Partida Rol por web

Nevermore: Entre muñecas y granjas

Primer Arco: Craftsbury

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22/06/2021, 02:53
Narrador

La mujer que había terminado en el piso, no tardó mucho en ponerse de pie nuevamente gracias a la ayuda que le habían ofrecido, demostrando que pese a su estado tan delicado que parecía tener en esos momentos aun tenía cierta fortaleza para continuar de pie y asentir a las recomendaciones que el grupo había comentado, posiblemente aquella fortaleza era la que cualquier madre tendría en esos momentos tan dificiles y criticos. Asi mismo comenzó a caminar aun entre llanto hacía dentro de la casa una vez mas, con el fin de poder tomar asiento correctamente y contarle a las personas allí presentes todo lo que ella sabía respecto a Pennelope, pues no parecía importarle aquellas palabras respecto a su salud o la de su esposo en lo absoluto, su mente estaba perdida en lo que podrían suponer era que su hija estuviera bien.

El hombre por otro lado, tan solo asintio a lo que Cornelius le había sugerido tomar para poder aliviar un poco ese estado de embriaguez que tenía encima, entrando de igual forma a la casa junto a su esposa, Gregory, George y Blanche, quienes tenían bastante bien cubiertas las necesidades de la familia, ahora podían tratar de ir un paso mas adelante.

Cornelius y Dexter como ya habían comentado, pronto se encontraron dejando atrás al resto de su grupo junto con los padres de la pequeña, para poder ir haciendo el primer reconocimiento alrededor de la granja.

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22/06/2021, 02:58
Narrador

Una vez estuvieron dentro del hogar de los Learmonth, pudieron notar que la casa por dentro no se diferenciaba mucho a su exterior realmente, el ambiente lúgubre y casi funerario que habían estado observando desde su llegada se repetía una vez mas dentro de aquellas paredes para mala suerte de todos, tenues y suaves velas alumbraban lo que era la sala mientras que todo lo demas era engullido por completa oscuridad, las paredes y adornos que decoraban alrededor sin embargo demostraban que sin duda los Learmonth pudieron haber tenido una gran epoca dorada en el pasado, tal vez cuando todo ese terreno se aprovechaba mejor con extensos campos de cosechas en vez de acumulaciones de lodo y tierra muerta, algo que lastimosamente parecía primar en la actualidad.

Por supuesto todo esto quedó en segundo plano cuando escucharon la puerta principal cerrarse, Roland terminaba de entrar en esos momentos, tambaleante como era de esperarse y tratando de encontrar un asiento.

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22/06/2021, 02:58
Jettie Learmonth

—Por favor... tomen asiento, no se si podamos comentarles algo que sea de utilidad para que encuentren a nuestra niña mas rápido, pero cualquier detalle que necesiten intentaremos brindarselos— Jettie comentó, se había logrado limpiar las lagrimas para esos momentos, aunque aun seguía bastante sollozante y con los ojos algo rojos por todo lo que había descargado momentos antes, todos los que estaban presentes pudieron notar como ella reaccionó ante la visión de su tambaleante esposo, rapidamente poniendose de pie y ayudandole a tomar asiento, era mas que claro que la mujer no solamente era hermosa sino que también parecía ser una esposa ideal y amorosa —Toma asiento cielo ¿Quieres el café cargado que estas buenas personas nos recomendaron? Seguro te hará bien y podrás también ayudarles mucho mejor si estas mas sobrio— Le comentó a Roland el cual timidamente asintió, aun bastante perdido realmente y moviendose de lado a lado debido a su estado.

Para buena suerte de Jettie, tenían la cocina como cuarto adyacente a la sala, la mujer no dudo pese a lo devastada que estaba a atender a su esposo —¿Les puedo ofrecer algo de beber? Mientras les tratamos de responder las preguntas que la señorita Williams ya nos había hecho hace unos momentos— Comentó en forma débil pero claramente tratando de sacar a relucir sus excelentes modales, parecía que pese a estar cargando con el peso de su hija, en esos momentos su esperanza había crecido un poco mas por el simple hecho de tenerles delante de ella. Rápidamente comenzó a sacar algunos granos de café para preparar la bebida de su esposo, sin embargo buscó volver al tema principal prontamente —Nuestra rutina suele ser la misma siempre, pararnos temprano para rezar, desayunar y tratar de hacer las reparaciones pertinentes alrededor. Nuestra preciosa Pennelope solía jugar siempre bajo nuestras miradas...— Tuvo que hacer una pausa, tratando de contener las lagrimas esta vez y dejando a la vista de todos lo hábil que era para retener información.

—Solamente sucedió, creo que estaba jugando en la parte trasera de la casa pero de un momento a otro solamente desapareció, buscamos nosotros por horas pero no tuvimos suerte, fue cuando tratamos de buscar ayuda— Tan pronto dijó esto, se quedó cayada, por supuesto todos pudieron notar que ella no podía decir nada malo respecto a su pueblo, aunque era claro para ustedes que aquella ayuda seguramente no existió hasta que el grupo se presentó por fin en esos momentos. 

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22/06/2021, 02:59
Roland Learmonth

—Mi esposa... mi esposa...— Roland quisó decir algo mas, sin embargo su estado actual en esos momentos no ayudaba para nada a que pudiera decir frases coherentes, suavemente se frotó los ojos, todos podían notar que el hombre estaba igual de preocupado y desesperado por encontrar a su hija, y como este se estaba esforzando en añadir mas datos a lo que había comentado ya Jettie al grupo —No logramos encontrar a mi Pennelope, aunque todo apunta a los pantanos... Mi esposa, se encargó siempre de enseñarle que no debía de ir allí ¿Porque lo haría?— Roland comenzó a sollozar, bajando su cabeza para poder descansar un momento después de haber logrado decir todo aquello sin morir en el intento, aunque también trataba de alejar su vista de una botella de alcohol que había justo en la mesa en medio de todos los que estaban allí presentes.

Deben de encontrarla...— Y tan prontó dijo esto, nuevamente dejo que su cuerpo quedara atontado mientras esperaba por el café que su esposa estaba haciendole, tratando simplemente de cerrar los ojos y aguantar las lagrimas que querían salir de sus ojos al recordar seguramente el momento en el que desapareció la pequeña.

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22/06/2021, 02:59
Narrador

Mientras dejaban que los demas se encargaran de ayudar a la familia y trataran de encontrar alguna pista que pudiera ser de utilidad con su testimonio, tanto Dexter como Cornelius se encontraron prontamente completamente a solas en los alrededores de la granja, la puerta de la casa principal se había cerrado en cuanto el padre de la familia terminó de entrar. Sin embargo poco y nada les terminó importando esto pues su misión en esos momentos era la de encontrar alguna pista que pudiera ayudarles a rastrear correctamente a la niña dentro de aquel bosque pantanoso que podían ver a la perfección en esos momentos; El lugar se miraba completamente sumido en la oscuridad comparado con la planicie en donde se encontraba la granja, al menos allí podían tener un poco de luz gracias a la luna sin embargo el cuento parecía ser otro dentro de aquella zona de alto peligro para cualquiera que no tuviera la experiencia suficiente.

Uniendo las pequeñas curiosidades que ambos hombres habían podido distinguir anteriormente, lograron encontrar que efectivamente aquellos maderos rotos que había señalado Cornelius pertenecian a lo que parecía ser la valla de seguridad que había alrededor del lugar, justo en la misma zona donde seguramente el grupo de pueblerinos había buscado brevemente y que Dexter ya había apuntado con certeza, los maderos parecían haber sido rotos a la fuerza sin embargo en cuanto lograron acercarse mas para investigar, lograron ver lo que parecía ser una mancha de sangre, ya bastante corroída por la coagulación y por si fuera poco, parecía que dicha sangre formaba un camino justo por la zona en donde trataron de buscar anteriormente.

Para mala suerta de ambos hombres, parecía que las pisadas sin sentido y demas movimientos de los pueblerinos habían roto el seguimiento de esta pista, lo que causaba que Dexter tuviera que tener un trabajo extra si es que quería lograr saber si aquella sangre podía ser el indicio de un rastro mas importante o tan solo se trataba de algún golpe que alguién se había dado tratando de romper aquellos maderos. Sea como fuera esto ya era una señal un poco preocupante aunque no había nada seguro por el momento, lo que si estaba claro era que alguién seguramente quiso acortar distancías saliendo por esa parte de la valla en vez de rodear el lugar.

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22/06/2021, 07:43
Doctor Gregory Palmer

Al menos la mujer se dejó llevar y con la ayuda de Dexter no tardamos en hacerle tomar asiento. Otra cosa era su marido, pero su mujer demostró su fortaleza y su dedicación hacia él, lo que quería decir que sobre su hija habría más amor. O eso se decía al menos, que cuando un hijo llegaba al hogar la pareja lo sufría cambiando un amor por otro.

Pero era evidente que yo no había pasado por eso.

Pero sí sabía que aquella mujer tenía que sentarse y calmarse. Atender a su marido sí sería una distracción si no le estuviesen lloviendo esas preguntas. Mientras hablaba, me quité el sombrero y lo dejé junto al maletín y el bastón. En ese momento escuché que creían que la niña estaba jugando atrás cuando desapareció. Así pues, abrí la puerta y le grité a la nada, esperando que ambos hombres recibiesen el mensaje.

- ¡Inspector!¡Dexter! ¡Creen que jugaba atrás cuando desapareció! - Exclamé y cerré la puerta para caminar hacia la señora Learmonth.*

- Discúlpeme. No es mi hogar y sé que no debería hacer esto, pero usted tiene que descansar. Yo prepararé el café para su marido y para quien necesite uno. No se preocupe, me apañaré bien. - Mi marcado acento inglés dejaba entrever preocupación por ella.

- Vamos, por favor. - Dije acompañándola al salón y dejándola junto a su marido miré a Blanche y a Russell. - Detective, cuando el doctor le diga que pare, hágalo. Él sabe leer a las personas mejor que usted y yo juntos.

Y es que la mujer entró muy fuerte. Entendía sus motivos, pero lo normal hubiera sido hacer primero una valoración médica para ver el estado de ambas personas y tratarlas en consecuencia antes de lanzarse a hacer un interrogatorio. Eran víctimas, no criminales.

Y regresé a la cocina. Estaba a dos pasos de ellos si ocurría algo y estaban con un doctor... Un alienista, pero un doctor a fin de cuentas.

Notas de juego

*Les pones tú el grito o se lo pongo yo?

Master: se lo pongo yo <3

Ok, perfecto ^^

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23/06/2021, 11:58
Dexter Collins

Ese aire opresivo que había dejado atrás al entrar en hall de la casa volvió a inundar las fosas nasales de Dexter. Desde esa posición y al lado de Cornelius, volvió a repasar con la vista los alrededores del hogar de los Learmonth buscando alguna pista que diera algo de luz al caso.

Por suerte, la noche era abierta y la luna podía arrojar algo de iluminación al lugar facilitando así las tareas de los dos hombres en el exterior. En su mano tenía el farol que siempre llevaba en su equipo, y tras un largo suspiro inició el paso hacia la zona que habían distinguido antes de entrar.

— Me resulta curiosa una cosa señor Fernsby. Estamos en una zona pantanosa pero no escucho el croar característico de las ranas. En estas zonas es común que vivan infinidad de ranas y sapos, en la mayoría de pantanos es normal escuchar su croar casi a todas horas. No quise preguntar para no poner más nerviosos a los padres, pero tenemos que ir con cuidado ante las visitas inesperadas de serpientes, o algo peor, caimanes.

Al llegar a los maderos rotos y la zona donde habían iniciado la búsqueda el grupo anterior se percataron de una mancha de sangre coagulada que no pasaba desapercibida.

— Curioso… — Dexter se agachó para observar la mancha mas de cerca. — Podría ser a causa de cualquier cosa, pero la coagulación nos dice que no es reciente ¿creé que una cría podría romper estos maderos al huir de algo? — se incorporó y comenzó a recorrer el pequeño rastro — Maldición, malditos inútiles — maldijo al ver que las pisadas rompían cualquier tipo de rastro de dicha sangre. — También podría ser que uno de estos imbéciles rompiera esos maderos al caer por un resbalón o un empujón… ¿Tiene alguna idea? — y tras lanzar la pregunta a su colega comenzó a recorrer la pequeña zona pisoteada por el equipo de búsqueda con sumo cuidado.
 

Notas de juego

Me tomé la licencia de que las ranas no croaban :3

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24/06/2021, 14:43
George Russell

Tentado estuvo de acompañar a la mujer, pero pensó que sería mejor que la actitud de caballero por parte de Greg era la mejor y no se tentaría con la belleza de la mujer, pero más aún con su vulnerabilidad que al fin de cuentas era un punto muy débil para el alienista. No obstante sin tomar asiento siquiera puso las manos en los bolsillos mientras le dio un repaso a la casa con sumo cuidado, estaban arruinados a simple vista y ella, la madre de Pennelope parecía no padecer el efecto devastador de un hogar venido a menos y un esposo alcohólico. 

Lo comprendo y le agradezco, por ahora estoy bien así—dijo en un tono amable, sonriendo a la mujer—. He notado que son religiosos, es importante hoy en día tener fe y creer en algo. Es lo que ayuda muchas veces a lidiar con el dolor, aún así permítame preguntar...

Hizo una pequeña pausa, pensativo.

¿Suelen ir a la Iglesia? ¿Tienen amigos, personas cercanas que vienen a visitarlos?—preguntó con ese aire tranquilo, sin presiones. 

El grito de Greg lo descolocó, pero bueno se mantuvo inamovible por ello y poco a poco intentó acercarse con el diálogo a la pareja. Apuntando detalles, teniendo en cuenta algunas cosillas evidentes y cuando el Doctor le indicó aquello, asintió con un ligero movimiento de cabeza. 

Después intentó calmar al hombre. 

Haremos todo lo posible por ello, no se preocupe y disculpen que sean muchas preguntas es necesario entender el contexto, conocerlos y primordialmente ayudar. Pueden contar conmigo de forma incondicional, tendrán mi apoyo, el de todos. 

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25/06/2021, 13:14
Cornelius Fernsby

A pesar de que todo el lugar solo se veía iluminado por la luz de la luna, se podía apreciar el destrozo que aquellos imbéciles habían realizado en la patética búsqueda de la chiquilla. Por suerte Dexter, siempre tan previsor, conseguía arrojar más luz gracias a su farol; aunque lo que mostraba solo lograba que Cornelius se enfadara aún más por el poco cuidado que los lugareños habían tenido.

Croar de ranas... —El inspector se detuvo un instante para escuchar. Hasta el momento no se había dado cuenta de lo que un oído más acostumbrado a los sonidos de la naturaleza no había detectado y, asintiendo en silencio, negó con la cabeza con una creciente preocupación—. Si tal como piensas hay caimanes por la zona... Mucho me temo que las posibilidades de encontrar a esa niña con vida se reducen.

Enarcó una ceja al ver la sangre. Una sangre que como bien había apreciado el guardabosques se encontraba ya lo suficientemente coagulada como para ser reciente. Observó con atención, y más frustración aún, el destrozo en los maderos que ya había podido apreciar desde la puerta de la casa.

Dudo que la niña hubiera tenido la fuerza suficiente para destrozarlos de esa forma —aseguró, bastante convencido de sus palabras—. Y tampoco creo que por una caída o un simple empujón hubieran quedado así. Más bien parece que alguien los ha querido arrancar a la fuerza, aunque con todo este estropicio que han montado por aquí solo son especulaciones.

Cornelius esbozó una sonrisa ladeada al escuchar la maldición del guardabosques. Entendía cómo se debía sentir el hombre pues él mismo de buena gana hubiera dado un puñetazo a toda esa sarta de patanes descuidados. O no tenían ni idea de lo que hacían o poco les importaba realmente la vida de la niña.

A no ser... Negó en silencio con la cabeza ya que no podía ni siquiera tener en cuenta esa posibilidad. Que alguien hubiera querido borrar de esa forma y a propósito cualquier huella que pudiera incriminarlo.

Pero algo tenía seguro el inspector, y era que cuando se encontrara cara a cara con el comisario su paciencia y sus formas seguramente acabarían perdiéndose.

Tú me lo podrás decir mejor —comentó Cornelius a su compañero—. Al ser un terreno pantanoso, ¿crees que los accesos al bosque serán por sitios en concreto o se podrá entrar en él por cualquier punto? Porque, dada la dirección que pudiera seguir ese rastro de sangre y si entrar al bosque solo se puede hacer por un par de puntos concretos, quizás tengamos suerte de encontrar un nuevo rastro. Y mejor conservado a poder ser.

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26/06/2021, 23:54
Blanche Williams

Hizo una mueca cuando Palmer gritó. Estaban tratando de no alterar demasiado al matrimonio y el decidía ponerse de escandaloso. Suspiró dentro de sí mientras veía desde su posición, en el asiento frente al esposo la situación.

La esposa decidió ir a hacer café, seguro como un modo de distraerse de toda la situación, era algo que solía hacer su madre cuando los nervios podían con ella y quería tener las manos ocupadas. Pero por supuesto, Palmer decidió ir a hacerlo él... No entendía a las mujeres para nada.

Ignoró por completo las palabras del doctor por haber comenzando a interrogar a la pareja, el mismo Rusell siguió su consejo ¿Cuál era el problema de Palmer?

Se levantó entonces para acercarse al doctor y responderle sus palabras sin molestar al matrimonio. —Lo siento, pero estamos sobre tiempo para buscar a la niña. Y estas personas son fuertes, no los trates como infantes débiles, lo mejor que podemos hacer es recibir la información para continuar el camino y traerle respuestas. — Esperaba que con eso entendiera sus acciones. Volvió al mueble para esperar a que le respondieran a George. Era tal como había dicho, estaban apurados, tenían que apresurarse a usar toda la luz posible que aún tenían para investigar aquel raro pueblo.

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29/06/2021, 14:56
Dexter Collins

Dexter escuchaba atento las conjeturas y observaciones de su colega Cornelius, dando algo más de sentido a la situación. El guardabosques siempre había pensado que Fernsby era un inspector brillante, una pieza indispensable en el grupo para, como ahora, dar luz a las diferentes escenas que se les podría presentar.

Mientras el inspector hablaba, Dexter miraba a su alrededor en busca de algo que le llamara la atención, aun a sabiendas que en el terreno que se encontraban ya había sido “peinado” por la patrulla de rescate anterior. Lanzó un bufido mientras arrastraba uno de sus pies contra los restos de maleza pisoteada del suelo. Observó unos segundos la tierra húmeda alumbrada por la luz de su farol, para instintivamente mirar a su compañero. 

— Me gusta como piensa con el tema del rastro de la sangre— esbozó una sonrisa adornada con aquella barba que siempre llevaba en su rostro. — Habría que observar esta zona y los alrededores para cerciorar eso, pero sí, en estas zonas húmedas suelen haber zonas de tierra creando pequeñas pasarelas naturales entre las zonas de agua estancada. Podríamos acercarnos a la zona donde acaba el rastro del grupo anterior para observar los limites — en ese momento alzó la vista al cielo, observando la luna unos segundos. — Será fácil ver donde terminaron de buscar y no tendría que ser peligroso — en ese momento miró a a Cornelius. — Dígame una cosa, si fuera un crio de la edad de la niña y viviera en una zona como esta ¿conocería los alrededores de su granja? ¿Conocería cada rincón de lo que le rodea? — el sabía perfectamente la respuesta, pero quería saber la opinión de alguien que no familiarizado en el terreno.
 

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29/06/2021, 20:16
Cornelius Fernsby

Cornelius asentía a las palabras de Dexter con la seriedad que le caracterizaba, acrecentada en los últimos meses. Saber que su teoría era aceptada por alguien que había demostrado en múltiples ocasiones su valía sobre el terreno, devolvía al inspector algo de la fe en sí mismo que había perdido.

Una sonrisa ladeada apareció en su rostro al escuchar la pregunta del guardabosques. Una pregunta lógica que obtendría la respuesta más lógica por porte del inspector. Una respuesta basada en la propia experiencia y en la de miles de niños antes que él y todos los que vendrían después.

Seguro que ella conoce los alrededores mucho mejor que sus padres. Los niños son curiosos por naturaleza y no calculan los peligros. Sin otro entretenimiento que pasar el tiempo en la granja, me extrañaría mucho que la niña no se hubiera dedicado a merodear cada rincón, incluso zonas del bosque —dijo, intentando ponerse en la piel de un niño de la edad de la desaparecida—. Se buscaría sus lugares secretos donde cobijarse cuando estuviera triste o enfadada... Sí, cualquier niño habría recorrido la zona mil veces y sabría los mejores sitios para pasar u ocultarse.

Pero había otra cuestión que sí podía echar por tierra esa teoría. Una cuestión que en esos instantes Cornelius no recordaba si ya se había mencionado.

A no ser que se hubieran mudado recientemente y a la niña no le hubiera dado tiempo reconocer el terreno —dijo, poniendo voz a sus pensamientos—. ¿En algún momento se comentó si la familia Learmonth han llegado hace poco o, por el contrario, llevan aqui toda la vida? Sus ropas no parecen encajar con este entorno...

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01/07/2021, 09:16
Narrador


Mientras ambos hombres estaban evaluando los alrededores de aquella zona y comentando posibles situaciones respecto a lo que pudo haber pasado. Tanto Dexter como Cornelius terminaron lo suficientemente cerca como para comenzar a ver los inicios de aquel boscoso pantano, el cual al principio podía verse bastante tranquilo, con los árboles lo suficientemente espaciados los unos de los otros, y con solo pequeños charcos de lodo por allí y por allá. La luz de la luna lograba aun penetrar las zonas mas externas y las cuales conectaban con la granja, por lo que ambos aun podían ver lo suficiente si prestaban la correcta atención, y junto con la luz que proporcionaba Dexter mucho mas. Sin embargo tampoco se podía pasar por alto que en cuanto alguién quisiera adentrarse mucho mas en aquella zona, los árboles pronto comenzarían a cerrarse entre ellos, formando caminos extremadamente estrechos y por los cuales se tenía que tener sumo cuidado al pasar, pues los charcos de lodos parecían hacerse de igual forma, cada vez mas amplios y posiblemente hondos, si esto no alertaba el suficiente peligro tal vez el hecho de que la luz natural de la luna no lograba penetrar para esos puntos podría funcionar para confirmar que en efecto, estaban en un lugar bastante peligroso y traicionero. Sin duda alguna lo que cualquiera podría esperar viniendo de una región tan apartada como en la que estaban en esos momentos y la cual dejaba en claro que el ambiente sofocante y lúgubre no hacía mas que continuar.

De igual forma, pudieron comprobar que tal como había comentado Dexter, la zona misma se divida en multiples entradas naturales y es que, realmente cualquiera podría adentrarse facilmente entre aquellos pequeños accesos que dejaban los árboles que delimitaban el inicio del bosque. Mientras ambos hombres se encontraba dialogando y tratando de ver si podían reconectar con aquel rastro de sangre que habían encontrado, el silencio casi desgarrador que estaba sobre de ellos se vio interrumpido de golpe, algo que sacó un susto enorme tanto a Cornelius como a Dexter, considerando que estaban en una zona no solo silenciosa, sino que cualquier minimo sonido podía producir un eco increible y quedar resonando por algunos segundos — ¡Inspector! ¡Dexter! ¡Creen que jugaba atrás cuando desapareció!— La voz era claramente familiar, el doctor Gregory parecía haberles gritado desde la casa de los Learmonth.

Aunque aquel grito parecía venir desde la intención de ayudar, parecía que la calma que ambos hombres estaban experimentando con el silencio de la noche se había perturbado un poco, pues un trío de cuervos que estaban justo sobre la casa de los Learmonth comenzarón a soltar graznidos, como si se hubieran molestado.

Los sonidos de las aves eran una cosa, pero lo que paso a continuación dejaría a los presentes sin duda helados... el silencio que había quedado después del grito del doctor del equipo se vería pertubado una vez mas, esta vez un grito desgarrador que no venía de la casa de los granjeros, sino del bosque —¡Mamá, papá! ¡Ayudenme!— El grito era devastador y por unos segundos, tanto Dexter como Cornelius experimentaron un zumbido que les descolocaría completamente, el grito provenía de justo desde las profundidades del bosque, donde la oscuridad predominaba y por mas que quisieran afinar sus instintos, era practicamente imposible divisar algo —¡Auxilio por favor! ¡Estoy sola!— Un grito mas rompió el ambiente, causando que la ansiedad creciera pero sobre todo, el insinto de protección que cualquiera en esa situación tendría, uno el cual decía que tenían que correr a rescatar a la niña que estaba claramente viva y pidiendo ayuda en esos momentos, justo delante de ellos.

Notas de juego

Vamos a ignorar a la pequeña ave que se coló en la imagen x9

Proxima actualización: 5 de Julio 

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01/07/2021, 09:18
Roland Learmonth

El padre de familia que se encontraba sentado y posiblemente bastante mareado debido a su condición, terminó saltando de su lugar debido al grito que había pegado el doctor Gregory, causando que llevara ambas manos a sus orejas para taparlas como si fueran a romperse los timpanos, aunque ciertamente no era para tanto era mas que obvio que esta reacción posiblemente sería el reflejo de su estado de embriaguez que tenía encima —Dios santo... no griten tan fuerte por favor— Estaba claramente agitado al decir esto, seguramente se había espantado mucho mas de lo que estaría si estuviera sobrio por obvias razones, sin embargo Roland terminó siendo encantado por las palabras tranquilas y bastante suaves que el otro doctor había comentado, el señor Russell había comentado algunas cosas y añadido ciertas preguntas que de inmediato se dispuso a responder de forma un tanto torpe y tratando de no entrecortarse demasiado esta vez, quería ser de ayuda despues de todo.

—Por supuesto... Seguir a dios es lo mas impotante— Comentó con la mirada fija al suelo, como si ver a los presentes le causara algún problema, seguramente se trataban de mareos pues podían observar como su cuerpo se seguía tambaleando de un lado al otro de forma bastante irregular —Solemos ir sin falta cada domingo a la iglesia, si... Nosotros, nosotros tenemos muchas amistades aunque no suelen venir mucho a la granja, tal vez debería trabajar mas en ella, si... Debo de hacerlo o no nos visitiran como antes— Fue comentando el hombre entre pequeñas pausas cada tanto para asegurarse de no estropear su propia habla mientras hablaba, aquellas últimas palabras demostraron un tono de voz bastante melancolico, como si hubieran tenido un tiempo donde la granja funcionaba como estaba planeado en vez de ser un terreno practicamente muerto como el que podían ver en esos momentos. 

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01/07/2021, 09:19
Jettie Learmonth

Jettie de igual forma se terminó sobresaltando debido al grito tan repentino que Gregory había lanzado, sin embargo no tanto como su esposo por supuesto. La mujer estaba a punto de comentar algo pero su mirada demostro una clara sorpresa al ver que el mismo doctor procedía a tomar su lugar en la cocina, de inmediato la mujer llevo una mano a sus ojos, limpiando un poco las lagrimas que habían quedado allí anteriormente —Disculpe... Señor Gregory, pero no creo que sea muy cortez de su parte hacer eso, aunque aprecio mucho su gesto— La mujer guardó silencio un momento, era claro que algo la había ofendido, y no solo el hecho de que el doctor había tomado lo que seguramente era una distracción para Jettie en esos momentos tan difíciles —¿Porque siento mucho mas preocupación por mi que por mi niña? Doctor le agradecería que se concentraran en poder encontrar a nuestra Pennelope cuanto antes. Ademas que jamás dejaría que un hombre tome un lugar asi en mi cocina, eso jamas...— Tan prontó dijo esto, su rostro fue hacía el resto de invitados que había en su hogar, dedicando una pequeña sonrisa timida tanto a Russell como a Blanche, como si quisiera disculparse por esas palabras, estaba claro que Jettie parecía tener unas convicciones completamente estructuradas en que la mujer, por supuesto debía encargarse de su cocina, y para alguién mas letrado en los temas de la psicología como lo era Russell, esto también podía indicar que estaba inestable en esos momentos y era mucho mejor dejarle distraerse con lo que ella quisiera.

Asi mismo, la mujer regreso a la cocina, mirando detenidamente al doctor Gregory con aquellos ojos que parecían mirar el alma misma, bastante rojos debido a las horas de llanto, pero demostrando aun delicadeza y tratando de decirle con estos que regresara a su asiento, despues de todo ella se estaba encargando de su trabajo ¿Cierto? 

—Muchas gracias por todo su apoyo señor Russell, el de todos— Comentó a continuación, regresando un poco a la tranquilidad que había estado demostrando hasta ahora pese a la situación tan desgarradora que estaba pasando junto con su esposo —Me crié dentro de la iglesia realmente, asi que como bien dice mi marido, ambos somos bastante devotos a nuestra fé, creo que si no hubiera conocido a Roland posiblemente me hubiera dedicado en cuerpo y alma a servir dentro de nuestra amada catedral— Terminó de decir, añadiendo un poco a lo que su esposo había contado y para tratar al mismo tiempo de dejar pasar el pequeño ataque de inestabilidad que había tenido, era obvio que la mujer se estaba esforzando en ser de ayuda y no dejarse caer en esos momentos, parecía que sin duda la llegada de todos los presentes le habían vuelto a dar esperanzas de encontrar a su hija, se podía sentir en la forma en que ella hablaba y se expresaba.

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01/07/2021, 09:19
Narrador

Mientras continuaban tratando de averiguar mas respecto a la pareja que tenían enfrente, y miraban como estos reaccionaban de distintas maneras debido a la posible inestabilidad que la desaparición de su hija había traido, no tardó mucho para que un nuevo evento llegara hasta el grupo que se encontraba presente dentro del hogar de los Learmonth, al principio todos podrían haber jurado que se trataba de un grito proveniente de Dexter o de Cornelius, en respuesta al mismo que había pegado Gregory anteriormente para indicarles un poco por donde se encontraba la pequeña Pennelope antes de su desaparición, sin embargo pronto todos los que se encontraban allí presentes se pudieron dar cuenta que esto no era asi y mas bien se trataba de algo diferente... 

El grito que cruzó directo hacía sus oídos les dejaría helados a todos por igual —¡Mamá, papá! ¡Ayudenme!— Estas palabras resonaron con estruendo dentro de la casa, y podían jurar sin miedo a equivocarse que provenían de la parte del bosque que se encontraba justo en la parte trasera del hogar de los granjeros —¡Auxilio por favor! ¡Estoy sola!— Un último grito resonó nuevamente, este sin embargo causó que todos los presentes experimentaran un zumbido que descolocaría por unos segundos todos sus sentidos, como si fueran victimas de una pequeña paralisis debido al impacto que estos sonidos habían provocado, por supuesto esto también fue igual con la pareja que se encontraba allí también, pues Roland de inmediato soltó un pequeño chillido, tratando de ponerse en pie pero cayendo de golpe debido a su mal equilibrio que tenía por la bebida.

Asi mismo, Jettie dejó caer una taza de porcelana al suelo, rompiendose en el acto. 

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01/07/2021, 09:19
Jettie Learmonth

—¡P-Pennelope, esa es mi niña!— Jettie grito sin importarle que se había roto en el suelo, de inmediato la mujer salió corriendo hacía la puerta pero terminó cayendo al lado de su esposo para ayudarle a levantarse mientras comenzaba a llorar una vez mas, gritando con una clara y comprensible desesperación a Blanche y los otros dos hombres que se encontraban allí, estaba completamente nerviosa de igual forma. 

—¡La escucharon también! ¿Verdad? Debe ser ella, por favor deben de ayudarla— Soltó entre lagrimas y tratando de poner a su esposo de nuevo en su asiento, para ser ella quien corriera una vez mas hacía la puerta para tratar de abrirla, sin embargo el miedo y la desesperación se juntaron en la delicada y quebrantada mujer que estaba allí presente, causando que no pudiera siquiera abrir la puerta y mas bien, se quedara un momento paralizada en ese mismo lugar, era claro que debían actuar todos los presentes a favor de aquella familia afectada, asi mismo suponían que tanto Dexter como Cornelius, seguramente también tuvieron que escuchar aquellos gritos, siendo ellos quienes se habían adelantado a explorar los alrededores mientras el resto trataba de encontrar mas información.

Notas de juego

Proxima actualización: 5 de Julio

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02/07/2021, 11:41
Doctor Gregory Palmer

La reacción de la mujer fue completamente desproporcionada para mi gusto, más aún cuando le pedí disculpas desde el principio. Estaba cada vez más claro que los americanos eran unos maleducados. Se habían asalvajado en aquel Nuevo Mundo y los que pertenecíamos al Viejo Mundo, seguíamos por encima de ellos en cuanto a modales. O eso o no era lo que aparentaba, un dulce ángel, sino una bruja oculta bajo una hermosa piel.

Por primera vez en mi vida, me sentí orgulloso de estar casado con Martha. Ella no se hubiese puesto así conmigo si hubiese tratado de hacerle un caldo o algo porque se encontrase mal. Aunque fuese distinto en una parte, la situación en sí era similar. - Si su temor es que le vaya a... - quitar a su marido, olvídelo. - Tuve que guardar mi sarcasmo para otra ocasión. - ... no importa. Mis más sinceras disculpas de nuevo. No era mi intención genererarle más malestar señora Learmoth.

Dicho esto guardé silencio y me reuní con los demás, quedándome con las ganas de tomarme un café al menos. Sin cenar, sin dormir y daba la impresión que con toda la noche por delante, porque el pueblo optó por no seguir buscando porque veníamos nosotros. Era vergonzoso. Luego miré a la detective, otra que se estaba equivocando. - Discúlpeme usted también, señorita. Pero creo que el debate y sus palabras debería guardarlas para otra ocasión y centrarse en ellos, no en mí.

Y por segunda vez agradecí que la belleza de mi mujer estuviese en su interior.

Instantes más tarde, cuando las correctas preguntas del que parecía en único centrado de verdad en aquella sala, el doctor Russell, fueron respondidas, la voz de la niña se escuchó por toda la casa. Mis ojos se abrieron como platos y miré a todos. Venía de atrás, pero con tanta fuerza y claridad que parecía que hubiese entrado por las tuberías de la casa... si es que habían cañerías en aquel lugar.

Que la mujer entrase de nuevo en ese estado no me gustó nada. Acabaría con un paro cardiaco. Corrí hacia mi maletín calculando el peso de la mujer. No quería dormirla, solo relajarla para que pudiese estar tranquila y cuidar de su esposo. - Señora Learmoth, solo se lo diré una vez antes de irme. - Le dije con mi acento inglés. - Puedo suministrarle ahora mismo un calmante, no la dormirá, solo se quedará más tranquila. Tardaré poco en suministrárselo, le hará efecto en unos minutos y podrá atender a su marido y conservar la calma mientras buscamos a su hija. Usted decide si quiere que se lo ponga antes de irme o si prefiere estar en este estado hasta que volvamos con las noticias que sean. - Y me puse el sombrero y miré a la mujer. En su mano estaba que me fuese ya de allí o que perdiese tres minutos máximo con ella.

Las verdaderas preguntas ya se habían hecho. La niña había desaparecido por detrás de la casa y su voz venía de allí. - Y una duda más... ¿hay pozos sin marcar en esta zona? Ya sabe, agujeros donde alguien pueda caer si no mira donde pisa... - Podía estar en uno y si había comunicación con la casa por algún sitio, hacer que su voz reverberase de aquella manera.

Tomase la decisión que tomase con respecto al calmante y según respondiese a mi pregunta, saldría por la puerta con mi bastón y mi maletín. Ya había tenido bastante "paletismo" en unos minutos, con el vigilante inicial y ahora con aquel matrimonio, sobre todo con ella, como para aguantar más tonterías. Prefería perderme de nuevo en un bosque a permanecer más tiempo en la granja. Además, había una cosa que sí era cierta: estábamos allí para buscar a la niña y si no querían las atenciones de un doctor, no les iba a obligar a ello.

Al salir iría al único lugar posible, la parte de atrás.

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02/07/2021, 20:34
George Russell

Con más fervor se acarició la barba, continuaba analizando todo desde los gestos, la predisposición al responder y también a que lo hacían en verdad si tenía una carga emocional evidente. Claramente obvió a sus compañeros, pero tomó apuntes mentales a la reacción de aquel hombre ante el grito de su compañero y el enojo de la mujer, que como toda ama de casa no debía ser humillada de aquella forma por un desconocido. Ella estaba lidiando con su dolor en apariencia y atender a los presentes parecía la tarea adecuada para mantener su mente a raya. Esto lo podía entender George por ser experto en el comportamiento y la psicología humana. 

Más aún cuando hablamos de personas creyentes, con costumbres muy marcadas que claramente se mantienen en la hipótesis de: la mujer en la cocina, el hombre al trabajo, que si bien desde una mente más liberal podía ser un abuso patriarcal, en estos tiempos era lo más común. No obstante se mantuvo muy atento, afinado como un violín en las preguntas y recibió las respuestas con un ligero asentimiento de cabeza, no le gustaba enturbiar aquellas notas de información con un comentario suyo. Había nacido para escuchar, se formó para ello y hablar si no era lo necesario, no lo haría. 

Lo comprendo, la fe muchas veces nos ayuda a mantenernos aferrados a la esperanza y ahora más que nunca, es un buen momento para ello—dijo conciliador, siguiéndoles el rollo y continuó—. ¿Qué sucedió con la granja, Señor Learmonth? Entiendo que es muchísimo trabajo para usted solo... ¿Tuvo algún ayudante o alguien que le echara una mano de vez en cuando?

Tenía que conocer el entorno de aquella gente, de alguna manera la revelación de aquel hombre era un hilo a coger para seguir y algo en su intuición le decía que había un antes y un después en este matrimonio. ¿Por qué llegar a ese punto? Quizás el alcohol mismo, pero siempre estaba asociado a un desarraigo. Nadie bebe sin una connotación emocional o evento que lo haya traumado. Hay más porqués en esta historia, ya le tocará llegar. No obstante en medio de este diálogo, le dedicó una sonrisa cálida—de las suyas—a la mujer y no agregó nada más. 

Y justo cuando se le ocurrió decir algo, se escuchó aquel grito que le heló la piel e incrédulo como era frunció el ceño ligeramente. Pensó en que tenían secuestrada a la niña, hasta lo comentado por Gregory. Sin embargo tras el evento, todo se desbarrancó como era de esperar y se incorporó rápidamente para ayudar mientras suspiró ante las palabras de su colega. 

La escuché, lo juro que sí. Señora, por favor tome asiento y beba un poco de té—indicó con cierta caballerosidad, ayudando a la mujer y miró a su esposo—. Usted también, por favor tome asiento. 

Luego pensó un breve instante mientras observó como su compañero se retiraba y habló a solas con los presentes. 

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02/07/2021, 20:50
George Russell

Sepan disculpar, si quieren bebemos las infusiones, encontramos la calma y continuamos con la conversación cuando se sientan preparados para ello—aconsejó y se acarició la barba—. Es mejor tomarse estos instantes, decirles que sí, efectivamente lo escuché y tengo preguntas al respecto. Ustedes dirán, mi función aquí es que se sientan bien.