Partida Rol por web

Tras una breve pausa en lo que reflexiono acerca de lo que acabo de escuchar, respondo:
- Reconozco que usted, señorita, me ha causado buena impresión y creo que tiene bastante credibilidad. Sin embargo - paro otro instante para elegir las palabras adecuadas. - lo que acaba de mencionar es altamente sorprendente. No me malinterprete, pero el nivel de excentricidad de este descubrimiento es notable.
Sirvo la siguiente ronda de scotch. Tras dar un trago, recupero el tono festivo.
- Ahora bien, ¡no descarto nada en este mundo como imposible, aunque sea improbable!¡Por expandir las fronteras de la ciencia! - brindo con los acompañantes.
- Eso sí, Señorita Barnes, ¡espero que esas criaturas alienígenas estén fosilizadas!¡Imagínese! - y río con una sonora carcajada, algo forzada, intentando quitar hierro al asunto.

- ¡¡Pero...!! ¡¡ Esto es magnífico señorita Barnes!! ¡¡Puede que su investigación y la mía estén conectadas!!- digo entusiasmado.-  Puede que estemos enfocando el mismo caso desde puntos de vista y disciplinas diferentes. Me encantaría conocer al doctor Saunders, señorita.- hago una pausa para tomar un sorbo y finalizo- Es usted una mujer de lo más interesante.

Seria increible, señores. Quinn... el doctor Saunders no me habria hecho venir desde Inglaterra si no hubiera sido un asunto serio y con visos de ser real Yo misma estab a alucinada. La perspectiva racional de los hombres de ciencia se mostraba abierta a mis palabras. ¡Incluso el buen doctor Saunders es antropologo!

declino mas vasos de scotch. Estoy algo mareada por el alcohol y la conversación es muy seria

Oh, no, señor Swift. Yo solo se lo que me escribió el propio doctor Saunders. Aunque debo reconocer que me fascina tanto como a ustedes los descubrimientos del buen doctor....

Y volviendome hacia el doctor Moses replico
Se imagina que no estuvieran fosilizadas y fueran un peligro para la raza humana? Hasta pudieran ser peligrosas para nosotros, o quizas su simple visión fuera suficiente para sumirnos en las mas insondables cotas de locura e insanidad jamás vistas por la raza humana

La noche avanza, y la botella de scotch se va agotando. En tiempos de ley seca es tremendamdente dificil conseguir siquiera matarratas canadiense, con lo que el poder degustar un scotch os resulta simplemente increible.

Margot da muestras de cansancio, ya no puede mas, necesita quitarse los zapatos y poner los pies en alto, apoyar la cabeza en la almohada y dormir unas cuantas horas sobre tierra firme, no olvidemos que las ultimas noches las pasó en un bamboleante transatlantico y esta bastante cansada. No garantiza poder estar despierta a las 8... pero se compromete a hacer lo posible para que asi sea.

La noche resulta algo intranquila, algo ruidosa. Las ranas no paran de croar a pocos metros de vuestra ventana, no olvidemos que van a dar al lago.. y en los edificios viejos la madera cruje, y si esta tan cerca de un pantano con tan altas dosis de humedad, mas. Incluso quien sabe si hay termitas o algún tejón debajo de los tablones de la casa, recordáis ruidos relativamente claros , no lo suficiente como para perturbar vuestro sueño pero si como para que los recordéis con cierta nitidez.

A la mañana siguiente el señor Brophy os informa de las tarifas de alquiler de barcas, que os resultan bastante economicas.

Tras alquilar las barcas, ayudo a la Señorita Barnes a subirse.
- Espero que el bamboleo de la barca no le maree, señorita. Aunque viendo cómo aguantó anoche, supongo que esto será juego de niños para usted. - comento con una amplia sonrisa, bromeando sin ninguna mala intención. Tras poner el primer pie en la barca, una pequeña ola la mueve y pierdo el equilibrio ligeramente. Me tengo que agarrar con las dos manos a un borde de la misma para no caer.
- ¡Vaya! Al final voy a ser yo el que no esté hecho para el lago. - miro a los dos acompañantes, algo sonrojado. - Les prometo que no les causaré problemas, aunque mi experiencia como marino se limita a la barcas de recreo. - concluyo con una sonrisa.
- Salvo que tengan una propuesta diferente, sugiero cruzar el lago. Al otro lado, podremos encontrar los restos de ese antiguo asentamiento. Esperemos que sean restos abenaki, y que haya fósiles ¡y no otras criaturas!

La noche no me lo ha puesto fácil con sus ruidos, pero el cansancio tras haber conducido tantas horas y el intenso día han ayudado a que concilie un sueño reparador.

Al día siguiente nos ponemos en marcha hacia el lago y cogemos una de las barcas.

- Nos dejamos guiar, doctor. Usted conoce mejor la zona. Visitemos ese asentamiento.- digo acomodándome en la barca y tomando los remos- Yo remaré, si no le importa- digo al ver que el doctor no resulta muy ducho en el manejo de la embarcación-  Así me servirá también como ejercicio.

No hay realmente mucha distancia, sospechais que el lago podria rodearse a pie. Pero el paseo en barca resulta agradable con los primeros rayos de sol de la mañana.

Y eso no es muy frecuente en Nueva Inglaterra....

Justo al otro extremo del lago, veis las viejas cabañas ya abandonadas hace años. No hay embarcadero al otro lado del lagom aunque un par de posters semipodridos en el agua parecen indicar que si lo hubo en el pasado, pero encallando la barca y arremangando los pantalones podéis llegar a tierra firme mas o menos secos aunque algo embarrados...

No hay mucho que ver en las cabañas. Están semiderruidas y sucias, parecen haber albergado a algun vagabundo en tiempos no demasiado lejanos al juzgar por los restos de basura dejados de cualquier modo en su interior. Las maderas están semipodridas, no parece haber buena madera en las cercanias en cualquier caso.

- Estas son las famosas ruinas. La primera vez que las vi no les dediqué mucho tiempo, puesto que su estado y la basura no me resultaron muy atrayentes. Ahora, con la nueva información recibida y la leyendas de la zona, lo veo con otros ojos. - buscó una rama larga en los alrededores para apoyarme y también para mover hojas y objetos sin tener que ensuciar mis manos. Remuevo distraídamente restos en distintos lugares.
- Señorita Barnes, Señor Swift, en este tipo de asentamientos, ¿hay algún lugar específico donde recomienden mirar? Este área se aleja de mi ámbito de conocimiento. - digo con un tono agradable, aunque se puede percibir que hay algo de decepción al no haber encontrado nada interesante inmediatamente.

Parece que la civilización no ha pisado esta parte del lago en un largo tiempo. La escena dista de ser la bucólica estampa que uno espera encontrar junto a un lago rodeado de un bosque, no sólo estamos rodeados de sucias ruinas, también los árboles ofrecen un aspecto enfermo. 

Empiezo a pasear por  las ruinas y alrededores cercanos a inspeccionar la zona, al tiempo que respondo al doctor.

- Según la tradición, las criaturas " que no existen" huyen del ser humano, de ahí que sólo unos pocos aseguren haberlas visto y que nadie, haya conseguido pruebas definitivas sobre su existencia. Por lo que es poco probable que podamos encontrar una pista de algo así en un asentamiento... a menos que pensemos en un depredador. Echemos un vistazo por los alrededores. 

¡Debía tener un aspecto horrible! al menos era solo barro, la ropa sería mas o menos fácil de lavar.

Miro con algo de curiosidad las viejas cabañas. NO parece que podamos sacar nada en claro de esta vieja aldea, hace años que está deshabitada.

Bien avezado Edmund en la tarea de buscar rastros y fósiles, señala unas extrañas pisadas entre el barro. Podrían ser humanas, pero.... no tienen pulgares! parecen dirigirse hacia el bosque.

Y de paso encuentra el pozo semioculto por la maleza que está a punto de pisar Margot lo que sin duda ahorrará a la joven inglesa una peligrosa caida

Es dificil saberlo. pero lo cierto es que no son un resto arqueologico, si es lo que andas pensando.
Como mucho 3 o 4 dias.

- ¡ Cuidado, señorita Barnes!- digo al tiempo que la agarro del brazo para evitar que pise un pozo disimulado entre la maleza- Vamos a tener que andarnos con mucho ojo- digo cogiendo un palo para ir tentando el terreno delante nuestra antes de pisarlo.

-Miren- digo señalando unas huellas en el suelo- Esas huellas no parecen tener más de 3 ó 4 días, pero además fíjense...

Me agacho para mirarlas y una vez agachado voy señalando con un dedo los contornos:

- Pueden parecer un pie humano, pero sólo tienen 4 dedos... no tienen pulgares.- Me levanto e indico el camino que su dueño pareció seguir, hacia el bosque- Se dirigen hacia allí... ¿ investigamos un poco más?

- Se nota su experiencia de campo, Señor Swift. No habría sido capaz de ver el pozo, mucho menos las huellas. Quizás sea cierto eso de que uno no ve lo que no sabe que está buscando. - digo con asombro sincero, puesto que el hallazgo es sorprendete - En todas las veces que he venido a pasear por esta zona, jamás me había percatado de este pozo.

Me acerco a las huellas y observo mientras Edmund nos explica lo encontrado. Me cambia la expresión de la cara, que pasa a mostrar una clara preocupación.

- Muy interesante...¿crees que los pulgares han sido amputados o... que se trata de otra especie? Me encantaría seguir investigando y ver qué encontramos. Ahora bien, como neófito que soy, no soy capaz de juzgar si contamos con el equipamiento adecuado. ¿Diría que estamos preparados? Si estuviéramos en un laboratorio químico, le diría que no, pero este no es mi elemento. - añado una sonrisa que no oculta mi inquietud y tensión.

- No...los pulgares no parecen amputados. Parece la propia morfología del pie. No se precupe, doctor...-le tranquilizo- sólo vamos a echar un vistazo. ¿ Está usted segura de querer continuar, señorita?

Si, claro pensé mientras miraba el pozo que habia estado a punto de pisar. Si no me llega a advertir el siempre atento Edmund habria caido y quizas me hubiera torcido un tobillo... Mi aspecto no era para nada lo que se esperaba para dar un paseo por los bosques. No habia traido las ropas mas adecuadas ni mucho menos.

Podemos dar un paseo a ver que encontramos

Las palabras del Señor Swift me alivian ligeramente. Se nota que no estoy tan tenso.
- Entonces, adelante, sigamos el rastro. Le sigo Señor Swift. Si le parece bien, Señorita Barnes, puedo cerrar la marcha. - afirmo. De mi tono no se puede deducir si me ofrezco a cerrar la marcha por caballerosidad, o por temor.

Por desgracia las huellas se pierden en la espesura del bosque y es imposible seguirlas por la exhuberante vegetación y la maleza. Hay ramas rotas y restos de paso que pueden haber sido de cualquier otro animal que bajara a beber al lago.

Aunque....

no hay tantos animales por aqui. Muchas ranas y alguna lechuza fijo. No hay mucha caza , igual eso explica por que el asentamiento no prosperó

En todo momento avanzamos conmigo en cabeza, tanteando el suelo con el palo para evitar cualquier otra sorpresa.

- Caramba... sí que hay ranas por aquí, doctor-comento- Avísenme si ven alguna. Tengo curiosidad por saber de qué especie se trata esta tan prolífica. 

Observo las ramas rotas del suelo donde el rastro se pierde. 

- Podemos continuar un poco más si les parece bien, pero sería un poco ir a ciegas. Aquí desaparece el rastro. O podemos dar la vuelta... ya debe ser casi la hora del almuerzo calculo. ¿ Qué me dicen?