Partida Rol por web

Más allá del tiempo y el espacio

Un nuevo camino

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16/09/2013, 11:54
Director

Era una noche casi invernal en Irlanda. El frío hacía mella en los escasos caminantes que aún rondaban las calles de Dublín, la capital de aquella tierra. Era una noche sin luna, donde solo las luces de neon de los locales y las procedentes de las escasas farolas eran capaces de atravesar una fina capa de neblina que flotaba a pocos centímetros del suelo, dotando a la ciudad de un aire etéreo aquella noche. 

En lo alto de un edificio, una figura encapuchada otea las intrincadas callejas de un rincón en el que a nadie le gustaría estar en ese momento. Camina sobre los tejados de los muelles, se mueve como un felino cazador, en silencio y al amparo de las sombras, conocedor del terreno. Puede ver en un callejón una pequeña banda de unos cuatro individuos, que parecen estar intercambiando ideas. En ese momento ve, para su asombro, una mujer con un abrigo blanco pasar justo por delante del callejón. Los hombres se sorprenden, mirándose los unos a los otros. Una sonrisa siniestra cruza por sus bocas cuando, con mirada cómplice, señalan a la entrada del callejón y a la mujer que pasaba y comienzan a caminar rápido hacia allí. Puede que aquella mujer esté en peligro ¿Qué harás?

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16/09/2013, 12:08
Gabriel Kerrigan

 Estaba claro que esos tipos no planeaban hacer nada bueno, les seguí desde el dejado, con mi arco en una mano, mientras sacaba una flecha de mi carcaj y le preparaba para usarla, en caso de ser necesario, mientras mis ojos de halcón no les perdía de vista ni un momento... Si pensaban que esta noche iban a ser los que iban a cazar, le iba a demostrar que no podían estar más equivocados...

Notas de juego

 Una pregunta que se me olvidó preguntarte, ¿alguna oportunidad de encontrarme con Amy Pond?. Es que estoy coladito por ello y me encantaría que mi personaje pudiera intimar con ella ;P

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17/09/2013, 01:59
Director

La mujer siguió avanzando, los tipos la seguían y cada vez se acercaban más. En ese momento ves como se preparan y sacan sus navajas. Sueltan una risita, momento en el que la mujer se gira y los ve. En un primer momento se queda paralizada y después corre, después de soltar un grito ahogado, con los cuatro matones pisándole los talones.

Los sigues por el tejado, la mujer dobla una esquina y te maldices, pues por un momento la pierdes completamente de vista, aquellos malnacidos giran la esquina y la siguen. Piensas que quizá sea tarde, puede estar perdida. Un movimiento en falso... Lo siguiente que ves es a uno de aquellos tipos salir volando por la esquina. Te acercas y miras desde el tejado. Ella acaba de girarse, está justo a la vuelta, y uno de los tipos acaba de recibir un puñetazo en la barbilla. Pero aún son dos contra uno y ha perdido el factor sorpresa. No puedes ver que ella lleve ningún arma, pero el brillo de las navajas de ellos se ve claramente bajo la luz de las farolas. La mujer lucha con valor ¿Pero será suficiente? El que ha salido volando parece inconsciente, pero el del puñetazo está tirado contra la pared tratando de reincorporarse. ¿Qué harás?

Notas de juego

Cabe la posibilidad. Por cierto quizá tu prólogo sea algo más rápido ya que los demás ya han terminado el suyo. O no, depende de como salga.

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17/09/2013, 02:38
Gabriel Kerrigan

 Apunto con mi flecha al brazo de uno de los que están luchando contra la chica, buscando incapacitándolo, y esperando que mi ataque inesperado sirva para desviar su atención y incluso hacerlos huir...

 Acto seguido, aprovecharía la oscuridad para descender y aparecer de improviso en el callejón, con otra flecha preparada...

 Realicé todas esas acciones de manera fría y precisa, sin perder la calma, con la gracilidad y velocidad de un auténtico depredador. Sabía que con ceder a las emociones solo lograría perder efectividad y la mujer podría pagar el precio. Debía ser frío como el hielo y preciso como una flecha en el centro de la diana...

Notas de juego

 Otro personaje femenino de Doctor Who que me interesa como interés romántico para mi personaje es Lady Christina de Souza, una experta ladrona, de hecho, podrían tener una relación muy en la línea de Batman/Catwoman:

http://tardis.wikia.com/wiki/Christina_de_Souza

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18/09/2013, 11:34
Director

La flecha sale volando de tu arco, cruza el aire y silba, impactando con suma precisión en el brazo de tu blanco. El hombre cae, se apoya contra la pared y se retuerce de dolor. Los otros paran automáticamente y miran en tu dirección, pero a penas ven una sombra. Entonces saltas, caes al suelo con gracilidad y aquellos tres te observan, con el arco presto para dispararles. - eh.. tíos, vámonos de aquí. - Se apresuran a levantar a su compinche y largarse a todo correr de la escena.

La mujer no huye, sigue detrás tuya, mirándote fijamente. No tiene miedo, ni siquiera parece sorprendida. Más bien por su expresión dirías que está... disgustada.

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18/09/2013, 11:45
Gabriel Kerrigan

 Por su expresión, la mujer no parece apreciar mi ayuda... Pues francamente, me importa muy poco, no me dedico a esto para recibir las gracias de la gente, si no para cazar criminales y pulir mis habilidades en situaciones de combate real, ya que eso no se puede lograr solo con entrenamiento...

 Viendo que, aparentemente, ella parece esta bien, no le digo nada, si siquiera trato de acercarme. En realidad lo que hago es disponerme a desaparecer en las sombras, con intención de volver a los tejados y teniendo especial cuidado de que nadie me siga, sobre todo ella, por si está lo bastante molesta como para intentarlo, por lo que planeo dar un rodeo para asegurarme de no llevarla hasta mi ático...

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19/09/2013, 10:10
Director

La mujer te sigue con la mirada cuando subes a los tejados. Parece que te estuviera midiendo, esa mirada... es como si te conociera. Ya la has perdido practicamente de vista, para cuando escuchas su voz, desde las calles. - El Doctor te necesita, Gabriel. - Había alzado la voz, pero no era un grito, hablaba del Doctor, no mencionaba ningún nombre, pero tú sabías que no era necesario... "El Doctor" era cuanto necesitaba para captar tu atención seguramente. Si tratas de buscarla observarás que ya no se encuentra allí, como si hubiera desaparecido entre la niebla. A lo lejos te parece escuchar un sonido familiar... pero no puede ser... La TARDIS.

Ha pasado una semana de aquello, te encuentras en tu ático, con las luces del sol poniente iluminando tu estudio, aún sigues meditando los hechos. ¿Qué harías? ¿Estarías preparado por si el Doctor te buscaba? ¿Por si alguna extraña criatura aparecía? ¿O seguirías con tu vida cotidiana sin creer en aquellos desvarios? Pero, esa es tu decisión.

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19/09/2013, 10:28
Gabriel Kerrigan

 Si el Doctor pedía auxilio... El Arquero respondería. No sabría cuando o donde, pero El Señor Del Tiempo sabría quien era y donde y como encontrarme, así que lo esencial era estar listo cuando eso fuera a pasar. Puse mis asuntos en orden y preparé mis mejores flechas, dardos y dagas a puntos, junto al resto de mi equipo, como mi traje protector. También revisé mi fiel arco, para comprobar que estaba en perfecto estado, a la vez que presto oídos sobre cualquier rumor de cualquier noticia o rumor de sucesos o criaturas extraños...

 Finalmente seguí con mi vida rutinaria, con el fin de que El Doctor supiese donde buscarme cuando viese a mi. Esta noche se celebra una fiesta en el museo británico, una exposición de un valioso collar de diamantes que perteneció a una princesa rusa y que ahora un jeque árabe lo ha prestado para exhibirlo. Normalmente no me van este tipo de eventos, pero dado que, según recuerdo, lo mucho que le gusta estos sitios al Doctor, decido asistir.

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19/09/2013, 10:47
Director

La fiesta transcurre con normalidad. La recepción se produjo a las 20:00, con canapés para recibir a los invitados, entre los que por supuesto te encontrabas. Elegantes camareros ataviados con esmoquin servían champán que llevaban en lustrosas bandejas. Las damas vestían sus mejores vestidos de noche, y los hombres elegantes trajes. Una más de esas aburridas fiestas de las altas esferas, con toda su parafernalia y sus adornos opulentos.

A las 21:00 empezó la cena, una degustación de platos de cocina contemporánea, ricamente adornados y de sabroso bocado. El problema era que el bocado era solo uno u dos a lo sumo, demasiado pequeños para llenarle a uno el estómago. Obviamente el Doctor no iba a aparecer en esos momentos, los cuales era habitual que rehuyera, pero para ti era más fácil entrar antes que después de la cena.

A las 23:00 empezó la exposición en si, el collar ocupaba el centro de la sala de muestras, gustosamente iluminado, mientras artistas invitados hacían sus números cómicos, o bien encargados de tal o cual organización no siempre benéfica daban su discurso dentro de sus 10 minutos de atención. Para tu sorpresa, todo iba normal, ninguna anomalía, salvo, quizá, una mujer que estaba rondando demasiado las joyas...

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19/09/2013, 10:56
Gabriel Kerrigan

 Puede que no fuera nada, pero esa mujer se comportaba más como alguien que se encontraba en una tienda, a punto de comprar, que en un museo, observando una exposición. Intrigado, me acerqué a ella, como quien no quiere la cosa, y fijé mi vista en lo que llamaba su atención:

 - Una hermosa colección de joyas...

 Luego, adopté mi sonrisa más encantadora, esperando que la conversación con ella fuera interesante. Por lo menos estaba seguro de que iba a serlo más de que lo estaba siendo la velada hasta ahora, que me resultaba tediosa y aburrida.

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19/09/2013, 11:10
River Song

- Desde luego, son una hermosa colección. Es una lástima que las dejen ahí dentro. ¿No cree? - Contesta una dama rubia, de apariencia atrevida y con un vestido de largo color negro, elegante a la par que sugerente. Parecía mayor a pesar de comportarse como una joven atrevida. La mujer miraba al escenario con cara de aburrimiento y después de nuevo a las joyas. 

- Me aburren un poco este tipo de cosas, pero ello no quita valor a los objetos expuestos ¿No le parece? - Comenta contigo con una voz coqueta, mientras desvía momentaneamente la mirada de las joyas.

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19/09/2013, 11:20
Gabriel Kerrigan

 Sonreí divertido, dándole la razón:

 - Si, es cierto, aunque no deja de ser un poco curioso y irónico de que estos objetos fueron hechos por sus creadores para que fueran lucidos por damas, no expuestos y acumulando polvo debajo de una vitrina. Aunque supongo que ahora, después de tantos siglos a cuestas, es la única manera de que la gente pueda admirarlos, sin que se estropeen, por el contacto por el ácido de la piel y todo eso...

 A continuación le ofrecí mi mano:

 - Por cierto, soy Gabriel Kerrigan...

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21/09/2013, 11:05
River Song

- Sí... puede ser... Quizá si fuera poco tiempo después de su creación... Pero no, mi marido seguramente se opondría a esas cosas. Opinaría igual que usted, que debe preservarse para que no sufra daños. Una lástima de diamantes. ¿Y qué le trae a usted por aquí, señor Kerrigan? - Preguntó la mujer, primero murmurando algo para si misma, después alzando la voz y mirándote mientras sonreía como si supiera algo ya que tú no sabías... Pero hay algo más, algo que te resulta familiar... La ropa es diferente, el peinado, y lleva maquillaje... Pero ¿No era a caso la mujer de la otra noche?

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21/09/2013, 12:47
Gabriel Kerrigan

 Tratando de mantener una expresión risueña, le respondí, sonriente, aunque manteniéndome alerta en todo momento, mirando por el rabillo del ojo a cualquier posible amenaza, con disimulo, ya que, por su comportamiento en el callejón, es obvio que esta mujer tiene adiestramiento y no conviene hacer nada que despierte sus sospechas de que la haya reconocido, por el momento:

 - Bueno... Digamos que estoy buscando a un viejo amigo... ¿Y usted?. No me ha dicho su nombre, y me temo que la adivinación no es uno de mis muchos talentos, señorita... Disculpe, señora, ¿no?. Ha dicho que está casada... ¿Ha venido su esposo con usted?.

 Mientras esperaba su respuesta, observé atento sus reacciones y su lenguaje corporal, aunque sin perder mi cara de poker sonriente en ningún momento.

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21/09/2013, 22:17
River Song

La mujer te miró y sonrío de forma enigmática, como si supiera algo que tu no sabías y que te concerniera. Era ese tipo de sonrisas de las que dan de pensar. - No, lamentablemente mi marido no ha podido venir hoy. Pero he venido a buscar a un amigo suyo, pues me temo que necesitaré su ayuda. - Contestó mirándote con cara de suspicacia mientras sonreía ampliamente.

- Mi nombre es River Song. - Añadió con una nueva sonrisa coqueta mientras volvía a desviar la mirada hacia las joyas.

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21/09/2013, 23:01
Gabriel Kerrigan

 Estaba cansándome de este juego, pero debía de mantener la calma y no perder la paciencia. Ella era la mujer de la otra noche y a juzgar por lo que dijo antes de irse y lo que insinuaba, era que era, supuestamente, la esposa del Doctor, él necesitaba mi ayuda, y ella no podía habla de una manera clara y directa, por lo visto...

 Claro que podía ser todo una trampa y esta mujer podía no ser quien decía ser, debía de tener cuidado... El sonido de la TARDIS que escuche bien podría haber sido un montaje elaborado para engañarme.

 Manteniendo mi sonrisa, le respondí:

 - River Song... Sin duda un nombre muy bonito y original, sin ninguna duda. Espero que encuentre al amigo del señor Song, así que, si me disculpa, no le robaré más tiempo para que pueda ponerse a buscarlo....

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28/09/2013, 18:07
River Song

- ¿Señor Song? Qué horrible suena eso, no soy tan anticuada como para cambiar mi apellido... Además, él no cambiaría su nombre. Doctor Song suena horripilante, mejor solo Doctor. - Dice mientras te sonríe tranquilamente, dándose la vuelta y marchándose mientras se contonea con aquel vestido ajustado. Sin embargo, no se dirige a la puerta de salida, más bien parece encaminarse hacia los pasillos del servicio ¿A dónde ira?

Notas de juego

Lamento el retraso, semana ajetrado

por cierto, con servicios no me refiero a urinarios, si no al de camareros, empleados y demás.

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29/09/2013, 19:34
Gabriel Kerrigan

 Observo como se aleja, de manera tan evidente que es obvio que es una invitación para que la siga, o al menos eso es lo que me está pareciendo a mí en ese momento.

 Decido picar y esperar unos instantes, antes de, con mucho disimulo, mezclarme entre la gente y los puntos ciegos que la señora del Doctor pueda tener para no ver que la sigo, esperando que no pueda verme, aunque estuviera esperando a que la siguiera...

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29/09/2013, 19:45
Director

La mujer avanza, alejándose del público hasta internarse en los pasillos del servicio. Al parecer lleva un pase, pues acaba de acceder por una puerta de seguridad en la que hay un guardia... Acaba de atravesar la puerta, el guardia mira el pase y asiente, sin decir nada, abriendo la puerta de seguridad. Ella se pierde y tú quedas en la sala de momento, decidido a seguirle la pista ¿Qué habrá allí dentro?

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29/09/2013, 19:48
Gabriel Kerrigan

 Obviamente es arriesgado ir de frente, ya que no tengo autorización para entrar ahí, podría acercarme y dejar fuera de combate al guardia, pero eso me causaría muchos problemas y no sabía cuantos más habría al otro lado...

 Mi única oportunidad era tratar de ver salir por una ventana y comprobar si tenían cornisas por las que yo podía moverme, ya que si intentaba moverme por el sistema de aire acondicionado, además de costarme encontrar alguno por el que pudiera entrar, acabaría perdida mi ropa de fiesta, delatando donde había estado...