Partida Rol por web

El refugio comunal no se encontraba tan lleno como hace unas horas cuando la ceremonia de la letania tenía fuerza, sin embargo aún habían algunos cainitas estaban en el lugar. Estos charlaban entre ellos, leían los muros o simplemente esperaban a otros ya que ese lugar era uno de los que ningún miembro de la secta seria rechazado.

Entre los que se encontraban en el lugar habian miembros de la manada de Ezekiel y carolina, lo que era bueno para el primero. Carolina a pesar del desafío a su rango se encontraba viviendo con su manada en el lugar que le correspondía dentro del refugio. Mientras Ezekiel se encontraba en el lugar de las criptas según les avisaron a ambos.

Las criptas se encontraban hacia los pasillos de la derecha en el mausoleo, si se miraba desde el estrado. Pasar por ahí no estaba prohibido para nadie al contrario, las criptas fueron los lugares de descanso de las victimas del colera de 1852. Pero la mayoria fueron vaciadas hace tiempo por sus actuales habitantes no muertos y muchas son utilizadas como lugares de reunion. Varias han sido personalizadas por manuales individuales; aunque no todas las cofradias tienen un cubil dentro del templo, cada una tiene al menos una de estas criptas a la que poder llamar hogar.

-Le parece bien interrogar primero a la Carolina y después a Zeke? Solo por una demostración de respeto- Esperaba que a los otros les vaya bien en las alcantarillas, si ellos daban datos ambiguos, se podía ir a consultar con la demonio, cualquier ayuda era bienvenida.

Mira a Leah algo extrañada, sobre todo después de llamar a Carol usurpadora. Se encogió de hombros.

-Yo dije su momento de empezar por el otro a fin de poner de mi parte y ser flexible, en verdad creo que el orden de los factores no altera el producto, elige tu por donde empezar.

Pero soy fiel defensora del respeto asi que... -Sonrió

-Zeke sera entonces- Encabezó la marcha, tenía experiencia en ciertas cosas por su vida militar.

-Y cuénteme de usted, hace cuánto es una no muerta?- Tendría que conocer a sus compañeros de manada, empezando por su pareja temporal, si era tolerable, capaz no tenga mucho problema en seguir trabajando con la muchacha esa.

Aurora se puso en marcha situándose a la siniestra de Leah con aire feliz, después de haber terminado aquellos rituales contra lupinos, haber entregado los presentes y el paseo en moto. Así que cuando Leah preguntó lo de su edad le encontró de tan buen ánimo que solo soltó un bufido de queja.

-Justo has ido a hablar de una de las pocas temas en las que no me siento cómoda, Leah, eres muy oportuno. Seguramente soy la mas vieja del grupo, mas de lo que cualquier mujer le gustaria reconocer. -Utilizó una convención social como justificante.

Pregúntame otra cosa o háblame de ti si lo prefieres. Por cierto, te queda genial esa gabardina. -Sonrió

-Gracias compañera, es para llevar mi arma sin muchos problemas, y no se note la funda- Le gustaba usar cosas que le queden grandes por eso y no lo tosqueaba si se desarrollaba un combate.

-Sabe que eventualmente va a tener que charlar de esas cosas con la manada, no?- Si querían confianza deberían hablar de donde venían y para donde iban.

Siguieron avanzando, mas o menos Aurora se sabia el camino, ya habia estado aqui otras veces.

-Sabes que eventualmente hay cosas de mi,  que no necesitáis saber ¿no?. Que vivamos en manada no significa renunciar a la intimidad ni a la vida propia. -Le corrigió. -Y si no, estoy deseando ver como me lo sacáis. -Dijo desafiante pero sin perder ese tono de broma que tanto la define.

Mira algo sobre mi, me gusta que me hablen de tu y no de usted. Al menos la gente con la que tengo cierto trato.

Y tu que ¿Eh? ¿Cuando te abrazaron? ¿Fuiste un cabeza pala?

-Bueno, de todas formas vamos a tener más tiempo para conocernos, qué estilo de pelea suele usar?- Había escuchado o visto algo de que era pistolera, no es lo mejor para despachar vampiros, pero al menos se sabría defender.

Suspiró. 

-Te he hecho una pregunta antes, seamos justos.

-Por 1960, más o menos. No fui cabeza de pala. Digamos que mi abrazo fue un tanto fugaz y terminé atendiendo mis asuntos por ciertos lugares lejos de casa- Habría sido mejor que esas situaciones se dieran mas seguido, el ir por ahí defendiendo a los débiles y protegiendo sus propiedades. Ahora tenía obligaciones con la secta, pero siempre se podía ir por ahí a joder con la camarilla, cerdos burocráticos.

-Tengo una idea y capaz pueda ayudarme a concretarla, ya que es una ciudad de vampiros. Es para detenerlos de una bala, sin la necesidad de apuntar a la cabeza- Dejo la idea a medio terminar, fue una de las cosas que aprendió cuando estaba en el ejército.

Asiente y sonrié al oir la edad. -Cachorrito. -Piensa.

-No he terminado de entender lo que dices pero no importa ¿Y como puedo ayudarte?

Mi especialidad son las armas de fuego, mas concretamente escopetas. Luego en cuerpo a cuerpo me defiendo bastante bien y tengo mis hechizos para jugar con ventaja.  -Hubiese entrado en detalles pero no estaban en el sitio mas discreto del planeta.

-Tengo cierta aptitud para crear cosas, pensaba que capaz alguien de su clase me podría ayudar, la idea es crear balas de madera- En el ejército solían usarla para entrenamiento, con los avances tecnológicos posiblemente se puedan producir sin mucho problema, no era necesario tener un arsenal lleno de esas, con unos pocos cargadores alcanzaban.

Pues no se... Mis conocimientos de balística me dicen que un proyectil de madera se destruiría con la explosión de la pólvora. Si eso no ocurriese, el proyectil se destrozaría al impactar contra un cuerpo y si consigues que eso no ocurra, darle al corazón con una bala de ese material... a veces basta una astilla para que el un cainita quede estacado y eso seria contraproducente.

Veo mas practica una cosa que se llama ballesta de repetición china, te podria interesar.  O una pistola de clavos y modificas la munición... 

-Se puede cambiar la punta de una bala entonces, o quemar la madera para que no se destruya con la explosión, de todas formas es mínimo el fuego- De todas formas le era relativamente fácil meterle una bala en le cerebro a algún vampiro y mandarlo a dormir.

-nunca usé una ballesta, y es poco práctico para llevarlo de acá para allá- Le gustaba mantener el perfil bajo, una ballesta era muy aparatoso.

-Casi tanto como una escopeta -Dijo mientras se tocaba la parte de la gabardina que donde tenia la escopeta escondida.

Guardó un rato silencio. Pensando en que le iban a preguntar a Ezekiel. Si lo que habia en las alcantarillas era un resultado mas del infernalismo y Ezekiel resultaba ser como su sire, estarian informando al enemigo de sus planes gratuitamente. Habria que tratar de ser sutiles.

-Cuando demos con el obispo hablas tu con el si no te importa, yo trataré de quedarme en segundo plano.

Con un objetivo su camino ambos Cainitas no tardaron en llegar a las criptas reservadas para la manada de ezekiel, la 25:17. Era extraño pero ambos sentían algo especial en el lugar, tal vez una protección que no podían ver a simple vista o algo mas en el aire que les hacia poner en guardia. Aurora por lo que sabia podia entender que esto era algo relacionado con un ritual hecho por un tremere.

Sin hacerse esperar mucho uno de los miembros de la manada se acerco al encuentro de ambos. Eso no era nada extraño, tenia sentido que no se encontrarían rápidamente frente a Ezekiel como estaba el ambiente tras la intervención de este en la ceremonia.

Quien les fue al encuentro fue una cainita vestida de forma casi mistica se podría decir. Con un vestido negro de ceremonias, que incluia una capucha adornada con símbolos de taumaturgia que Aurora reconocía pero que no entendia bien porque tenían un orden que los hacia mas vistosos que otra cosa. Su rostro estaba casi tapado aunque de vez en cuando se veian sus ojos verdes que permanecían abiertos todo el tiempo.

“Hermanos bienvenidos a nuestra cripta.” Les saludo. “Soy Yasmin, me llaman Yasmin la negra. En que puedo ayudarlos?” pregunto sin irse de su tono neutro que no despedida sus sentimientos sobre ellos.

-Buenas y santas, soy Leah, ella es Camila- Se eñaló y después a la bruja, no iba a venderla así que mejor decir cualquier nombre. -Disculpe la molestia, queríamos hacerle unas consultas a Ezekiel, si no es mucha molestia- Era un tono amigable, posiblemente tengan que dejar las armas en la entrada, eso no era un problema, de momento eran neutrales para ambos bandos, al menos la bruja, el lunático tenía simpatía por zeke.

Aurora le extrañó percibir magia en esta zona, pero no demasiado. Eran rituales de protección seguramente tampoco le interesaba mucho en ese momento ponerse a indagar.

Les salió al paso aquella mujer y tuvo que poner un rostro serio resistir una carcajada por su atuendo tan esteriotipado y mas aún por el sobrenombre que tenia "La Negra"  -A saber que diablos habria hecho para merecer un mote como ese. -Se fijó en los símbolos que llevaba sobre la ropa. -Bueno, siendo sinceros la rara soy yo que no llevo uniforme de bruja piruja.

Leah, tal y como la tremere pidió, tomó la voz cantante. Asi que se limitó a hacer una gesto con la cabeza a modo de saludo y sonreir. Hubiese hecho un gesto o incluso preguntado cuando le cambiaron el nombre, pero la experiencia le habia enseñado a seguir la corriente en ocasiones.

Los ojos verdes permanecen abiertos mirando a ambos, aunque concentrándose mas en Leah. “¿Que clase de consultas?” pregunto no con curiosidad pero con una formalidad que indicaba que ambos deberían ser mas específicos para ver a ezekiel. “Ezekiel estará dispuesto a verlos, pero me gustaría poder informarle de que consultas se tratan para que pueda atenderlos como corresponde.” Explico educadamente mirando por un segundo a Aurora antes de continuar con Leah.

“Tambien les pediré que se desarmen antes de entrar a la cripta.” Agrego al final esperando que se vayan desarmando mientras respondían las preguntas.

Le entregó su arma como prueba de confianza. -Queremos consultarle sobre las alcantarillas y las desapariciones- Directo al grano, sin perder tiempo, cuanto antes sepan lo que pasaba, antes podrían ir con sus compañeros de manada o darles cierta información.