Partida Rol por web

Mi instinto debe haberme fallado, o Wolfgang es menos perverso de lo que yo mismo seria.

Pienso mientras regreso al ascensor, y con las dos pistolas desenfundadas pulso de nuevo le boton 66.

Con un poco de suerte estos dos habran acabado el trabajo, aunque en atencion a sus habilidades, mas probablemente estaran muertos o capturados. Si quieres un trabajo bien hecho tienes que enviar a un ruso.

- Está en la planta 86... estamos en la 67... y nos habían citado para unirnos a él en la 66. Me estoy volviendo loca, está jugando con nosotros. - Dijo mirando a Shadow con el ceño fruncido reflejando preocupación y desorientación, se sentía confusa y también algo inútil por no saber que hacer.

- Para colmo no hemos hecho mas que empeorar las cosas... ya oiste lo que dijo, que lo ayudamos a encontrar a Selene... creo que se refería a ella. Yo no pienso que este mundo cambie, me niego a creer que no somos un peligro para sus fines.. vamos a por el Shadow... vamos al piso 66, o confiamos en la locura que está haciendo Oleg... Escoge. - dijo mirándole fijamente.

Piso 66 del Empire State, Nueva York.
Dos ascensores abren sus puertas casi a la par. Cada uno en un extremo del vestibulo, en mitad de la planta.
De uno de ellos sale Oleg Pancratius, el mayor lider criminal de la ciudad.
En el otro ascensor llega un policia y una aspirante a policia, se hacen llamar Shadow e Hidra respectivamente.

Al encontrarse, al verse, se genera un momento de tension en el que todo puede ocurrir. Sin embargo esa tension se desvia en cuanto aparece procedente de una de las oficinas una persona. Se trata de un muchacho de color, de poco mas de diez años, subido en una tabla de skate.
Cuando esta a punto de pasar de largo se detiene y señala a los recien llegados.

- Wolfgang os espera. Dejad las armas y seguidme. Y nada de trucos.

Dice la ultima frase señalando, a modo de advertencia, a Oleg.

Durante un instante, Oleg barajo la posibilidad de ignorar la advertencia, pero si la vida en el crimen te enseña algo es a no subestimar a tus oponentes. Dejo las armas y se volvio hacia sus dos compañeros con su poco encantadora sonrisa mirando primero al hombre.

Shadow dijo con un leve movimiento a modo de saludo antes de mirar a Hidra y decirle Cariño, como me alegro de verte. Abrio los brazos como si esperase que se lanzase a ellos, el tiempo suficiente para ver la esperada mueca de repulsion antes de volverse hacia el pasillo y mover sus brazos en una invitacion a que pasasen. Por favor, no dudeis en pasar delante.

Pese a que sus gestos eran intencionadamente provocadores, por una vez su comportamiento no estaba motivado por el mero hecho de que gozase con el. Aprovecho sus propias pausas para mandar un mensaje telepatico aunque solo a Shadow, pues no queria quitarle naturalidad a la reaccion de Hidra.

¿Que coño ocurrio abajo? da igual. Tienes que encontrar la forma de acabar con el, yo tratare de darte la oportunidad.

Ángela miró confundida a Oleg cuando apareció en la sala, miró a Shadow por pura confusión hasta que apareció el chico anunciándoles que Wolfgang les estaba esperando. Ángela miró su arma  unos instantes y la dejó en el suelo, pensando que no le haría falta si iba a intentar acabar con él, en un momento dado tendría que concentrarse al máximo para usar sus poderes para matarlo.

Alzó la vista hacia el criminal que los saludaba de forma burlesca. ella lo miró con desagrado, una mirada de la que ya estaba mas que acostumbrado. Lo que había confundido a la mujer es que el criminal también dejase las armas. ¿Significaba con eso que había intentando hacer algo contra Wolfgang o era tan solo un papel que estaba desempeñando?.

Apretando los dientes y esquivando la mirada del criminal, miró a Shadow antes de dirigirse hacia donde le habían indicado. Respiraba lentamente en un intento fracasado de calmar sus nervios, aquello llegaba a su fin.

Dejais vuestras armas y seguis al muchacho. Caminais por un pasillo con varias puertas que dan a oficinas, aseos y diversas habitaciones pertenecientes a la empresa de importacion y exportacion.
Llegais a una gran sala de reuniones con una larga mesa llena de sillas y una serie de ventanas que muestran una vista panoramica de Nueva York.
La sala solo tiene una puerta, entrais por ella tras la cortes invitacion del chico del skate. Una vez dentro comprobais que Wolfgang no esta alli, sin embargo la sala no esta vacia.

Sentados a cada lado del asiento que preside la mesa se encuentran un par de hombres. Curiosamente los tres conoceis a esos hombres, aunque por motivos totalmente distintos.
Uno de ellos es el Capitan Clarke, lider del grupo de operaciones especiales de la Policia. Aunque en distinto departamento, compañero de Shadow y, en un futuro, de Hidra.
El otro es Ivan Illich, vinculado a la Bratva que dirige Oleg. Segun los informes policiales ocupa un puesto importante en la organizaciones, aunque al no poder demostrarse ninguno de los delitos que presuntamente ha cometido no se le puede juzgar.

Una tercera persona ocupa la sala de reuniones. En mitad de la mesa, sentada y tomando una infusion, se encuentra una mujer de aspecto atractivo y, tambien, conocida por sus logros.
Se trata de Alexandra Paressant, tambien conocida como Lady Voleur. Encerrada por estafa, amante de hombres de la alta sociedad y musa de muchos criminales.
Hace apenas un dia terminó de cumplir condena por la venta de copias de obras de arte.

Observais que, al contrario que vosotros, los dos hombres tienen sus armas sobre la mesa.
Todos se giran y os miran, como si fuese normal que os encontraseis alli.

Obviando al resto de los presentes clavo mi mirada en Ivan, esperando leer en su reaccion si como parece me ha traicionado. Es un golpe inesperado, un giro de los acontecimientos que me ha cogido por sorpresa.

Tras la reaccion de Ivan ante mi mirada recorro el cuerpo de Lady Voleur. Debi tirarmela cuando tuve oportunidad, quiza aun tenga oportunidad de hacerlo antes de matarla. Cuando hablo, lo hago dirigiendome a ella, aunque en realidad espero a que sea Wolfgang quien se muestre y responda.

¿Y bien? Imagino que estamos aqui por una razon.

Ángela se quedó mirando sorprendida al Capitán Clarke, ¿es verdad que se había aliado con Wolfgang?, ¿que esperanzas cabía ya en la ciudad si la mismísima policía también había sucumbido?. La mujer bajó la mirada consternada y decepcionada, casi no había dirigido la vista hacia la mujer explosiva que se encontraba en la sala, no la conocía pero era una mas.

Miró de reojo a Olej cuando formulo una pregunta obvia. Ella no dijo nada, se dedicó a buscar a mirar de vez en cuando hacia la puerta, era de allí donde debía venir el lider si se le ocurría presentarse ante ellos.

No puedo evitar que se me abra la boca bajo la máscara. ¿Qué demonios hace Clarke aquí, sentado codo con codo con un capo ruso y la mujer a la que había estado siguiendo hacía lo que e parecía ahora una eternidad?

-¿Y bien? -Digo en cuanto me recupero lo suficiente para articular palabra.- ¿Dónde está nuestro anfitrión?

El chico que os ha guiado hasta esta sala os señala tres sallas libres en mitad de la mesa invitandoos a tomar asiento.
Despues camina junto a la pantalla y coge un mando colocado en la pared, pulsa un boton y un proyector en el techo comienza a funcionar.
En la pantalla aparece la imagen de Wolfgang, tan solo se ve de cintura para arriba delante de un fondo negro.
Asiente con la cabeza a alguien detras de la camara y comienza a hablar.

- Bienvenidos, damas y caballeros. Si estan aqui y siguen vivos es porque han demostrado tener lo necesario para formar parte de una organizacion como Poseidon. A estas alturas no es necesario el secretismo, todos saben lo que esta ocurriendo y quien lo esta llevando a cabo.

Al igual que el resto de los presentes permaneceis atentos a la imagen de Wolfgang hablando a la camara, observando su tranquilidad y su facilidad de palabra, dignas de un politico o uno de esos gurus dedicados a dar conferencias sobre mil temas.

- Por desgracia hemos tenido que prescindir de algunas personas, cada asiento vacio simboliza una decepcion o una mala eleccion por parte del aspirante. Los que si estan viendo esto, por contra, son totalmente aptos para los intereses de Poseidon. Y si lo estan pensando, o se lo estan preguntando, les puedo confirmar que si. Todos los presentes tienen algun tipo de capacidad especial, desde el control mental hasta la capacidad de controlar el hielo. Pasando por la metamorfosis, la duplicacion fisica, la habilidad de atravesar paredes o, la que personalmente me parece mas interesante, el don de anular y limitar cualquier poder.

Los cruces de miradas se convierten en un breve juego para adivinar el poder de cada uno, aunque en algunos casos se sepa la incognita sobre quien tiene cual poder os asalta a medida que los menciona.

- Poseidon esta a un paso de controlar a todas las naciones. En breve se instaurará un nuevo orden mundial basado en la superioridad de gente como ustedes, como nosotros, sobre los vulgares humanos. Ellos seran nuestros esclavos, por fin ocuparemos el lugar que nos corresponde. Por eso necesitaremos lideres, y ahi es donde entran ustedes. Si aceptan formar parte de ese nuevo orden mundial se les asignará un territorio y seran los lideres de ese nuevo estado. Tendran mas poder del que nunca han soñado, total autoridad y no necesitaran dinero ya que obtendran todo de manera gratuita.

Por un momento os da la impresion de estar escuchando la charla de bienvenida a una vulgar secta, pero despues de ver todo lo que habeis visto sabeis que la situacion va mas allá.

- Olviden sus sentimientos de justicia y piensen en ustedes, solo en ustedes mismos. Todo el mundo ha soñado con ser un rey alguna vez, esta es su oportunidad. Y si estan pensando en sus seres queridos, sepan que no es necesario dejarlos atras. Como hemos dicho tendran total autoridad dentro de su territorio, podran tener a su lado a quien deseen.

Wolfgang deja de hablar unos segundos para que su mensaje cale en los presentes y la mente de cada uno empiece a soñar con la utopia que ha anunciado.

- Puedo ver y oir todo lo que sucede en esta sala. Si tienen alguna pregunta es el momento de realizarla. Si desean abandonar el edificio estan en su derecho, no seran perseguidos ni atacados. A no ser que decidan ir en contra de los intereses de Poseidon, logicamente.

Entrego el rifle y la pistolas del militar. El cuchillo, la pistola de policía y una granada las intento ocultar con mis poderes de morfo (el cuchillo iba de por sí dentro de la bota, creo recordar).

Tiro por si acaso pasa algo y me pillan =P

Siempre que me regalan flores, me pregunto como me van a joder.

Si, todo es muy bonito, muy apetecible. No necesito pensar demasiado para que me seduzca la idea, pero cuando algo es demasiado bonito para ser verdad, es que no es verdad.

Mientras espero la respuesta sobre cual es el precio de tanta “bondad” dirijo de nuevo mis ojos hacia Iván, pero esta vez mi mirada es de justo reconocimiento. No tenía la menor idea de que tuviese ningún tipo de poder, y pocos son capaces de ocultarme algo. Lejos de causarme enfado, me siento bastante satisfecho con la situación, pues sin ayuda de mi don, me di cuenta desde el principio de que este era un activo valioso, y ha resultado ser aun más valioso de lo que yo pudiese pensar.

Por supuesto también dedico unos instantes a asignar poderes a cada uno de los presentes, lo que resulta en realidad sencillo, o al menos me lo parece. Recuerdo mi encuentro con la hermosa señorita Voleur, y una sonrisa asoma por mi rostro cuando pienso en que hubiese ocurrido de haber decidido que no me era útil. Hubiese sido toda una sorpresa verme incapaz de utilizar mis habilidades. Iván sin duda ha debido colarse en muchos lugares para lograr toda la información que obtenía. Por otro lado un policía capaz de multiplicarse es una desagradable asociación de ideas.

Ángela se quedó mirando la pantalla con atención, su ceño fruncido se acentuaba a medida de que Wolfgang les iba explicando. Lo hacía de una manera que les hacía parecer que era una elección fácil, con muchas facilidades y sin ningún tipo de contras, añadiendo también avisos amenazadores para los que eligieran otro camino que dañara a Poseidon. 

La aspirante a policía miraba al resto de los que estaban allí, descartando algunas habilidades que ya conocía a quien pertenecían, intentando adivinar de quienes eran, pues iban a seguir siendo sus enemigos, pero eso no era algo que hablar en voz alta pero se sentía frustrada y dolida, también con una desesperanza interior que nunca antes había sentido. El Capitan Clarke estaba ahí y Ángela lo miraba fijamente a los ojos, esperando que él le retirara la mirada avergonzado.

- He perdido a un hermano por culpa del crimen organizado... ¿y se supone que debo aceptar esto?. Esto no es distinto...- Dijo bufando como si aquello aun no se lo terminara de creer. Seguidamente miró a los que fueron sus compañeros, sabía que aunque Oleg desconfiaba en un principio, aquel sitio era su salsa, sería lider de alguna región aunque no de todo el mundo, así que se imaginaba su decisión final. Su mirada se centró ahora en  Shadow, ella estaba dispuesta a atacar, no tenía armas pero podía manejar el hielo de la misma forma, no dudaría en lanzar proyectiles de hielo a quien la atacaran, pero recordó que había alguien con la capacidad de anular los poderes... ¿ya los tendría anulados?, ¿de quien se trataba?...

Todo lo que oigo me suena a los desvaríos de un loco, carente todo de sentido. ¿Por qué entregar un premio como tal o simplemente perdonarles la vida y dejar marchar a gente que se ha interpuesto de toda manera posible en su camino?

Por no hablar de que nosotros tres nos habemos encargado personalmente de "vaciar" algunas de esas sillas.

Miro a todos los que se encuentran alrededor de la mesa, esperando ver sus reacciones o escuchar alguna pregunta mientras sopeso mis posibilidades. Además de nosotros 6 está el chico del patín, y no creo que Wolgang deje su seguridad en alguien poco capacitado. Ángela parece reticente a aceptar, pero como siempre Oleg hará lo contrario. Eso hacía un cinco contra dos.

Tras esperar un poco y ver que nadie pregunta nada, levanto la mano descaradamente, imitando a un niño en el instituto.

-¡Oh, yo! ¡Yo tengo una pregunta, señor de la tele! -En realidad no la tengo, al menos no sin demostrar que todo esto me huele a mierda, pero necesito tiempo para pensar.- ¿Por qué?

Dios, ha sonado más estúpido de lo que pensaba...

Wolfgang sonrie al escuchar vuestras respuestas. Toma aire y os contesta.

- Esto no es crimen organizado, señorita Stinson. Como ya he dicho se trata de un nuevo orden mundial. Nosotros, como raza superior que evidentemente somos, tenemos el deber de gobernar sobre esa escoria humana que malgasta sus vidas con una existencia miserable.

Todos los presentes miran la pantalla con atencion, a excepcion del chico que no deja de vigilaros.

- Sin embargo no comprendo su reticencia a colaborar con Poseidon. No se ha negado a luchar codo con codo con el señor Pancratius, seguramente responsable de la muerte de muchos inocentes como su hermano.

Tras una breve pausa para odenar sus pensamientos prosigue.

- La razon de todo esto, señor Willson, es muy basica. Todavia no existen suficientes personas como nosotros, y Poseidon necesita lideres superiores al pueblo. Poner monos a dirigir monos no es una opcion, necesitamos que la raza superior domine. Por eso estamos dispuestos a olvidar nuestras anteriores disputas por un bien mayor, un bien y un futuro muy por encima de nosotros. Como ya he dicho se les otorgará una region a gobernar y su mision será que se cumplan los planes de Poseidon. Tendran total libertad, siempre y cuando sus actos no vayan en contra de los intereses comunes.
Y ademas viviran mucho mejor que cualquiera de los gobernantes actuales. Les permitiremos tener con ustedes a su familia o a quien decidan. Como ya hemos dicho, su nivel de vida será muy superior al que jamas hayan imaginado.

Ivan Illich, el hombre de confianza de Oleg, se gira por primera vez hacia vosotros.

- La situacion es esta: Podemos negarnos y convertirnos en rebeldes y esperar a ser masacrados. O podemos aceptar una oferta unica y vivir el resto de nuestras vidas como reyes. Sinceramente, creo que el ejercito no va a poder detener a Poseidon. En cuanto ese barco llegue a Washington se acabó, nadie va a poder detenerlo. Mi consejo, Vor V Zakone, es que todos aceptemos y olvidemos el mundo que dejamos atras. Al fin y al cabo todos, a nuestra manera, hemos trabajado para construir un mundo a nuestra medida.

Dedico una sonrisa a Iván ante sus palabras, y un asentimiento de cabeza apenas imperceptible. Así que el precio de ser rey, es tener que servir al emperador. Bien, eso es algo que se puede asumir, y en cualquier caso, es, como bien ha dicho mi antiguo empleado, inevitable.

Por otro lado, este es un momento único para forjar alianzas que nos permitan contrarrestar el poder de Poseidón si en un futuro amenaza nuestros “reinos”.

Sin estar demasiado seguro de si la mujer estará utilizando el don que le he atribuido, impidiendo que utilicemos nuestros poderes trato de enviar un pensamiento a Iván primero y a ella después.

Iván, mantén las manos cerca de tu arma, dudo que mis queridos compañeros se muestren tan razonables como yo.

Señorita Voleur, si como sospecho es usted capaz de anular los poderes de los demás, este seria un momento excelente para hacerlo.

Tras unos instantes vuelvo la mirada hacia Hidra, divertido ante la situación.

Así que el crimen organizado mato a su hermano. Imagino que eso le da una nueva dimensión a nuestra relación señorita. De haberlo sabido, hubiese saboreado mas aquel beso.

Incluso en el borde del abismo, soy totalmente incapaz de no regodearme en las divertidas coincidencias de la vida, pero mi rostro pronto adquiere cierta seriedad, mientras miro alternativamente a uno y otro.

¿Cuantas vidas no habéis podido salvar? La pregunta la lanzo en un instante en que mis ojos se posan sobre los de Shadow, antes de volver a mirar a Hidra. ¿Y ahora debemos luchar con esta gente para causar aun más muertes? Bueno, no es que la vida de los “monos” sea importante para mí, pero sospecho que vosotros no compartís mi falta de preocupación. ¿Queréis miraros al espejo cada noche y sentiros heroicos y bondadosos? Pues aceptar la oferta y convertiros en gobernadores ejemplares. Salvareis muchas mas vidas de las que salvaríais prolongando este conflicto. Después de todo ¿quien sabe que es la justicia mejor que vosotros?

Pese a lo solemne de mi discurso, mis últimas palabras no están carentes de cinismo. Y es que aunque me haya visto obligado por las circunstancias a colaborar con ellos, desprecio lo que son y lo que representan. Gente con su propio sentido de lo que es la justicia, que abusa de su don para imponerlo. Al menos yo acepto mi calidad de ser superior, no engaño a nadie, no me oculto tras supuestos ideales para hacer aquello que me gusta. ¿Que hace ella sino buscar venganza por esa muerte familiar? ¿Y acaso el es distinto? Lo dudo, sencillamente no conocemos su historia.

Me recuesto en mi asiento esperando el desarrollo de los acontecimientos. Voy desarmado y no voy a participar en la inminente refriega.

Ángela escuchó la respuesta de Wolfgang con cara de pocos amigos, para ella seguía siendo crimen organizado, y el cabezilla era él. Ella no podía atacarles, seguramente anularían su poder y luego la matarían por intentar hacer algo, así que la única opción viable era abandonar el edificio y buscar a Selene. Había un barco con misiles que acabaría con muchísimas personas ¿que excusa me pondría a eso?.

Ella frunció el entrecejo al escuchar que no había puesto ninguna resistencia en luchar de lado de Oleg, y eso la enfureció bastante.

- Parecéis un líder no muy listo, si trabajé con un criminal es porque no tenía mas remedio, porque trabajábamos juntos por un bien común hasta ahora, hasta tu aparición, hasta esta maravilla que nos haces ver que se trata tu plan de conquista del mundo. Muy bonito eso de que tendremos territorios a gobernar, y podremos tener a nuestras familias, lo que no encaja en este bello panorama es el barco que se dirige a Washington con varios misiles... ¿Me va a decir que se trata de confetis en honor a vuestro nuevo orden mundial?

Cuando habló Oleg diciendole aquel jocoso comentario se giró hacia él mirándole con asco. 

- Si por mi fuera, saborearías mi puño. - espetó al criminal a medida que retrocedía unos pasos y se ponía de lado de Shadow, mientras Oleg intentaba convencerles de que no había otra opción y que aceptáramos aquello. 

Ángela no podía aceptar, no podía decepcionar al mundo, ni a Selene ni a Watai, ellos no podían estar ahora de manos cruzados, no podía ser aunque durante todo este tiempo en el que habían luchado no los había visto hacer nada hasta el último momento. Probablemente moriría por no aceptar tal cosa, era desesperante ver que todo estaba perdido o eso era lo que parecía por lo que estaba sucediendo a su alrededor, pero se negaba a ser una mas en aquel circo. La pregunta era si debía abandonar en solitario el edificio o Shadow también lo haría.

- Esto no es nada justo, ¿desde cuando es justo obligar al mundo aceptar esta nueva orden o morir?. - respondió a Oleg. No es justicia y menos aún si se piensa matar a gente con esos misiles, detened el barco y puede que eso me haga cambiar de idea. - no sabía porque demonios habia dicho eso, no sabía si eso iba a hacerla cambiar de idea, seguramente no, pero no podía permitir que muriera mas gente.

Mientras todos hablan, mi mente arde buscando una respuesta y mi mano juguetea con la granada que oculto en el bolsillo. Wolfrang sabe quién soy, o por lo menos el nombre con el que figuro en la seguridad social, así que también he de suponer que sabe quiénes son importantes para mí.

Pero Selene aseguró que la mantendría a salvo. ¿Habrá conseguido localizarla? ¿O a estas alturas la propia Selene habrá muerto?

Tampoco es que me fiara demasiado de Selene. A fin de cuentas, no sabía nada de ella.

-Digamos que acepto. -Digo tras sopesar mis opciones.- ¿Qué es lo que consideras "acciones que se opongan a Poseidon" y que no podría hacer en mi territorio?

Wolfgang os escucha pacientemente, cuando habeis terminado hace una respuesta general.

- La justicia es un obstaculo para la evolucion. ¿Es justo destruir bosques para que el ser humano se expanda? ¿Es justo invador otras naciones y matar a sus ciudadanos solo para robar su petroleo? ¿Es justo ejecutar a un preso sin haber demostrado su culpabilidad? Podriamos estar enumerando injusticias durante años, pero aqui no se debate eso. Sencillamente vamos a crear una sociedad dominada por gente con poderes, donde el ser humano basico trabaje para esa sociedad. Sin cabida para el crimen, el individualismo ni la mediocridad. Por eso estan aqui, porque tienen habilidades especiales, no por su estilo de vida o su funcion en la sociedad actual.

Se acomoda en su asiento sin abandonar una postura correcta y formal antes de proseguir.

- En cuanto a las reglas de este nuevo orden mundial, seran comunicadas una vez establecido. Pero no esperen leyes medievales ni nada parecido. Sencillamente tendran que asegurar unos niveles de productividad y mantener a los humanos controlados. Si lo hacen bien podremos prescindir de conceptos como prisiones y juzgados. Productos que no queremos heredar de la fallida sociedad moderna.
Esto no significa que apliquen una libre tirania, deben cuidar de la mano de obra.

Junta las manos y entrelaza sus dedos dejando los dos indices estirados. Es admirable su elocuencia y oratoria, digna del mejor congresista o de cualquier presentador veterano.

- En referencia al barco que se dirige a la capital de este muy pronto extinto pais. Ustedes saben que nadie se rinde sin una amenaza. Consideren ese barco la pistola que obliga al ladron a arrodillarse y ser detenido. Si nuestras palabras bastasen para cambiar el mundo Poseidon no necesitaria todo lo que ha desplegado para esta operacion.

El capitan Clarke, que permanecia en silencio, se da la vuelta para mirar hacia vosotros. Su rostro refleja resignacion y con su mirada pide perdon a Hidra.

- No hay nada que hacer. Al menos tenemos la oportunidad de dirigir a millones de personas y asegurarnos de que tienen una vida mejor que si estuviesen bajo el mando de otra persona. Al fin y al cabo se trata de lo que siempre hemos hecho, proteger y servir. Solo que esta vez nosotros no ponemos las condiciones, pero si la forma de llevarlas a cabo.

Casi siento ganas de aplaudir las palabras de Wolfgang mientras pienso en que si alguien me hubiese ofrecido participar en esto antes de que todo empezase, habriamos ahorrado mucho tiempo. Con todo, lo que no dice es tan importante como lo que dice, cuotas de productividad, cumplimiento de objetivos, esta claro que la libertad que nos ofrece esta estrechamente ligada a nuestra capacidad para satisfacer las necesidades que tengan. Con todo, no es muy distinto de lo que ya hacia en la Bratva, gobernar mis zonas de influencia y cumplir con las exigencias del consejo.

Seguramente tambien aqui podre incrementar mi poder a costa del de mis vecinos.

No puedo por menos que sonreirme ante los comentarios del policia. En realidad me parece una justificacion muy razonable, en realidad cualquier justificacion me pareceria razonable siempre que nos lleve a algun punto en el que yo tenga millones de personas bajo mi mando, pero lo realmente interesante es imaginarme a cualquiera de estos autoproclamados heroes tratando de cumplir con sus falsas premisas sobre lo que es el bien y la justicia mientras tratan de adaptarse a las demandas de Poseidon.