethan. Mis ojos buscaron, un poco inquietos, las escaleras por las que se había marchado, y cambié mi postura al pensar en lo que ese hombre había dicho. No quería pensar demasiado en lo que estaba haciendo. No me consideraba una mojigata, pero me parecía inapropiado de tantas maneras que sería difícil saber por dónde empezar.

Al ver que de nuevo las puertas se abrían busqué con los ojos al recién llegado. Sus primeras palabras, diciendo que algo había sucedido, provocaron mi expectación, y al escuchar su historia sentí erizarse la piel de mis brazos. Aparté la mirada cuando el hombre vomitó, esperando que ahora otros no empezásemos a contagiarnos, y ni siquiera me planteé cómo podrían haber preparado aquello: no me importaba. Esta experiencia era totalmente inmersiva, y ahí estaba yo, inmersiéndome, o como fuera.

Las palabras del chico que me acompañaba, sin embargo, captaron mi atención. Lo miré un instante sin saber muy bien qué decir. No había olvidado a qué había venido al local, pero la verdad es que con tanto muerto ni se me había ocurrido buscar lo que se suponía que venía a buscar.

—Pues... —respondí un poco dubitativa. No parecía que el chico esperase que me metiera mucho en el papel, ni nada, pero si no ¿qué gracia tenía aquello?—. Bastante bien, creo. La verdad es que Sweetwater parece un poco más peligroso de lo que había imaginado, pero todo el mundo dice que es un buen lugar para asentarse. El fotógrafo, el señor Jones, es un hombre amable. No me ha dado tiempo de conocer a muchos más, la verdad, pero seguro que las cosas marchan bien ahora que tenemos un nuevo Sheriff.

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11/05/2017, 03:51
Ethan Bullock

Aquellas tres monadas parecían dispuestas a devorarme hasta dejarme seco, vaya que sí. Y desde luego yo no iba a quejarme, se notaba que sabían lo que hacían y cuando la morena empezó a tantear el terreno trasero mis manos estrujaron los pechos de la pelirroja. «Pedazo de guarra», pensé, con la única neurona que todavía me hacía conexión y esbozando una media sonrisa lasciva. ¡A vivir sin límites se había dicho!

Agradecí en ese momento la mamada de Jane en el vestuario, que me había dejado como nuevo. Si no fuera por ese desahogo creo que no habría aguantado tanto con las otras tres, pero siendo así me dejé hacer metiendo mis manos aquí y allá, palpando, hurgando y amasando sus carnes hasta que la tuve tan dura y tan gorda que pensé que explotaría.

Fue entonces cuando llevé una mano a la melena de la rubia y enredé los dedos entre su pelo, sujetándola mientras movía la cadera, follándome su boca sin preocuparme por las arcadas que pudieran darle si me pasaba. Y seguí así hasta que empecé a derramarme en su garganta entre espasmos. No era tan distinto a disparar, aunque faltaba el olor de la pólvora. 

Me había quedado agotado después del trajín y siendo señoritas de pago ni siquiera me iba a preocupar por si ellas se habían quedado satisfechas o no. Eso era problema de ellas, no mío. Así que en cuanto los dedos de mis pies dejaron de contraerse por el orgasmo las solté y respiré profundo. Vaya puta pasada. Me encantaba ese sitio, con que le quitasen un poco el polvo sería cojonudo. 

Habéis estado genial, chicas —les dije, con una sonrisa encantadora, todavía tendido en la cama. Tenía que recuperarme un poco—. Os habéis ganado la propina.

Notas de juego

XDDDD

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11/05/2017, 10:01
Douglas Merry

- Vaya, la cosa empieza fuerte.- dijo Douglas  - Vamos buen hombre, lléveme al lugar.

Y cargando su escopeta sobre un hombro, todavía pensando en lo absurdo de ser un inmortal en el Oeste, el nuevo sheriff salió a investigar el suceso.

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11/05/2017, 13:38
John Smith (Vicente Navarro)

No me apetecía engañarme a mi mismo. Estaba en un lugar nuevo y al que aún no le había pillado el tranquillo, reforzar mis esfuerzos en lo social era una buena opción, eso o como se suele decir… tirarme al monte, pero eso era la última opción.

La chica me respondía con amabilidad, aunque… no sé, había algo que no llegaba a captar.

- ¿Y puedo preguntar que buscas? - Pregunté rubricando la pregunta con una sonrisa - ¿Aventuras? ¿Emoción? ¿Tienes algún plan en mente? - En ese momento pensé que quizá estaba haciendo demasiadas preguntas – Puedes preguntarme lo que quieras ¿Eh?  

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11/05/2017, 15:14
Director
Sólo para el director

Notas de juego

- Vaya, la cosa empieza fuerte.- dijo Douglas  - Vamos buen hombre, lléveme al lugar.

Y cargando su escopeta sobre un hombro, todavía pensando en lo absurdo de ser un inmortal en el Oeste, el nuevo sheriff salió a investigar el suceso.

Jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa me meo!!!

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11/05/2017, 18:55
Archer Jackson

La gente gritaba aterrorizada al verme lleno de sangre y sesos. O lo que fuera, estos robotijos lo simulaban bien todo. Que se jodieran. No les mataba a todos porque ni se lo merecían. 

—¡Que os jodan, mamones!necesito beber algo¡Iros a tomar por culo! —limpié la culata del revólver en la parte limpia que quedaba del uniforme del tipo y lo enfundé. Las armas con cuidado. 

Por alguna razón el infligir dolor me había tranquilizado, la adrenalina me había devuelto la consciencia, un poco. Registré al gordo, por si tenía algo que me pudiera ser útil.

El tren desde luego no lo iba a ser —Menuda mierda de decorados de cartón piedra... — el puto tren no era más que un decorado... ¡Todo era un decorado! La gente era un decorado. La gente normal me habría impedido lo que había hecho o habría huído. Me volví hacia la ciudad. Habría agua por algún sitio ¿no? Un lugar donde alquilar habitaciones y baños. Quería quitarme la mierda de encima. Y el problema de la deshidratación.