Partida Rol por web

- Es que los jovenes de ahora no han aprendido modales? ¿qué es esto de entrar en la casa de los demás sin permiso? - Refunfuña
- Bueno, no importa. - Responde rápidamente.
- Veo que vais viniendo vosotros poco a poco. pero falta gente. la situación es grave y agradecería que cedierais a hacerme un poco de caso ya que quiero explicaros la situación personalmente ya que es bastante grave - Dice con seriedad mientras mira a Trygg

 -Disculpe el entrar así, pedi permiso antes de entrar- Había actuado adecuadamente, tal vez el anciano wyveriano no me escucho o no le fue informado por sus empleados que se me concedio el permiso para entrar, aunque por lo visto y como siempre, eso no signifique que el dueño lo hiciera -Lamento incordiarle-

 Dicho eso le escucharía el como se le solicitaba que se acercase para ser puesto al tanto de la situación, siendo lo que estaba buscando simplemente me limite a hacer un gesto a Ekaterina y Sara para que se acomodasen primero, si habían sillas las ayudaría a acomodarse puesto que bien aprendidos tenía una o dos cosas sobre lo que era portarse como caballero. Una vez hecho esto simplemente me sentaría en algún sitio que el anciano viese prudente, eso se denotaría al mirarle y ver si su expresión mostraba disgusto al señalarle donde me fuese a sentar; y finalmente le miraría directo a los ojos.

 -Vengo de Dondruma en recomendación del gran anciano Wyveriano de la misma aldea, me llamo Ruel Stroud- Bajaría la cabeza con parsimonia en un claro gesto de saludo sentado para así volver a mirarle una vez mi espalda se encontrase erguida -La única pregunta que hare de momento sera el saber como puedo llamarle, luego de lo que diga vere si tengo mas preguntas pero por ahora prosiga- Sin mas que decir solo me quedaría callado para escuchar su explicación, despues de todo mi presentación al resto de los presentes estaba hecha.

Mi forma de ser era un poco más discreta que la de mis nuevos compañeros, concretamente de la de Katia. No habría entrado así en la casa del alcalde, pero bueno, ya es demasiado tarde.

Cuando entramos y ante las palabras del alcalde, veo que la amenaza debe ser seria, ya que han reunido a un buen número de cazadores para este fin. Puede que tengamos que derrotar a un gran dragón o a algún tipo de bestia de similares características o tamaño.

Como parece que aún faltan cazadores, me limito a quedarme un poco más atrasada que mis compañeros y a esperar.

Y seguía entrando gente, este lugar parecía ser más una posada que la casa del alcalde. Demasiada gente desconocida no auguraba nada bueno. Othkano empezaba a arrepentirse su decisión de quedarse, aun así, su curiosidad podía más y se contuvo. Miro alguna salida rápida en caso de que las cosas se salieran de control, una ventana, una puerta; siempre era recomendable tener un plan alternativo. –Bien, si todo se sale de control me tiro por la ventana y abandono este pseudopueblo de cuatro casas.-

-Parece que mi solicitud de algo para tomar va a tener que esperar un poco más-Pensó Othkano mientras meditaba si el alcalde no lo escuchó o simplemente había decidido ignorarlo- tratemos de permanecer callados,ante la duda un oído atento es el mejor consejero

-Bueno estamos todos ya no es así? O es que has llamado a todo un ejercito entero de cazadores? Dice mientras indica la obviedad de que apenas se cabe ya en la casa del anciano señalando con un simple gesto  a los recien llegados Ni que fuésemos a enfrentarnos a una horda de Rathalos... Comenta Trygg con tono burlón mientras mueve la pierna en un tic nervioso de impaciencia

- Chico. si tienes la gargante seca agradeceria que esperaras un poco. la taberna de mi hijo está aquí al lado. - Dice mirando al joven Wyveriano

- Bueno, empezaré por el principio. - Dice mientras os da la espalda y pone las manos a la espalda para hacerse el interesante.
- Hace años que sufrimos ataques y problemas de todo tipo de monstruos. Desde raptores hasta monstruos grandes. Hace no mucho, un Lao-Shan Lung derribó una de las fortalezas de las capitales, ya sabéis lo grandes que son. Tranquilos, no os voy a mandar allí con el equipo en esas condiciones. - Continua relatando y terminando con una pausa dramática

- Por el momento necesito que cacéis unos Velociprey y si encontráis al macho alfa, le deis caza. - Especifica la solicitud de caza

- Supongo que pensareis que cazar raptores es fácil ya que estáis acostumbrados, pero el problema no es lo fuertes que son. si no, la cantidad. son demasiados. - Explica a los jóvenes cazadores y termina dándose la vuelta y mirándoos a todos a la cara.

- Dicho esto, si todavía tenéis algo que objetar sois libres de partir de este pueblo a punto de ser destruido. - Termina

-Ja! Ahora empiezas a hablar mi idioma viejo! dice al levantarse de un salto -Bebida, una horda y un alfa que matar, hoy sera un gran día. Comenta riendo mientras se dirige a la salida de la casa...

-¿Huir? ¿Esconderse? JA! Y darles la responsabilidad y la gloria a estos humanos que apenas han aprendido a cazar hace dos o tres años... ni de broma! Comenta mientras sale de la la estancia para espera fuera a los demas mientras respira aire mas fresco que el de la casa....

 En mi mente había un pequeño Ruel que con su catalejo miraba con gran interes a todos los que se encontraban en la habitación, quizas no tanto a Sara y Ekaterina por que ya tenía una idea de como podían ser cada una. Empezando por la joven humana de armadura de Rathalos rota, no podía decir mucho, solo que era linda y muy callada, o era una persona muy introvertida del tipo timida o era alguien mas como Sara, de simplemente no hablar mucho; el siguiente era uno de los wyverianos con el equipo de principiante, el se mostraba muy orgulloso de su raza por lo visto y hasta tenía las agallas o la estupidez de menospreciar a la nuestra con nuestras habilidades de caza pero en el había un equipo de novato, algo realmente vergonzoso si es que era cierto que llevaba mas de 3 años cazando; y el ultimo pero no menos importante era el joven wyveriano que se encontraba muy callado, por lo visto miraba en todas direcciones lo cual parecia ser que hubiese sufrido algun evento traumatico al mirar en todos lados como si estuviese evitando algo. Para cuando el vejestorio wyveriano termino de hablar y de que el señor que se cree el cazador estrella terminase de ofender a mi raza, me levantaria y dejaría que se fuese, solo iría a hablar con el anciano.

 -Yo me quedo, el problema es que mi equipo no esta en buenas condiciones como notara, el anciano de la forja termino de destrozar mi equipo como notara que no llevo puesto ahora- Aun así no perdía mi sonrisa -Quería preguntar si les queda por ahí un martillo de cazador y algo de equipo básico, al menos para erradicar a los velocipreys, tengo el presentimiento que volvere con material suficiente para una armadura-

 Esperaría por la respuesta del viejo y de sus, por lo visto, compañeros de cazería, le desagradaba el hecho de que el único en decir si a parte de el fuese ese molesto wyveriano, ya venian siendo 3 en el día que estaban en plan de toca cojones, quizas el anciano no tanto ya que tenía motivos y hasta cierto punto el herrero tal vez podía salvarse, pero aquel cazador no. Quizas se podría formar un grupo anti wyverianos.

- Tranquilo por suerte para vosotros al recibir una carta comunicando que aceptaban enviar a cazadores aquí solicité al herrero que forjara equipamiento con los pocos recursos que nos quedaban. Aqui hay 2 habitaciones. no son muy grandes pero supongo que para ir a cambiaros es más que suficiente. Evidentemente los chicos en una habitación y las chicas en la otra. - Explicaba a los presentes

Poco rato después de salir de la casa te encuentras con 2 personas más. ambas humanas.
Un hombre, de cabello desarreglado y equipo de cazador destrozado, similar a tus nuevos compañeros y una mujer con el cabello rosa con el mismo equipo de principiante, igual que tú

Se cruza de brazos esperando a que el alcalde hablara, luego entran varios cazadores más.

Vaya, ¿pero cuantos vamos a ser? piensa, y ladea la cabeza mirandoles con curiosidad, pero de reojo ve como el humano de pelo blanco (Reuel) la está mirando. ¿Pero que mira ese? se sonroja ligeramente, frunce el ceño y vuelve a mirar al alcalde. Cuando este les dice lo que tienen que cazar, asiente ligramente.

-Yo estoy preparada, vamos cuando querais, pero me gustaría pasar por la habitación a dejar algo. -Con la mano roza ligeramente las espadas dobles de su padre.

 -Pues todo esta dicho, si me disculpan, ire a cambiarme- Sin mas que decir o mirada que soltar, percatandome de una respuesta en particular, iria a la habitación indicada por el anciano para buscar mi equipo prestado y proceder a desvestirme y colocarme el mismo, de paso podría ver si la calidad del mismo al menos podría resistir una mision así de facil, por el objetivo mas que nada aunque quizas la cantidad nos jugase en contra, eso solo haría las cosas mas divertidas.

 Con suerte solo mi compañero de habitación notaría unas marcas en mi espalda y torso, justo a uno de los lados formando un arco de puntos por asi decirlo, seguro la otra marca que portaba no era tan vistosa. Pero una vez todo estuviese listo y luego de asegurarme que no faltase nada, saldría a agradecer con un gesto al alcalde. -En que dirección se encuentra la manada de velocipreys, osea donde normalmente se los ha visto?, queria preguntarle eso y si hay algo mas que debamos saber?-

Habia escuchado atentamente todo lo dicho en la reunión, era la primera vez que se unía con un grupo desde aquellos cazadores que le enseñaron todo lo que sabía, nunca fue problema con ellos el sentirse a gusto. Ahora estaba por primera vez por su cuenta, "...un grupo debe ser unido y para ello debe conocerse, se debe confiar...” le dijo su instructor hace tiempo y él se había olvidado de confiar en la gente desconocida, el de afuera es un mundo duro y salvaje, en más de una ocasión pago caro el confiar en extraños.
-El grupo no esta mal, no me importaría intentar cooperar con ellos por ahora… aunque el wyveriano que salio por la puerta es temperamental. Y muy ruidoso, puede traernos problemas si no aprendemos a lidiar con él. Las mujeres no dieron mucho para analizar, habrá que esperar mas adelante y el humano parece bastante amigable- pensó mientras una amarga ironía lo invadía, se llavaba mejor con los humanos que con su propia raza, siempre había sido así.
-Suficiente meditación por el momento- La pregunta del humano es sabia, si quieres que hagamos el trabajo es necesario que no te guardes nada, cualquier información puede ser vital. Por cierto…Ruel,¿ verdad?, crei que presentarse era algo normal en las charlas-pensó mientras se armaba una idea que todos los cazadores eran igual de antisociales que él- pero resulta que solo tu lo hiciste, por cierto soy Othkano-

- A mí, si me disculpan, iré a cambiarme. - Digo antes de entrar en la otra habitación, en la que no entró Ruel. Me coloco el equipo, cojo mi nueva arma y salgo.

Escucho atenta la pregunta de Ruel y espero la respuesta. El otro cazador tiene razón, cuanto más sepamos mejor. 

- Es simple. se encuentran en bosques y colinas. Yo mismo les seguí la pista sin que los aldeanos lo supieran. También fui cazador en su momento. Por desgracia ya estoy mayor para estás cosas - Explica

Al principio estaba con Trygg en eso de que no necesitábamos una horda de personas para acabar con lo que sea que nos viniera encima, sin embargo el pedante, imbécil menosprecio a los humanos y con ellos a mí, yo tampoco iba a retirarme, pero dejaría que este se fuera para darle ventaja y al momento de comparar resultados viera quién era la mejor en este enjambre de cazadores.

Al momento de enterarme que hay nuevas armas y armaduras voy  a por la mía y sin prestarle mayor atención a mi género me cambio en donde no entro Ruel, por respeto hacía él y posiblemente hacia el otro wiveriano.  Sí usted creyera que pese a nuestra presencia su aldea va a ser destruida, no iría de caza. Y por cierto, hasta podría esperar aquí a cualquier amenaza para contrarrestarla. Sí teme por su seguridad al mandar a todos los cazadores lejos de la aldea, podría quizás acompañarnos para estar seguro. Claro esta, es probable que le sorteen más peligros. Descuide, todo esto acabará más pronto de lo que espera; Ekaterina Kuznetsova -se señala a sí misma- se lo garantiza.

Y marcho hacia la taberna antes de irme de la aldea. Con unas ultimas palabras a los congregados Son libres de seguirme sí tienen miedo de morir, pero no les recomendaría meterse entre medio de mí y mi presa, no lo contarían. -les aseguro con seriedad- Antes de siquiera tocar la puerta resbala y cae hacia delante, levantándose como sí nada más tarde para seguir su camino. 

Al salir de la casa te encuentras a Trygg esperando y con 2 cazadores más. pero les ignoras completamente y te diriges directamente a la taberna

- Ahora que lo recuerdo... También hay una tienda de campaña para 4 personas en cada habitación. que alguien la lleve. - Dice con cara de recordar algo importante

*
- Jovencita - Dice refiriéndose a Lilith
- No soy herrero, pero creo que no estarás lista si no te cambias esa armadura de Rathalos tan destrozada que tienes. - Continua
- Sé que es una armadura de principiante pero es lo mejor que tienes por ahora y como ya he dicho antes hay habitaciones para cambiarse tranquilamente- Termina

Se mira la armadura y se sonroja, había entrado tan deprisa a la casa del alcalde y quería salir tan rápidamente de cacería, que ni si quiera se había fijado en que tenía la armadura medio rota.

-Vaya, creo que tiene razón, iré a cambiarme en seguida. -entra corriendo en la habitación donde habían entrado anteriormente las chicas, y sale al cabo de unos minutos, con una armadura (de novato) totalmente nueva- Ahora si, ya estoy. Espero fuera.

Se despide del alcalde con una ligera reverencia y sale de la casa.