Partida Rol por web

La noche transcurrió deprisa, en silencio y sin que os dieseis cuenta. Vuestro agotamiento era más que evidente, por lo que si la tormenta prosiguió durante horas y horas, tampoco estuvisteis despiertos para considerar que aquel lugar era una amalgama de contrastes, con un paisaje paradisíaco durante el día y un infierno por la noche.

Pero eso sí, al despertaros, todo se veía mucho mejor.

Os habéis salvado, habíais conseguido un refugio, tras muchos y continuados esfuerzos, y estabais a salvo, por el momento. Pero... ¿en dónde? ¿Podríais salir de allí? ¿Cuál debía ser ahora vuestro siguiente paso?

Con aquella idea en la cabeza, vuestros ojos, acostumbrados ya a la oscuridad, miraron a su alrededor, percibiendo la entrada de la cueva y la claridad del amanecer, y la oscuridad que se prolongaba al adentrarse todavía más entre la roca.

Nya parecía haber aprovechado la noche para recuperarse y el haber comido y dormido, os había sentado definitivamente bien. Era el momento de aprovecharlo.

Al abrir los ojos no recordaba nada o muy poco de la noche anterior e incluso del dia, despues de caer al suelo solo habia pequeños retazos en mi interior que si lo pensaba no tenian mucho sentido; el malestar en mi cuerpo debia ser evidente pues me habia quedado completamente dormida.

Ahora ya despierta observaba todo a mi alrededor con nuevos ojos, la cabeza aun la tenia algo aburrullada pero por lo menos ahora podia pensar con mayor claridad, estabamos en alguna especie de cueva??

Al parecer era la primera en despertarme pues solo se oia el silencio de la respiracion de los demas, me acerque lentamenta a Kimy, era realmente hermosa cuando dormia, le aparte un mechon que tenia en la cara y la movi un poco para intentar despertarla sin molestar a los demas; cuando vi que esta abria los ojos le pregunte casi en un susurro.
Puedes explicarme que ha sucedido??

Al fin pudo dormir a pierna suelta cuando en sus sueños se coló la voz de Nya. Abrió levemente los ojos para ver como un ángel se mostraba en su visión. ¿Nya? Nya...-¡Nya!...-se abrazó a ella y cuando se dio cuenta del alboroto bajó el tono de voz. -​​​​​​Nya, ¿Cómo estás? -​​​​​​dijo tocándola como si fuera una aparición y quisiera cerciorarse de que los ojos no la engañaban.

Una sonrisa se le escapó entonces, le acarició la cara  y luego se acercó a darle un beso tierno en la mejilla -estuve preocupada por ti... Cuando volví de explorar estabas en el suelo, inconsciente por culpa de las bayas y temí por tu vida. Te amarré a mi cuerpo para subirte hasta esta cueva, y el vendaval que se formó fue tan fuerte que nos costó auténtico dolor llegar todos hasta ella. -​​​​​​Le sonrió tomándola de la mano para mostrarle algunas de las heridas por las caídas -Están pasando cosas raras en está isla...

Durante el sueño, incluso el suelo húmedo parecía un lugar estupendo para dormir después de aquel día de locos que fue aquel. Al escuchar los gritos de Kimy, Malek continua durmiendo, pero poco a poco comienza a sentir hambre por lo que se levanta con torpeza aún con los ojos cerrados hasta que poco a poco se incorpora y despierta del todo. 

Ah, si, estaba varado en una isla desierta. Recordarlo le produjo el malestar que el sueño le había hecho olvidar. 

Aún así, parecía que el sueño le había sentado bien e incluso su brazo se sentía mejor. Había sido una caída terrible.

- Despertaste...me alegro.- dijo en dirección a Nya, entonces le daría un vistazo al resto y diría. - Entonces...¿un avion?- 
Preguntó hacia Kimy y Jensen.- ¿Dos accidentes en la misma isla? Y...¿cómo que, nos observan, Jensen? Tal vez escuché mal...ayer a penas podía pensar- cuestionó, poniendo los temas que le interesaban antes de la repartición de trabajos, ahora que tenía más cabeza como para ponerse a pensar sobre ellos. Aunque aún así, no era alguien que le gustara pensar demasiado, simplemente le gustaba ir y hacer.

Creo que me encuentro algo mejor le dije a Kimy mientras respondia a su abrazo y notaba como sus labios rozaban mi mejilla provocando un cosquilleo en esta, casi estuve tentada de girar la cara y hacer que mis labios se juntaran a los suyos cuando oi la voz de Malek.

Yo tambien me alegro le dije a Malek sonriente Alguien me puede explicar donde estamos y que ha pasado?? pregunte soltandome dificilmente de Kimy pero manteniendo mi mano cerca de la suya y acariciandola para notar su calor Que es eso de un avion??

Avioneta. Una avioneta estrellada en lo denso de la jungla.

Confirmó Jensen mientras se estiraba para desentumecer los músculos

Y no sé si nos observan, pero sonó un zumbido muy raro y luego se abrió una trampa excavada en el suelo.

Se gira hacia Kimy buscando confirmación.

¡Díselo tú, Kimy!

Kimy notó las caricias de los dedos de Nya y agarró la mano mientras asentía a las palabras del rubio -Una trampilla se abrió bajo nuestros pies. Pero no era una vulgar trampa, era alta tecnología. Nos salvamos saltando sobre las ramas de un árbol. -​​​​negó con la cabeza -No se que hubiera pasado si alguno de los dos llega a caer por ella, era tan profunda que no alcanzamos a ver el fondo.

Miró al resto de la expedición -Por eso vamos a tener que andarnos con mil ojos, explorar bien cada sitio, intentar tener recursos para alimentarnos a mano y buscar un medio de comunicación externa. Una radio, una pistola de bengalas o intentar descubrir que coño pasa en esta isla...

Las voces de los demás resonaban en las paredes de la cueva, despertandome de un profundo sueño.
- Buenos días... uaaah... - Soltando un bostezo al final.

Al intentar incorporarme, mi cuerpo se encontraba envarado por el esfuerzo de ayer y el golpe que recibí en el avión, asi que solo estiraría y masajearía un poco los músculos para aliviar un poco las molestias y el dolor.

Todavía tenia en mente lo que habíamos pasado ayer, pero era relajante ver que los demás se encontraban bien y, parece que no fui la ultima en despertarse, pues Kate todavía se encontraba recostada.

La llegada a la cueva fue muy dura pero lo habían conseguido. Una vez que consiguieron hacer el fuego, Kate se tumbó y se quedó dormida enseguida. Se encontraba tan cansada del día, que apenas notó el duro suelo en el que dormía y tampoco si la tomenta seguía o paró.

A la mañana siguiente, Kate fue la última en despertar. Cuando lo hizo, vio que Nya aparentemente estaba mejor y lo que podía escuchar mientras se despertaba es que la estaban poniendo al día de lo que había pasado en lo que ella estuvo inconsciente.

- Nya, me alegra mucho de verte mejor - se acercó y le dio un abrazo no muy fuerte, pues temía hacerle daño. Luego se acercó a Alba y escuchó atentamente lo que Kimy y Jensen contaba con más detalle la expedición que tuvieron el día anterior - Pues podríamos acercarnos a esa avioneta como dijimos ayer, ¿no? ¿Quién se viene conmigo? - los miró a todos y sonrió. Mientras esperaba la respuesta de los chicos, le preguntó a Alba a modo de susurro - Oye Alba... Bueno... esto puede sonar un poco raro... - se rascó la nuca con cierta timidez - ¿crees que si cojo las bayas que no se pueden comer y hago como una especie de pasta para usarlo como pintura y uso los dedos como pincel, habría alguna posibilidad de intoxicación por absorción a través de la piel? - se sentía un poco avergonzada, pero necesitaba de algún modo expresar su arte.

Susurrando mi respuesta a Kate.
- Bueno... si, hay una posibilidad de intoxicación por absorción a través de la piel -, No podía saber con certeza si esa clase de bayas eran muy toxicas, al menos no sin un laboratorio, - Te recomendaría que utilizases algo que no fuera tu cuerpo para pintar, pero si aun así quieres hacerlo, mis indicaciones serian que no mantuvieses un contacto con la pasta que utilices para pintar por mas de una hora, con un espacio de doce horas entre cada aplicación, evitando también el contacto con la boca, ojos, nariz, entre otros. Una vez que termines, enjuaga bien la zona durante unos 30 minutos. -
Acercándome un poco mas a Kate, pasando mi brazo derecho por su espalda y tomando su hombro en mi mano, le doy un abrazo, - Puedo ayudarte a formar la pasta, quizás y encuentre algo para neutralizar su toxico, así podrías dejar volar tu creatividad por mas tiempo -

Miraba a Alba escuchando su respuesta Era lo que pensaba... - De acuerdo seguiré tus indicaciones, Alba - le dedicó una leve sonrisa. No quería coger también una intoxicación, pero la pasta de aquellas bayas sería lo más cercano a pintura que tendría. Notó que Alba se acercó más a Kate, que pasó su mano por su espalda y la colocó en su hombro. Le dijo que le ayudaría a preparar la pasta de las bayas y que intentaría neutralizar su tóxico. Aquello le hizo muy feliz. Se acurrucó un poco más en Alba y colocó su cabeza sobre el hombro de ella - Muchas gracias. Esto es muy importante para mí, el arte es un modo de expresar el interior de tu alma y no solo eso, también de desestrés - le sonrió ampliamente. Se quedó un rato más en esa postura.

Pasado unos minutos más, se puso en pie - Bueno, voy a asomarme a la entrada de la cueva, quien quiera venirse conmigo a la expedición solo tiene que salir - dijo al resto de sus compañeros. Dio media vuelta y salió de la cueva, quedándose en la entrada observando alrededor.

Te pusiste en pie y te dirigiste hacia la entrada de la cueva. Podías oír el sonido de las olas chocando contra las rocas y algunos pájaros graznando, gaviotas o algo por el estilo, en las proximidades. Eso parecía ser indicativo de que la tormenta ya había pasado y un nuevo y brillante día se abría ante vosotros.

Sin embargo, cuando te asomaste, tuviste que agarrarte con las dos manos a ambos lados de la cueva, porque para tu sorpresa, os encontrabais en lo alto de un acantilado, en una pared vertical, y bajo tus pies, solo estaba el mar. No lo entendías, pero la playa parecía haber desaparecido, como si te hubieses asomado al extremo equivocado de la cueva, saliendo por el otro lado.

El golpe de las olas se volvió ensordecedor y por un momento, incluso sentiste como si estuvieses a punto de caer. Al mirar hacia abajo, la espuma del agua se tornaron como si fuesen brazos y te llamasen para reunirte con ellos, y casi pudiste escuchar voces entre susurros que te decían "ven", "ven con nosotros".

Y mientras las voces se repetían, sentías como si algo poderoso te atrajese hacia el borde. No querías ir... pero al mismo tiempo, te fascinaba dar el último paso.

Seguramente habrías terminado por darlo, de no ser porque el miedo que sentías era demasiado poderoso como para permitírtelo.

Pues si todos están de acuerdo, yo iré contigo, Kate. Al fin y al cabo, soy el único que he visto esa avioneta.

Dijo Jensen poniéndose en pie y haciendo unos estiramientos que acompañó dando un par de saltos en el sitio para entrar en calor.

Después de esos breves ejercicios, dio una palmada y salió detrás de la británica.

¡Vamos al lío!

Ahora que Nya había despertado Kimy se resistía a dejarla sola de nuevo. Aunque tenía muy claro lo que quería hacer. -Yo voy a construir una trampa para ver si podemos cazar algunos de esos animalejos, vamos a necesitar comida mientras conseguimos averiguar algo más. 

Echó un vistazo alrededor primero y luego añadió -necesitaré materiales, ramas y piedras, igual sería buena idea que os acompañe un trecho para poder encontrar lo necesario.

Todos los sonidos que Kate escuchaba mientras llegaba a la entrada de la puerta le indicaban que la tormenta había pasado y que sería un espléndido día. 

Justo cuando llegó a la entrada tuvo una sensación bastante rara, por lo que se agarró a lo que pudo de la entrada de la cueva. Lo que podía ver era un pronunciado acantilado donde a sus pies, solo estaba el mar Pero... ayer no subimos por aquí, ¿no? Echó un vistazo dentro de la cueva, pero desde donde estaba, sólo podía intuir las siluetas de sus compañeros. Volvió a mirar hacia delante No... por aquí no subimos, abajo había árboles y estaba cerca la playa... ¿qué ha pasado? 

Mientras seguía dándole vueltas a la cabeza, recorrió con su mirada el acantilado hasta llegar al mar. Una sensación de caída le recorrió todo el cuerpo y se quedó paralizada, temiendo que con cualquier movimiento, pudiera caer. Las olas rompían a los pies del acantilado, solo podía escuchar eso. Le pareció ver que aquellas olas, formaban como unos brazos, quería sacudir la cabeza, pero no se atrevía a hacer algún movimiento. Aquellos brazos comenzaron a llamarla y pudo escuchar "Ven, ven con nosotros". Sus ojos no apartaban la mirada de aquellas olas y aquellos misteriosos brazos, estaba como hipnotizada - ¿Quién... quién eres? ¿Dónde estás? - susurró. No sabía si era producto de su imaginación o era real.

Seguía mirando hacia abajo, quería ir con aquella voz, pero a la vez estaba paralizada por el miedo - No... no puedo... tengo miedo - dijo a la nada mientras seguía mirando hacia abajo.

Kate se os había adelantado y para cuando la alcanzasteis, os disteis cuenta de que se había quedado como petrificada en la entrada de la cueva, incluso retrocediendo, como si hubiese algo que la atemorizara. Además, decía cosas que no parecían tener sentido, mientras miraba hacia abajo.

 ¿Quién... quién eres? ¿Dónde estás?  ....  No... no puedo... tengo miedo

Vosotros os acercasteis hasta colocaros a su lado, mirasteis también en la misma dirección y no visteis nada. Era el mismo lugar y la misma pared de roca que os había costado horrores subir.

Pero Kate... parecía paralizada por el miedo. 

Kimy caminó hacia la salida de la cueva junto a Jensen. Kate había salido muy decidida un poco antes. Cuando estaban llegando hasta ella pudieron comprobar que la chica aún no había tomado la escala para bajar. Y no solo eso, sino que la escucharon decir cosas sin mucho sentido a algo o alguien que estuviera allí abajo.

Kimy se acerco a Kate, la agarró del brazo y pudo comprobar que estaba muy tensa. Se asomó a la playa pero no vio nada y sin embargo Kate solo parecía querer retroceder -Kate, que te ocurre... ¿Que has visto? ¿de qué tienes miedo?