Partida Rol por web

- Vaya, que sheriff tan amable - pensé divertido al escuchar sus palabras - Si colabora así sin saber mi cargo me gustaría ver cómo lo haría si lo supiese...

Por otra parte, el hecho de que se refiriera de aquella manera a la espada indicaba que sabía de qué hablaba... interesante al menos. De momento le seguiría el hilo, a ver dónde me llevaba.

- Vaya, gracias. - contesté - ¿le importa que me pase, a ver si puedo ayudarle?

El hecho de estar hablando con el sheriff, supongo, me recordó de repente algo. ¡El antiguo sheriff aún debía estar en aquella sala de interrogatorios! - Pobre hombre - pensé sarcásticamente mientras me disponía a dirigirme allí.

Como guste, estoy en... bueno lo visito hace poco para ver a un detenido. Estare intentando que mi compañero no mate a nadie de momento. Deberias tomarte una tila a ver si te calmas grito mientras cuelgo.

Cuando sales y caminas hacia alli, notas como una quemazon en tu nuca, te giras y lo unico que ves es a un oriental mirando un periodico en un banco del parque que mira su reloj levantandose y subiendo a un coche que para frente a el.

Suena el telefono es Irina esta vez

Cita:

Poco después de salir algo atrajo mi atención, tal vez debido a la disciplina del auspex o a la simple experiencia de tantas décadas. ¿Tal vez me estuvieran siguiendo? El truco del periódico no había cambiado desde las Grandes Guerras, al fin y al cabo. Yo mismo lo había utilizado alguna vez, de hecho...

El sonido del teléfono interrumpió por un segundo mis pensamientos i el hecho de que aquel hombre subiera al coche hizo que me permitiera buscarlo en mi bolsillo, aunque sin descolgarlo aún.

Un segundo mientras suena el telefono y ves algo, un bulto dentro del coche, sin sentido, casi inerte, dudas un segundo, pero ves que es una mujer. El oriental te mira un segundo y sonrie mientras se pone unas gafas de sol montando en el coche y cerrando la puerta aunque oyes un gemido dentro de dolor que te llega levemente como si no tuviera fuerzas el que lo emite.

La verdad es que no actuaría en plan "héroe" si se producía un secuestro cualquiera ante mis ojos. Tal vez llamaría a la policía si me sentía con ganas. Pero esa sonrisa... tuve un mal presentimiento, así que me acerqué fijándome en si podría descubrir algo más...

Te acercas, los cristales estan tintados, pero algo golpea una, es una mano, blanca, femenina como si quisiera salir.
Tus ojos te revelan que los ocupantes del coche, al menos los de la parte de atras son vampiros, el conductor es humano aunque con algunas trazas palidad. Vuelves a oir el quejido y vuelves a oir otro golpe en el cristal. Un poco de sangre en su muñeca antes de que el coche arranque y se aleje, pero tu sombra, es como si tiraran de ella hacia dentro como si quisieran escapar atraves de ella.

¿Qué habría pasado en aquel coche? Tendría que preguntar por ello cuando viera al sheriff...

Sin más dilación contesté a la llamada de, según parecía, Irina.

- Vaya, - pensé - justo cuando a mi me surge algo... En fin, tampoco corre prisa lo del sheriff. Espero...

- Saludos de nuevo - respondí cordialmente - La verdad es que ahora es a mi al que le ha surgido una, pero creo que podrá esperar. ¿Se encuentra cerca de London Bridge?

Pues entonces nada pero te dire off rol que es la de la foto, si se parece a pero tiene su explicacion ^^

Cita:

- Vaya... Si quiere podemos vernos en un punto intermedio. ¿Donde se encuentra? - pregunté sin dejar notar mi fastidio, mientras me dirijía a la estación de metro más cercana.

Lo del sheriff podría esperar un rato, pero cuanto menos fuese mejor...

Cita:

- Como quiera entonces - respondí amablemente finalizando la conversación - hasta ahora.

La verdad es que realmente habría preferido quedar en un lugar intermedio para ahorrar tiempo, puesto que no quería hacer esperar tanto al sheriff, pero tampoco vendría de cinco minutos...

Mientras esperaba podía aprovechar para alimentarme, siempre que encontrara alguna presa de mi delicado agrado de ventrue. Probablemente tendría que prescindir del magnífico juego previo al manjar del que solía disfrutar normalmente, puesto que no daría tiempo, pero la experiencia me decía que era importante andar preparado, especialmente cuando me veía involucrado en asuntos extraños potencialmente peligrosos...

Encuentras una presa, no te cuesta mucho, por que al verte incluso se sonroja, te alimentas y llegaras a tu cita a tiempo por lo que parece. Alli esta esperando a que llegues al lado de su moto.

Tras unos minutos de recorrido bastante tranquilo consigo llegar hasta mi destino: London Bridge.
De nuevo queda patente una de las mayores ventajas de ir en moto y es que puedo adentrarme en cualquier callejón sin preocuaprme demasiado por el aparcamiento ya que dudo que me lleve mucho tiempo...

Después de un breve momento de búsqueda doy con el "sr. Anderson", por lo que subo el vehículo a la acera y lo dejo ahí antes de bajarme y retirar el casco, colocándome bien la ropa antes de dirigirme hacia él acompañada del incesante sonido de mis tacones.
-Buenas noches...- le saludo educadamente y miro un instante alrededor antes de volver a centrarme en su mirada sin titubeos.

Acudí a la cita con Irina totalmente saciado, gracias a aquella pobre mortal que esperaba el autobús. Era una verdadera pena que aquellos brillantes y dorados rizos se hubieran mancillado con lo basto de las prisas. ¿Tal vez volvería a encontrarme con ella alguna otra noche en London Bridge?

Mis ojos recorrieron, fugaces, los alrededores mientras me acercaba a Irina, aunque bien sabía que el principal peligro potencial lo formaba ella misma. Deformación profesional, supongo. Mi paso era  firme y decidido, pues no había tiempo que perder y, por lo que había visto, ella no era persona de grandes formalidades.

- Buenas noches - saludé cordialmente empezando a "pasear" - ¿Alguna suerte con la búsqueda hasta ahora?

-No demasiada, supongo- mi ceño se frunce ligeramente pero me obligo a relajarlo mientras empiezo a andar junto a él de brazos cruzados.
-Sé dónde está otra de las espadas, bueno quién la tiene, pero todavía no he hablado con él, espero hacerlo en breve... Al parecer siguen habiendo ataques y sucesos extraños por la ciudad, convendría tener a todos los portadores localizados pronto por si viene- resoplo sonoramente, con cierta impaciencia, a pesar de que respirar y llenar mis pulmones en un gesto que dejé de precisar hace tiempo, no puedo evitar algunos signos tan humanos cómo ése.

-Creo que lo más frustrante de todo es que ni siquiera sé a qué deberían enfrentarse pero no puedo quedarme sin hacer nada... ¿Qué me dice usted?- pregunto centrando entonces mi atención y mi mirada en él con cierta expectación. Dudo que me llamara para nada...