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Mi Primer Cambio

4 - El Desafío de los Cachorros

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10/04/2020, 04:10
Perla

Martes

12 del mediodía

Estaban saliendo del túmulo dejando atrás a sus nuevos amigos, y a su padre. Perla  se encontraba tras Fang y junto a los cachorros. Llevaban suficientes provisiones para una semana aunque no creían que tardaran ni la mitad, si tenían suerte. El cielo estaba despejado y el clima era agradable.

El bosque los recibió con su calma verde y mágica de la flora irlandesa.

-Antes todo este país estaba lleno de árboles –explicaba la muchacha –la deforestación humana y la ambición ligada a ella, cada vez los reducen más.

Era una lástima que las personas no pudieran apreciar la belleza y necesidad de la madre naturaleza. Hayas, robles, avellanos, había una enorme cantidad de vegetación y, debido a la humedad del suelo, hongos y lianas se amontonaban alrededor de los troncos.

Fang asintió en silencio, estaba concentrado en los alrededores a medida que se adentraban en la espesura.

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10/04/2020, 16:30
Conrad Ferguson

Abandonar aquel lugar nos sumergió en lo más profundo del bosque en que me había sentido nunca. Era tan espeso y alejado de todo como cuando habíamos seguido a Ciervo hasta la granja, pero en aquellos momentos no había tenido tiempo de disfrutar de la belleza del entorno natural.

Las monjas nunca nos habían llevado al bosque. Como mucho a parques para que jugásemos. -Expliqué a Perla, sin culpar en absoluto a aquellas religiosas. Demasiado bien nos trataban, pese a todo- Los hombres cortan los árboles para conseguir madera, para tener campos de cultivo y hacer más grandes las ciudades. ¿Crees que es compatible todo eso con conservar los bosques? -Quise saber, con curiosidad, acercándome a lo que creía que era un roble y acariciando la corteza cubierta de musgo. Realmente quería comprender la lucha en que estábamos métodos, de que formábamos parte.

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17/04/2020, 23:33
Eara Ferguson

Comenzar aquel viaje fue, sin duda alguna, algo nuevo para mi. Primero, porque estaba empezando a saber lo que era tener como dos sentimientos a la vez dentro de mi, haciéndome bullir como una olla express a punto de ponerse a silbar. Segundo porque todo era nos ayudaría a comprender quién éramos realmente.

Comenzamos nuestra andanza y, de repente, era como si viera la naturaleza con otros ojos. De repente el musgo era bello, suave y húmedo y de ese color verde que decoraba cada árbol haciéndolo especial. Cada sonido era más perceptible para mi, desde nuestros pies sobre el suelo hasta el cantar de un grillo a lo lejos y camuflado bajo la tierra. Mis ojos, de repente, eran capaces de ver hasta el animal que normalmente me hubiera pasado desapercibido.

Escuche a Perla lamentarse de la pérdida de árboles y sentí una pena en la boca del estómago. Conrad comenta lo que nos han enseñado en clase, pero es cierto, que cada vez la naturaleza va perdiendo la batalla contra el ser humano, sean o no razonables el motivo por el que se hace.

Acaricio con los dedos una flor que ha crecido sola entre un matorral espeso, es suave ¿siempre habían sido tan suaves? Luego, una mariposa vuela y la observo como aquel que ve algo maravilloso por primera vez. Creo que comienzo a sentir esa conexión con la naturaleza de la que nos han hablado. Tal vez, no sea buena a la hora de controlar la bestia que anida dentro de nosotros, pero la conexión con la naturaleza estoy comenzando a sentirla y me gusta. Aprecio cada pequeño detalle y eso hace que quiera encontrar el siguiente, que quiera absorber todo lo posible, que quiera tener contacto con todo, comprobar el olor, el tacto el sonido.

Intento dejar mis desvarios por un segundo y prestar atención a lo que están hablando, pues me he abstraído demasiado.

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20/04/2020, 22:18
Perla

Conrad explicó a Perla sobre las razones por las cuales los hombres utilizaban los bosques e indagó sobre la compatibilidad de protegerlos cuando se los necesitaba también. ¿Cómo usarlos y a la vez resguardarlos?

-El problema es la proporción de abuso de los humanos sobre la naturaleza. Al día de hoy, en Escocia, los bosques han sido protegidos por el gobierno para evitar la deforestación que se da en otras zonas.

Perla quiso ejemplificar el asunto con el caso de un país sudamericano que habían visto en el orfanato.

-En Brasil, por ejemplo… cada vez se talan más árboles a tal punto que lo que es una de las mayores selvas del planeta podría convertirse en el futuro en un desierto –sus manos se extendieron para abarcar todo alrededor –los árboles no solo nos cuidan, sino que nos dan el aire que respiramos, comida y refugio… pero debemos darles el tiempo de volver a crecer.

Eara se sentía absorbida en lo que observaba, los colores eran más nítidos, las texturas más detalladas... de a poco la Bestia que vivía en ella y en su hermano, empezaba a mostrar también parte de su magia. Volvió a prestar atención al intercambio entre Perla y su hermano justo para ver cómo una bandada de pájaros sobrevolaban por encima de ellos.

La joven Theurge puso su brazo delante para que los niños se detuvieran.

-¿Fang...? ¿Los has visto? -preguntó. 

-Sí- respondió él -parece que están huyendo de algo...

 

Notas de juego

Seguimos. No ando bien del todo pero la fiebre se fue.

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20/04/2020, 22:33
Conrad Ferguson

La explicación de Perla me abrió los ojos a una realidad, una que tan sólo una de las monjas del orfanato nos había contado alguna vez. Todas las demás definían el mundo como una cuestión de bien y malo, lo bueno y lo malo, sin que hubiera nada entre ambos más que una linea definida en el suelo. Sin embargo, Sor Gracey decía que todo lo malo tenía algo de bueno, y todo lo bueno algo de malo. Ella decía que lo importante era mantener ambas caras de la misma moneda en equilibrio, aunque yo nunca había entendido a qué se refería. Sin embargo, en aquellos momentos creía entenderlo.

No se trataba de que una cosa fuera buena y su contraria mala. Se trataba de que una cosa tenía algo positivo y también algo negativo, como su contraria. Los campos de cultivo y las ciudades tenían algo bueno, el progreso y el alimento y refugio para los hombres; pero tenía algo malo, que era la deforestación y la contaminación. Los bosques tenían muchas cosas buenas, pero una extensión interminable no permitía a los hombres habitarlos.

Lo que hace falta es un equilibrio... -Medité en voz alta, creyendo comprender a qué se refería Perla.

Sin embargo, aquellos pensamientos quedaron súbitamente en un segundo plano, cuando Perla nos detuvo con un gesto al ver a una bandada de pájaros salir volando. Tanto ella como Fang parecían convencidos de que aquello significaba algo, aunque para mí no había nada de extraño en que unos paros salieran huyendo si nos oían llegar. Los pájaros hacían eso, ¿no? Al menos, las palomas del parque. Pero claro, ¿y si no huían de nosotros, sino de alguien más? ¿O de algo?

¿De dónde venían? -Pregunté en voz baja, mirando a las copas de los árboles por si pasaba algún rezagado- Si sabemos de dónde vienen, sabremos de dónde viene ese posible peligro, ¿no? Nadie huye hacia lo que le da miedo...

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24/04/2020, 09:47
Eara Ferguson

La explicación de Perla es bastante lógica, aunque a mi aún me cuesta entenderla. Conrad, por el contrario, parece que sumido en sus pensamientos lo comprende. La verdad es que lo que ella dice tiene sentido. Aún así me cuesta comprenderlo del todo. Pero me gusta escucharla hablar. Me trasmite tranquilidad a la par que seguridad. 

Pero toda esa seguridad se ve interferido por el vuelo repentino de unas aves que a mi, inicialmente, me.parece bello aunque parece que tanto para ella como para Fang no lo es.

Ambos parecen ponerse en guardia y yo, sin comprender nada me pongo tensa también aunque intento resguardarme tras Perla. Lo que dice Conrad tiene sentido, pero claro, no somos más que unos niños que acaban de descubrir el nuevo mundo que los rodea. 

Algo asustada busco en mis ojos lo que haya podido hacer que esos pájaros salieran volando pues parecía obvio para ellos que no había sido nuestra presencia lp que los había asustado.

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25/04/2020, 02:59
Perla

La noción de que era necesario el equilibrio era fundamental y totalmente cierta. Perla iba a felicitar luego a Conrad por su comentario tan sagaz pero ahora, bien como el niño también lo había anticipado, era vital conocer la dirección de aquellos pájaros.

-Han venido por allí –explicó la Theurge señalando al este. –No vamos a quedarnos a ver de qué estaban huyendo, sigamos adelante pero caminando más hacia el Oeste…

Fang se adelantó hacia la dirección de la cual habían ingresado las aves. Mutó a su forma lupus y subió su cabeza alto para aspirar profundamente el aire circundante. Acto seguido, bajó su testa y olfateó el suelo. Mientras la muchacha y los dos cachorros se iban por el otro lado, vieron claramente cómo se le erizaban los pelos del lomo.

Notas de juego

Todos, Percepción + Alerta

siempre que no os indique lo contrario la dificultad es seis.

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25/04/2020, 12:42
Conrad Ferguson

Perla parecía tener muy claro de dónde venían los pájaros, con lo que podíamos asumir dónde se encontraba el peligro del que huían y del que debíamos guardarnos. Precisamente por eso, Perla indicó que seguiríamos caminando pero alejándonos de ese peligro. Aún así, no pude evitar fijarme en que Fang se situaba entre el posible peligro y nosotros, adelantándose a su posible llegada. Eso me causó una gran intranquilidad, recordando que no era la primera vez que lo hacía. Fang siempre se interponía ante el peligro, aún a costa de su propia seguridad, y aún sabiendo que ese peligro podía superarle. Era valiente, pero yo tenía miedo por él.

Yo no era valiente. Tampoco era grande ni fuerte. No era capaz de hacer lo que él hacía, aunque quería poder hacerlo. Quería ser capaz. Quería ser grande, fuerte y valiente para poder proteger a mi hermanita, aún sabiendo que siempre había sido ella quien me había protegido a mí, y no al revés. Quizás por eso, mientras caminaba al lado de Perla traté de repetir aquello que había hecho cuando nos atacase el lobo malo antes de llegar con la manada. Quería cambiar, quería ser más grande, y poder ayudar a Fang si nos alcanzaba el peligro.

- Tiradas (2)

Notas de juego

No se si a estas alturas, tras haber sufrido ya el Primer Cambio, podemos tratar de cambiar a voluntad. En cualquier caso, con una pifia seguro que tardaré en volver a intentarlo XDDD

Master: sí, sí, ya podéis intentarlo a voluntad... los dados no quisieron pero, en 10 minutos de juego te dejo intentarlo nuevamente.

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01/05/2020, 09:21
Eara Ferguson

Perla dejó bien claro que no íbamos a esperar. Así que comenzamos a andar. Tuve la sensación de que más rápido que antes o, simplemente, se trataba de que yo estaba algo más angustiada. 

Fang se quedó detrás y pude llegar a ver cómo se le erizaba el pelo del cuerpo.

-¿Le vamos a dejar solo? ¿No podemos ayudarle? ¿Y si le pasa algo?-pregunté siguiendo el paso. 

Conrad y yo eramos pequeños e inexpertos y yo entendía que nos querían proteger, pero Fang siempre estaba enfrentándose a lo que sea que nos perseguía mientras nosotros simplemente huíamos. Tenía miedo. Miedo por él, por mi y sobretodo por Conrad. 

Una parte de mi me decía que debíamos ayudar a Fang, otra que debíamos correr y salvar el pellejo de Conrad, pero no conseguí obedecer a ninguna. Simplemente, de momento, obedecí a la que me decía que debía seguir a los mayores y, Perla era, en este caso, la persona a obedecer.

- Tiradas (1)
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02/05/2020, 02:40
Perla

Los cachorros querían ayudar, eso estaba claro. No les gustaba la idea de que fuese Fang el que arriesgara el cuello. Conrad inclusive trató de cambiar pero su cuerpo se negó, sus huesos no se movieron, su cabello no creció. Solo se quedó con un hormigueo que se apagó al punto de haber comenzado.

-Vosotros sois demasiado valiosos, debemos protegeros. Venid, por allí.

Perla señaló una dirección y empezaron a seguirla pero los dos pequeños vieron algo entre las ramas y arbustos del bosque. Era una cabeza oscura, de ojos amenazantes. Un enorme lobo negro. Incluso ahora que se estaban alejando a toda prisa no tuvieron un atisbo de duda de quién era el perseguidor.

No iban a olvidar la faz monstruosa de Oliver tan rápido… sus ojos verdes centelleaban incluso entre el follaje del mismo tono con iridiscencias de locura. Fang ya estaba en su forma lupina totalmente preparado para el embiste,

-¡¡No miren atrás!! -gritó Perla y se convirtió delante de los niños, en un grito mental, que de alguna forma escucharon les indicó que se subieran a su lomo. Otro aullido llenó la espesura desde un ángulo diferente.

No era un danzante... eran dos.

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02/05/2020, 15:59
Conrad Ferguson

No podía cambiar. Sentí una especie de hormigueo, pero no era capaz de cambiar como lo había hecho aquella vez, no podía ser como Fang, ni podía sentirme como en nuestros sueños, como un lobo capaz de correr por el bosque.

Y eso era lo que quería, correr.

De hecho, eso era lo que Perla quería que hiciéramos, correr, pues el peligro estaba demasiado cerca. Tan cerca, que pudimos verlo en la distancia, en aquel rostro de lobo que ya conocíamos, era Oliver, y no estaba sólo, pues otro lobo aullaba a lo lejos.

Tan sólo esperaba que no se tratase de…

¡Eara! –Exclamé prácticamente sin pensar, al ver a Perla cambiando su forma, convirtiéndose en una criatura tan grande que parecía querer que nos subiéramos a su espalda, sobre su lomo, para llevarnos como si fuera una montura- ¡Vamos! –Le pedí, preocupado de que montase ella antes que yo para que pudiéramos huir de allí.

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02/05/2020, 16:01
Eara Ferguson

Todo estaba yendo muy deprisa, tanto que no nos daba tiempo casi a pensar. Miré hacia atrás, hacia donde hacía tan sólo unos segundos estaba Fang. En su lugar estaba la nada y entre el follaje vi claramente una bestia ya conocida para nosotros: Oliver. Mirándonos con sus ojos verdes y con el hocico contraído en un gesto de amenaza constante.

La voz de Perla me sacó de ese momento insistiendo en que no miráramos atrás. Nos instaba a correr, lo que parecía que íbamos a tener que hacer a partir de ahora cada vez que hubiera un peligro. Dudé. No quería huir eternamente por muy valiosa que yo fuera, pero la voz de Conrad me animó a correr y le obedecí. Estar junto a mi hermano era más importante que hacer caso a ese acto de rebeldía.

Con decisión me acerqué a Perla y subí a su lomo ayudada por Conrad antes de tenderle la mano para ayudarle a él a subir también.

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03/05/2020, 05:35
-Master

Se subieron a lomos de la enorme loba que corrió con todas las fuerzas de sus ágiles patas. Detrás se oyeron los signos de batalla de dos animales enfurecidos. El bosque empezó a pasar rápidamente delante de ellos, un árbol dejaba a otro atrás, un rincón se abría hacia un claro y luego se volvía a cerrar, entre un matorral denso y verde. Perla conocía el camino de estos bosques aunque no podía saber realmente hacia dónde debían encaminarse, sí era consciente de cómo alejarse de Oliver.

Mas otros aullidos sonaron más cerca. Los niños vieron de soslayo una sombra correr en paralelo. Era un enorme lobo de pelaje rojo y abundante, que desaparecía y hacía reaparición entre el follaje. El aliento de Perla escapaba de su hocico mojado cuando empezó a ganar velocidad, dándose cuenta de que había una amenaza cercana.

“Sujetaos bien… ¡¡¡bien fuerte!!!”

Les dijo de una forma telepática. Sus patas ganaron velocidad pero el otro animal era muy rápido. Aunque Eara y su hermana eran dos niños sabían bien que la chica iba a cansarse más que el otro ser puesto que los llevaba encima.

Tal vez… pudieran cambiar pero si eso salía mal quedarían en el camino. ¿Acaso podrían pedir ayuda??

¿A quién…?

 

Notas de juego

Conrad, tira Alerta + Percepción, no puedes cambiar de forma en este turno

Eara, si quieres cambiar, para aligerar la carga de Perla tira Resistencia + Impulso primario. Sino tira lo de Conrad.

Siempre que no os diga lo contrario, la dificultad es 6.

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03/05/2020, 05:53
Conrad Ferguson

Lo único que podía hacer era sujetarme al pelaje de Perla y a mi hermana, que iba delante de mí sobre su lomo. Me sentía realmente inútil, además de asustado, sujetándome sólo por no caer mientras oía los sonidos de lucha que íbamos dejando atrás. Una vez más, Fang se enfrentaba a Oliver para darnos una oportunidad, y yo no había sido capaz ni siquiera de cambiar a la forma del lobo para poder ayuda aunque fuera corriendo por mí mismo.

Y es que notaba cómo Perla se cansaba al correr con nosotros sobre ella, más aún cuando nos dimos cuenta de que un lobo nos perseguía. Debía ser el refuerzo de Oliver, ese aullido que habíamos oído. ¿Quizás nuestra madre? No quería pensarlo, porque ella misma nos había avisado de que en todo caso no sería ella. Sólo quería pensar en que lograríamos huir, que Perla nos sacaría de allí, aunque no sabía cómo.

¡Ciervo! -Grité sin pensarlo, de pura desesperación, mientras cerraba los ojos- ¡Ayúdanos, por favor!

Puede que aquella petición no tuviera sentido, pero era el miedo quién hablaba a través de mí. Y nos habían dicho que Ciervo iba a estar cerca nuestro, y estábamos en su bosque, ¿no? Así que tal vez...

- Tiradas (1)
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07/05/2020, 10:54
Eara Ferguson

Estaba completamente tensa sobre el lomo de Perla. Notaba el compás de sus patas al correr con nosotros encima y, también notaba, que el ritmo cada vez iba decreciendo a pesar de que ella intentaba que no fuera así. 

Notaba los brazos de Conrad agarrados a mí y la tensión que ellos ejercían me hacía notar que él también se estaba dando cuenta. De repente, habló al ciervo como si éste pudiera ayudarnos.

En mi mente se dibujó la idea de bajarme de ese lomo. Dejarle libre de mi peso haría que pudiera salvar al menos a Conrad pues, si la cosa salía mal, nos cogerían a los tres; y ese lobo de pelaje rojizo estaba demasiado cerca. Así que, sin pensarlo mucho, intenté recordar lo que me hizo responder a mi lobo interior la primera, lo que hizo que mi cuerpo, aún infantil, pasara a ser el de un ser deforme cubierto de pelo. Me concentré de nuevo en esa imagen decidida a saltar del lomo de Perla antes de convertirme y poner en peligro la vida de Conrad.

- Tiradas (1)
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08/05/2020, 03:05
-Master

Conrad llamó al Ciervo mientras Eara saltaba de lomos de Perla sintiendo la energía dentro de ella a medida que sus huesos se reacomodaban. Lo que la ayudó en el proceso fue pensar en su hermano, en lo que sería de ellos si el lobo rojizo les daba alcance. El sentirse débil frente a esta posibilidad aumentó su enojo… y su enojo convocó a la Rabia que empezó a llamar al lobo dentro de ella.

Así que, cuando tocó el suelo, lo hizo con sus patas de loba. Siguió corriendo cerca de Perla mientras miraba al animal que los perseguía. Su hermano, por otro lado, vislumbró una cornamenta pasando a su izquierda, una sombra que volaba casi con una agilidad sobrenatural.

De inmediato supo que era Ciervo y que los estaba guiando para salir del camino del depredador, iba hacia la izquierda y se metió entre dos añosos árboles que dejaban entre sí un agujero del tamaño justo para que pasaran a través.

Sintió que ahora también él podría intentar convertirse… pero primero debería guiar a la Theurge pues solo el pequeño cachorro había visto al guardián del bosque.

Notas de juego

Eara, alerta y percepción para ver al ciervo.

Conrad, si quieres mutar a lobo, puedes intentarlo ahora.

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08/05/2020, 10:50
Conrad Ferguson

¡Eara! -Exclamé extendiendo mi mano en un torpe intento de sujetar a mi hermana y que no se cayera del lomo de Perla. Pero no se estaba cayendo, sino que se tiraba ella, cambiando hasta convertirse en un enorme lobo de pelaje rojo. Bueno, no era exactamente un lobo, sino una especie de criatura a medio camino entre hombre y lobo, como los monstruos de las películas pero mucho, infinitamente, más hermoso.

De hecho, me quedé maravillado al verla así, corriendo a nuestro lado en aquella forma que yo había sido incapaz de adoptar. Me mordí el labio inferior, sabiendo que mi hermana nunca necesitaba mi protección, porque ella era mejor que yo, siempre lo había sido. Era ella quien me había protegido a mí toda mi vida. Sin embargo, mientras la miraba algo llamó mi atención más allá, en la espesura del bosque. Una sombra, la de una cornamenta majestuosa que se movía a toda velocidad entre los árboles y la floresta, mostrándonos el camino que debíamos seguir.

¡POR ALLÍ! ¡PERLA! -Grité a la loba que me llevaba sobre ella, señalando el camino que Ciervo nos mostraba, de forma que también Eara pudiera verlo- ¡ES CIERVO! ¡QUIERE QUE LE SIGAMOS!

Quería ir en esa dirección, saltar de lomos de Perla y correr como lo estaba haciendo Eara, libre y veloz. Por ello cerré los ojos, intentando nuevamente que mi cuerpo respondiera, como lo había hecho en el bosque cuando Oliver nos había atacado. Y sí, me sentí algo más fuerte, como si de repente fuera más grande, pero no era un lobo, seguía sin ser un lobo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Nota mental: los primeros px que consiga serán para Impulso primario ¬¬U

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11/05/2020, 12:05
Eara Ferguson

Pude sentir como esa rabia, desconocida para mi hasta hace tan poco, invade cada rincón de mi pequeño cuerpo. Siento como exploto, como nace de mi ese ser, en el que logré convertirme hace algunas horas, y me sorprendo al sentirme muy cómoda.

Mis patas tocan el suelo agilmente y sin casi realizar ningún sonido al caer. Me sigue sorprendiendo lo fácil que me resulta todo en aquella nueva condición.

Con rapidez me pongo a correr al lado de Perla sintiéndome orgullosa de haber podido quitarle un peso de encima, logrando así que ella pueda sacar de allí a Conrad si es necesario.

Siento el aire que golpea mi cara y, lejos de molestarme, me reconforta sentir a ala velocidad a la que voy. 

Conrad habla y mis ojos logran ver rápidamente por qué debemos ir por dónde nos indica Conrad. Ese ciervo majestuoso, que sólo hemos visto un par de veces, parece indicarnos el camino correcto y eso me deja un gusto dulce que expande tranquilidad. Si le seguimos a él sabremos qué hacer y por dónde ir en cada momento.

"Sí, Perla, por ahí" corroboro todavía sorprendida del hecho de que podamos comunicarnos por la mente.

"Lo conseguiremos" pensé para mí orgullosa de nosotros y de nuestra suerte, aunque mi mente piensa fugazmente en que Fang está en algún lado luchando con Oliver, dando, como tantas veces ha hecho ya, su vida por nosotros si es necesario.

- Tiradas (1)
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11/05/2020, 23:45
-Master

Aunque Conrad hizo el intento de cambiar, no pudo concretar su metamorfosis. La energía interior creció y la fuerza pareció hacerse más nítida, sin embargo así como vino se quedó estática y sus huesos no cambiaron ni su cuerpo se estiró. Seguía siendo un niño. Lo bueno era que Perla estaba ganando distancia y que su hermana, ahora en forma Crinos, corría con fuerza y, no sólo eso, sino que ella también había visto al Guardián del Bosque.

La Theurge siguió las indicaciones de los cachorros y saltó por el hueco dejado por esos dos árboles entrelazados. Eara la siguió.

Ahora se hallaban en una especie de camino ladeado por árboles sombríos que hacían de paredes. La luz del sol apenas se filtraba entre las altísimas copas de los árboles. Perla siguió andando por allí. Notaron que esta parte del bosque se hallaba en un silencio especial, ni siquiera se escuchaba el canto de los pájaros.

Solo se oían sus propias patas… ni siquiera las de la persecutora. El camino bordeado se abrió de golpe. Delante había un bosque diferente. Eso sería la mejor forma de describirlo. No solo era distinto, como si hubieran pasado a otro lugar del mundo sino que, delante de ellos, se hallaba un templo casi en ruinas.

Perla se paró en seco, junto con Eara.

Notas de juego

En un momento os doy la experiencia, la estoy calculando.

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12/05/2020, 11:34
Conrad Ferguson

Por un momento, sujetándome como podía al pelaje de Perla, creí sentirme más fuerte, más grande, como si mi cuerpo comenzase a cambiar. Sin embargo, parecía resultarme imposible hacerlo, como si algo dentro de mí se negase a cambiar. O como si fuera demasiado inútil, débil y torpe para hacerlo.

Lo único positivo que podía sacar era que seguía siendo pequeño y ligero, y por ello Perla pudo seguir corriendo a gran velocidad, una vez que dejó de cargar también con Eara. Seguimos el camino que nos había marcado Ciervo, y eso nos llevó a lo que parecía una sección del bosque muy diferente. Apenas llegaba la luz del sol, y no se oían los sonidos normales del bosque, ni siquiera de quien nos había estado persiguiendo.

¿L-lo hemos perdido...? -Pregunté sin dejar de mirar hacia atrás, incapaz de soltar mis manos del pelaje de Perla. Sin embargo, pronto me di cuenta de que estábamos ante una especie de templo medio derruido en medio del bosque, y me quedé un momento boquiabierto- ¿Qué es este lugar? Parecen las ruinas de un templo secreto, como de las películas del profesor del látigo... -Dije, recordando al héroe de las películas que buscaba en templos antiguos y peleaba contra los alemanes. En sus películas, los templos estaban llenos de misterios y trampas, pero al final había un tesoro. Pero ¿qué pintaba un templo así en aquel bosque?