Partida Rol por web

Le miro con una sonrisa sádica y m quito las gafas lentamente.
Oh ya veo tener un puesto importante en la D.M.C. acompaña el don de las negociaciones. Vosotros nos queréis por que hemos sobrevivido. Si no os dierais cuanta de que hay supervivientes estaríais jodidamente jodidos, no cree “señor Lee”? – Hace un énfasis sarcástico en la frase – Ya se cuanto pagan en la D.M.C. pues si no lo sabe, intentasteis ficharme. Ahora hablamos de lo interesante, a mi el dinero me interesa, para mis investigaciones obviamente. Pero para que voy a pedirlo si puedo aprovechar vuestros laboratorios y datos de investigación, estamos hablando sobre lo que vosotros queréis y yo tengo. Y lo que vosotros tenéis y yo quiero.

Al soltar esto se toma un trago de agua y continúa.
Veamos si las investigaciones ilegales que tenéis, no me des acceso a ellos. Sabéis que mi campo es el de cibernética y medicina, supongo que sabrás que mi investigación sobre los ojos cibernéticos es muy avanzada, pero me faltan algunas maquinas y vosotros tenéis. Si vais a querer que arriesgue mi trasero ahí fuera, y no mueran de los vuestros como han dicho ya, veo razonable pedir algo con lo que me ahorro yo también muchas complicaciones. También se que tenéis mutantes con una regeneración excelente, hasta que pueden regenerar todo. Supongo que a estos les interesaría el ojo, pues conlleva muchas ventajas. Os estoy ofreciendo dos cosas, mi ayuda y prácticamente mi vida. Y vosotros solo queréis darme algo banal como el dinero. Por favor, huelga decir que es una ofensa directa. Me da igual el rango que ocupes en la D.M.C. o los poderes que tengas. Yo tengo los míos y me considero valioso, esto e slo que cuenta. SI no fuera valioso, no estaría aquí sentado. Así que para no perder tiempo, y no perder el vehículo de vuelta, dime si me daréis eso.

Su tono es más frio que el Hielo.
Quien dice si fallaron una vez, la próxima podrán matarme?

- Tengo a las personas más importantes en el campo de la ciencia y a los mutantes más inteligentes ocupando mis laboratorios con investigaciones realmente útiles para toda la humanidad. Disculpa si no llegar a su nivel te hace sentirte mal. No sé si te das cuenta de la situación en la que te encuentras, pero parece que no. Esto no es una negociación, no es un tira y afloja hasta que alguien se salga con la suya. ¿ Doy porsupuesto que no acepta y quiere volver a sus ocupaciones entonces ?

Su vista mira a todos esperando a que si alguien más no desea quedarse lo comente.

"Si puedo hablar con mi madre para explicarle, y ellos se encargan de que esté a salvo, estoy seguro de que comprenderá"

Cuando mark paso la vista para ver si rechazabamos su petición dije- yo voy.

Esther estaría a salvo. En ese momento no conocía a otra persona mas importante en su vida. Tenía ganas de hablar con ella y comprovar si, realmente, se encontraba bién tal y como aseguraba aquel tipo.
Martina resolvió no meter mas madera en el asunto. Al fin y al cabo no tenía nada mas que hacer y, tras una vida dedicada a los demás, no se le ocurría otra manera de seguir con su labor. Si pudiese ayudar a un fín noble como es que no muera gente inocente, ella lo haría de manera natural.
-De acuerdo...- Decidió aceptar. -...iré con ustedes.-

Me quedo un segundo pensativa, lo que preguntan los otros me parecen irrelevantes, incluso molestas en el caso del hombre de gafas.

Creo que no tenemos mucha opción ayudaré mientras no se aclare lo del simbolo pero no penseis que vaya a quedarme un segundo más no estoy de acuerdo con los metodos de esta... "compañia"

Un poco harta de tanto parloteo y con unas ganas terribles de ver a mi madre y a Ahriel, exploté tras los últimos comentarios prepotentes escuchados:
- Bueno, yo creo que ya está bien de pedir y pedir cosas, ¿no? -grito mirando al señor de gafas.- Aquí todos tenemos nuestros trabajos, nuestra familia y una vida que perder. Yo desde luego bastante tengo con saber que sigo viva y que una organización tan grande y poderosa se va a encargar de que siga estándolo, sin plantearme si es para su propio beneficio o no. Quiero vivir y ellos me aseguran una protección y seguridad aparte de la que puedo abastecerme por mí misma. No creo que estemos como para pedir peras al olmo.
Me callé un momento para tomar aire, me quité el pelo de la cara que, seguramente, tendría colorada de la pura rabia, y terminé diciendo:
- Ya lo han dicho: Quien quiera, que se marche, es así de simple, todos hemos entendido las reglas a la primera. AL que no le guste, se irá por donde le han traído y punto.

Y después me dirijí a la mesa del buffet y me puse a picotear un poco de queso, unos panecillos... dejando a mi espalda al resto.

- Bueno, si a mis padres les parece bien. - sonrie algo emocionada - Contad conmigo. - inquiere acariciando la cabeza de Yin en aquel momento, se sentía la protagonista de una pelicula de espionaje. Con mal gusto para la ropa, eso sí. - ¿Tenemos que quedarnos aqui escuchando esas tonterias? - pregunta en un susurro a la chica pelirroja que aun está a su lado acariciando al lobo - En fin... Hay cretinos en todos lados ¿eh? - termina por decir con una sonrisilla inconsciente de que se ha producido un silencio y todos la han escuchado.

Agente Lee... Si lo que quiere es ayuda, la tendrá.

Asistiendo a lo escencial, creía que mis habiliades no eran lo suficientemente buenas como para luchar.

Se me vienen muchas preguntas en mi cabeza Agente... Estas marcas que tenemos nosotros, exactamente iguales, en la misma mano. ¿Estan directamente relacionadas con algún aparato biotecnológico que anulan poderes mutantes?; segundo, ¿Tienen alguna idea/pista sobre que o quién está llevando a cabo este suceso de muertes tan... desagradables?. Tengo muchas mas, pero si seria tan amable de responderlas.

Claro que tendréis a los super cabecitas ahí. Pero sigo considerado uno de los mejores biociberneticos del mundo aun sin tener el don de ser superinteligente, no soy tonto. Aquí vosotros vais a sacar de nosotros mas de lo que nos proponéis, perdona que te diga. Pero me veo con derecho a que me proporcionéis algo a cambio por el tiempo del trabajo que voy a gastar con vosotros… No crees? - Se apoya en el codo y te mira sin gafas con sus ojos violeta penetrantes - Además es un trabajo de sumo riesgo me gustaría saber que cuando acabe siga teniendo un puesto donde trabajar. Y como en mi universidad, seguramente me echen por estar fuera al saber cuanto tiempo. Me aseguras que podre seguir con la investigación? Se cuanto pagáis, pero cuesta encontrar trabajo en áreas tan especificas donde requiere unos ingresos muy altos. Así pues no es un tira y afloja. No quiero mendigar por ahí o ejercer de un simple medico. Es equivalente a palmarla.

 - Lo mismo digo...cuente conmigo... - Digo con la cabeza agachada, la verdad, la idea de ser un "agente" de la DCM no le hacia mucha gracia, era un peligro constante...pero sabiendo que habia algun loco por ahi suelto que podia matarlos a todos...mejor estar todos juntos y preparados...

Escucho con atención como se desarrollan los hechos a mi alrededor. No puedo evitar estar de acuerdo con algunos. No podemos esperar a que la muerte venga a llamarnos a la puerta. Tengo cosas que hacer, y promesas que cumplir. Espero pacientemente a que los demás acaben de hablar, entonces alzo un poco la voz para hacerme escuchar.

-Si la D.C.M. necesita mi ayuda, la tendrá. Pero que quede claro que esto no lo hago por ustedes, ni por mí...- Miro a Mark fijamente, a los ojos. -Y concuerdo con él- hago un gesto con la cabeza para señalar a Ian -pues hay dudas que requieren ser solventadas. Será mejor que acabemos con esto en cuanto antes...

Tras oir el sarcastico comentario, lanzo una especie de gruñido y le pongo el dedo indice al tipo en toda la pechera mira guapito de cara, puede que a todos estos niños de teta se la des, pero yo ya tengo el culo pelado, asi que no me engañaras con tus sonrisas llenas de dientes blancos ni con tus bonitas palabras.

En otras circunstancias, preferiria mil veces patearme las calles de NY persiguiendo yonkis entre mierda de perro y meados de vagabundo. Incluso me dejaria disecar en el laboratorio ese que dices que no teneis antes de ayudaros, o con tal de no escucharos ni a ti ni al cerebrito ese. Pero como ya he dicho, ese bastardo se ha cargado a varios mutis en mi ciudad, y quiero cogerlo y hacerselo pagar bien caro. Y con tal de conseguirlo, seria capaz hasta de juntarme con el diablo. Y aunque la D.C.M. sea peor que este, creo que podre soportarlo, al menos por un tiempo.

Asi que si os ayudare guaperas, pero solo mientras dure la caza del malnacido ese. En cuanto este en la carcel o en una tumba, me largo de aqui cagando leches, ¿capichi? tras decir esto, le doy la espalda completamente y me alejo lentamente de el. Ah, por cierto, la proxima vez que querais que la gente este a gusto, olvidaros de esta mierda para boy scouts y poner comida y bebida de verdad.

A mis espaldas oigo hablar a un par de chicos, al hombre preoptente de gafas y, por último, el hombre que tiene un par de alas de murciélago.
Cuando termina de soltar la última frase no puedo evitar que se me escape una risilla pues estoy de acuerdo con lo que ha dicho ahora que estoy frente a la mesa. No me giro pero en el silencio sé que la risa que se me ha escapado ha sido oída en la habitación, pero me da igual. Ese tipo habla muy mal, sí, pero cuando lo hace, tiene clase, pienso riéndome ahora para mis adentros.

Merrid parece pensar ante todas las doscuciones que se estaban llevando a cabo a su alrededor "Ellos no saben lo que yo. Si lo supieran estarian realmente asustados". Asi, vuelve a rewafirmar su decisión:

- Ya dije antes que la D.C.M. puede contar conmigo, agente Lee. Aunque quizá mi ambito de trabajo no les parezca util. De todas formas, creo que debemos empezar cuanto antes. Quizá el tiempo juegue en nuestra contra.

El hombre oriental asintió ante las respuesta de todos. Era normal que todos tuvieráis dudas y cosas que queríais saber y era muy consciente de ello.

Cuando Icaro se acercó a él y le puso la mano en el pecho simplemente le miró y empujó suavente la mano del agente, que son un impulso que le parecía increíble, acabo sentado en la silla más cercana a punto de caerse de ella. - No es momento para peleas, tenemos mucho que hacer. - Fue todo lo que dijo mirándole.

Ya que todo el mudno parecía estar conforme, era momento de empezar a hablar del problema, pero para ello, le sobraba gente en la habitación, ya que los que no querían participar en la operación no tendrían acceso a la información que tendría el resto. Mark hizo un gesto a la mujer que tenía detrás y luego dijo:

- Señor Flattery, veo que no es capaz de comprender nada que no sea salirse con la suya. No pide cosas, las exige, y desde luego, si se cree que es imprescindible para nosotros está muy equivocado. La agente Donovan le acompañará ahora mismo fuera. Ha sido un placer y espero que todo le vaya bien.

Las palabras del hombre no pudieron ser má educadas y corteses.

- Al resto le pido un poco de paciencia, en cuanto estemos presentes tan sólo los quetenemos que estar, os daré toda la información de que dispongo.

La agente Donovan, quien antes de moverse se bajó las gafas de sol para mirar al agente Draven y mostrar una sonrisa divertida, fue hasta la puerta y pasandouna tarjeta por ellector la abrió, esperando a que el doctor se levantara para acompañarlo fuera.

No me acaba de gustar no poder usar mis habilidades, trato de usarlos sin exito para comprobar que no puedo hacerlo.

¿Cuando podremos volver a usar nuestros poderes? ¿o hay alguna zona donde esten activos? no me siento comoda sin ellos es como si me faltase algo... Pregunto mientras los que faltan se deciden.

Me levanto con mis aires de superioridad, y sigo a la agente sin decir nada. Me importa poco lo que vayan a hacer si no me trae ningún beneficio a mis investigaciones. Son ingenuos al pensar que yo no era valioso…

Quien se creía para no dar nada por nuestra contribución. Pero bueno veremos a ver que puedo averiguar yo por mi cuenta entre los que conozco. Un científico siempre tiene que tener la puerta trasera para el mercado negro.

Consigo mantenerme en la silla por los pelos, agarrandome a los manillares y moviendome de un lado a otro para mantenerme el equilibrio. Observo sentado como el cerebrito abandona la sala, y cuando desaparece me levanto enfurecido como nunca lo he estado. Extiendo la alas ruidosamente, y vuelvo a acercarme con paso lento pero seguro al tipo, con los nudillos blancos de lo fuerte que estaba apretando los puños.

Vuelvo a quedarme a escasos centimetros de el, cara a cara, retandole a hacer lo mismo vaya, parece que el guaperas ademas de dientes blancos tiene huevos duros. Lo cual es normal, sabiendo que si la cosa se pone fea solo tiene que silvar y sus amigos vendran a salvarle su bonito culo. Me gustaria saber si harias lo mismo si en vez de rodeados de colegas tuyos estuviesemos en un puto callejon de Nueva York a la luz de la luna. Apuesto a que correrias tan rapido que se te despegarian las etiquetas de la ropa.

Paso mis furiosos ojos por todos los miembros de la D.C.M., primero el chulo-playa que tengo delante, despues por el que tiene cara de pringao, y luego por la "dominatrix" de mi ex-compañera, para finalmente volver al careto que tenia enfrente. Y justo cuando parece que voy a golpear al tiparraco este, lanzo una socarrona sonrisa y le vuelvo a dar la espalda de forma provocativa mientras me dirijo hacia la silla a la que hace poco me ha tirado bueno, como ya he dicho estoy dentro, asi que cuentanos de que cojones va esto, danos el tipico discursito ese de "el mundo nos necesita" y larguemonos de este jodido lugar, que el puto mono de tabaco me esta matando.

El doctor Flattery salió de la habitación junto a la agente del D.C.M. y cuando la puerta se cerró tras ellos el hombre comenzó a hablar sin demora, ya que consideraba que gracias a la cháchara innecesaria del hombre ya habíais perdido el suficiente tiempo.

- Empezaremos por el principio para dejar claro todo lo que sabemos y que todos podáis llegar a las mismas conclusiones que hemosllegado nosotros, quizás incluso a aportar algún dato más o alguna idea, ya que os habéis tenido que enfrentar a ello antes de venir aquí.

Un silencio de nuevo, en lo que cogía aire.

- Hace unas dos semanas comenzaron a producirse una serie de asesinatos en Nueva York. Las víctimas sólo tenían en común que eran mutantes entre sí, la mayoría de los fallecidos ni se conocían ni siguiendo sus vidas y todo lo que conocemos de ellos tenían ninguna conexión. Los cádaveres que encontramos allí, por llamarlos de alguna manera, eran esqueletos, pero no como normalmente encuentras uno. Los huesos estaban como s por arte de magia le hubieran hecho desaparecer todo lo que tenían encima y dentro, como si los hubieran lavado, incluso en alguno de los casos aún estaban calientes. - Hizo un gesto de negación con la cabeza como dando a entender que no era capaz de imaginar nada que lo hubiera podido ocasionar. - En todas las escenas del crimen, ha aparecido dibujado el símbolo que desconocemos por qué tienen grabado en las manos. Lo que se usó para dibujarlo era sangre, pero la de las víctimas juntas. Es decir, como si hubieran mezclado en un recipiente la sangre de todos los muertos y la hubieran usado para pintar en las paredes. En el único caso que no ha habido muertos en el lugar donde han aparecido los símbolos es en alguno de los vuestros.

Mark volvió a parar un poco para coger aliento mientras os miraba, tratando de adivinar si hasta el momento le seguíais.

- Tras la llamada de El Vaticano, por lo sucedido al padre Merrin, su desvanecimiento y la aparición de su marca, como en el restod e vuestros casos. He tenido ocasión de hablar personalmente con el Papa Juan Pablo VI y él mismo me ha dado una respuesta al símbolo..

- Parece que en el sigo XV, sí, hace más de mil años, la inquisición española acusó de brujería a un hombre, ya que se habían encontrado ciertos escritos en un idioma desconocido que catalogaron como satánico. Según los archivos que conserva la iglesia de entonces, que son más bien escasos hizo falta matar al hombre unas 10 veces hasta que por fin consiguieron que dejara de respirar, ya que era invulnerable al fuego y a otras cuantas cosas más, lo que nos hace creer que era un mutante, aunque esto último es una suposición propia.

- El caso, es que la iglesia siguió investigando por su cuenta y supo que este hombre se reunía en secreto con otras personas, en lo que llamaron rituales satánicos, pero claro, para la iglesia en esta época, cualquier cosa que escapara a su comprensión era cosa del demonio, así que tampoco podemos darle demasiada credibilidad. Al parecer, esta secta, que se hacían llamar los Daec'ma, escribióy escondió seis libros, que podrían salvar a la humanidad o bien destruirla, utilizando la información que había escrita en ellos.

El hombre ahora se encoje de hombros, como sin tener demasiado claro si de lo que había dicho la iglesia sería algo cierto, pero al ser lo único referente a los asesinatos que se había encontrado, era conveniente seguir esa línea de investigación.

En definitiva, tenemos uno de esos libros, que es el principal, ya que parece que sólo uno tenía el símbolo dibujado. - En ese momento el hombre de gafas saca un libro negro, con los bordes plateados y el símbolo que tenéis grabado en las manos grabado en plata en la cubierta y os lo enseña. Tenía pinta de ser muy viejo, sin duda.  - Pero este libro, parece estar en blanco. Conocemos, o creemos conocer el paradero de otros tres, pero hay dos que aún no hemos podido localizar.

- Y aquí, damas y caballeros, es donde creemos que tenéis que entrar vosotros. Iréis a buscar los tres libros de los cuales conocemossu paradero, ya que por alguna razón, parece que tenéis que ver de alguna forma con aquella extraña secta de la Edad Media. Según la iglesia, los que llevan el estigma del mal deben actuar en contra de su naturaleza.. - Ante estas palabras sonríe, claramente daba a entender su poca " fe " en la iglesia diciendo, creo que a los ojos de dios ahora sois pecadores o adoradores del mal o alguna cosa así.

Todos miráis al oriental como si os acabara de contar una película antigua y éste sonríe y dice: - No, no es una novela, aunque creo que si salimos de esta el señor Wingfield tendrá material suficiente para escribir su segundo superventas. - Dice conociendo el éxito del primer libro del joven.