Partida Rol por web

¿No se nota que nos está encantando? O ,al menos, a mí. ¡Ay! Había pensado en una idea, ya luego la aplicas si quieres o no: se me había ocurrido la idea de que ambos grupos 1 y 2 se encontrasen en alguna sala y cooperasen juntos. Obviamente la historia tiene el mismo transfondo, o al menos, parecido. Pero siempre puedes poner que uno de los grupos lleva demasiado tiempo aquí abajo que no se han percatado de que ahí arriba el tiempo transcurre. Obviamente esto es una idea y pudiese ser  mejorable... (Ya paro, me he subido mucho ajajajja)

Máster, avísanos cuando podamos entrar en juego :)

Adam no podía creer que esto estuviera pasando de verdad. Allí mismo. Frente a sus ojos. ¿Dos bestias encerradas en este lugar? Eso era una auténtica locura. Locura, pero real. Los colmillos de las leonas parecías descomunales a esa corta distancia. Su corazón palpitaba con tal fuerza que parecía que fuera a salirse de su pecho en cualquier momento. Dudó en mantenerse quieto o moverse.

—¡Beth, corre! —.  Chilló Adam y al ver cómo Beth se dirigía hacia la puerta él también echó a correr. El plan estaba ahora claro: cerrar la puerta y dejarlos otra vez encerrados allí, para toda la eternidad.

Istar andaba de un lado hacia el otro, con los hombros echados hacia adelante. Se encontraba cansada y ahora, sí que sí, aquello le parecía un laberinto sin salida. Sin embargo, el murmullo de unas voces le llamó la atención, haciendo que la egiptóloga se incorporase en su compostura.

-¿Escuchas eso? -le susurró a su amiga que caminaba hacia su lado-.

Istar frunció el ceño y se atrevió a gritar:

-¿Hay alguien ahí?

Istar caminaba delante de ella y ambas estaban visiblemente decepcionadas. Aquella maldita "X" no era su vía de escape, sino una simple pared, así que iban a tener que seguir dando vueltas. Por el momento, el plan de investigar todas las cámaras, aun siendo arriesgado, tenía cierto sentido, así que empezaron a moverse por el pasillo 2.
Fue entonces cuando un ruido delante de ellas les sobresaltó. Istar le preguntó si lo había oído y ella asintió.

-Sí, pero no sé que puede ser-le respondió, tensándose al instante. No es que pensara que fuesen a encontrarse con otra roca rodante, pero cualquiera sabía.

Istar escribió:

Y nada más preguntar, ambas los vieron. Eran Beth y Adam, que parecían estar saliendo de la Cámara 2 que ellas pensaban "visitar". Safiya también se fijó en algo más. Parecían estar nerviosos, respiraban agitados y también, aliviados por encontrarse... ¿a salvo? Eso significaba que en aquella cámara también se habían cruzado con algo peligroso.

-¡¡Son Beth y Adam!! -exclamó Safiya, aliviada no tanto porque no se tratase de otra trampa, sino por haberlos encontrado con vida.

-BETH, ADAM. SOMOS NOSOTRAS -les gritó a continuación, acelerando el paso para alcanzarles. Por fin volvían a estar reunidos, y eso era una buena noticia.

-¡SANTO DIOS... BENDITO!

Iba aterrada, jadeando y corriendo, mirando hacia atrás y ayudando a Adam a empujar la puerta a sus espaldas hasta que esta se cerró con un sonido pesado y, aparentemente definitivo.

Cuando lo hubieron conseguido abrazó a su marido y después, extenuada se deslizó hasta el suelo, donde se quedó sentada, mirando hacia las mujeres que llegaban corriendo.

-¡AQUÍ! ¡Nos... habéis seguido! 

Se rehizo con dificultad, pero finalmente se levantó de nuevo del suelo, hablando entrecortadamente al principio por el esfuerzo y el pánico.

-No... no podéis imaginaros lo que hay tras esa puerta... diablos, es increíble... un par... de leonas! En serio, dos leonas hambrientas aquí encerradas. Ni idea de... desde... cuando. O cómo... Además... -Inspiró profundamente, calmándose- La X no lleva a ningún sitio. Volvíamos a buscaros, pero se nos ha ocurrido mirar en la maldita sala. ¡Nos ha ido de un pelo! ¿Qué hacen esos animales ahí encerrados? No entiendo nada, os lo juro, ¿Qué es esto? ¿Qué clase de montaje? 

Luego siguió, ya más tranquila y aliviada de poder contar con las dos expertas.

-Oh, y he hecho una foto a un jeroglífico. Supongo que lo habéis visto al venir hacia aquí, ¿sabéis qué significa?

-¡Oh, Beth, cielo...!

Istar la miró perpleja. Beth podía haber entredo de nuevo en shock.

-Nosotras nos hemos encontrado con gatos raros, una bola que nos quería aplastar y la estatua de la diosa... ¿Qué es lo que habéis encontrado por todas las salas? Así, podemos ir hacia una ruta diferente, si ponemos en común todos los sitios por los que hemos ido... No sabemos cómo es que hay animales vivos aquí..., pero debemos salir sea como sea.

Istar le ayudó a levantarse, incorporándola de pie.

-¿Puede enseñarnos el jeroglífico?

-Claro. Mirad...

Les mostró enseguida su teléfono móvil, en el que había la fotografía tomada al jeroglífico que habían dejado atrás al dirigirse a la sala.

-¿No lo habéis visto al venir? Si os habéis encontrado todos esos obstáculos, no me extraña. ¿Habéis vuelto justo por el mismo pasillo por el que nos marchamos nosotros? 

En el teléfono mostró efectivamente un jeroglífico que podíais traducir como:

Las hijas del sol gobernarán el mundo

Safiya se acercó con Istar a ver el jeroglífico. Beth había hecho bien en sacarle una foto, porque Safiya empezó a pensar que quizás por sí solos, ninguno significase nada, pero juntos, a lo mejor formaba algún tipo de mensaje. También se dio cuenta de que en el tiempo que ellas habían rodeado buena parte de aquel laberinto, Beth y Adam parecían haber visto únicamente dos pasillos y una cámara, y que ella pensaba que habían venido por el mismo sitio... a buscarles.

-Beth, nosotras hemos dado toda la vuelta como os dijimos, no detrás vuestra, pero lo bueno es que al final, nos hemos encontrado y que estamos todos bien. Además, hemos visitado dos cámaras, en una de las cuales encontramos éste medallón -le explica Safiya, mostrándoselo

Safiya sacó a continuación su móvil.

[B]-También hemos encontrado más jeroglíficos -le dijo, acercándose a Istar y, con su ayuda, poniendo en común todos los que tenían.

-En el pasillo 6 encontramos "La maldición de la carne corrompe a los infieles"
-En el pasillo 8, "El sol protege a los que nacieron ciegos"
-En la cámara 9, "El corazón de mi hermana"
-Y el vuestro, del pasillo 2, "Las hijas del sol gobernarán el mundo"

Safiya miró a Beth, Adam e Istar.

-En un sitio como este, cada cosa tiene que tener un significado. El problema es que seguramente, tendremos que visitar todas y cada una de las cámaras y los pasillos porque quizás en uno de ellos, haya algo que necesitemos. Si nos dejamos alguno por el camino, podríamos estar dando vueltas indefinidamente. Así que yo sugiero dos planes de acción: El primero, nos movemos todos juntos y vamos visitando cada lugar, ayudándonos entre nosotros. O bien, seguimos como hasta ahora, en dos grupos, pero nos distribuimos el trabajo, y cada uno se encarga de ciertas cámaras y pasillos.

-Menudo lío... sí, claro que todo esto tiene que estar conectado, una especie de clave conjunta. Pero, ¿quién diablos se entretuvo en montar algo así? ¿Y con qué propósito? Porque esto no tiene pintas de ser actual, ¿no? Debe llevar así siglos. Milenios...

Sacudió la cabeza, incrédula. Nada tenía sentido. ¿Una maldición del Antiguo Egipto? ¿En el Templo de una diosa celosa? Porque Beth no lo diría en voz alta, pero esto olía a magia. Magia muy oscura. ¿Leonas vivas encerradas durante tanto tiempo...? No, definitivamente todo esto no le gustaba un pelo.

-Déjame ver ese medallón, por favor. ¿Lo encontrásteis por casualidad, caído en alguina parte? O, por el contrario, estaba sobre alguna peana o algo así, remarcando su importancia...?

Se mordió el labio, pensativa. Cabía cualquier cosa. Y era dar palos en el aire cualquier sugerencia, aunque había que hacerlas.

-En cuanto a los jeroglíficos... ¿Tienen algo que ver con las put... pruebas, pruebas que habéis superado? Por ejemplo, alguna luz muy potente que era mejor atravesar con los ojos cerrados, no sé... O con las leyendas de esa diosa-gato... ¿tenía hermanas...?

Bufó, confundida.

-Ufff. Y no no me separaría de nuevo. Iremos mejor y más seguros los cuatro. De eso estoy convencida.

Istar observó el jeroglífico con detenimiento, escuchando a ambas mujeres.

-Creo que te falta un detalle, cielo. -comentó narrando de nuevo lo que Safiya había argumentado-.

• En el pasillo 6 nos encontramos con: '' La maldición de la carne corrompe a los infieles''.
• En la  sala 8 se hallaba esos felinos.
• Pasillo ocho: ''El sol protege a los que nacieron ciegos''.
• sala 9: ''El corazón de mi hermana'' ( donde habíamos hallado el medallón).

Tras traspasar el pasillo PJ, en la sala 3, una gigantesca bola nos iba a aplastar. Hasta ahora, creo que los jeroglíficos han tenido relación en la sala 9. Tal vez... con los otros han tenido y que nos proporcionaba información sobre las pruebas y las salas... Beth , ¿te importaría hacerle fotos a los que nos encontremos ahora? Sería conveniente tener una imagen, por si después , a la larga, debemos de hacer un puzle...

Istar buscó su cantimplora y bebió un poco de agua, ofreciéndole a los demás.

-En cuanto a Bastet, como bien dijo mi compañera, era una diosa pacífica, sin embargo... podría ser temible como la diosa Sejmet -esta pertenecía a la guerra y era... brutal. Hay arqueólogos e historiadores o egiptólogos que defienden que ambas eran hermanas.Representaba las cualidades maléficas del Sol-. En ocasiones (Bastet) aparece como la hija de Ra -dios del Sol-, y podría ser peor que Sejmet...

>> Con respecto al medallón... pudiese ser un regalo de Ra  a su hija...

Istar sabía mucho más que ella, y eso se notaba cada vez que hablaba sobre el antiguo Egipto. No era solo la fascinación que parecía mostrar o el brillo que emitían sus ojos cuando hablaba, sino que todo su cuerpo parecía transportarse a ese lugar, a esa época, y también conseguía que todos ellos fuesen arrastrados con ella.

-Todo eso solo hace que tengamos más razones para ser cuidadosas. Todos los dioses tienen siempre una cara amable... y otra cruel, y Bastet no es diferente. Ahora tenemos que concentrarmos. Si os parece bien, vamos por el pasillo 3 y exploramos también el 4 y el 5. Entre los cuatro, estoy segura de que saldremos bien de esta.

Safiya mira al grupo y sonríe. Por primera vez desde que cayeron en aquel lugar, se siente confiada. Aquello no es el País de las Maravillas ni ella es Alicia, pero no puede evitar sentirse atraída por todo lo que les rodea, por las trampas, los medallones, los jeroglíficos y en definitiva, por el misterio.