Partida Rol por web

La presencia de un guerrero como Nheilens en una escuela de magia es como la de un elefante en una cacharrería. Susurros y lecturas atentas se ven detenidas por el entrechocar de las placas de su armadura sus pesados pasos.

- Arim... tengo que verla. Decidle que Nheilens ha venido a buscarla - comenta el hombre al cruzarse con el primer sirviente de la escuela a su paso.

Pasad dice el hombre que hay en la puerta Esta en su despacho en la tercera torre, creo que conoceis el camino que lleva alli, aunque ahora no se si estara ocupada

Pasad dice el hombre que hay en la puerta Esta en su despacho en la tercera torre, creo que conoceis el camino que lleva alli, aunque ahora no se si estara ocupada

Sólo se detiene un momento cuando el hombre de la puerta indica que Nheilens habría de conocer el camino hacia el despacho de la directora. Lo mira un momento tratando de averiguar alguna intención oculta al hacer tal comentario y, no hallándola, prosigue sin detenerse hasta la torre.

Llegando a la torre se detiene un instante frente a la puerta para recuperar el resuello. Maldice un par de veces al aire y llama con fuerza al portón de madera haciendo que este resuene enérgicamente.

Adelante murmuro mientras se abre la puerta y me giro mirandote con una sonrisa ¿que quieres ahora? estoy muy ocupada

- ¿Ocupada?

Entra en la habitación con algo de fastidio. Mira hacia atrás y decide cerrar la puerta.

- Está bien, tienes razón, no he sido quizá el mejor de los posibles... - se muerde el labio no sabiendo siquiera cómo empezar tras una pausa decide obviarlo cambiando de tema torpemente - Han matado a un mago, Sérfalas. No, no me mires así, yo no he sido pero bien lo habría hecho, él se lo buscó. Erik Doclan lo mató.

Con los brazos en jarras camina haciendo círculos por la habitación.

- Arim, será juzgado por ello y eso que fue un duelo justo. Así testificarán pero... yo no sé qué hacer. Quiero ayudar pero no sé cómo. Estoy perdido. Arim...

Se acerca hacia ella y planta sus dos manos en la mesa.

- No sé qué hacer. Creo que es bueno que siga mi camino sin mi hermano pero... el me lo diría... dímelo tú. ¿Cómo podría ayudar a Erik? ¿Podrías tú hacerlo?

¿Tanto ha durado? murmuro con una sonrisa en los labios levantandome de la silla y acercandome si dices que se lo busco tu amigo no tendra ningun problema y mas siendo la pareja de Simbai. La unica que me da pena es Danye la pobre sin alguien que cuide a ella y su pequeña.
Me siento en el divan y te indico que hagas lo mismo Pues lo unico que puedo decirte es que digas la verdad, es lo unico que puede hacerte libre y no pienses en tu hermano el no se ha preocupado de ti en este tiempo, nunca y ahora tampoco

- ¿Danye? - el guerrero se rasca la cabeza tratando de hacer memoria. Parece no conseguir demasiado éxito - ¿Acaso aquel egoista cuidaba de ella de algún modo? Bien hará en prescindir de él. De requerir protección seguro que incluso el propio Erik la aceptaría. Al fin y al cabo habría de ser su responsabilidad ahora.

Mira un momento la puerta pero se sienta en el divan, parece algo nervioso.

- Siempre he sido sincero y grandes problemas me trae serlo. Si alguna vez mentí fue para proteger las mentiras de mi hermano. Sé que no me quiere, pero es mi hermano. La sangre ha de ser respetada. Esa misma es la garantía que tienes de que... - mira torpemente la barriga de la maga como si no quisiera pero no hubiera podido evitarlo - ... bueno... ya sabes... cuidaré de mi legado y lo protegeré con mi vida.

No te preocupes por esto me toco el vientre sonriendo amorosamente puedo cuidarlo sola, sabia que solo era una noche de pasion loca nada mas. Abandona a tu hermano te matara por el poder que ambiciona y ese dia nadie te llorara, bueno puede que una mujer si

Asiente mientras se levanta cuando Arim se muestra capaz de prescindir de su protección, cualidades que no parecía apreciar de igual modo en Danye. En su rostro entonces hay una mezcla de temor ante las aciagas profecías de la drow y cierta congoja ante su última frase.

- Arim... yo...

Titubea sin encontrar otra salida a todo aquello más que la propia puerta de la habitación a la que se dirige.

- En noches de pasión se matan hombres, se derrocan reinados, se capturan mujeres, se incendian templos y se conciben criaturas. ¿Han de ignorarse los efectos de tales noches? Soy violento en la batalla y lujurioso en el catre ¿eso me convierte en un asesino y en un esposo? Pues tienes que saber ninguna cosa creo que soy más que alguien fiel a sus principios, a su pasado y a su sangre. No prometo nada que no tenga. No os puedo ofrecer a un marido pero sí a un guerrero. Es lo que soy, no soy más que eso. No menosprecieis mi resolución pues con mi sangre protegeré a mi descendencia y a quien la porta.

Abre la puerta pero no puede evitar girarse de nuevo hacia Arim antes de salir.

- Hasta que me necesites trataré de salvar la ciudad o el mundo, o algo, no lo tengo muy claro... no hay nada que tenga claro maldita sea.

Eso espero, que estes a mi lado cuando te necesite o tu hija te necesite sonrio levantandome y me acerco a la puerta Nheilens, yo tampoco puedo ofrecerte una mujer sumisa y complaciente, bueno en la cama si, pero no voy a quedarme en la casa esperando tu regreso es mi raza

Fija la mirada en sus ojos y asiente despacio. Sonríe con cierto cariño y cierra la puerta. Alejándose de allí de nuevo. No reconoce a nadie por el camino ensimismado en sus pensamientos.

Tanta inactividad le está matando, se siente inútil, oxidado, buscaría su destino aunque fuese un camino que tuviese que recorrer solo.

TRas caminar durante un largo rato llegais a la escuela de magia con sus imponentes torres en mitad de aquel verde jardin
En la puerta os encontrais esto

Una decoración un tanto extraña. No puedo evitar alzar una ceja. Las únicas construcciones que he visto en mi vida han sido mi casa del bosque, el palacio de la diosa y ese maldito laberinto. Nada se parecía a esto, incluso caminando por la ciudad no podía dejar de asombrarme por como eran las cosas. Pero no podía dejar de lamentarme por la escasez de naturaleza a cada lugar en el que posaba la vista. ¿Falta mucho?

No, solo traspasar las puertas, pero os agradeceria no entrar, no me gustaria verla la ultima vez fue demasiado violento

La puerta se abre y salgo caminando apoyado en mi baston con calma, os miro de uno en uno.
Que poder ayudaros en este lugar puedo yo?

Miro directamente a la estatua del jardin casi dejando de lado al señor que se encuentra hablandonos.
¿Que es esto?
Digo dirigiendome hacia el
Es muy..... llamativo
digo trabando la frase ya que por un momento no se como describirla

Llamador es digo mirandote Tu ser marido Illiam, Arim compañera de correrias

Asuma mirando la extraña estatua, se queda pensativo. Extrañas construciones, nunca antes habia visto nada igual.

Miro al pequeño viejito verde

No entiendo nada de lo que dice

Me agacho para estar mas o menos a su altura

Oiga! ¿Que quiere decir?