Partida Rol por web

Alex va delante de Eric, mirando alrededor y llevándose una mano en la nariz por el hedor, arrufándola...

Madre mía... apesta...  - se detiene y mira a Dan, para dirigirse al símbolo de la piedra. - ¿Pongo la mano encima? - le pregunta, enseñándolo el mismo símbolo grabado en su mano. 

Luego de mi estrepitosa e inutil maniobra, no omití opinión y me dirigí hacia ellos directamente siguiendo las ordenes de Smith; obviando directamente a los demás integrantes del grupo.

Siquiera pude ser lo suficientemente cauto de saber que no habría minas en el lugar. Cuando le claven una flecha en la cabeza o explote un volcán no me haré cargo

Al mismo tiempo mi nariz estaba olfateando un olor, extraño, conocido... Mi rostro se veía preocupado a medida que nos acercabamos a aquella estatua. Pero, algo me llamó mucho más la atención en aquella estatua.

....................Aquella marca............................ Esa misma marca de sangre que había visto tres veces en mi vida. Aquella que me había puesto en esta "mision" suicida.

Sin más que decir, me acerqué casi hipnotico para poder tocarla y examinarla más de cerca.

- Desde luego no harán un perfume con él... - suspira arrugando la nariz mientras desde detras del agente de la D.C.M. observa el simbolo y la estatua de piedra - Yin, - se dirige a su mascota - echa un vistazo por la zona. - termina ordenando al lobo, guiñandole un ojo.

El olor sigue vigente. Sigo tapándome la nariz y la boca con la mano. Observo como mis compañeros también reaccionan ante el olor. Esto no puede ser bueno... Me mantengo alerta, por si acaso.

Absortos como estabáis en vuestras cosas, tanto que os costó hasta moveros, no os disteis cuenta de que ya no estabáis solos junto a esa piedra. Tan sólo Eric, que al estar mirando a Dan tras su breve conversación pudo ver como unas garras y pezuñas huesudas comenzaban a salir del suelo.

Antes de que pudiera ni siquiera pestañear, lo que algún día serían alguna especie de mamífero, seguramente alguna clase de depredador, estaba detrás vuestro, aunque ahora no fuera más que un amasijo de huesos y piel seca, habiendo dejado de tener gusanos muchos pero muchísimos años atrás.

Una especie de momia se levantó también del suelo, tras aquellos animales. No tenía vendajes ni nada por el estilo sobre el cuerpo, tan sólo piel sobre los huesos, dejando a la vista unos redondos ojos rojos que hacían estremecer a quien los miraba.

En ese momento os disteis todos la vuelta, para contemplar la escena que se ha organizado a vuestras espaldas.

El corazón se me aceleró de pronto. Las garras huesudas surgieron del suelo, sorprendiéndonos a todos. En pocos segundos aparece un tipo extraño de animal frente a nosotros. No puedo evitar esbozar una mueca de asco ante tan desagradable espectáculo. Tras él aparece un tipo de momia que me desconcierta aún más.

-Sí que se molestó en esconder el libro aquel tipo.- le comento a Dan mientras me pongo en guardia. Lo último que quiero ahora es acabar en las fauces de esas cosas.

Las criaturas que pareceían depredadores " zombi " soltaron un rugido, no iban a tardar en atacaros, eso quedaba totalmente claro ante vuestros ojos, sobre todo cuando doblaron sus huesos traseros con la idea seguramente de saltar.

La posibilidad de caer en la fauces de esas cosas no parece resultar muy agradable. Lo primordial ahora sería defenderme. Seguro que el traje que nos han dado es resistente, pero prefiero asegurarme a experimentar un mordisco directamente. Así que, me concentro en mi poder. Tratando de activar mi congelación sobre mi mismo con el fin de defenderme.

Cuando comienzo a notar el frío desenfundo mi espada. Y armándome de valor me dispongo a enfrentarme a esas criaturas.

Eric se concentra por unos instantes, y veis como su piel comienza a coger un tono azulado, podéis respirar el frío que desprende, una sensación parecida a cuando abrís la puerta del congelador y se os empieza a helar la cara y las manos.

Dan, que parece que también ha reaccionado a tiempo, desenfunda una pistola y veis cómo comienza a derretirse en el suelo, hasta que donde estaba no queda rastro de nada desapareciendo así ante vuestras narices. No tardáis en volver a verle, aunque esta vez aparece en lo alto de enorme estátua de piedra, apuntando a aquellas criaturas con cara de pocos amigos.

La momia levantó las manos, señalándoos con sus resecos dedos, mientras los " despojos animales " saltaban encima vuestro. Tres de las cinco criaturas atacan, aunque sus taques son bastante torpes y tan sólo va bien encaminado el de la criatura que está junto a Eric.

A su vez, la momia suelta un tremendo grito, que hace que hasta el suelo comience a temblar mientras sois capaces incluso de ver las ondas de aquel espantoso sonido.

Cuando mi armadura ya está activada siento algo de alivio, pero la cosa no acaba aquí. Dan se derrite y aparece sobre la piedra, apuntando con su pistola a las criaturas.

La criatura que parece el jefe nos señala, supongo que indicándole a sus vasallos que nos ataquen. Una de las criaturas me ataca, intento esquivar su acometida.

Entonces el supuesto jefe emite un agudo chillido, cuyas ondas se vuelven visibles mientras el suelo tiembla bajo mis pies.

Aquellas horribles criaturas me habían tomado por sorpresa. En un abrir y cerrar de ojos todo pasó rapidamente.

Aquellas bestias habían atacado a mis tres compañeros sorpresivamente. No pude hacer mucho, estaba totalmente inmovil en el aire; no entendía muy bien lo que estaba pasando, pero lo unico que sabía que estas bestias nos querian fuera del lugar.

Alex se giró y dio un respingo al ver aquellas cosas... y al ver a Dan desaparecer y luego disparar desde aquella roca. Abrió los ojos sorprendida... pero sin más, sonrió.

La cosa se pone interesante... - dijo con un rintintín.

Se tapa los oidos con cierta molestía mientras observa aquellas criaturas, propias de una novela o pelicula de zombies.

Las ondas no tardan en elvolverlo todo y en envolveros a vosotros en ellas, es molesto, muy molesto y a pesar de que no habéis sentido ningún dolor, os pitan los oídos de una forma muy molesta, sobre todo a Ian, que se tiene que llevar las manos a los oídos para tapárselos.

Eric, con un rápido movimiento consigue esquivar a la criatura que trata se había abalanzado sobre él, aunque se ha parado a su lado y ahora le mira desde el fondo de sus cuencas oculares ahora vacías, aunque no tan inertes como a él le gustaría.

Los dos " animales " restantes también actuan. Uno de ellos trata de atacar de nuevo a Abby mientras que el otro trata de atacar a Ian, quien claramente lo está pasando mal.

Alex frunce el ceño ante aquel molesto pitido, se lleva la mano a las orejas, haciendo una mueca... pero después, baja las mismas y se prepara para atacar, sin abandonar la sonrisa en su rostro.

Frunce el ceño un poco molesta por el grito lanzado por aquel ser sobrenatural.

Centrando su mirada en Yin que gime de dolor al tener un oido más sensible.

Ian estaba algo atareado, demasiado para si mismo. En un intento de recuperarse, cae al suelo apoyandose de manos, algo aturdido y herido...

Las criaturas habían avanzado hasta vosotros, todos teníais uno de esos animales ahora al lado, intentando morderos o bien derribaros, aunque en el casod e la pequeña abigail eran dos. La momia es la única que se mantenía alejada, aunque aún os retumbada la cabeza después de escuchar su aterrador grito.