Partida Rol por web

 Tavik asiente.

-Un mes, ven sola, no seria justo que yo confiara en ti y tu vinieras con un sith, o con tu maestro

Dicho esto hace una reverencia a tu persona y corre por entre los arboles como alma que lleva el diabo. Ya no quedaba nada de aquel joven, habia sido todo como un sueño, pero sabias que vibrabas de la emocion, de la incertidumbre, en aquel claro de Alderaan. estabas en un momento en que tu cabeza no respondia auque quisieras.

Me quede quieta mirando como se alejaba y despues dejandome caer en el suelo, sintiendo la corriente electrica recorrerme, sintiendo mis emociones como un toberrino, mi cuepro pidiendo a gritos descargarse de alguna manera, mi lagrimas cayendo con mas y mas fuerza y no sabia porque...

 No sabes como pero Sasha habia desaparecido, aquel impetuoso sith que os acompañaba estaba destrozando cada persona que tenia enfrente pero los jedis no se movian.

Cuando quizas hubieras dado el paso a actuar, los jedis giraron sus cabezas hacia afuera como si alguien los hubiera llamado, y llamaron a retirada a todos sus soldados.

Krulh se acerca a tí y te mira jadeante y lleno de sangre.

-¿Porque se van, has visto algo sospechoso?

Y si que habias visto algo sospechoso, Sasha habia desaparecido con un jedi, peleando, ¿Donde estaba?

Aquel joven se habia ido, tus oidos estaban taponados, tu piernas no te respondian y el sol comenzaba a caer. ¿Tan pronto habia pasado el dia?

Al decidir levantarte, tus piernas te fallaron. estabas aun en shock. Nunca te habia pasado nada igual pero una voz en tu cabeza te sobresalta. La reconoces como la de tu maestro.

- Sasha ¿Que te pasa? he notado una pertubacion en tu Fuerza. ¿Que has visto?

Las palabras acariciaban tu cerebro como si su mano estuviera acariciando tu mejilla desde millones de años luz.

- Treivus... Treivus... - susrre una y otra vez saturada con cada una de mis emociones y sentimiendos - ¿Lo sabias verdad? ¿Sabias que tenia un hermano...? Te falle... era un Jedi y no he podido matarlo, te he fallado... no... - Incluso mis pensamientos se entre cortaban por los nervios, lo necesitaba aqui, necesitaba que el me estrechara entre sus brazos que me tomara y me hiciera olvidar.

 -Pequeña, no lo sabia, sino lo hubieras sabido, un sith bien informado no tiene debilidades, por lo que hblaremos cuando llegues, solo sabia que tenias un estrecho lazo con alguien, pero me era imposible saber quien o que era para ti, ahora vuelve con Khrul y Zaraxxis, y volver con Khaos.

Sus palabras no eran sentenciadoras, no iban con mal proposito, sino lo conociera bien pensaria que la estaba consolando de verdad.

- Lord Deimus se impacienta con vuestra llegada, ahora ve.

La Fuerza de tu maestro aun permaneciaen tu cerebro como un hilo que aun te comunicaba con él, pero poco a poco iba desapareciendo hasta no quedar mas que el leve eco de sus palabras en tus recuerdos.

Seguia tensa, nerviosa, pero al menos ya mas relajada por la voz del hombre que muy a mi pesar amaba... Comence a caminar con mi mente vacia, simplemente sintiendo a Khrul, buscando su hubicacion, ahora mismo era al que necesitaba, necesitaba alguien que me despreciara, que no sintiera nada bueno por mi... alguien que me hiciera reaccionar y ese hera el.

- No. Es su forma de combate, siempre hacen igual. Vienen, pelean por un periodo breve de tiempo y después se van. Han perdido ellos más de lo que hemos perdido nosotros.

Zaraxxis no se movia de su posición. Si los caballeros jedi no atacaban él no se iba a mover tampoco.

 Khrul se acerca a Zaraxxis:

- Eh! y ¿Donde esta nuestra "amiguita"? - pronuncia estas palabras con recelo.

Al mirar a tu alrededor, ves el enorme tanque blindado que llevaria a Khaos hasta la nave, con el general Grievous sobre él y tirando con una de sus piernas bionicas a un soldado que habia conseguido subir a la parte superior de aquel tanque. Guarda sus sables laser y baja con ruido de alli, para dirigirse hacia vosotros.

- Parece que no está de buen humor ¿no crees?

Khrul lo dijo en un susurrro, pero su cara denotaba la poca importancia que tenia por el asunto, el general le parecia un ser sin importancia, prescindible, un ser que hace ya mucho deberia estar muerto.

La metalica voz de Grievous llega a tus oidos.

- ¿Y Sasha?

En ese momento la joven, como magullada y casi sin fuerzas aparece por el gran boquete por donde habia llegado y huido los Jedis. se la veia agotada, sin fuerzas. Pero viva.

GRacias al vinculo que me unia a Khrul simplemente tuve que seguir su fuerza para encontrarlos, al llegar no dije nada simplemente segui con mi mirada en el sulo, perdida, triste, enojada... y una de mis manos apretando mi antebrazocon fuerza, mi expresion corpotal denotaba rabia contenida y miedo, miedo a algo muy fuerte.

Mi mirada simplemente se poso un segundo en el general dejandole ver que estaba todo bien, despues paso fugazmente por Khrul, no tenia fuerzas ni para pelear con el.

- Bueno, pues todo en orden. Subamos a la nave y larguemonos de aqui. ¿donde estan los cocodrilos cuando los necesito?

Zaraxxis se dispuso a subir a la nave esperando unicamente a Khaos y al general. Los otros dos... que se divirtieran un rato a solas, estan en la edad.

 Subis, y el tanque donde está Khaos es anclado en las bodegas de la nave. Tambien soldados del complejo montaron en la nave para cutodiar el cargamento y cientificos y medicos, par que las costantes de Khaos no se fueran a pique en el viaje, ni en el salto espacial que deberian dar para llegar a Korriban.

zaraxxis se dirige hacia su camarote, Greivous y Krulh se dirigen a la cabina de mando a poner orden entre la tripulacion y despegar cuanto antes. Pero El joven Sith, Krulh se acerca a tí antes de que te vayas.

-Tuviste una grata conversacion?

Dijo con un sarcasmo patente.

Mis manos se apretaron y baje la mirada - No puedes dañare mas de lo dañada que estoy ahora mismo, asi que no te esfuerces... - Dige girandome, en mi mirada se podia ver un claro agotamiento y como mis neuronas y sentimientos iba a 200 por hora.

Lo mire de soslayo pensando en lo que tendria que enfrentar al llegar.

El joven te mira con una extraña cara y su voz fina y siseante te susurra al oido.

-No seré yo quien te de la charla, quizas padre quiera verte cuando lleguemos y ya sabes que hace cuando se enfada

Tu cabeza recodaba las palabras de aliento de tu maestro cuando habias visto a tu "hermano", pero sabias que quizas su aliento fuera solo una sombra de su enfado, no era bueno ver a tu maestro enfadado, habias visto el dolor causado por sus manos, pero jamas lo has sentido. 

Pero recuerdas los ojos frios y calculadores de él, mientras te miraba y asesinaba a tu antigua compañera, una sith que no supo hacer bien su trabajo. No era que la conocieras demasiado, pero ella era tu unica compañia hasta que llegó Kruhl.

-Sasha ven

Oiste tras de tí, el General Greivous te llmaba para que le acompañases en el viaje como siempre, como su copiloto.

- Si se enfada conmigo solo sera culpa de sus mentiras, ademas a ti que mas te da, parece que te encanta que tenga problemas, asi que estaras muy feliz cuando lleguemos - Capullo egocentrico... Sabia que mi maestro sabia d emi hermano era imposible que no supiera algo tam importante y mas aun si el era un Jedi, me lo habia ocultado, me habia engañado y lo ultimo que haria era dejar que encima me regañara por ello.

Eche una ultima mirada de odio a Kruhl justo antes de is a mi puesto con el general.

El general seguia con sus toses, pero habia demostrado una gran destreza en combate, sus sables daban a ver su leyenda. Tenia un gran manejo de los sables de luz, era una pena que la fuerza lo abandonara cuando su cuerpo se hizo añicos.

El viaje, como siempre, fue silencioso y rapido. La hipervelocidad era algo que agradecias, pues asi llegasteis en pocas horas a Korriban. Donde tu maestro esperaba en el final de la rampilla de carga de la nave. Miraba el gran tanque donde kaos estaba resguardado, y luego con sus rojizos ojos te mió y te hizo una señal con la que te dijo que le acompañaras. El General puso una mano sobre tu hombro, dandote animos, pero sabias que no tenias de que temer. La furia no llenaba los ojos de tu maestro. Quizas mas bien, la preocupacion.

Llegasteis al despacho, en el cual te tomó y te presentó a Kruhl como su hijo, se sentó con paciencia en su sillon, mientras con la fuerza acerca otro frente a él y te pide que te sientes.

-Cuentame

Mire al general con una sonrisa, pues nunca habiamos tatado temas personales pero el sabia que ocurria algo asi que... Eche una ultima mirada a Kruhl y segui a mi maestro.

Al entrar en el despacho semplemente me siento y lo miro de forma directa - ¿Cuentame? - Le prgunto con ironia - Creo que eres tu el que se olvido de contarme algo, creoq ue eres tu el que sabe lo que ha pasado... No me creo que algo asi te pasara por alto ¿Porque cojones me lo ocultaste? TENIA DERECHO A SABERLO!!! - Termine gritandole olvidando quien era, el respeto que le devia, todo.

 Tu maestro se te queda mirando ante el grito que le diste y sentiste como la gravedad empezaba a ser mas grande en aquella sala.

-TE CREES QUE SI HUBIERA SABIDO DE SU EXISTENCIA NO TE LO HUBIERA DICHO? NO ME REPLIQUES APRENDIZ, NO ERES NADIE COMO PARA HABLARME DE ESA MANERA, SOY UN LORD, TRATAME CON RESPETO!

Dijo mientras se llevaba un dedo a los labios, y se acercaba a ti. Sabias que significaba ese gesto, que callara pues habia alguien tras la puerta, pero cuando él sintió que se habian ido de la puerta quizas con terror de tener al otro lado a un lord enfadado, y se arrodilla ante tí, mientras tu estabas sentada, y te coge un mano, estaba tan lindo cuando tenia esos gestos.

-Perdoname, Pero Lord Deimus me prohibio contarte mis visiones, lamento haberte mentido de esta manera y que te hayas enterado de esta forma...entonces es cierto de que tu hermano es un Jedi...tenemos un problema con eso

Dijo tu maestro levantandose y caminando con tranquilidad