Partida Rol por web

Como siempre me sentía traído y trepelido por sus palabras, su razonamiento me resultaba un canto de sirena, tremendamente lógico pero aún así no dejaba de pensar que algo iba mal.

Tus palabras tienen mucho sentido... y me halaga la confianza que depositas en mí; en cambio sigue resultándome raro loque me tratas de decir;seguramente se deba a la influenciadeloshijos de Adán, como los llamas.

Después hizo aparecer un par de objetos, que me resultaron como si fuera un prima cambiado, un reverso tenebroso de aquellos que buscábamos. ¿Y ésto es?, ¿debo averiguar por mí mismo... Su súbita desaparición me dejó con lapregunta en los labios aunque no esperara respuesta. Mirñé los ojbjetos y antes detocarlos siquiera mi mirada buscó instintivamente a Moonchild interrogante; si alguna vez necesitaba de una palabras osuopinión seguramente ésta era una de las más prpicias.o

Sigues envuelto en esa oscuridad, sin ni rastro tanto de Moonchild como de Michael. Ni siquiera logras oír los pensamientos de tu Familiar.

Te preguntas cómo es posible que veas los objetos, máxime cuando La Adversaria ha desaparecido. Sin su extraño fulgor rojizo no deberías ser capaz de ver, pero... ¿Y si tiene razón? No tendría sentido que un ser de Oscuridad estuviera ciego en su propio elemento ¿verdad?

Te acercas a ver esas cosas que dejó. El orbe te recuerda - con la salvedad de su negrura - a los que has visto con anterioridad, los que absorbieron Istyarem y Rachel. Y ahora entiendes lo que esta última dijo en Irlanda, que ella "escuchaba su melodía". De algún modo, sabes que esa esfera resuena con tu propia esencia... El otro objeto es un enorme anillo de metal, tan grande que debe ser un brazalete o algo por el estilo.

Recuerdas que antes de que aparecieran estos dos objetos te pareció ver una figura humana, una silueta... Como si la Adversaria hubiera hecho aparecer a uno de los Elegidos y... te lo hubiera servido en bandeja. Bueno, sólo hay una forma de saberlo a ciencia cierta...

Te agachas, agarras el brazalete con una mano y extiendes la otra hacia el orbe... Al tocarlo destella un fogonazo de oscuridad que te ciega incluso a ti y pierdes el sentido.

Recuerdos nebulosos. Imágenes algunos, palabras otros. Pobreza. Miseria. Buscar la supervivencia desde corta edad. Rebuscar en basureros. Aguantar en pie inhalando pegamento. Envidia de los ricos. Madre apuñalada haciendo la calle. Sin padre. Pandilla. Familia. Los serpientes. Palizas. Venta de drogas. Lucha por territorio. Atracos. Una sobredosis. La Gran Serpiente. Un hombre te salva de la muerte y de las calles. Te enseña el Camino. El Sash.

Recuerdos nebulosos. Imágenes algunos, palabras otros. Elegancia. Clase. Flema y autocontrol. Decoro. Familia de rancio abolengo. Abogacía. Actos benéficos. Bisabuelo casado con Hindú. Padre sufrió una grave enfermedad. Muerte indigna. Depresión. Abuso de alcohol y drogas. Sobredosis. Diosa Kali. Reclutado por Euthanatos perteneciente al MI6. Brazalete

Despertáis tumbados al borde del lago, como si alguien os hubiera sacado y puesto a secar. La loba y el halcón permanecen expectantes en sus respectivas ramas.

¿Pero que coño?...

Michael se despierta rascándose la cabeza mientras mira a su alrededor

Deja los ojos fijos en la loba y en el halcón.

Ya veo que no ha sido un sueño...

Desaparecísteis, hermano - sentencia la loba - Os fuisteis a un punto tan alejado del Sueño que no logré encontraros... Pero reaparecísteis inconscientes. El Guardián os sacó del agua.

¿Desaparecimos? ¿Asi, sin más?

Michael toma las constantes vitales de León para asegurarse de que está correcto.

No debería tardar demasiado en despertar...

Dutrante unos interminables segundos, aún habiendo vuelto, mi mirada parecía envuelta en una visión distante tanto en tiempo como en espacio.

Parecía que miraba mis manos con estupor y fruncía el ceño provocando arrugas en la frente despejada.Trás eso pude comprobar dónde volvía a estar.

¿Que ha pasado?, ¿Desaparecidos?.

Hola de nuevo,Michael...

Pese a todo mi expresión y tono denotaban una profunda turbación y sospresa.

¿Que ha pasado? Era como una visión... pero a la vez... no lo era...
 

Algo os arrancó de aquí y os llevó al Sueño - apunta Moonchild - Y fue algo tan poderoso como para ocultarte a los ojos de Selene - apostilla mirando a León

No sé exactamente que ha ocurrido. Aunque la Pastora de Soles estuvo hablando conmigo...aunque mejor os lo cuento a todos cuando sea. Creo que es importante.

Soteníaen mi mano el brazalete,mirándolo, estudiándolo.

He estado en un lugar sin luz, Moonchild. Es cómo se me ocurre describirlo.

Es un brazalete ancho, como de una cuarta de borde a borde. El metal, frío al tacto, es de un color muy oscuro difícil de discernir. ¿Azul?¿Morado?¿Rojo? Como si fuera un anillo, tiene montada una gran piedra transparente multifacetada. Por el diámetro cabría pensar que León se lo podría poner en el biceps.

Michael mira el brazalete de León e intenta poner en orden sus confusos pensamientos.

Yo no estuve solo... Mi avatar estaba conmigo... y tambien el Animista

Sacude la cabeza y mira el trozo de tela que tiene, con cuidado, en las manos. Al cabo de un momento repara en ello y se lo pone alrededor de la cintura, dando una mezcla entre muy rara y algo ridícula.

Tú estabas lejos, pero podía sentirte. - interviene Brisa - Era débil, como cuando yo me fui al Sueño y tú te quedaste a Este Lado, pero te sentía. Lo que Moonchild dice es que ni Selene pudo sentir a su Hermano.

Michael se pone lo que podría pasar por un foulard plateado a modo de cinturón al que la luz de la luna llena arranca destellos.
 

Al atártelo - con un movimiento tan rápido y automático que casi ni te das cuenta de cómo lo has hecho - tienes la sensación de que hasta ahora ibas desnudo por la vida. Como cuando usas reloj de pulsera durante años y lo olvidas y te lo vuelves a poner al llegar a casa...