Partida Rol por web

Ofrendas Ardientes

Cap. 3 - Thistletop

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31/01/2011, 19:35
Director
Sólo para el director
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07/02/2011, 12:49
Laetitia Desnae

Debemos recordar que estamos en las fases preliminares de una de las grandes batallas de la historia, que nosotros vamos a actuar en Thisletop y que muchos preparativos tienen que hacerse aquí y en el exterior. En esta crisis, espero que pueda perdonárseme si no me extiendo mucho al dirigirme al pueblo de Sandpoint hoy. Espero que cualquiera de mis amigos y colegas, o antiguos colegas, que están preocupados por la protección de Sandpoint, se harán cargo, y plenamente, de la falta total de ceremonial con la que es necesario actuar. Solo os diré: «No tengo nada más que ofrecer que sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor».

Tenemos ante nosotros una prueba de la más penosa naturaleza. Tenemos ante nosotros muchos, muchos, largos días de combate y sufrimiento. Me preguntáis: ¿Cuál debe ser nuestra política?. Os lo diré: Hacer la guerra por mar, por tierra y por aire, con toda nuestra potencia y con toda la fuerza que Desna nos pueda dar; hacer la guerra contra una tiranía monstruosa, nunca superada en el oscuro y lamentable catálogo de crímenes humanos. Esta debe ser nuestra política.

Me preguntáis; ¿Cuál debe ser nuestra aspiración?. Puedo responder con una palabra: ¡Victoria!. Victoria a toda costa, victoria a pesar de todo el terror; victoria por largo y duro que pueda ser su camino; porque, sin victoria, no hay supervivencia. Tened esto por cierto; no habrá supervivencia para todo aquello que Sandpoint ha defendido, no habrá supervivencia para el estímulo y el impulso de todas las generaciones, para que la humanidad avance hacia su objetivo. Pero yo asumo mi tarea con ánimo y esperanza.

Estoy segura de que no se tolerará que nuestra causa se malogre en medio de los hombres. En este tiempo me siento autorizada para reclamar la ayuda de todas las personas y decir: «Venid, pues, y vayamos juntos adelante con nuestras fuerzas unidas»

Continuaremos hasta el final... lucharemos en Thisletop... lucharemos en los bosques y los caminos... lucharemos con cada vez mayor confianza y mayor fuerza... defenderemos nuestro pueblo cueste lo que cueste... lucharemos en las playas... lucharemos en los caminos... lucharemos en los campos y en las calles... lucharemos en las colinas... nunca nos rendiremos...

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07/02/2011, 12:49
Director

Aquellas palabras que Laetitia había pronunciado días antes en Sandpoint sonaban demasiado lejanas para los compañeros. Era fácil hablar sobre las defensas de Sandpoint, pero ahora, atravesando los frondosos bosques del Nettlewood en busca de la supuesta entrada a la fortaleza de Thistletop, poco importaba más que dejar atrás los árboles, las alimañas y los bichos que no hacían más que revolotear sobre sus cabezas. Por no hablar del viento y el ulular que traía consigo del este. Hiflin estaba inquieto, de pequeño había oído las leyendas sobre un demonio que vagaba por estos bosques. Laetitia también había oído hablar de un fantasma que habitaba estas tierras, los aldeanos lo habían bautizado como el Diablo de Sandpoint, aunque nunca se había acercado a la ciudad. Sobre estas leyendas corrían todo tipo de rumores, desde apariciones hasta personas desaparecidas. Pero teniendo por delante una fortaleza goblin que asaltar, encontrarse con un espectro era el menor de sus problemas.

Dos días habían tardado en llegar a Nettlewood siguiendo la línea de la costa, el conocido camino de la Costa Perdida. Al grupo inicial de los héroes, del que solo quedaban Laetitia, Dorlam y Rictor, se habían unido Hiflin (en un intento por escapar de las autoridades) y los dos hermanos, Shezael y Hakim, que parecían más una pareja cómica salida de los mejores teatros de Magnimar (o de Korvosa, que era de dónde venían). El ayudante del sheriff había decidido quedarse a proteger la ciudad, y Minvant, había salido huyendo hacia Magnimar presa de una crisis de fe y mala suerte.

Habían adquirido unos cuantos mapas de la región, uno de ellos confeccionado por la elfa Shalelu que había entregado al sheriff hacía ya unos cuantos años, con unos esbozos sobre cómo estaba configurada la entrada secreta a Thistletop. Sirvió más bien de poco cuando Sheza lanzó un fogonazo en mitad del bosque para abrir camino. Aunque todos juraron a Desna por la locura de la joven hechicera, las llamas pronto se extinguieron para dar paso a un sendero de tierra... y a un grupo de seis goblins pillados completamente por sorpresa.

Notas de juego

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07/02/2011, 12:51
Hakim Tauranor

Calmar a Sheza, tras salir del edificio de la alcaldía, había sido más difícil que otras veces, su hermana no solo estaba enojada, estaba triste, y eso era peor que su ira. Finalmente, tras una visita a las tiendas y una buena comida, había logrado que voliera a sonreir. Esa noche durmieron en una habitación del Dragón Oxidado, podrían haber pagado dos pero los años de costumbre pesaron más y la cama les quedó ancha. Como cuando eran niños y lo único que tenían era un colchón, Hakim se despertó para encontrarse con Sheza abrazada a su espalda y ambos ocupando el borde mas alejado de la ventana. Intentó no despertarla y bajó a la sala común a desayunar, donde se encontró con algunos de los que el día anterior habían estado en la sala de la alcaldía. Saludó y luego de desayunar, fué cuestión de esperar a que confirmaran la salida.

Las palabras de la bardo, que por cierto era muy bonita y sorprendentemente alta, le llegaron hondo, y durante los dos días que había durado el viaje hasta el momento le habían servido de sostén. También había sido motivo de pelea con Sheza, que ahora insistía en que le gustaba la "larguirucha" y que sólo le podían parcer buenas a alguien con "cerebro de yunque" y "ojos de buey enamorado". Claro que Hakim se apresuraba a negar semejantes acusaciones y pasaba a elogiar la elocuencia de Laetitia, y que no era larguirucha sino alta, como él, algo que Sheza desde el piso no podía apreciar... Nunca llegaban a las manos, y no tardaban mucho en pedirse perdón, en realidad Hakim no tardaba en pedirle perdón a su hermana cuando esta llegaba a las lágrimas. Las cosas se calmaban y media hora más tarde, un comentario, un suspiro, o una mirada demasiado prolongada en la dirección equivocada provocaban un nuevo estallido. Al menos no gritaban demasiado, y trataban de mantener la compostura de cara a sus compañeros, y sorprendentemente jamás llegaban a la violencia física. De hecho Hakim pedía disculpas a todos por el espectáculo y era casi cómico ver al gigantón con el rostro arrebolado y la mirada baja.

Finalmente, tras una discusión y cansada por la selva, Sheza dejó salir su frustración en forma de una lamarada en la que la vegetación pagó por la cabeza de su hermano. Cuando las reprimendas y las llamas se extinguieron, seis caras verdosas miraban con sorpresa del otro lado. La frustración de Hakim también encontró salida, y los compañeros pudieron ver como la enorme mole se abalanzaba sobre los goblins mientras sus manos buscaban el puño de su mandoble. Un instante más tarde el herrero estaba parado del otro lado de las bestezuelas, con la espada en las manos chorreando sangre. A un goblin le faltaba medio cuerpo, y mientras dos de sus compañeros veían con horror como caía la otra mitas a unos cuantos metros, los otros dos contemplaban como la cabeza del sexto se desprendía del cuerpo.

Notas de juego

Off: Para los mente sucia, no hicieron nada más que dormir y jamás se dedicarían a esas costumbres Korvosanas Incestuosas.

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07/02/2011, 12:51
Dorlam Selt

Sandpoint parecía ya un susurro lejano que se alejaba con el viento de forma lenta pero inexorable. Esa era la impresión de Dorlam, cabizbajo y pensativo como de costumbre. Las veces que más lejos había estado de Sandpoint contaban con tranyectos medidos en minutos y no en jornadas como la que estaba experimentando ahora. Siempre había podido contar con la recurrente "¿qué habrá de cena hoy?" o "estoy deseando pillar mi cama". Ahora esas postulaciones carecían de sentido. La familiaridad propia de su mesa de estudio o el tacto de los muros cambiante debido al calor de las cocinas de la academia habían tallado poco a poco una armadura de comodidad que en los últimos días estaba resquebrajándose de manera alarmante. Salir de Sandpoint siempre había sido la meta de Dorlam, pero nunca había fijado una meta diferente de Magnimar.

Al cabo de dos jornadas y con el trayeto teóricamente casi completo, la tensión se había incrementado entre los compañeros. La posibilidad de un encuentro fortuito con patrullas que hicieran su ronda o con grupos de exploración aumentaba a cada paso paso que daban. Los ruidos del bosque para oídos poco acostumbrados eran señales de amenaza constantes por lo que el corazón de Dorlam raras veces conseguía tener un ritmo tranquilo.

La extraña mujer pelirroja dió cuenta de una gran arbusto que se interponía al paso y ahí sin más, como puestos por el destino y a fin de desquitarse de la tensión acumulada, un grupo de seis goblins se había convertido en presa obligada para el grupo. No hubo organización ni disciplina, sólo brutalidad y desenfreno. Cada uno de los contendientes hizo su trabajo lo mejor que pudo, unos bien, otros muy bien y otros, como en el caso de Dorlam... muy mal.

El mago había recurrido como de costumbre al componente telequinético y danzaba su arma en dirección a uno de los oponentes. Sin embargo el resultado no fue el esperado y ya fuera la tensión, la falta de práctica, el destino, o los gritos tanto del gigantón Hakim como de los despedazados goblins, el arma de Dorlam no ejecutó los movimientos esperados. Los movimientos adicionales de los componentes del grupo junto a una brillante ejecución del sencillo Manos Ardientes, acabó con la amenaza reinante. Dorlam masculló en silencio su torpeza y tras ello felicitó a Sheza por la brillante ejecución del conjuro.

- "Imagino que pueda haber patrullas que ahora sean conscientes de una presencia hostil en la zona. Deberíamos movernos de aquí y buscar alguna entrada. Quizá podríamos esconder también a estos desgraciados..."

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06/06/2011, 16:39
Laetitia Desnae

- Si, debemos movernos y cubrir nuestras huellas... aunque antes deberíamos ver si ha quedado algun goblin con vida que pueda proporcionarnos información - dice la bardo arrodillándose junto a uno de los cuerpos y comprobando si tiene pulso. - Este ha muerto, podéis retirar el cuerpo.

Tras comprobar su estado uno a uno, Laetitia consigue finalmente encontrar a uno que está inconsciente. - ¡Aqui hay uno! Está un poco quemado, pero sigue con vida. Lo que no se es si accederá a cooperar una vez despierte. Tal vez si alguien hiciera que volviese a temer por su vida se lo replantearía... - dice mirando a la pareja de hermanos, que son de lejos los que más miedo dan del grupo.

Tras estabilizarlo, atarlo a un árbol y practicarle unos primeros auxilios* consigue que el goblin recupere la consciencia. - Bienvenido al mundo de los vivos, pequeño amigo. Pese a que mis amigos están en contra de dejarte marchar, yo les he convencido para que si nos ayudas y te marchas bien lejos de aqui no te hagan daño - dice dejando una pausa para que Hakim haga una demostración de lo que es capaz de hacer. - Nos gustaría saber qué estabais haciendo por aqui... y también si hay alguna entrada trasera a la fortaleza de Thistletop que se encuentre poco vigilada

 

Notas de juego

* Si los 1os auxilios no son suficiente, usaría una canalización de energía

No avanzo más porque un 24 es una buena tirada pero tampoco es para echar cohetes y hay que ver como resulta el principio para ver si hay que atornillarle mas o menos :P

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06/06/2011, 17:36
Hakim Tauranor

Hakim tomó uno de los cuerpos de los goblins, abarcando la cabeza con una sola de sus manos. Miró al goblin con una sonrisa y apretó lentamente el craneo hasta que se empezaron a escuchar las junturas de los huesos chirriando. Enarcó una ceja y apartó la mano de su cuerpo mientras su sinrisa se volvía un poco más siniestra. Cerró la mano con fuerza, el crujido fue espeluznante y la sangre salpicó la tierra en un amplio círculo. El cuerpo colgaba del puño cerrado, uno de los ojos del goblin había ido a parar al lado del interrogado y el otro colgaba entre los dedos.

Hakim soltó el cadaver destrozado y limpió su mano en la ropa del prisionero, dejándola manchada de sesos y fragmentos de hueso. - Tu eliges con quien hablas pequeño. - dijo al tiempo que tomaba una de sus manos en el mismo puño ensangrentado y apretaba lo justo como para que sintiera los huesos de los dedos juntarse.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d20(+11)
Motivo: Intimidar
Resultado: 10(+11)=21

Notas de juego

Supongo que mi 21 ayuda un poco, te toca "defenderlo" de mi ;)

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07/06/2011, 09:37
Laetitia Desnae

- Yo no quiero concidionarte, pero... si estuviera en tu lugar preferiría hablar y salir de aqui por piernas y no parar hasta llegar a los pantanos antes de dejar que ese me pusiera la mano encima. Puedo asegurarte que no te haremos ningún daño si nos ayudas y que tendrás comida para poder huir de aqui.