Partida Rol por web

Me paro un momento y escucho mientras hago un escrutinio en la oscuridad para ver si veo u oigo alguna de las babosas y despues de unos segundos así me pongo a arreglar la ballesta y a dejarla cargada por si la vuelvo a necesitar.

Ostias, encima ahora hay al menos una docena de esos bichos... mierda pero como salga de esta prometo volver algún día y destruirlas a todas... por Aelyn que si me permite salir de esta las destruiré.

Después de pensar eso mientras me pongo a reparar la ballesta voy haciendo una oración que me enseñaron de pequeño a nuestra diosa que es en si la historia de cuando se encaprichó de mi antepasado.

Con la ballesta reparada, tras caersete al suelo provocando un gran ruido, miras a tu alrededor, temeroso de que el ruido haya alertado a las babosas. Para tu desgracia, el ruido de arrastrar de las babosas crece y se acerca peligrosamente, hasta el punto de que ves aparecer a una de ellas tras una estalagmita...

La babosa, con la boca hinchada, se encoge y estira rapidamente, escupiendo el ácido que guarda en su interior y que sale despedido hacia ti.... cayendo a pocos centimetros. Tras ella, ves aparecer a varias más, todas preparadas para escupirte...

Disparo un virote a la babosa que tengo mas cerca y luego corro todo lo que pueda con todo el cuidado del mundo de no caerme y lo mas lejos posibles de ellas, y cuando crea que las he dejado suficientemente atrás mi idea es coger piedras y las lanzarlas lo mas lejos posible, pero cuando voy corriendo me resbalo y caigo al suelo.

Al ver aparecer a las babosas, y con el arma reparada, la alzas con rapidez y disparas, consiguiendo uno de los mejores disparos que recuerdas... El virote, con una precisión mortal, vuela hasta clavarse en el ojo de una de las babosas, la cual, tras estremecerse unos segundos, muere.... El resto de criaturas, ignorando la muerte de su compañera, continuan arrastrandose hacia ti con la boca hinchada...

Rapidamente, y tras tu mortal disparo, te das media vuelta y echas a correr, intentando dejar atrás a tus numeroso enemigos... Durante unos instantes, parece que lo logras, pero las resbaladizas piedras te juegan una mala pasada y tu pie izquierdo pierde apoyo logrando que tu cuerpo pierda el equilibrio y caiga, con fuerza al suelo... Al sentir como te vas al suelo, te mueves lo mejor posible para caer haciendote el menor daño posible, pero tu movimiento es lento y tan solo consigues que tu mano izquierda, mal apoyada, soporte la mayor parte de la caida.....

Crack!!- El dolor nace en tu dedo meñique, desde donde asciende recorriendo la mayor parte de tu brazo. Muy dolorido y con el meñique izquierdo, casi con segurirdad, roto, te pones en pie, pues no tienes tiempo....

Aunque has dejado atrás a las babosas, aun las oyes moverse, acercándose a ti...

Viendo que no consigo darles esquinazo intento convertirme en arañas ya que al ser mas pequeño haré menos ruido y podré esconderme mejor.

Desesperado, agotado y muy dolorido tras tu caido, recurres a la única opcion que se te ocurre... cierras los ojos...

Cuando los vuelves a abrir, tu cuerpo se ha transformado en una araña, de unos 20 cm de diametro. A tu alrededor, tus cosas yacen esparcidas por el suelo. Tras unos minutos para habituarte a tu nueva condición, empiezas a observar a tu alrededor... Tras unos segundos, las primeras babosas hacen su aparición, y puedes observar que se detienen al verte... puede que asustadas!! Las babosas empiezan a recular...

De momento lo que hago es tejer una telaraña para intentar retenerlas en caso de que me intenten atacar otra vez ya que por lo que veo les doy miedo y espero haber si se marchan para poder recuperar mis pertenencias.

Venga asquerosos engendros iros de una puta vez de aquí que no quiero ir desnudo por este asqueroso y mugriento sitio.

Tras unos tensos minutos, las babosa desparecen, retirandose y alejandose del lugar... El silencio, tras su marcha, vuelve a reinar a tu alrededor... vuelves a estar solo...

Cuando aun meditas sobre tu siguiente acción, en la soledad y tranquilidad, una figura aparece al fondo del camino, donde se detiene... Soprendido fijas tus ojos en él... Es un drow, empuñando un estoque, y vestido con la ropas tipicas sobre una armadura de cuero tachonado...

Para más sorpresas, y sin haber aun reaccionado ante la aparición del drow, escuchas un ruido a tu espalda, donde das un rapidos vistazo. Al final del camino, donde este gira, hay otro drow, se mi oculto. Tu rapido vistazo no te da tiempo a ver mucho, pero si vislumbras el ortopedico vendaje que lleva en la cabeza...

¿Qué hacéis aquí? Que la mirada fulminante de Aelyn os lleve al abismo.
pienso mientras lanzo un poco de telaraña al techo y me subo por ella para irme alejando un poco pero sin perder de vista mis pertenencias.
Como toquéis mis cosas daos por muertos estúpidos engendros cagados por el culo de un troll.
Busco un sitio desde donde pueda verlos sin que me vean ellos a mi.

El hechizo es precisamente para eso para no perder nada que no sea magico porque según lo veo yo habrá veces que necesite una cuerda y si me he convertido en araña y vuelvo a ser normal lo de la cuerda lo tengo jodido por ejemplo o por poner otro está el tema del dinero que voy a parecer que lo voy tirando por gusto jejejeje ¿Entiendes por qué he pensado en crear este hechizo?

Cuando lanzas tu telaraña a unas de las estalactitas y esta se engancha, ves como el drow que empuña el estoque se avalanza hacia ti, intentando atacarte, asi que desechas la idea y corres a escabullirte entre las estalgmitas... Durante unos segundos mueves tu patas con rapidez, hasta que al final logras esconderte...

Desde tu posición divisas al drow, cercano a tus posesiones...

Intento dar un pequeño rodeo para sorprender al del estoque por la espalda, pero con el tamaño actual que tengo me es muy dificil.

Moviendote más sigiloso de lo que crees gracias a tu forma arácnida, rodeas varias estalagmitas hasta que alcanzas un punto en el que seria capaz de atacar al drow por la espalda... aunque te lo piensas, pues tu estado no es el más idóneo...

Me transformo otra vez en mi forma original y cogiendo rápidamente mis componentes para el hechizo proyectil magico (si es que eso lo tengo) digo en mi idioma natal justo detrás del drow al que he pillado por la espalda.

Soy Asterot, hijo del Gran Asteror y descendiente de Anakylás el capricho de Aelyn, mago de la Casa Oscura de Nuestra Señora Aelyn, siervo del circulo primero de Nart´akil y guerrero en la magia de los estudios arcanos, si alguno osa tocar mis pertenecias me vengaré en esta vida o en la otra y que la mirada fulminante de Aelyn os envíe al abismo mas oscuro pues un siervo suyo se encuentra presente.

Dicho esto espero unos segundos preparado para lanzar el hechizo y observo que hacen y si no hacen nada me muevo con parsimonia y con toda la nobleza con la que puedo a sabiendas que estoy desnudo y recogiendo mis cosas me las coloco y espero a que me digan algo.

Mientras tomas, de nuevo, tu forma drow, ves como el drow del estoque agarra tu bastón y se dirige, con paso seguro, hasta situarse a 5 pies del otro drow. Este segundo, el del aparatoso vendaje en la cabeza, sale de su supuesto escondite y un murmura unas palabras, la cuales no llegan a tus oidos...

Decidido, y desfiante, te acercas a tus pertenencias, y cuando pronuncias tus palabras, ambos drows se vuelven hacia ti... Con tranquilidad empiezas a vestirte, sin dejar de mirarlos...