Me disponía a irme con la espada cuando alguien interrumpió de manera casi desbocada.
El Mathis... ¿No era aquél el local de Irina? ¿Quién lo quería atacar? ¿Porqué?
Por el momento, a pesar de todo, me limité a mirar hacia mis dos acompañantes, esperando sus reacciones al respecto. Aunque estaba claro que la visita al príncipe tendría que esperar. De nuevo.