Partida Rol por web

Asiento levemente y apuro el café. Luego me cojo de su mano, mejor era ir rápidos. Aquí cada uno tenia sus cosas. Lo mío no era viajar demasiado rápido, pero hoy estábamos de suerte. Así que con una leve sonrisa de las mías, espere a irnos. Había recogido todo y el maletín aun. Ahí estaba mi pistola. No me hacia falta ni sacarla para utilizarla.

Espero no marearme por la velocidad – suelto algo gracioso a mi juicio.

Emma se echó a reir y lo hizo con ganas ante tus palabras, ya que te tenía agarrado de la mano se puso frente a ti y te miró a los ojos, aún sin poder contener la risa del todo.

- Te vas a marear casi seguro, es lo que hace toda la gente que viaja así la primera vez, así que procuraré parar en un sitio donde no haya mucha gente para que no te vean si lo haces. - Luego dejó de reirse y te miró más seria. - Creo que te hace falta relajarte, vives tenso. Tienes que tomarte la vida con más tranquilidad, sino no vas a vivir más de cincuenta años sin que te dé un infarto..

Emma hablaba en serio esta vez, no hacía falta que te dijera nada más, ya que su expresión parecía ser siempre la acertada para cada momento.

- ¿ Estás preparado? Creo que van a ser demasiadas experiencias que descargan adrenalina para el mismo día.. no sé, igual luego te enganchas.. - Esta vez volvió a reir.

Le sonrió y le asiento lentamente. No se si quería pasar por esta experiencia, pero si ello conllevaba ir mas rápido, tenia que hacerlo.

No se si la adrenalina es tan buena como tu dices. Y la vida me la tomo enserio por que es así. Disfruto mis momentos, pero otros son para ser serio. – Le guiño el ojo, algo que nunca había hecho – Me lo pensare después del viaje, ya que durante este, dudo que pueda pensar en eso. – Lo digo con una amplia sonrisa esta vez.

- Sabes que yo te puedo hacer pensar en lo que quieras.. - Dijo riéndose de nuevo. No sabías por qué le resultabas tan gracioso, pero la verdad es que la doctora se lo estaba pasando mejor que un niño con un caramelo. - Está bien, nos vamos. - Y dicho esto tan sólo te dio tiempo a darte cuenta de que todo se difuminaba a vuestro paso. Podías intuir como abría puertas, bajaba escaleras, subía cuestas, pero a ti tanto agetreo te recordaba a lo que se debía sentir en una noria si ésta fuera a unos 300 km/h. Era horrible y tú no lo encontrabas demasiado divertido, pero antes de que pudieras enterarte de algo más, la doctora de detuvo sin ni siquiera haberse despeinado. A ti te costaba hasta mantener el equilibrio, por no decirte que estabas totalmente desorientado.

Me sujete a ella y mire alrededor. No estaba mareado peor la desorientación esta muy mala. Mire a mi alrededor. Aun me daba vueltas la cabeza para ir por mi cuenta.

Bueno bueno para la próxima vez.. Sabré que esperar. Aun me da vueltas la cabeza, pero supongo que nos queda poco ya, no? No se ni donde estamos – Miraba a mi alrededor pero no me resultaba demasiado familiar la zona – Recuérdame que esto es mejor que el café. Por las mañanas debería dar una vuelta así. – digo a forma de broma.

Emma volvió a reir ante tu comentario.. - ¿ Ves? A eso me refería con una actitud positiva.. Aprendes rápido.. - siguió riendo un rato y luego te señaló el edificio. - Me parece que es ahí dentro donde están los ordenadores ¿ no? He venido por la parte de atrás por si te me mareabas mucho. No quiero que luego tus alumnos de rían de ti, no suele ser demasiado recomendable que vean a un profesor con la guardia baja.

La mujer se quedó esperando. Este era tu " territorio " así que supuso que aquí te gustaría llevar ati la iniciativa. No lo dijo con esas palabras, pero estaba esperando claramente a que tú te movieras para luego hacerlo ella.

SI estaban en el laboratorio de al lado de mi despacho. Vamos – Saque mi tarjeta de identificación y me dirigí al laboratorio. Antes de entrar mire alrededor. Me dio la impresión de que algún nos observaba, pero no vi a nadie. – Pasemos pues – Dije cuando abrí la puerta y le dejaba pasar primero – Esta ahí recto, espero que no haya nadie usándolos ahora. Seria difícil de explicar por que va a usar nuestro superordenador alguien de fuera de la universidad. – Le decía mientras caminábamos hacia la sala. Volví a mirar alrededor por se acaso antes de entrar.

Accedisteis al edificio sin ninguna clase de problema, un par de personas te saludaron por el pasillo, aunque con un gesto de cabeza, ya que iban enfrascados en sus cosas y tampoco es que tuvieras la costumbre de pararte demasiado con ellos a hablar.

No tardasteis en llegar a la sala, de la que salía una señora de la limpieza, que os miró un poco mal, ya que acaba de dejarlo todo reluciente y ahora se lo ensuciaríais todo de nuevo, pero no dijo nada, parecía ser su pan de cada día así que suspiró, dijo algo en un idioma que no comprendiste y siguió por el pasillo hacia delante arrastrando su carrito con los productos de la limpieza.

Una vez en la sala Emma te miró: - Nos acaba de llamar algo así como cerdos desagradecidos, que lo sepas.. - Casi riéndose de nuevo. El humor de Emma no era ni mucho menos parecido al tuyo, parecía ser una persona alegre y vivaz, aunque te preguntabas cómo sería verla trabajando y toda concentrada.

- Bueno, aunque yo pueda correr mucho, el ordenador no va a poder correr tanto como yo así que me va a llevar un rato.. ¿ Sabes? A mí también me gusta beber café cuando trabajo.. - Puso carita de pena a ver si le traías uno mientras te miraba. - Necesito tu móvil..

Saco el móvil y se lo doy. Luego me giro, mi despacho estaba al lado y tenia la cafetera ahí.

De acuerdo, ahora vuelvo. Si viene algún le dices que estas conmigo, que eres mi becaria o algo. Así nos evitaremos problemas. – Digo dirigiéndome a mi despacho. Al entrar ahí activo la cafetera y miro en mi PC si me llego algo nuevo. Luego cojo el café y vuelvo.

- Perfecto, no te preocupes. Si viene alguien le diré que te estoy ayudando con un proyecto, que lo de ser becaria a mi edad y sabiendo que la mitad de la universidad me conoce no creo que vaya a colar.. - Dijo la mujer mientras cogía el móvil que le tendías.

La dejaste en la sala con el ordenador y te encaminaste hasta tu despacho para echar un vistazo a tu ordenador. Casi como si lo hubieras acertado tenías mails nuevos. Uno, ni te molestaste en abrirlo, ya que era de un compañero que ni siquiera te caía demasiado bien, así que pasaste un poco. También tenías otros dos mails, y los dos con un remitente desconocido, lo que no era demasiado agradable, porque sabías, antes de abrirlo, que seguramente lo que hubiera en ellos ni te iba a gustar y ni tan si quiera lo ibas a entender.. que lo de no entenderlo casi era lo que más te molestaba.

Al abrir el primer mail tan sólo ponía una fecha, que era exactamente dentro de dos días. No ponía nada más pero sabías exactamente que estaba relacionado con todo esto.

El segundo mail ya te heló la sangre por completo ya que en el ponía: Tienes dos días, si no buscas ayuda, no podré ayudarte. Ve al origen, ve al origen de todo..

El mail no te proporcionaba ninguna información más, pero no se acabaron ahí los problemas, al menos eso parecía, ya que en ese momento la luz se apagó y saltaron las luces de emergencia. El edificio y seguramente todo el campus, ahora mismo estaría sin luz.

Rápidamente salí de mi despacho con la taza, se veía aun algo por las luces de la alarma de incendios. Fui casi corriendo a la sala de ordenadores para ver que pasaba. Mientras miraba si podía ver algo. Esto no podía ser una coincidencia. Era raro que supieran a donde íbamos, además estaba el mensaje…

Ahora después se lo contaría a Emma, de momento fui a buscarla rápidamente.

Al salir de tu despacho viste que efectivamente, todo el edificio parecía haberse quedado sin luz. Desconocías la causa, pero todo el mundo estaba saliendo de su despacho quejándose de forma bastante aclaratoria sobre lo que les parecía quedarse sin poder seguir con las cosas que tenían que hacer.

Ya había pasado en alguna otra ocasión, el campus, casi se paralizaba cuando pasaban estas cosas, pero tenías la esperanza que no tardara demasiado en regresar o que al menos, tus temores no fueran ciertos y esto no tuviera nada que ver con Emma y contigo.

Llegaste a donde la habías dejado y al abrir la puerta, viste como tenía tu móvil en la oreja, estaba hablando con alguien o más bien, escuchando. No tardó en mirarte y separar tu móvil de ella, mirándote de forma precoupada.

- Alguien, bueno, no sé quien es, acaba de llamar a tu teléfono y ha dicho que tenemos que salir de aquí lo antes posible, que en cuanto pueda nos manda unas coordenadas para que nos dirijamos a un lugar en concreto..

La mujer te miraba esperando a que tomaras una rápida decisión, aunque se la veía dispuesta a salir de nuevo de allí como si su vida fuera en ello, cosa, que pudiera ser en este caso.

La miro un tanto escéptico, podría ser una trampa. Pero también estaba el correo. Bueno que así fuera, me acerque a mi material medico y cogí todos los bisturí que tenia. En mis manos eran mas que simples cuchillitos.

Bueno vámonos pues, no quiero arriesgarme. Me envió también un correo electrónico. Asi que sabe mas que nosotros. Vamos fuera y luego pensamos a donde ir, y no. No pienses en ir con tu velocidad ahora, si pasase algo tengo que estar bien al 100% - le decía con una media sonrisa, luego saque mi revolver y se lo di.

Ante tus palabras Emma iba claramente a protestar, pero cuando la mostraste ese amago de sonrisa, tan sólo pudo devolverte la sonrisa y asentir.

- Está bien, está bien.. - Dijo cogiendo sus cosas y devolviéndote el móvil mientras se ponía de pie. - No me ha dado tiempo a localizar ninguna dirección. Lo siento.

No tardasteis demasiado en salir del edificio. En principio, fuera no se veía nada extraño. Había bastante gente que había salido de los edificios cuando se habían quedado sin luz. Estudiantes saliendo de sus clases, incluso la cafetería se hallaba sin luz.

- Emma, Gabriel!! - Una voz de hombre, por desgracia, que conocías de sobra, os llamaba desde vuestras espaldas. Sí, él era quien se suponía quien era tu jefe, y lo que menos te apetecía en estos momentos era tener que aguantarle. Al darte la vuelta, allí estaba ese hombre rechoncho y de gafas, con sus ojos saltones tras ella. Era el doctor Michaels y era un mutante con el único poder se ser y creerse más inteligente el resto del planeta.

- Emma es siempre un placer verla por aquí.. ¿ Se ha planteado al fin trabajar con nosotros? Veo que conoce al Doctor Flattery.. ¿ Conociendo al equipo que tendrá que dirigir?

La doctora te miró de reojo, sabiendo que lo que aquel hombre te acaba de decir no te iba a gustar nada, era como si te conociera de toda la vida..

- No, ya le he dicho exactamente 6 veces que no voy a aceptar el trabajo. Esta es una visita personal.. - Fue todo lo que dijo, mostrándose como si estuviera perdiendo la paciencia ya.

Arqueo una ceja al oír que iba a ser mi jefa y me rio por dentro, ya tenia cubierta la idea de follarme a mi jefa… Bueno ahora teníamos que escapar de este palurdo de alguna forma, ya hablaría con Emma sobre esto mas tarde. O quizás el sabia que paso con la electricidad… Pero el aviso era claro, largarnos de aquí cuanto antes.

Perdona pero tenemos que irnos, tenemos que llevar una partícula ocular sin que se descongele al laboratorio de Señorita Jules. Y no esta muy cerca que digamos, ya hablaremos mas adelante. Y por cierto así nadie puede trabajar con los apagones deberías arreglarlo. – le decía mientras cogía a Emma por el brazo y la apartaba de este parlanchín. No teníamos tiempo. – Cariño. Deberíamos irnos ya – le dije con tono burlon.

El hombre se quedó con cara de estúpido al esuchar como la llamabas " cariño ", levantando una ceja y mirándoos sin dar crédito a lo que creía que estaba sucediendo. Emma, que se percató como siempre de los detalles y eso que aquel hombre era de los que resultarían complicados para poder extraer alguno de sus pensamientos, se agarró a tu brazo y te respondió de la misma forma, aunque veías diversión en sus ojos cuanto te miró.

- Claro amor, debemos irnos. - Dijo para luego mirar al hombre que ahora ya estaba hasta blanco por la escena. - Ha sido un placer, cuídese.

Alejados ya unos metros la doctora se echó a reir, aunque aún iba colgada de tu brazo.

- ¿ Has visto la cara de idiota que se le ha quedado? Ha sido tremenda!

Aún sabiendo que podíais estar en peligro, la doctora se mostraba bastante alegre y tranquila, como lo había hecho en todo momento menos en ese rato en el que la encontraste, en el que estaba realmente asustada.

- Oye ¿ a dónde vamos?

No sabia donde ir exactamente. El único lugar que no iban a buscarme es en la casa de mi compañero óptico. Igual podíamos quedarnos ahí hoy y ya mañana veríamos que hacer. Espero que este en casa. El también tenia poder, pero era un mutante débil.

Podemos ir a casa de mi compañero de trabajo a ver si esta. El podría encubrirnos creo. Luego supongo que tendríamos que ir al lugar ese, pero quedan dos días. No me fio de ir a mi casa… - Le decía con una sonrisa mirando alrededor por si veía a alguien sospechoso. – La única pega es que vive en un piso con 1 habitación, tendrías que compartir el sofá conmigo… - dije con una risilla.

La doctora asiente ante tus planes, ya que pareces saber mejor que ella qué es lo que tenéis que hacer y luego, aún agarrada a tu brazo responde al resto de tus palabras:

- Creo que podré soportar lo de dormir contigo, aunque espero que no ronques.. o que no duermas.. - Emma se echó a reir ante su propio comentario, pero te miró con cara de estar hablando totalmente en serio. - Además si lo que se acerca es algo así parecido al fin del mundo o al menos eso me pareció entender, mejor que nos pille a todos habiéndonoslo pasado lo mejor posible antes..

No tardasteis en llegar a casa de tu colega, pero lo que viste cuando llegasteis no te gustó nada. En la parte de abajo había muchos curiosos mirando y había mucha policía y ambulancias, a parte de que tenían acordonada la zona. dos hombres bajaban con una bolsa negra para cadáveres del portal y lo depositaban en una de las ambulancias, que en menos de diez segundos salió pitando con el cadáver que trasportaba.

Al mirar hacia arriba, tus más oscuros temores se confirmaron, ya que bajo la ventana del piso que tan bien conocías, estaba el mismo símbolo que tenías tatuado en la mano.

Mire la escena impasible, era mi compañero y uno de los dos amigos que tenia. Pero yo no iba a llorar por el desde luego. Mire a Emma y con expresión seria:

Pues si quieres que nos lo pasemos bien, tenemos que pensar donde. Porque lo que a mi no se me ocurre otro sitio seguro… Y aun no buscamos bien en el internet. Si no encontramos nada, iremos a la D.C.M.

Le decía mientras observaba alrededor, intentando ver si alguien en especial se fijaba en nosotros o en la habitación. Ella podía leer la mente y yo podía inmovilizar a una persona sin problemas.

Emma te miró unos instantes parecía estar pensando, pero en realidad lo que estaba haciendo era escuchar los pensamientos de los policías.

- Me temo que el fallecido sí es tu compañero, al menos que no hubiera dos científicos viviendo en ese edificio.. - que como bien sabías no era así ya que el resto de la gente del edificio era gente bastante normal, quitando a un escritos de novela rosa que era una especie de salido que no hacía más que decirles cosas a las mujeres que pasaban por su lado.

Mientras hablaba, la doctora era capaz de seguir escuchando los pensamientos de las personas y además de procesar toda la información, como si su cerebro fuera una especie de ordenador y pudiera realizar muchas tareas a la vez.

- Bueno, para tener acceso a un ordenador que nos pueda comunicar con un satélite tan sólo necesito conseguir un portátil con conexión telefónica potente.. y creo que el resto va a ser cuestión de un poco de tiempo invertido, pero necesitaríamos encontrar un lugar seguro, el ordenador lo puedo comprar.. bueno no, ya no puedo, te recuerdo que todas mis cosas se han muerto con mi casa y eso incluye mis tarjetas de crédito.