Partida Rol por web

Espadas, cuentos de viejas nada mas replico levantandome y mirando a Viktor a los ojos creo que aqui todos ocultamos cosas Hardestad. Todos te creen muerto por lo menos podrias haber cambiado de rostro, eres demasiado reconocible hago una mueca, una sonrisa mientras miro al resto. Protegere esta maldita ciudad, soy el principe, es algo que me he ganado por derecho. Ningun antidiluviano me lo impedira y menos alguien tan obsoleto como el que tengo delante. John quiero que todos los hombres esten listos, los nosferatu se ocuparan de las alcantarillas, los brujah de las entradas a la ciudad y tus gangrel de las calles.

-¿Cuentos de viejas? Habló el jovenzuelo...- respondo cruzándome de brazos mientras miro con la ceja arqueada a Jackius y su intento de organización que a mí casi me resulta surrealista.
-¿Cómo vas a protegerte de algo que ni siquiera sabes lo que es? Estoy convencida de que lo único que podrá detenerle, sea lo que sea, son las espadas. Con tu estrategia sólo conseguirás derramar sangre inútilmente y yo sólo conozco a unos pocos de los portadores... Necesito a Soren- digo esto último convencida de que o el Príncipe o John sabrán de quién hablo.

-Alexander me ha dejado otra de las espadas pero no sé a quién pertenece, ellas elijen a su dueño y no al revés- especifíco antes de que Jackius se emocione demasiado con la idea.

-Bueno, pues si las espada no sirven para nada y no soy un guerrero ni uno de tus hombres, creo que esta reunión no tiene más sentido para mí. Si me disculpa, me retiro a mi asuntos-miro a Irina, que parece tan contrariada como yo, aunque ella al menos parece que si tiene ganas de guerrear. Yo lo dejé hace tiempo y, la verdad, si menosprecian mis habilidades mejor sigo en mi mundo y sea él el que se encargue de todo. Para eso es el príncipe y yo ni siquiera soy un primogénito.

-Que tengan buena noche. Si me necesita, ya sabe donde encontrarme. Suerte con su lucha.-Me doy la vuelta y me coloco mirando a la puerta.-Vamos-digo a Anna y comienzo a andar con intención de irme de allí. Se que si el antediluviano ese es tan poderoso como todo dicen, el príncipe no tendrá oportunidad de acabar con él por mucho brujah que tenga a su servicio, sin embargo mi visita de cortesía ha concluido. No se merece el puesto que tiene, no sabe llevar el cargo.

Anna se levanta, no ha dicho nada en este tiempo, pero en su rostro hay una sonrisa y se coje al brazo de Vincent antes de salir caminando a su lado. Los rostros de Viktor y de Jackius se ensombrecen como si hubiera algo que no le gustara nada de todo esto o de lo que acabas de hacer. Antes de salir en la puerta....

Un placer ver a tantos reunidos y con tan buenos planes, pero por si no os habeis dado cuenta falta alguien en esta reunion, alguien que estaba en Sevilla cuando murio el anterior custodio de las espadas. sonrio mordiendome el labio inferior espero que el proximo primogenito Ventrue sea mas capaz que los ultimos, aunque el ojo de algunos principes deja mucho que desear para algunas cosas. Por cierto como primogenita Ravnos espero que tus amigitos magos se alejen tanto de mis gitanos como de mis buenos muchachos. Un placer como he dicho, nos vemos...mejor no por que la proxima vez puede que no sea tan cordial la reunion

-¡Esto es la puta ostia!- exclamo ya fuera de mí cuando los dos pretenciosos se marchan de la suite así, sin más, vacilando y cómo si no fuera con ellos el fin del mundo. Cómo si fueran a salvarse por una "divina intervención".
-Es primogénita y justiciar pero ha dejado claro que está por encima de ti y te pisa cómo le da la gana, así que yo tampoco voy a perder más tiempo con un Príncipe tan nefasto- espeto sin cortarme un pelo. ¿Porqué debería hacerlo si ellos dos no lo han hecho? Que no usen palabras groseras no significa que su actitud sea igual de irrespetuosa así que me agacho para besar la cabeza de Quentin.

-Ya sabes dónde encontrarme si quieres hacerme una visita o venir conmigo, ¿vale?- le digo al malkavian con un tono dulcificado y cariñoso, dedicado para él antes de darme la vuelta y salir también de la habitación.
No voy a perder más tiempo con una marioneta, es algo que detesto de verdad.

Pero tiene razon, falta la española, ella sabe como son las espadas. Las vio todas y al menos ha entregado dos de ellas a alguien. Necesitamos encontrarla y que nos diga quienes eran. Aunque Soren creo que seguira con Isabella si no ha descubierto que hacer con su estoque digo mientras veo como se marchan y miro a Jackius Soy el ventrue mas antiguo de la ciudad, sere el primogenito y por tu bien espero que sepas que hacer por que si la ciudad cae tu seras el primero en sufrirlo te lo prometo. El sueño de Mithras no se esfumara tan facilmente

Abro la puerta para disponerme a salir afuera, me detengo y miro a Víktor, posible futuro Príncipe de la ciudad por lo que acabo de comprobar.
-Una de esas personas fue Alexander y me ha cedido su espada porque no piensa quedarse... De todas formas se dirige con ella a China así que si queréis pillarla será mejor que os deis prisa, pero debería bastar con una llamada de teléfono- me encojo de hombros, al fin y al cabo estoy segura de que Anna también sabe algo al respecto pero directamente ha pasado de mencionarlo.

Miro de reojo a John, decepcionada por su silencio sumiso, y cierro la puerta marchándome del lujoso hotel y volviendo a mi local. Un poco de calma, me conviene...

Pongo un dedo en tus labios y te guiño un ojo mientras salgo del agua caminando hacia el dormitorio enrollada en una toalla.

Tengo hambre, es muy raro no suelo tenerla. ¿me podrias traer algo de sangre para que no me ruga el estomago tanto? te miro con ojitos tiernos apoyada en la puerta mientras sonrio y salgo fuera, sentandome en la cama y luego tumbandome.

-Claro..- Me enrollo una toalla negra a la cintura y me dirigo hacia la cocina, desde allí y mientras voy preparando las cosas digo..
-¿Sólo tomas sangre? podría prepararte un buen plato de macarrones a la boloñesa..- Un par de copas de cristal con ese líquido rojo sumergido en un par de hielos es todo lo que necesito para dirigirme de nuevo a la habitación..

-Ten, está fría..- te tiendo la copa de cristal.. ¿quieres que ponga algo de música?..- pregunto señalando con el dedo la mini-cadena, sin estar muy seguro de si te apetecerá..

No tolero la comida, esas delicatesen quedaron atras. digo cogiendo la copa y tumbandome mirandote mientras juego con la otra mano con los dedos sobre la colcha haciendo circulos. Me apetece muchisimo un poco de musica, ya sabes cual me gusta asi que... le doy un sorbo a la copa y me chupo luego los labios y saco la lengua entre mis colmillos.

Dejo la copa apoyada a un lado de la mini-cadena para poder rebuscar mejor entre los cd's..
-Por suerte aún puedo disfrutar de esas delicias. Deberías probar las mías, quizás te gusten.. Ya la tengo..- dice al encontrar una de las canciones y darle al play..

-¿Si?... y qué es lo que mas te gusta.. voy andando de rodillas haciéndome el tonto por la cama hasta encontrarme con tus labios húmedos para saborearlos con el agrio sabor de la sangre.. creo que aún me debes un masaje..-

Un nuevo sorbo y una sonrisa inocente mientras pones la musica y te acercas.

¿Que me gusta? pues la verdad demasiadas cosas, bailar, la opera, una pelicula romantica, las rosas digo enumerando las cosas y cierro los ojos saboreando el beso. Es verdad, te debo un masaje pero tu tambien me debes uno creo recordar te acaricio la mejilla y me llevo la mano a la cabeza con gesto de dolor.

-¿La opera?.. me quedo un tanto extrañado después de besarte con un gesto divertido.. creo que no hay cosa mas aburrida que eso, pero bien si te gusta, puedes llevarme algún día..¿se puede comer palomitas?- bromeo al mismo tiempo que te hago cosquillas por la parte de las costillas con cuidado de que no se caigan las copas encima de la cama..

-Jaja.. tú ganas, pero después no te escapas de hacerme uno a mi.. me froto las manos después de dejar la copa apoyada en la mesita de noche dispuesto a darte el masaje.. ¿qué parte te duele?..-

Blake digo en medio tono de reproche mientras suspiro y te miro dejando los brazos que cuelguen por el borde de la cama la espalda, me duele mucho y ahora la cabeza, creo que el viaje no me ha sentado bien. La proxima vez que me secuestren y me dejen en la isla

-¿Eso significa que quieres dormirte?...- Blake le mira un poco preocupado por sus últimas palabras y se acerca de nuevo hacia la copa para acabar retrepándose en el cabezal de la cama..

-La próxima vez que te secuestren.. ¿qué?..- me quedo mirándote como estas tumbada y con la sensación de que tu última frase no esta terminada del todo..

No tengo mucho sueño, solo es que parece que me estan martilleando la cabeza con rabia, pero se me pasara. digo negando y mirandote de reojo mientras me incorporo un poco.

Pues que la proxima vez que me secuestren le agradeceria mucho al señor secuestrador que me dejara en esta isla o que me lleve a un paraiso tropical. Aunque claro dudo que me vuelvan a secuestrar, tal vez solo me secuestre una persona

Me incorporo acercándome mas a ti para darte un beso entre tus cabellos y tu frente -Tranquila... pues quizá ese señor secuestrador sea yo la próxima vez, y pueda llevarte a una isla donde el agua choque a tus pies ¿sabes?... sentada en la orilla del mar..¿me dejarías?..- Te miro y sonrío, y vuelvo a mirar al frente algo entristecido..

-Ojalá nada de esto estuviera pasando.. y fuera todo normal...- dice con ese tono entristecido recordando los momentos que pasó para ir a rescatarte..

Eso me encantaria replico riendome y acariciandote la mejilla terminando por sentarme en la cama a tu lado apoyando mi cabeza en tu hombro con los ojos cerrados y cogiendo una de tus manos entre las mias. Cuando quieras y tengamos tiempo lo haremos, me gustara mucho pasar mucho tiempo contigo lejos de aqui señor secuestrador