Partida Rol por web

Félix hace el fuego, prepara el pescado y cena sin conversar demasiado, como perdido en sus pensamientos. Cuando Irina vuelve de fumar, ante el olor del tabajo, está a punto de pedirle uno, aunque se contiene A la pregunta de Irina sala de su ensimismamiento.

Más que por los salvajes, no estaría mal que nos mantuvieramos despiertos por si aparece algún animal salvaje y para mantener el fuego encendido. Yo puedo hacer la primera, si queréis y así preparo una antorcha por si tenemos que alejar a algún bicho.

Por cierto Señorita.- dice con una ligera sonrira.- tras esta copiosa cena, ¿sería tan amable de compartir un cigarrillo conmigo?

Este es el ultimo cigarrillo que pude rescatar "con vida"... - una sonrisa para amenizar la situacion -  disfrutelo usted detective que le espera una larga noche, ya que estoy demasiado cansada y agotada mentalmente como para mantenerme despierta unos minutos mas.

Acomodando una manta junto a la fogata y cerca o dentro de la tienda, Irina se recuesta y queda tumbada mirando el cielo despejado de vaya a saber que lugar...

La noche sigue...

Ezekiel pone mucho de su empeño en las trampas para agua, de hecho al tumbarme en la arena a dormir, sigo dándole vueltas a la cabeza...

-Hmmmm y si en vez de agarrarlo con una liana lo hubiese clavado con un bastoncito???

Puede que colocándolo así... bla bla bla...

Me levanto antes de echarme a dormir finalmente para revisar que todo esté bien.

Vuelvo satisfecho de mi proyecto y me tubo a dormir meditando en el tema.

Siempre me ha costado finalizar las cosas, siempre hay algo que mejorar...

Digo a mi compañero de cabaña.

Muchas gracias.- dice con algo de culpabilidad, pero sin ser capaz de decirle que no al cigarrillo.

Enciende una rama en la fogata, que se encuentra dentro de la tienda, y con ella se enciende el cigarrillo.

Dios... Gime de placer cuando el humo inunda sus pulmones. Fuma despacio, sabiendo que es el último que disfrutará en mucho tiempo. Dejar de fumar en esas condiciones de tensión va a ser muy duro.

Cuando termina de fumar, se sienta al lado del fuego algo mareado y comienza a fabricarse una lanza, afilando el extremo de un palo recto con una piedra afilada. Es un trabajo ardúo pero después de una hora termina y procede a endurecer la punta con el fuego.

Charlie mira con deseo esos últimos cigarrillos que están fumando a su lado, un tabaco mejor que el que él llevaba, pero decide empezar a hacerse a la idea de que no podrá beber ni fumar en mucho tiempo.

-Estoy seguro de que nos indemnizarán por ésto, por el naufragio. Y yo me indemnizaré a mi mismo. - añade con una sonrisa cansada - Por cada día que haya pasado hambre o haya echado de menos el tabaco o la ginebra, me pasaré dos de bacanal, como los griegos*. Seguro que es pecado, hermana, pero a mi, la plaza en el infierno, ya no me la quita nadie. "Carpe Diem", como diría Platón.

Luego, parece que desvelado por tanta cháchara a su alrededor, juguetea tumbado con un palo en la arena, mientras su mirada se deja seducir por las danzarinas llamas de la hoguera.

go go go!

Notas algo raro en el pescado. Su formación fisica es bastante diferente a lo que conoces de ese genero. Digamos que su estructura osea es sutilmente anormal. Es como si estos peces que os habéis comido fueran anteriores evolutivamente a los que ahora conoceis.

Esta amaneciendo, pues el cielo esta adoptando ese tono azul madrugador, y la luna aún luce en el cielo cuando un ruido procedente de la playa os despierta. Una gran agitación surge bajo las olas cerca de donde desembarcasteis y se oyen unos sonidos águdos y molestos acompañados de... ¿Una cascada?.
¿Queréis acercaros a observar lo que ocurre?

Recuerdas que ayer noche te acostaste mientras seguias sacandole punta a un palo con tu navaja. De hecho te quedaste dormido mientrás aún hacías eso y ahora al despertarte ya no esta la navaja en su lugar. Te registras los bolsillos pero la navaja no aparece. ¿Que esta pasando?

Charlie se siente extraño. No por el sobresalto que los despierta, sino por el hecho de ser la primera vez en mucho tiempo que no se levanta con resaca. Instintivamente, palpa en sus bolsillos en busca de algo. Al no encontrarlo, mira en la arena, a su alrededor.

-¿Dónde cojones está mi navaja? - pregunta malhumorado, sin dirigirse a nadie en concreto.

Sin muchas esperanzas de obtener una respuesta satisfactoria, coge uno de los palos destinado a la fogata y se acerca a la fuente del ruido fijándose, de paso, en si hay huellas recientes y ajenas alrededor del improvisado campamento.

Ezekiel despierta con las ropas húmedas y los huesos congelados, el fuego ya se ha apagado y es la primera vez que duerme en el suelo.

Sacude un poco su pelo para quitarle la arena. Le pica.

Entonces oigo los murmullos del agua y que Charlie sale decidido con un palo.

Extrañado y curioso, sigo a Charlie unos pasos por detrás sin decir nada.