Partida Rol por web

Más allá del tiempo y el espacio

Una vieja promesa

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21/07/2013, 14:15
Director

Era una mañana tranquila en la ciudad subterránea de Kajluti. Los Silurians seguían debatiendo el tema humano, en esta ciudad las opiniones eran muy distintas, pues ellos estaban convencidos de que podrían compartir la Tierra en paz, a diferencia de lo que pensaban sus hermanos de otras ciudades, que veían a los humanos como usurpadores y seres inferiores. Hacía dos años de los incidentes con los Sontaran, finalmente se había terminado de construir la Grán Pirámide junto a su hermana la de Keops sin mayores problemas gracias a cierto visitante y su cabina azul. La historia aún alegraba a Silurians y entretenía a sus niños, mientras que comenzaba a constituir una leyenda entre los humanos de la superficie. El hombre en su cabina azul.

Aldro permanecía en su cámara personal poco antes de marchar hacia el ágora esa mañana, donde iba a debatirse nuevamente el tema humano. Ensoñaba aún mientras recordaba su última aventura a la vez que se preparaba una comida rápida y su ropa. Entonces sonó su comunicador, era un mensaje de la central de comunicaciones de Kajluti. El aparato, que parecía un reloj de muñeca, emitió un pitido y vibró, y después una luz parpadeante permaneció en el mismo, avisando al Silurian de que tenía un mensaje. Lo cual era curioso, pues no sabía de qué podía tratarse en un día como este, donde seguramente todos estuvieran en el ágora.

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30/07/2013, 20:11
Aldro

Sorprendido al ver la lucecita parpadeante de su comunicador, se dispone a ver de qué se trata. Qué extraño, hoy no pensaba recibir ningún mensaje pues todos están ocupados en el Ágora.

Aldro añoraba una y ota vez los momentos que pasó con el doctor. La vida en Kajluti a veces tiene sus momentos, sobre todo en el plano científico, que es lo que más le entusiasma pero, ¿y la acción?? La parte de la acción es lo que Aldro echaba de menos. 

Finalmente se dispone a leer el mensaje de su comunicador.

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04/08/2013, 20:05
Director

Era un mensaje proveniente de la central, al parecer del guardia que permanecía controlando la superficie y las inmediaciones de la ciudad subterranea mediante monitores y sondas. El mensaje decía lo siguiente.

"Aldro, se requiere tu presencia en la central, hemos recibido una señal, parece destinada a ti"

El enigmático mensaje concluía de este modo, sin dar pista alguna, el Silurian debería llegar hasta el centro de control, pero se acercaba la hora de ir al Ágora para debatir el tema humano. Lo que podría ser un importante paso para su civilización... ¿Podría faltar?

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05/08/2013, 17:35
Aldro

El mensaje parecia referirse a una señal detectada en el exterior de Kajluty y referida al Siluriann. Todo esto le parecia muy enigmático a Aldro y en su interior no dejaba de darle vueltas al asunto, Pese a las ganas que sentia de ir hasta el centro de control, Aldro debia cumplir antes con sus obligaciones. 

El debate estaba a punto de comenzar en el Ágora, así que se pone en camino mientras pensaba. Espero que de una vez por todas se den cuenta de que hay que colaborar con los humanos, y no estar contra ellos. Por desgracia algunas mentees de sus hermanos estaban ancladas en la tradición y las viejas costumbres y no les dejaban ver la realiad. Lo más beneficioso seria seria un intercambio de culturas, respetando unos las costumbres de otros.

Esta vez Aldro queria dejar bien claro los puntos de por qué los humanos y los Silurians deberian convivir en armonia.

Una vez finalizada la reunión, no perdieria tiempo en ir al centro de control. De lo contrario, la curiosidad acabaria con él.

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10/08/2013, 14:01
Silurian

- Buenos días Aldro. - Te conteste al Silurian de la base de comunicaciones a tu llegada. Su nombre era Kelac, era algo mayor que tu, bastante jovial y ya habíais hablado un par de veces. - Ven, ven, te he llamado porque hemos recibido esta mañana un mensaje que parece ser para ti... Pero aún no se cómo. ¿Cómo es que has tardado tanto? ¿No te mata la curiosidad? - Preguntó, hablando rápido como tenía por costumbre, aunque esto se exageraba más teniendo en cuenta la emoción que ese mensaje parecía provocarle.

El silurian se dirigió al panel de control de comunicaciones y pulsó un botón. Entonces el mensaje apareció en la pantalla, decía lo siguiente: 

"Aldro; nos vemos en el lugar de partida, la Gran Pirámide, al anochecer."

- El mensaje no dice nada más, y lo que es curioso es que la procedencia no se encuentra en ningún lugar de la ciudad. Parece venir del exterior, de la superficie. Pero los humanos no tienen tecnología para mandarnos mensajes, que sepamos ¿Verdad? ¿De quién será? ¿No es emocionante? - Pregunta Kelac visiblemente emocionado.

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10/08/2013, 22:15
Aldro

-¿Que si tengo curiosidad? ¡No te puedes imaginar la curiosidad que tengo! Llevo dándole vueltas desde que me enviaste ese aviso por el comunicador. Aldro ya conocia de alguna otra ocasión a Kelac, y no le importaba mostrarse tal y como es.

-Indudablemente es algo extraño Kelac. Imagino que pocas veces o ninguna te encuentras en con estas anomalias y me pongo en tu lugar. MMmm debe ser algo que rompe con tu monotonia, es asi, ¿verdad?. Bueno, sólo puedo decirte, que si se trata de lo que yo pienso y espero, ¡tu emoción no se podrá comparar con la mia!.

El doctor, el doctor, ha vuelto, ha vuelto!! Viene a cumplir su promesa, como me prometió! Aldro da un salto-Algunos Silurians hace esas cosas cuando se emocionan. y le coje de los hombros al técnico de comunicaciones. -Kelac, ¡espero no verte en una laaaaaaaaaaaaaaaaarga temporada!

Después abandona la sala de comunicaciones y se dirige a su habitación con una gran emoción. Tengo que prepararlo todo, tengo que seleccionar todo mi equipo, no hay tiempo que perder. Piensa, acelarado.

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12/09/2013, 14:30
Director

El silurian científico se queda sin duda con una gran cara de pasmado, pues no sabe cómo interpretar las palabras de su colega, que acaba de decirle que no quiere verlo en un tiempo, pero a su vez no parecía para nada enfadado con él, más bien ilusionado con algo. Después vuelve a su trabajo mientras sigue dándole vueltas a dicha cuestión y a tan extraño comportamiento.

Por su parte Aldro se dirige a su habitación. Puede comprobar que la ciudad es un hervidero de gente, con la reunión recién terminada, todos hablan en pequeños corrillos ahora sobre las opiniones individuales respecto a los humanos. La votación momentanemente está en contra de mostrarse a los humanos, pues los Silurian son dados al estudio y prefieren esperar un poco más. Aldro atraviesa la ciudad sin prestar atención a estas cosas, tiene algo entre manos, algo que si es lo que el cree podría ser la gran aventura de su vida. Apresurado y con el corazón en vilo como un simio, se dirige hacia su habitación y prepara sus cosas. Alguien al parecer le esperaba en la superficie, en un lugar que él conocía.

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02/10/2013, 12:36
Aldro

Una vez en la habitacion, hace una meticulosa selección de los utensilios que cree más necesarios en una misión intergaláctica. Cuidadosamente coloca todos los aparejos en una maleta especial para ello, metálica por fuera y acolchada por dentro. También prepara otra maleta especial para trajes donde guarda un uniforme diseñado para luchar, otro para viajes espaciales y algo de ropa más normal. 

Por último recoje de su receptáculo el fusil siluriann para el cual Aldro tiene autorización de clase A, pues está catalogado como científico protector según las leyes de su ciudad. Guarda el fusil en un maletin especial que tiene dos compartimanetos, el superior para el arma en si y un segundo compartimento para la munición.

Después espera a que sea la hora apropiada para salir de la ciudad e ir al punto de encuentro, cargado con todo el equipaje y vistiendo aún ropa de calle (o lo que los Silurianns consideran como tal), un mono ajustado pero muy cómodo, de color gris con betas negras.

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05/10/2013, 19:12
Director

Las últimas luces del sol bañan las pirámides. Las arenas del desierto se mueven de aquí para allá, pero por suerte el tiempo parece despejado ahora. No se ven humanos cerca, más que un par de guardias acarreando antorchas alrededor de las Pirámides. Cualquier ciudad y asentamiento está lejos de aquí, pensado como un lugar de reposo, pero los Reyes del Nilo no pretenden dejar sus futuras moradas desprotegidas. Sin embargo, el lugar acordado era más allá del recinto cercado, por lo que ahora el Silurian debería ingeniárselas para colarse, preferiblemente sin acabar con los humanos o dar la voz de alarma.