Partida Rol por web

-No asustes a los muchachos Sam-agrega el hombre que desciende de la segunda planta con tono familiar-¡Bienvenidos!
Tras las presentaciones de los recién llegados agrego:
-Soy el Vice almirante Nova, capitán del Yamato Maru
-Es interesante poder contar con gente en el puente.-Miro a una de las jóvenes-Cabo Zeus. ¿Puede usted hacerse cargo de la estación de armas?

Immelde no muestra ninguna reacción visible al tono de la comandante de vuelo. En su fuero interno, está contenta de que sea cómo es. La autoridad que exuda, la presencia y la seriedad, y ese aire de tonterías las justas. Todo ello le resulta tranquilizador. Con gente como ella, aunque sea gente exigente y dura en muchos casos, se siente segura. Segura de saber su lugar, qué debe hacer y qué se espera de ella. Capaz de mostrar su devoción y capacidad, y de sentirse parte de una cadena de mando fuerte y estable.

De demostrar que no es un fallo de la reserva genética.

Se cuida muy mucho de sonreír, empero, pese a su satisfacción. Podría interpretarse como altanería o burla, y tiene bastante sentido común para saber que si hace algo así, ella será la siguiente en llevarse una reprimenda, o algo peor. Incluso aunque pudiese explicarse, pasar tus primeros cinco minutos de entrevista con un ofical al mando justificándote no es la mejor forma de entrar en un destino nuevo.

Cuando el segundo de a bordo, más amablemente, se presenta y se dirige a ella, Immelde saluda de nuevo y no tarda ni medio segundo en responder.

Por supuesto, señor. Si se me permite, solicito que tenga la bondad de pedir a alguien que me muestre su posición, o me proporcione indicaciones precisas, y me pondré a trabajar de inmediato. Si están disponibles los logs de mantenimiento y el archivo de datos de calibración, también puedo comenzar a estudiarlos en cuanto realice las comprobaciones de inicio, aunque probablemente me lleve algún tiempo revisarlos por completo.

-Estación de armas-señalo un solitario puesto en la planta baja de la sala de mandos-La estación de armas le permitirá controlar las defensas anti cazas, todas las que nos dejaron
Miro a mi segundo al mando y esbozo una pequeña sonrisa.
Luego me dirijo a la capitán de fuerzas especiales.
-Capitán Hesh, ocupe por ahora la bahía de seguridad por favor. Tengo a 4 de mis oficiales principales con gastritis.
Me giro hacia un controlador distante.
-Consígame comunicación con el almirante, teniente.

Soram no podía dejar de mirar a su alrededor. Las cosas que se iban sucediendo no le dejaban tragar. Acababa de conocer a una Capitana de las Fuerzas Especiales y a una Cabo de Artillería Naval. Y ahora, por accidente o no estaba bajo las ordenes de una mujer fría y tal vez despiadada que los quería para nosequé de un nuevo Caza.

Tras acordarse de eso último se cuadra ante la Comandante de Vuelo Samantha Storm.

- Como ordene Comandante. – no sabia que mas decir la verdad que la situación tal vez fuera demasiado para el. Pero no por ello perdería la oportunidad de ver ese nuevo caza. Dispuesto a seguir las indicaciones de la Comandante.

De inmediato- responde Immelde, encaminándose acto seguido al puesto señalado.

Armas anticaza. Bueno, eso va a ser más complicado que las armas antinave que maneja normalmente. A diferencia de los cañones diseñados para la lucha contra cruceros, fragatas o destructores, los relativamente pequeños y móviles cañones anticaza (mas ametralladora que cañón, en realidad) requerían de un montón de calibraciones intermedias y estudios de rango a fin de establecer con claridad la esfere de alcance, junto con cálculos de vectores y estudios de punto muerto. Eso, por supuesto, sin contar el radar para las estaciones de misiles.

Va a ser un trabajo largo, pero al fin y al cabo, eso es lo que hace. Para eso ha venido. No se para a pensar demasiado en el comentario del almirante acerca de son "las que les han dejado". Probablemente, hayan recortado el armamento original tras reasignar la nave, o simplemente como parte de los acuerdos post-guerra entre humanos y Zentradi.

Poco importa. Lo unico que importa, es que cuando las baterías anticaza sean necesarias, estarán listas. Eso seguro.

Tras cargar el log de calibraciones, Immelde empieza a estudiar la miriada de líneas que cubren sui monitor con una concentración tan absoluta como si fueran una obra de arte.

En cierto sentido, lo son.

La meltrandi asiente y dice:

- Si, señor a la orden

Para observar una ultima vez el puente de la nave, no terminaba demasiado de gustarle la asignacion, sin embargo, no tenia otra, ella se habia estado especializando en labores mas estrategicas en los ultimos tiempos, sin embargo, tendria que desempeñar lo mejor posible en los ultimos tiempos, asi pues se dirige hacia su puesto

Algunos minutos después se inicia la cuenta regresiva y las flotas Galaxy y Frontier comienzan su viaje.
Las últimas naves en realizar el "salto" son las naves de reparaciones de ambas flotas.
La Hikoru Maru, una moderna nave de diseño terrestre se despide de la Yamato Maru y se lanza tras las naves que componen la flota Galaxy.
El vice almirante Nova da la orden y la nave Zentraedi comienza su viaje.

-Pilotos! Síganme.-dice secamente la Comandante Storm y se dirige hacia el ascensor que les permitirá salir a los tres hacia uno de los tantos corredores.

Has estado familiarizándote con tu estación de seguridad por espacio de diez minutos.
El salto de la Yamato Maru ha sido debidamente avisado por los parlantes pero tu concentración y esmero por aprender lo más posible cuanto antes, no te ha permitido escuchar la cuenta regresiva.
Ocho minutos después de iniciado el viaje, comienzas a pasear tu vista por los distintos monitores que te indican, la cantidad total de tripulantes y la cantidad nominal de los mismos (100% de los tripulantes se encuentra presentes), emisiones de energía provenientes diversas fuentes (todo aquello que emita un haz de energía dirigida aparece en este panel, en este momento es 0), emanaciones de gases nocivos (0%) y la identificación de los mismos, detectores de explosivos (uno activo), campos de contención (0 activos), compuertas exteriores (todas cerradas)

La meltrandi observa como uno de los indicadores que indican explosivos esta activado, asi pues decide entrar en el menu para desde la consola tratar de localizar el punto exacto en donde se ha encendido el indicativo de existencia de explosivos antes de informar ya que trata de dar toda la informacion completa

Tras acceder al menú correspondiente, una presentación holográfica cobra vida sobre tu estación, obligándote a levantar la vista.
Automáticamente comienza a señalar el hangar donde llegaran los cazas.
Un segundo después la computadora comienza a hacer zoom, hasta "meterse" dentro del hangar y seleccionar una serie de cajas, que son estibadas por un robot de carga (similar al que tuviera problemas en la tierra).
Tras breve análisis la forma del robot de carga se siluetea en color rojo que parpadea, indicando que ahí está el dispositivo explosivo.

La intensidad de la voz de la Comandante Samantha le saco de su ensimismamiento. Soram al oírla como les reclamaba a el y a Michael. Saluda a los mandos de la sala y sale tras ella para no hacer que se enfade y sentir esa cólera tan fría que desprendía desde que había hablado por primera vez. Por su mente pasaba la idea de un nuevo tipo de caza. Eso le intrigaba y a la vez le entusiasmaba. Tendrían que verlo para ver que nuevas tecnologías habían echo aparición.

- Si, Señor. - dice mientras la alcanza en la puerta.

Alzando la voz Khazziana habla para que el capitan de la nave escuchase:

- Señor, acabo de detectar un artefacto explosivo en el hangar de llegada de los cazas, en el interior de unas cajas

Mientras espera la respuesta mira en los registros de entrada de la nave si hay algun registro de entrada de material explosivo aunque realmente le extraña que sean transportados de forma tan poco segura, mientras en su mente se forma la imagen de lo sucedido en la Tierra, no le gustaba demasiado ya que la meltrandi es una persona que no cree en las casualidades y esa seria demasiada casualidad para lo que ella piensa.

Me giro hacia la capitán y veo que ha desplegado la pantalla de amenazas.
Doy dos pasos y veo que es el hangar al que hace referencia.
-Alerta amarilla. Mask alerte a control de daños y que despejen el hangar..-miro a la capitán Hesh-llame al cuartel y despliegue un equipo de seguridad.

La alarma resuena por toda la nave, las luces cambian a un amarillo y breves momentos después retumba una explosión en la nave.

Khazziana maldice y rapidamente manda un equipo de seguridad:

- Aqui puente, equipo de seguridad 1 dirijase de inmediato al hangar de aterrizaje de cazas, ha habido una explosion, procedan con precaucion

Para de inmediato y rapidamente llamar al cuartel general:

- Aqui nave de reparaciones Yamato Maru hemos sufrido una explosion en uno de nuestros hangares producido por una caja explosiva.

Immelde levanta la cabeza de la compleja jungla de vectores y coordenadas de su monitor al oír a la otra meltrandi, con el ceño fruncido.

¿Otra explosión? ¿Y esta provocada por un artefacto? Lo del hangar pudo haber sido casualidad o un simple case de funcionamiento defectuoso, pero esto ya empieza a sonar raro.

Sea como sea, Khazziana ya tiene la situación bajo control. Esa es su parte del trabajo. De modo que rápidamente deja la consola de calibración en pausa y abre la consola de estado. Una representación tridimensional de la Yamato Maru salta en el monitor, con la posición de las baterías operativas marcadas. Por motivos bastante obvios, un hangar de despegue de cazas no necesita ese tipo de baterías, así que no soprende de ver que ninguna de las armas a su cargo ha sufrido daños.

El ataque no ha afectado a ninguna de las baterías anticaza de la nave, señor. Accederé al sistema de imagen infográfica más próximo, aunque lo más probable es que de con un punto muerto. 

Es un informe poco más que de rutina. Los protocolos de alerta requieren que se den actualizaciones en la situación, aunque ella no tiene mucho que decir... o que hacer. Puede intentar acceder al sistema de imagen de alguna torreta que se halle cerca de la zona- si no tienen un operador humano, pueden controlarse de forma remota mediante un sistema de sensores combinados que proyectan una representación gráfica en tiempo real del campo de vista del arma. Es dudoso que le sirvan de algo, ya que de haber algo que ver, estará en el interior del hangar. Pero al menos le puede avisar si una nave u otro objeto lo bastante grande abandona la zona.

Las alarmas llenan la gran nave. Al contrario de lo que pensaría un observador anónimo, la tripulación tiene bien asignada su tarea en caso de emergencia. En poco más de dos minutos, los pasillos de la Yamato Maru están desiertos, libres para que se desplacen por ellos, los equipos sanitarios, de control de daños y de seguridad.
Una decena de hombres fuertemente armados marchan a paso ligero comprobando visualmente el estado de los corredores.
Otra docena de soldados ya se encuentran listos para entrar al dañado hangar, como parte de la escolta del grupo sanitario y de los hombres de Control de Daños.

La explosión sonó apagada en medio del corredor. Movida por unos reflejos asombrosos la Comandante Storm desenfundó su pistola y dijo a los jóvenes:
-Siganme
Acto seguido se lanzó a correr hacia el dañado hangar, llegando junto con el grupo de Control de Daños.

-Navegante! Firme el curso, mantenga la velocidad.-Miro a la capitana Hesh.-Capitán! El contramaestre se hará cargo de su estación. Póngase al mando de los hombres que están por entrar al hangar.
Me siento en mi sillón en la parte elevada de la sala de control.
-Cabo Zeus, si cualquier cosa se despega de nuestra nave, vuela cerca o le parece sospechosa, está autorizada para abrir fuego de advertencia.