Partida Rol por web

Te encuentras en tu piso/estudio en la zona Soho de Londres, a pesar de que no es muy grande te agrada la zona, pues es la más frecuentada por artistas de todo tipo, la actual "bohemia" cosmopolita de la metrópolis.
La calle en la que te encuentras está plagada de diferentes productoras cinematográficas, redacciones de revistas y algunas editoriales de libros, así que es común ver a gente de lo más variopinta transitando por ella y por éso a veces te abstraes observando por uno de los grandes ventanales...

Aún así enseguida sales de tu ensimismamiento puesto que hoy debes hacer una sesión de fotos a una de las muchas modelos que te ha encargado tu agencia, por suerte o por desgracia será algo rápido pero debes prepararlo todo antes de que aparezca...

Algo nervioso, espero a que toquen la puerta, ya que hoy tengo un pequeño trabajo encomendado por la agencia. Reviso mi equipo para asegurarme que esta todo listo y en orden. Mis ropas: vaqueros limpios y una camisa oscura con los primeros botones desabrochados. Me coloco un poco el pelo y me voy a la cocina a tomarme un café mientras pongo algo de musica tranquilita.

-Tiene pinta de ser un buen dia hoy- Pienso mirando por el ventanal con una mirada perdida a la gente que pasa por las calles de Londres. Dando un sorbo tras otro espero impacientemente que llamen a la puerta.

Empiezas a consumir tu taza de café, el cuál se te hace tan necesario cómo el consumo de vitae diario, sin él te sentirías casi desesperado... El sentir el caliente líquido por tu garganta y estómago te hace sentir en parte más humano y te tranquiliza, cuando ya estás apurándola suena el timbre con algo de insistencia y ante tu sorpresa parece ser que esta vez la muchacha ha sido puntual, no se da a menudo.

Cuando abres la puerta te sorprende un poco el aspecto de la muchacha, sobretodo por su ropa que no luce en absoluto "glamourosa" y colocada al detalle cómo suele ser muy común, pero lo importante es que sea profesional al fin y al cabo.
-Buenas noches... ¿puedo pasar?- te pregunta con una sonrisa y algo de acento nórdico, que aún así no altera su melodiosa voz.

Mi vista se alarga por el ventanal hasta ver el reloj de la torre mas alta de Londres. Apuro las ultimas gotas de mi taza y doy media vuelta para dejarla a remojo en el fregadero. -Tiene que estar al caer- Me voy limpiando las manos, cogo un pequeño trapo y me las voy secando.

-Vaya, es puntual- Mientras me voy frotando las manos con el trapo me dirigo a la puerta para abrirla. Trago saliba al verla. -Ho-hola, claro, adelante- Sonrío y la invito a pasar. Cierro la puerta tras de mi. -¿Quieres tomar algo?..tengo café recién hecho- Mientras lo digo ya le estoy preparando una tazita de café bien rico.

-Bueno..me llamo Blake, tu debes de ser Samantha...- -No puedes hacerlo Blake, ni lo pienses..- Puedo oler ligeramente la sangre de su cuerpo como me pide que la absorba. Carraspeo y le llevo el café dejandolo enfrente suya encima de la mesita.

-¿Prefieres musica sensual o algo mas animado?- Quizas se sienta incomoda por mi sugerencia, pero no creo. -Por la sesión de fotos...- Lo dejo en el aire mientras voy rebuscando entre los cd's.

-Bien, gracias entonces...- se encoge de hombros y coge la taza aún humeante dándole un pequeño sorbo mientras mira el estudio con curiosidad, acercándose a alguno de los trípodes con plafones reflectores hasta que mencionas tu nombre y la música y entonces deja escapar una risa despreocupada.

-Encantada pero yo soy Yvette, me parece que no es necesaria ninguna música...¿me has confundido con una modelo?- pregunta entre extrañada y sorprendida mientras se mira a sí misma negando con la cabeza.
-Bien, no importa, conoces a Gerard Gerasimovich, ¿cierto?-te pregunta sin andarse por las ramas en absoluto. El tipo en cuestión es el primogénito de tu clan, hablaste muy escuetamente con él cuando tu padre decidió que sería de buena educación presentarse, parecía un tipo bastante afable, se interesó por tus fotografías.

Me quedo pensativo cuando dejo de buscar entre los cd's. ¿Yvette? Carraspeo. -Por tus ropas hubiera jurado que eras una simple ciudadana, pero por tu belleza hubiera jurado que si que eras una modelo- Suspiro, mientra miro su silueta. En fin..¿Gerard Gerasimovich? Me voy acercando a Yvette y sin apartar mis verdes ojos de los de ella -Si, le conozco, estuve hablando no hace mucho con él. -¿Por que?- Se queda un tanto extrañado cuando le preguntan por Gerard.

-Entonces, si no eres una modelo ¿Como sabes donde vivo?. Acaso trabajas para el tal Gerard..Su tono de voz es el indicado, frio, pero muy educado cuando se encoge de brazos esperando respuesta por parte de la hermosa chica.

-Vaya, pues gracias por el halago...- dice arqueando ambas cejas debido a la sorpresa causada por tu respuesta, aunque tampoco la cohibes y te devuelve la mirada sin amedrentrarse ni moverse mientras lleva su mano a uno de los bolsillos traseros de sus tejanos.

-No, no trabajo para él... ni para nadie- dice negando con la cabeza mientras frunce el ceño cómo si ése comentario le hubiera resultado ofensivo -Pero sí, le conozco y me ha pedido con insistencia y buenos modales que te trajera ésto, sabía que me pasaría por esta zona...- te tiende un pequeño sobre aterciopelado en el cuál puede leerle tu propio nombre con letra pulcra y recargada.
Mientras lo coges ella se aparta y se queda mirando con curiosidad el "escenario" que ya tienes preparado.

-Así que toreador, ¿se puede ver una exposición tuya en algún sitio?- pregunta con curiosidad mientras el timbre vuelve a sonar.

-¿No trabaja para nadie?..me gusta esta chica-Le cogo el sobre aterciopelado que me tiende tras sacarlo de su pantalon.-Esta caliente..- Ella se aleja curioseando mi estudio mientras sostengo el sobre en mis manos. Me lo paso por la nariz ligeramente cuando ella esta de espaldas para poder percibir algún extraño olor que contenga en su interior.

-Vaya, por lo visto te han hablado de mi...- Dejo el sobre sin abrir encima de una butaca.-Bueno.. Carraspea ..no podría enseñarte mas que fotos de modelos y algún que otro cuadro. Por lo que la máxima exposición que puedes ver está aquí, aun no me he decidido por dar el salto definitivo. Le señalo un cuadro en especial..-Ese de ahí.. Hace una breve pausa dejando que observe el cuadro ..recuerdo que lo pinté cuando era humano..- Fugaces recuerdos se cuelan por mi mente cuando busco en un armario unas fotos que tenia guardadas. Dejo de rebuscar las fotos y el timbre me saca de aquellos recuerdos..

-Disculpa..estoy esperando a alguien- Sin ningún tipo de pavor abro la puerta.

-Bueno, apuesto a que con un poco de educación y agasajo Gerard podría echarte una mano para dar ése último paso- comenta mientras observa el cuadro con interés ladeando la cabeza.
El sobre resulta suave al tacto y desprende un muy ligero aroma perfumado, alguna mezcla de flores que apenas se percibe si no es oliéndolo de cerca.

-Eh, deberías tener cuidado con comentarios cómo ése, podría no ser una vampira si no una simple chica a la que Gerard ha engatusado con su presencia y labia, no sería la primera- compone una sonrisa burlona al hacer referencia a eso y entonces abres la puerta.
Esta vez si que parece tratarse de Samantha, es una muchacha alta y esbelta, con el rubio cabello recogido y compuesto al máximo detalle acompañando el rostro de mucho maquillaje y el cuerpo de un vestido estrecho que deja adivinar sus formas.
Bonita, pero nada original, ya estás muy acostumbrado a ver mujeres de éste tipo.

-Oh, será mejor que os deje trabajar... ¡Hasta pronto!- exclama de manera informal y animada mientras sale del piso cruzándose con Sam, la cuál carraspea mirándola de reojo de arriba a abajo para después sonreirte ampliamente
-Siento haber llegado tarde.

-Lo tendré en cuenta- A decir verdad sabía que era una vampira o mas bien lo intuía, su olor y su piel lo decían todo. Antes de abrir carraspeo -Me gustaría seguir con esta conversación, pero el trabajo lo impide, si algún día quieres, puedes pasarte..- Lo dejo en el aire cuando abro la puerta -Hastalavista- Me despido de Yvette y seguidamente poso la mirada en Samantha.

Tardo unos segundos en reaccionar ya que me ha cohibido esa vampira, pero finalmente. vuelvo a la realidad.-Vaya, estas estúpenda- La invito a pasar. -Ponte cómoda, enseguida estoy contigo- Voy hacia la butaca y cogo disimuladamente el sobre. -Tu debes de ser Samantha verdad..- Digo con forme me voy yendo hacia la cocina quedándome de espaldas a ella, aprovechando ese momento para abrir el sobre y ver lo que hay en su interior.

-¿Quieres tomar algo preciosa?- Dice en un tono elocuente, como si lo dijera muy a menudo mientras abre el sobre encima del mármol de la cocina.

-¡Gracias!- exclama con una risita aguda mientras entra al piso dejando su bolso y la chaqueta sobre una butaca, para después acercarse hasta dónde tienes colocados los focos de luz y demás.
-Oh sí, un zumo o algo así, tengo que cuidar la línea ya sabes- comenta dándose unos golpecitos en el vientre a pesar de que evidentemente está delgada.
-¿Tengo que ponerme alguna ropa en especial?- pregunta con indiferencia mientras se acerca a la cocina mirándote con curiosidad de arriba a abajo.

La nota está redactada en un papel aterciopelado, y la firma con el nombre está efectuada con el mismo tipo de letra que la que escribía tu nombre en el sobre.

Escucho la voz de la modelo, pero no le presto atención, estoy concentrado en leer la nota. -Ojalá pudiera decirles que no me interesa una mierda nuestro futuro, y aun menos permanecer con ellos, quiero mi vida..¿es tan difícil?- A la que me doy cuenta de que Samantha me está mirando de arriba abajo. -Pe-perdón..estaba en otro lugar - Arrugo la nota y la tiro a la papelera. Doy una palmada sacando el énfasis que me queda dentro

-Bien, vamos a divertirnos- Me voy hacia la mini-cadena y cargo el cd adecuado para la sesión. Presiono el pequeño botón del mando ¡play!..

-Quiero..- aparto la mirada hasta sus ojos -Necesito que imagines que estás sola, que has llegado a casa después de una discusión con tu novio y necesitas descargar toda esa tensión. Necesitas dejar claro quién manda, ¿de acuerdo? Vamos allá, enséñame lo que es el respeto..- susurro la última frase, acompañándola de un guiño. Al ritmo de la música saco un zumo de fresa del frigorífico y le sirvo en un baso de cristal.

-Sobre la ropa...siempre dejo a elección de la modelo, podríamos hacer una sesión con ropa interior...- Mi cara no es ningún poema, se lo digo totalmente en serio. Con una sonrisa en mis labios deslizo la copa de cristal por el mármol hasta dejársela entre sus dedos prácticamente..

-¿Y bien......?- Me quedo esperando respuesta por su parte, si no le gusta mi idea siempre puede haber mas.

Samantha te mira algo sorprendida y aturdida por tu idea, tras lo cuál cuando alcanza a reaccionar ríe y coge el zumo dando un sorbo.
-En ropa interior... de acuerdo, no hay inconveniente en éso. Entonces además quieres que sea una sesión en plan agresiva, ¿no? Vamos allá- asiente para sí misma y se lleva el vaso, dando otro trago para después dejarlo sobre una silla mientras se desviste quedándose con su bonito conjunto de ropa interior, probablemente ya venía preparado dado que nunca se sabe lo que te pueden pedir, además de la que tú mismo le prestas pues tienes un extenso armario con vestidos y demás conjuntos para ellas.

La sesión empieza, y sin duda alguna la chica es atractiva y sensual físicamente, pero aún así no transmite el potencial o la suficiente personalidad que te gustaría retratar, así que podría catalogarse cómo "otra más" de la larga lista de modelos que has tenido que fotografiar.
Llega un momento en que resulta incluso repetitivo...

-Espera un segundo. Manténte así..- cojo una de las sábanas que llevo siempre en el equipo y la pongo sobre uno de los focos -Es para difuminar la luz y evitar sombras incómodas- explico mientras vuelvo a mi posición, tomo la cámara y compruebo si he conseguido el efecto deseado.

-Comencemos..- tiro las primeras fotos mientras ella mantiene la postura -Ahora quiero que juegues. Pasa tus manos sobre tu piel como si fueran las de tu amante. Vamos...- tras unas cuantas fotografías, quito la cámara del trípode y comienzo a desplazarme por la habitación y continúo tirando, tratando de captar el contraste de sus ojos con su piel morena al ritmo de la música hasta tomar unas cuantas fotos*-

"Bueno, esto es otra cosa, ha sido algo diferente. Creo podré sacar algo bueno de éstas fotos. Veamos qué más podemos hacer..." Pienso mientras recogo mi equipo -¿Te has sentido incomoda en algún momento?- pregunta con su correcto tono sin quitar la mirada de sus ojos mientras va enrollando los cables..

-Bueno, la verdad es que ha sido un poco raro- comenta mientras se encoge de hombros volviendo a ponerse su vestido con facilidad para cubrirse enseguida con el abrigo.
-Pero he hecho mi trabajo que al fin y al cabo es lo importante, espero que hayan quedado bien... Ya me las pasará la agencia. Un placer poder haber trabajado contigo- te sonríe pero a causa de tanta práctica falsa apenas transmite algo. Recoge su bolso y entonces se acerca un poco a dónde estás tú recogiendo los cables.
-Eso es todo, ¿no? Puedo marcharme entonces...- comenta mirándose el reloj sin disimulo.

-Lo siento, es que queria improvisar.. termino de recoger uno de los cables no suelo decir a las modelos que se pongan en ropa interior a no ser que me lo ordene la agencia- Me giro hacia ella mientras se esta poniendo el abrigo..-Ademas pensé que tu cuerpo, era el idóneo para esta sesión. Eres muy fotogénica, ¿sabes?. Y tienes una cara preciosa...- Dejo de hacer lo que estoy haciendo, y me pongo hacer lo que debería ser, aunque no quiera aceptar que lo soy, es lo que soy y no creo que tenga un presa tan fácil y tan cercana a mi, soy un vampiro que luchará para viajar por su cuenta, cueste lo que cueste.

-Así que por que no te quedas un rato mas..- Me voy acercando a ella dejando a lucir mi torso semidesnudo entre los botones de la camisa oscura. Poco a poco el tono de mi voz se convierte en un susurro cálido mientras mis dedos buscan las manos de Samantha ¿puedo probar el rojo de tus labios?..

Samantha parece algo dubitativa al principio pero unos cuántos susurros amables y la mirada penetrante de Blake acaban por convencerla para dejarse llevar en un cálido abrazo lleno de caricias y besos que culminan en un mordisco que apenas percibe mientras el fotógrafo sacia parte de su sed con relativa facilidad.
Tras ésto la muchacha se marcha con una sonrisa en sus labios algo atontada y cuando te dispones a entrar en tu cámara oscura para revelar las fotografías suena el teléfono sobresaltando el silencio de tu estudio.

-Dónde siempre, ahora- se limita a decir la voz de tu padre escuetamente antes de colgar. Cada vez parece más paranoico con el temor de ser vigilado o espiado por éso casi nunca habla si no es cara a cara.
El sitio de siempre, se refiere sin duda a la calle Mayfair[/url], en el West London cerca de dónde vives. Soléis quedar cerca de un pub llamado "HB Audley" aunque en realidad rara vez habéis entrado.

Siento la piel de la humana como es todo mia. Mis dedos buscaban sus manos para entrelazarse con los de ella suavemente. Parece que no se pone nerviosa y aacerco mis labios a la comisura de los suyos para rozarlos primero y despues unirlos en un beso lleno de caricias. Cuando la chica esta atontada por mi presencia y mis dulces besos, escurro mis labios por su mentón hasta llegar al cuello y mordisquearlo con mis dientes, dejando que sienta placer cuando le chupo parte de su sangre..

-Hastalavista preciosa- Dejo que se marche algo conmocionada, quiza nunca sepa lo que llegué hacerle. Me apoyo en la puerta para cerrarla tras de mi. Cogo el pequeño mando de la mini-cadena y le doy al play para poner algo de música mientras voy a revelar las fotos. No me esperaba ninguna llamada de telefono por lo que me sobresalto un poco..-¿Quien será.......?- Dejo de hacer lo que estoy haciendo y cogo el telefono.

-¿Si..?-Frunce el ceño al escuchar aquella voz. -Esta bien ya voy..- El tono de voz reflejaba el respeto que le tenia a su padre, nunca se atrevería a dirigirle la palabra. Cuelgo rápidamente, pero antes de salir me acerco a la papelera y desarrugo el papel que me entrego Yvette, sin mirarlo de nuevo me lo llevo al bolsillo posterior del pantalón vaquero. Cogo un abrigo y con todo lo necesario salgo de mi casa, en la dirección que siempre suelo tomar al quedar con mi padre..

A pesar de la pequeña paranoia de sentirse observado y perseguido a menudo, tu padre sigue vistiendo de forma algo estrafalaria para alguien que presuntamente quiere pasar algo desapercibido pero de todas formas es inútil hablar con él sobre éso.
Mira su reloj de bolsillo cuando llegas y tras asentir y sin saludarte empieza a andar por la calle para que vayas caminando junto a él.

-¿Te ha llegado la invitación del sr. Gerasimovich?- te pregunta cómo si en realidad ya supusiera la respuesta pero quisiera confirmarla.
-Me ha pedido personalmente que le hagas un favor... y a cambio te compensará- tras ésto por fin se digna a mirarte de arriba a abajo sin detenerse, pero el paso es calmado y tranquilo.