Partida Rol por web

-Oh Dioz mío, Zcott... -comenté, horrorizado al ver cómo el techo comenzaba a descender-. Vamoz a terminar aplaztadoz. ¡Ez otra de ezaz trampaz como laz que zalen en laz peliz de Indiana Jonez!

Observo las letras, divididas en vocales y consonantes, grabados en aquellos ladrillos. Se trataba de otro reto de inteligencia como al que habíamos hecho frente en la primera de las estancias, la de las baldosas y dardos con curare.

-¿A alguien ze le ocurre alguna idea? -pregunté, a voz en grito, por si alguien sabía cómo resolver ese nuevo puzzle.

- ¡Tío, cómo la lias! - Le recriminó de nuevo Scott. A decir verdad, él mismo podría haber sido el que pisara la trampa. Había sido casualidad que en las dos últimas ocasiones hubiera sido Caleb quien les pusiera en grave peligro de muerte. - Bueno... ya te daré una paliza si salimos vivos... Vamos a pensar.

Scott miró aquellas letras. Parecía un scrable a contrareloj, aunque lo que estaba en juego eran sus vidas y no la victoria en un juego de mesa aburrido como pocos. Arriba nueve vocales y abajo nueve consonantes. ¿Tenían que formar palabras? No se le daba bien aquello. Resolver sopas de letras era cosa de abuelitas aburridas. 

- ¡Centrate Scott! - Se dijo a si mismo.

Scott se acerca a las letras con Caleb, y al fijarse ve que las letras están escritas en piedra. Cuando las toca, se da cuenta de que se hunden ligeramente. Sin duda, tiene que poder escribirse un mensaje con ellas y si es el adecuado, estás seguro de que la puerta se abrirá.

La otra cosa de la cual se da cuenta es de que eso no parece formar una frase en español. Debe ser otro idioma.

Cuando aquella bestia alada me agarró de la chaqueta comencé a gritar-¡QUITA BICHO DE MIERDA!-grité intentando revolverme pero las zarpas de aquel bicho me habían cogido bien y me era casi imposible zafarme, pensé en Anne, en el profesor ¿me llevarían con ellos y me comerían? una cantidad de imágenes sangrientas comenzaron a sucederse en mi mente mientras sentía como pies empezaban a separarse del puente, escuche a mi prima gritar mi nombre-Lex ¡noooo!-lágrimas de impotencia amenazaban con salir pero entonces noté como alguien me cogía de los pies y tiraba hacia abajo con fuerza lo que provocó que la alimaña me soltase cayendo encima de alguien, era Sarah con la que casi estrello mi cara con la suya.

-Gr-gracias Sarah, te debo una mmuy grande-dije con una sonrisa nerviosa, ruborizado apartándome de encima suyo lo más rápido posible y corriendo hacia tierra firme ya que el puente se desmoronaba por segundos, una vez a salvo mi prima se avalanzó sobre mí y la abracé con tanta fuerza como pude.

Cita:

-Lo siento..no quería asustarte, soy un torpe y me caí, pero shh tranquila, estoy bien primita-dije tranquilizador mientras le daba un pequeño beso en la mejilla-Aún tienes Trick para rato ¿eh?-sonreí animado y secándole las lágrimas con los pulgares-Venga pongámonos en marcha-cogí la mano de Lex con firmeza para seguir avanzando, después de mis padres era a la persona que más quería en el mundo. A continuación le dediqué una mirada de gratitud inmensa a mi salvadora-Sarah gracias por hacer eso, ahora te debo una docena de helados por lo menos-le guiñé el ojo divertido aunque el miedo en el cuerpo aún permanecía.

Caminamos con Caleb al frente y rezando porque no la volviese a cagar dimos con un nuevo enigma unas letras en el suelo sin ningún orden aparente, otro puto acertijo de Willy, era obvio-Toca volver a estrujarse las neuronas, a ver qué sacamos ésta vez...-dije rascándome la nunca pensativo mirando a los demás.

Un nido!

Un maldito Nido! Y nosotros íbamos a ser la comida de los bichos! Casi me pongo a gritar del nerviosismo hasta que el profesor Armitage habló. Creía que estaba sola y su compañía me hizo acudir rápidamente para abrazarlo. Al fin y al cabo era un Adulto!

Pero los huevos.

- Estamos perdidos...- dije en voz baja, después que saber que estábamos tan alto como para matarnos si intentábamos irnos de allí.

- ¿Ha visto Jurassic Park?- Dije al Profesor acercándome a los Huevos y recogiendo uno.- Si cogemos uno tendremos un seguro de vida... si son inteligentes, claro. O puede que... si nacen ahora mismo, crean que soy su madre!- Si claro, Anne, te crees Daenerys Targaryen, la madre de dragones?

Cita:

- Tenemos que formar una palabra o una frase... - Dijo Scott. - No parece que sea en inglés... ¿Italiano tal vez? - Se preguntó el chico. - Mi padre me enseñó algo de italiano... Uscire en italiano es salida... - No utilizaría todas las letras pero el tiempo jugaba en su contra, así que probó con aquella primera idea.

Pulsaste la U para empezar, pero nada más hacerlo, el fragmento de roca que la contenía, volvió a subir como un flotador, a su posición original. Estaba claro que lo que fuese, no empezaba por esa letra.

El profesor miró a su alrededor.

-Creo que por ahí tenemos un saliente. Deberíamos intentar salir de aquí, y sin huevo. Si tienen desarrollado su instinto maternal, podrían seguirnos y eso tampoco sería muy buena idea, ¿no crees?

El profesor intentaba no perder la calma y buscaba una salida allá donde fuese.

- ¡Chicos, si me escucháis apuntad estás letras, en una hilera las vocales IEAUIIEUO y en otra las consonantes VRSCQRTND. - Fue deletreando una a una las letras. - No está en inglés, debe estar en otro idioma. ¿Español, italiano? - Se notaba el miedo en la voz de Scott. Su vida dependía de su ingenio, por lo que lo tenía complicado. - ¡Pensad rápido! He probado la palabra uscire, salida en italiano... Pero la primera tecla ha vuelto a su sitio de inmediato.

Entonces se le ocurrió algo a Scott. Ir pulsando una a una todas las teclas hasta que alguna se quedara fija. Así sabría al menos por dónde empezar y una vez tuviera la primera, conseguia segunda tampoco sería tan difícil utilizando el mismo método. Y entonces comenzó a toquetear una a una las teclas empezando por las consonantes.

- ¡Vamos Caleb, reacciona! - Le dijo.

Permanecí observando con detenimiento aquellas letras, intentando descifrar en qué idioma estaban escritas.

-No ez italiano, Zcott... -comenté, con la mirada puesta en los ladrillos. En esos momentos, hubiera necesitado un poco de regaliz para aclarar mis ideas, aunque por desgracia los había agotado-. ¿Y zi fuera latín? Al fin y al cabo, tanto el italiano como el español zon lenguas romancez, y el latín ez muy parecido.

Me encogí de hombros, mirando a mi compañero con cara de circunstancias.

-No zé latín, pero ezo me lo contó mi padre -aclaré, no muy convencido.

Acto seguido, arriesgándome demasiado, decidí pulsar la letra V. Quizá fuera un buen comienzo o sólo otro error.

Caleb se acercó al tablero y empujo la "V", esperando que esta vez, se quedase así... y eso fue lo que sucedió. La "V" permaneció en su lugar y no regresó a su posición original.

Scott empezó a darle vueltas al coco como no lo había hecho antes, mientas el techo continuaba su agónico descenso. Casi inmediatamente, tras haber hablado a través de la pared y escuchar a Caleb, se le ocurrió.

Sí, tiene que ser latín.

Al pulsar la V, me sorprendió advertir que había acertado. Al menos ya teníamos la primera letra de aquella enigmática palabra. Ahora tendríamos que averiguar las demás.

IEAUIIEUO

VRSCQRTND

-La ziguiente tiene que zer una vocal, Zcott -le indiqué a mi compañero, señalándole con el dedo las tres vocales de la fila superior-. La I, la E o la A...

-¡Lo tengo, lo tengo, Zcott! -exclamé, muy animado-. ¡Ez una fraze en latín! ¡Zí! ¡Tenía razón! ¡Ahora mizmo lo rezuervo! ¡En realidad, no zobra ningún ladrillo, zolo hay que medir bien el orden!

Acto seguido, comencé a pulsar las siguientes letras, que seguían a la V, siguiendo un orden muy concreto:

V-I-R-E-S-A-C-Q-U-I-R-I-T-E-U-N-D-O

-¡Virez acquirit eundo! -leí la frase, en un tono que más bien parecía un mago entonando un hechizo-. No zé cazi nada nada de latín, pero virez ez Fuerza... ¡Laz fuerzaz ze adquieren caminando!