Miércoles, 7 de agosto del 2019.
Mediodía, temperatura 28ºC
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-¿Es posible que el nivel del mar descendiera tanto en cosa de unos siglos? -inquirió Mitch, muy extrañado, aunque la teoría de las hermanas Cooper era la única opción racional y viable que se le ocurría-. Siendo un barco pirata, no puede ser muy antiguo. Cuatrocientos años, quinientos tal vez, seiscientos a lo sumo...

"Los barcos no aparecen en medio de las islas, tronco" pensó el hippie para sus adentros, ya que en esos momentos la única posibilidad razonable es que siglos atrás la línea de playa hubiera llegado hasta aquella posición.

Aunque había algo que le preocupaba más que el hecho de cómo había llegado un barco pirata hasta allí, y eso era que Alistair estaba tratando de subir hasta el barco mientras gritaba sobre la presencia de una tal Daphne. ¿Tal vez era una hija? Mitch pensó que tal vez se tratase de una niña pequeña, que quizá los demás no habían alcanzado a ver corriendo antes por la jungla. Porque la otra posibilidad, que el doctor hubiera perdido la cabeza, no era precisamente algo que le agradase. Al fin y al cabo, era el único que podía ayudarles si alguno de ellos resultaba herido de gravedad.

-Voy a intentar subir -dijo el hippie, armándose de valor-. Puede que desde arriba pueda ver qué busca el doc, o si en verdad no hay nada. -El joven se aproximó a una de las enredaderas y trató de trepar por ella, agarrándose con ambas manos, aunque sin mucho éxito.

 Entre todo el pataleo y la efusividad expresada por el descolocado Doctor Banner, Melvin intentó agarrar al hombre para contenerlo y evitar que el mismo intentase escalar nuevamente o se diera a la fuga en búsqueda de aquella "Daphne" de la que hablaba. Lamentablemente, el corpulento hombre no tuvo mayor suerte que recibir una patada de Alistair en la cabeza, lo cual dejó a Melvin un poco más que aturdido.

_{Wow... *I'm seeing stars*...}

 No parecía ser nada grave, y Melvin simplemente quedó en el suelo frente al barco un tanto mareado. Pero ahora al doctor se le presentaba menos resistencia para seguir con su plan de escalar el navío.

¿Es que todos se habían vuelto locos de repente? Primero Alistair escalando llamando a esa tal Daphne imaginaria. Luego lastimando a Melvin y ahora Mitch también tratando de subir. Todo mal, ¿No que necesitaban agua? ¿Entonces?

—¡Alistair! Tranquilo ¿Quién es Daphne? Podemos tratar de encontrarla, pero ten cuidado, baja de allí te ayudaremos ¿Sí? — trató de convencer al hombre acercándose a las enredaderas donde el medico estaba enganchado casi cayéndose. En su fuero interno rezaba para que no se estampara contra el piso. —¡Mitch! ¡Ten cuidado! No podemos ponernos a escalar todos, se ve peligroso — trató de detenerlo también, viendo como fallaba, pero lo primordial era bajar a Alistair de allí primero y quizás así Alisson y Mitch podían ver si lograban algo más importante. Volteó a ver a Melvin que se sentaba en el suelo y llegó a él lo más rápido que su estado lastimado le permitió, agachándose un poco desde su lado para revisarlo. —¿Estás bien? ¿Te hiciste daño?

Alistair no echaba cuenta de que Mitch hablaba como si no estuviera delante, solo le interesaba que pudiera subir y le dijera hacia dónde se había dirigido su mujer, porque estaba convencido de que estaba allí. Tampoco se percató de la patada que le había propinado a Melvin cuando trató de subí por segunda vez y sin éxito. 

- ¡Es mi mujer! ¡Se llama Daphne! Está embarazada - Añadió aquello último con gran preocupación. Sus ojos seguían abiertos de par en par, alerta y con los hombros en tensión. 

Se volvió hacia el resto y se refregó la cara con las manos, intentando despejarse. - Mitch la encontrará - trató de autoconvencerse sin dejar de mirar al hippie. Luego se acercó a Melvin para ayudar a levantarse también.

 Melvin se sienta en la espesura del suelo, siendo rodeado por los juncos y pastos del lugar. Su mirada estaba un poco perdida, pero rápidamente reacciona a la ayuda recibida por Ava y el propio Alistair. Se necesitaba un poco más que una patada para noquear al corpulento hombre. Con la ayuda de ambos, se incorporó.

- Estoy bien, no se preocupen... pero Al, *buddy*, cálmate un poco. Mitch va a encontrar a Daphne... si es que ella está aquí. Si no es así, me temo que estás teniendo un par de ilusiones potentos, *my friend*.

 Melvin hablaba con un tono amigable, como intentando buscar que el doctor recapacite. No esperaba que fuera tan fácil, pero por lo menos habían evitado que se alejase más y ahora estaba con ellos.

En verdad todo aquello se estaba saliendo de control, pero asi como Ava decidió ir directo a la acción del momento, acercándose tanto a Melvin como a Alistair, para estar allí por si se necesitaba que entre todos detuvieran al doctor que aun estaba un tanto alterado por todo aquello de su esposa ¿Su esposa? Alisson se quedó pensando unos momento para ella misma, frunciendo el ceño, no recordaba haber escuchado que Alistair gritara el nombre de "Daphne" la primera vez que lo vio en la playa. Era buena pensante y le gustaba alardear de ello, por lo que estaba segura recordaría de ser asi.

—Como dice Melvin doc... si esta aquí la encontraremos, estamos todos juntos en esto ¿No es asi?— Comentó primeramente, para poder tranquilizar mas la agitación inicial, pero despues miro a Melvin mismo, asintiendo a sus siguientes palabras —Pero como el dice ¿Estas seguro de que ella esta aquí? Este lugar puede hacernos mucho daño y no solo físico, debes pensar un poco, recordar las cosas, mientras vemos lo demas— Si estaba allí la mujer del doctor, estaba mas que segura que la podrían encontrar, sin embargo la cabeza de Alisson en esos momentos solo pensaba que se podría tratar de una ilusión y poco mas, igualmente no iba a descartar nada, no despues de todo lo que habían vivido.

—Y por otro lado... Parece que el que este un barco aquí si que puede significar la presencia de agua potable— Comentó, esperando que esta vez no pasara nada diferente que arruinara de nuevo el plan inicial, encontrar agua y hacer un campamento, aquella zona se miraba bien pero no estaba segura aun de nada, en especial por la ausencia de ciertas cosas que no eran propias de un lugar como ese, los animales por ejemplo —Las raíces apuntan a casi todos lados, podría significar que el agua abarca todas esas zonas... No sería extraño considerando que esta aquí esta cosa— Señalo alrededor, menos el norte, en donde no parecía continuar el rastro que los arboles habían dejado desde hace un buen rato ¿Donde estaban realmente? Era todo bastante extraño.

Alisson empezó a sentir un fuerte dolor de cabeza. Sentía como su cuerpo se estaba deshidratando y eso le provocaba una fuerte migraña que le dificultaba concentrarse en cualquier tarea sencilla que tratase de realizar. ¡Necesitaba beber algo cuanto antes!

Miércoles, 7 de agosto del 2019.
Tarde, temperatura 29ºC
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Mitch decidió ayudar a su compañero el doctor y tratar de subir al barco para encontrar a Daphne. Pero las enredaderas eran más resbaladizas de lo que había sospechado en un momento y no se sintió con fuerzas para poder trepar en condiciones.

Samantha volvió a sentir un fuerte dolor de cabeza. Sentía como su cuerpo se estaba deshidratando y eso le provocaba una fuerte migraña que le dificultaba concentrarse en cualquier tarea sencilla que tratase de realizar. ¡Necesitaba beber algo cuanto antes!

-Es imposible -dijo Mitch, con un gesto de negación-. Necesitaría ser un atleta olímpico para llegar hasta arriba.

Observó lo alto que se encontraba el barco y, luego, miró a sus compañeros. Era poco probable que cualquiera de ellos pudiera llegar hasta arriba. La que parecía encontrarse en mejor forma física para conseguirlo era Alisson, aunque nada garantizaba que la chica lograse trepar hasta el barco.

-¿Sabéis a quién necesitaríamos ahora? -inquirió el hippie, pensativo-. A Kalina, la chica rusa. Quizá ella hubiera sido capaz de ascender con facilidad. -Fue en ese momento cuando Mitch se percató de la presencia de la señora Smith, que acababa de aparecer sorpresivamente tras ellos-. ¡Pero señora! ¿Usted otra vez? ¿Y su hijo? ¿Dónde está?

Alisson tuvo que detenerse un momento, buscando un árbol en el cual poder apoyarse debido al dolor de cabeza que estaba comenzando a sentir en esos momentos, no era ninguna experta como Alistair, pero no se debía de ser demasiado inteligente como para saber que estaba comenzando a sentir las consecuencias de la falta de agua. En cuanto logró recomponer su postura se acerco a su hermana ¿Estaría igual que ella? Esperaba que no pues no se encontraba aun tan entera como ella. Este mismo hecho causó que sintiera un poco de malestar por la situación misma, no estaba con tiempo como para estar jugando a las escondidas con una alucinación (Lo cual era lo mas probable) como el resto de hombres que estaban allí con ellas, tal vez despues de recuperar sus necesidades básicas podría ayudar con ello pero en esos momentos le era imposible.

—Lo siento... la falta de agua me esta comenzando a matar la cabeza...— Miró a su hermana antes de indicarle la dirección que creía mas conveniente para seguir las raíces de los arboles, era su única pista clara que tenía para encontrar el maravilloso liquido que tanto estaba anhelando en esos instantes —Si quieren seguir intentando escalar esa cosa, no creo que puedan contar conmigo por el momento. Debo encontrar esta fuente de agua antes de que sea demasiado tarde, ¿Vienes Ava o te quedas a descansar?— Preguntó, mirando a su hermana por unos segundos despues de haber dicho esto, suponía que por el momento se quedarían allí todos por lo que sería fácil ir por agua y regresar. Ni siquiera le dio importancia al hecho de que la señora de antes los había alcanzado, mas bien comenzó a caminar hacía el sur, sin despegar su vista de los arboles ¿Quien diría que estos terminarían siendo sus mejores amigos?

Samantha había llegado al lugar, pese a que se encontró con viejos conocidos, seguía pensando en dónde estaría su hijo o su marido. E incluso pensó en aquel pequeño niño de pelo corto que la había ayudado minutos atrás. Sea como fuere, estaba sedienta, por lo que decidió beber ahí mismo, delante de todos.

-Hola a todos -Dijo mientras sacaba una botella de Pepsi de Medio Litro de su mochila y buscaba una zona confortable en la que sentarse y beber tranquilamente- Mi hijo se fue sin mi, ¡Menudo desagradecido, una no amamanta hasta los 7 años para que luego se vaya así sin más, sin traerme el desayuno a la cama!. ¡Y ESO NI SIQUIERA ERA UNA CAMA!.

 Luego de recuperarse de lo que fue una considerable patada en su cabezota, Melvin se levantaba del suelo con la ayuda de sus compañeros. Fue en ese momento en el que vio llegar a la enigmática mujer que habían dejado atrás en el avión. La Señorita Smith. Los ojos del corpulento hombre se iluminaron.

 Con el paso tambaleante pero emocionado, el hombre se acerca a Samantha, saludándola con alegría. En parte sentía un poco de culpa en su espalda por haber sido uno de los que apoyo la idea de irse sin ella. Viendo que la mujer había podido hacerse con una botella de Pepsi y ya no era víctima de la sed, la conciencia de Melvin pudo descansar un poco.

- ¡Señorita Smith, que alegría verla! Quiero decir... que alegría ver que está usted bien... *Thank God*

 Aunque su emoción surgía de ver a la mujer sana y salva, también había un poco de excitación por ver aquella botella de gaseosa. Algo bebible, luego de haber estado tanto tiempo sin tomar nada. Los ojos de Melvin revelaban deseo.

- ¿Podría... podría tomar un sorbito de esa Pepsi? ¿*Pretty please*?

Mitch se sintió decepcionado al no poder ascender hasta el barco. No sólo por el hecho de que había fallado y no sabría qué había en el interior del navío, sino porque además el doctor Banner continuaría pensando que su esposa estaba en aquel barco pirata.

Como portadora de malas noticias, la señora Smith les confirmó además que su hijo se había marchado sin ella y, a la vista de las circunstancias, todo apuntaba a que la mujer no lo había encontrado caminando por la jungla. Desde luego al hippie no le pareció que Arthur fuera un buen hijo. Si bien su madre era un tanto excéntrica, ¿la había abandonado a su suerte estando medio deshidratada?

-Alisson, voy contigo -se ofreció Mitch, sabiendo que sería más útil acompañando a la chica para no dejarla sola que quedándose allí, intentando llegar al barco pirata, sin éxito-. No creo que los haya, pero podría haber animales salvajes en esta isla. Si vamos juntos, al menos podremos defendernos si algo nos ataca. Ava -dirigió una mirada a la chica malherida, sabiendo que se encontraba más recuperada que los días anteriores, si bien no quería dejarla atrás-, ¿nos acompaña?

Vio a todos tratar de nuevo ir a escalar o por lo menos ayudarse mutuamente sin lograr nada y suspiró, ella solo quería agua para luego ver que hacer, escalar y tratar de matarse nuevamente no era lo ideal realmente. Suspiró por lo bajo al ver que por lo menos Mitch estaba a salvo y volvió a mirar a Alisson, realmente ella también estaba muriéndose de sed y la entendía perfectamente.

—Voy contigo, no pienso quedarme lejos de ti de nuevo — le dijo a la menor, levantándose como pudo para llegar donde su hermana. A la llegada de la mujer arrogante y hacer aquello frente a todos, su único pensamiento fue que, con razón su hijo había huido de ella. Cualquiera con una madre así prefería estar solo. Prefería no decir exactamente que otros pensamientos oscuros habían despertado en ella esa acción, pero no dejaría que el resto se preocupara por la tipa de encontrar nuevamente comida o agua, como había pasado antes. Veían claramente que ella le importaba poco el resto de las personas de la isla. Que Mitch dijera que iba también solo fue un alivio adicional, no quería perderlo de vista tampoco. —Claro, gracias. — le dijo nuevamente, acercándose a él y comenzando a seguir ahora a Allie junto al hippie, mientras más rápido encontraran el agua mejor.

Samantha miró de arriba a abajo a aquel hombre gordo que parecía suplicarle un poco de Pepsi. Con cierta resignación, la mujer se levantó, dio unos cuantos pasos hacia aquel hombre, con la botella en una mano, decidió usar la otra para acariciar la cabellera de aquel seboso ser.

-Te diría: "¿Después de dejarme abandonada en aquella playa piensas que te voy a dar?". -Las palabras fueron frías y secas, así como cierto grado de resentimiento-  La respuesta es sí. Abra la boca.

Sin dar tiempo al hombre, Samantha metió la botella en la boca del hombre, y apretó el otro extremo para que un chorro cálido de Pepsi, inundara la boca de aquel gordinflón que la había dejado sola y desamparada haría unas cuantas horas en la playa. Tras esto, le cedió toda la botella.

-Quédatela.

 No pensó que el pedido iba a ser respondido de forma afirmativa, pero aquella mujer demostraba ser más impredecible de lo que uno creería. Tanto era así, que cuando le dio un poco de beber, lo hizo de la forma más brusca posible. Haciendo que alguna lagrimita de dolor le surgiera al pobre Melvin. Ahora estaba tosiendo, y con una fosa nasal chorreando Pepsi (parecía efectivamente un pit bull). Pero sed... ya no había más.

- ¡NGHHHH! ¡Ngh!... Uff, gracias... gracias.

 Tomando la botella y sonriéndole inocentemente a aquella cruel pero justa mujer, Melvin se percata de que el equipo estaba por dividirse nuevamente. Lo cual no era nada bueno si Mitch tenía razón y había peligros en la isla. Incorporándose, le habla a todos.

- ¡E-esperen, no deberíamos separarnos! Pueden tomar un poco de esto si quieren... Eh, ¡Srta. Smith! Ahora que está mejor, puede seguirnos. Estamos buscando agua. Para que no pase nuevamente lo de antes. Perdón por eso... *come on, join us!*

 Melvin le extiende la mano a la mujer. No esperando que la tome (aunque no estaría nada mal) pero invitándola a seguir a los demás. No sabía que esperar de Samantha, pero Melvin ya había visto que podía convencerla una que otra vez.

-El agua ya la encontré yo. -Comentó como si de poca cosa se tratara- ¿Podéis decirme dónde ha ido mi hijo?.

Samanta no le daba la menor importancia a lo que allí ocurriera, tan solo se preocupaba por su familia, puesto que tanto su hijo como su marido iban a recibir un buen tirón de orejas por andar liandola con secuestradores, aviones y preservativos. ¿Quién se creía que era?. Como si fuera a mojar la picha en mitad de un secuestro.

Aquella mujer tan odiosa ya le estaba colmando la paciencia, realmente la había estado ignorando desde que había dicho lo del secuestro, la teoría mas tonta hasta el momento, al menos para ella, no le extraño que estuviera allí tomando agua en frente de todos cuando muchos estaban comenzando a deshidratarse. —No es necesario que vengan todos, muchos ya tomaron agua despues de todo ¿No? Tal vez el hijo de la tipa tan solo escapó, cualquiera lo haría... Como sea, es bueno quedarse por aquí, el barco puede ser un buen lugar para tener algún campamento o algo— Después de todo la construcción como tal del barco podría ayudar mucho en la noche, aunque no lograran escalarlo al final, esperaba en verdad que no los siguieran, no por Melvin claramente, mas bien por la mujer a la que estaba invitando, si ella quería jugar a preocuparse solo por ella misma, todos podían hacerlo y la falta de agua del momento estaba haciendo que Alisson dejara de ser tan amable como lo había estado haciendo hasta el momento. Sin mas miró a su hermana y Mitch, rogando con la mirada que tan solo continuaran y poco mas.