Partida Rol por web

Persona: Shadows Arise

La Corte Oscura

Cargando editor
01/05/2019, 15:02
Kaguya Kitamura

Lo último que recordáis es que os fuisteis a dormir, pero ahora por alguna razón que escapaba a vuestra comprensión, os encontrabais en un juzgado donde un montón de gente hacía fila para llegar hasta el estrado, lo que más os llamó la atención es que eráis los siguientes, aunque tuvisteis tiempo suficiente para ver que le pasaba a quien tenía el turno justo anterior. El se encontraba en las mesas de la derecha y en la mesa de la izquierda se encontraba alguien exactamente igual, al menos en apariencia, con la excepción de que tenía los ojos amarillos. La juez dio un martillazo que indicaba el final de aquél juicio y la persona con ojos amarillos atacó a su copia, dejándola bastante malherida e incapaz de moverse.

No entendíais nada de lo que estaba pasando, hasta que finalmente os tocó el turno. - Vamos a acelerar esto, sois muchas personas y mi tiempo es demasiado valioso como para malgastarlos en vosotros, así que a partir de ahora vamos a ir de dos en dos, total, el resultado siempre es el mismo. - avanzasteis hasta la mesa que os indicó aquella chica, aunque más que por voluntad propia, por miedo.

Dio un martillazo en la mesa y aparecieron al lado izquierdo dos personas exactamente iguales a vosotros, con la diferencia de que tenían los ojos amarillos. - Habéis sido convocados aquí porque vuestra alma inferior va a ser puesta a juicio, si perdéis, demostraréis ser tan inferiores y débiles como aparentáis y por lo tanto vuestro lado "oscuro" tomará posesión de vuestro cuerpo, y si ganáis el juicio... Bueno, no vais a ganar, nadie gana nunca, todos sois patéticos. - dijo soltando una gran carcajada. Con miedo mirasteis a vuestras respectivas copias, parece que si no queríais acabar como tantas personas que habían recibido aquél mensaje, debíais defenderos y ganar aquél juicio.

Cargando editor
01/05/2019, 15:18
Arlek

Lo último que recordáis es que os fuisteis a dormir, pero ahora por alguna razón que escapaba a vuestra comprensión, os encontrabais en un juzgado donde un montón de gente hacía fila para llegar hasta el estrado, lo que más os llamó la atención es que eráis los siguientes, aunque tuvisteis tiempo suficiente para ver que le pasaba a quien tenía el turno justo anterior. El se encontraba en las mesas de la derecha y en la mesa de la izquierda se encontraba alguien exactamente igual, al menos en apariencia, con la excepción de que tenía los ojos amarillos. El juez dio un martillazo que indicaba el final de aquél juicio y la persona con ojos amarillos atacó a su copia, dejándola bastante malherida e incapaz de moverse.

No entendíais nada de lo que estaba pasando, hasta que finalmente os tocó el turno. - Vamos a acelerar esto, sois muchas personas y mis súbditos están esperándome fuera para complacer mis órdenes. - avanzasteis hasta la mesa que os indicó aquella chica, aunque más que por voluntad propia, por miedo.

Dio un martillazo en la mesa y aparecieron al lado izquierdo dos personas exactamente iguales a vosotros, con la diferencia de que tenían los ojos amarillos. - Habéis sido convocados aquí porque vuestra alma inferior va a ser puesta a juicio, si perdéis, que vais a perder, os uniréis a mi legión de súbditos realmente inferiores y trabajaréis para mi y para cumplir mis deseos, ya no existirá nunca más vuestra voluntad, solo trabajaréis para satisfacer la mía y bueno, si ganáis... No, no ganaréis. - se le veía bastante serio, una sonrisa malévola apareció en su rostro. Con miedo mirasteis a vuestras respectivas copias, parece que si no queríais acabar como tantas personas que habían recibido aquél mensaje, debíais defenderos y ganar aquél juicio.

Cargando editor
01/05/2019, 15:22
Naoki Kawa

Lo último que recordáis es que os fuisteis a dormir, pero ahora por alguna razón que escapaba a vuestra comprensión, os encontrabais en un juzgado donde un montón de gente hacía fila para llegar hasta el estrado, lo que más os llamó la atención es que eráis los siguientes, aunque tuvisteis tiempo suficiente para ver que le pasaba a quien tenía el turno justo anterior. El se encontraba en las mesas de la derecha y en la mesa de la izquierda se encontraba alguien exactamente igual, al menos en apariencia, con la excepción de que tenía los ojos amarillos. La juez dio un martillazo que indicaba el final de aquél juicio y la persona con ojos amarillos atacó a su copia, dejándola bastante malherida e incapaz de moverse.

No entendíais nada de lo que estaba pasando, hasta que finalmente os tocó el turno. - Vamos a acelerar esto, sois muchas personas y quiero que todos estéis pronto a salvo bajo mi protección. - avanzasteis hasta la mesa que os indicó aquella chica, aunque más que por voluntad propia, por miedo.

Dio un martillazo en la mesa y aparecieron al lado izquierdo dos personas exactamente iguales a vosotros, con la diferencia de que tenían los ojos amarillos. - Habéis sido convocados aquí porque vuestra alma va a ser puesta a juicio, si perdéis,  pasaréis a estar bajo mi control y protección ¡lo cual no es malo! Ya no tendréis que preocuparos de si algo que hacéis está mal o no, ni sufriréis por mal de amores ¡y nunca más estaréis tristes! Solo tendréis que obedecerme y todo irá bien mis pequeñas almas perdidas, no dejaré que nunca nada malo os pase ¿que es perder el libre albedrío comparado con nunca más volver a ser infeliz? - os miró con una sonrisa compasiva, parecía haber cierta ternura en tan alocadas palabras dignas de un dictador. Con miedo mirasteis a vuestras respectivas copias, parece que si no queríais acabar como tantas personas que habían recibido aquél mensaje, debíais defenderos y ganar aquél juicio.

Cargando editor
01/05/2019, 15:28
Ryland Horst

Lo último que recordáis es que os fuisteis a dormir, pero ahora por alguna razón que escapaba a vuestra comprensión, os encontrabais en un juzgado donde un montón de gente hacía fila para llegar hasta el estrado, lo que más os llamó la atención es que eráis los siguientes, aunque tuvisteis tiempo suficiente para ver que le pasaba a quien tenía el turno justo anterior. El se encontraba en las mesas de la derecha y en la mesa de la izquierda se encontraba alguien exactamente igual, al menos en apariencia, con la excepción de que tenía los ojos amarillos. La juez dio un martillazo que indicaba el final de aquél juicio y la persona con ojos amarillos atacó a su copia, dejándola bastante malherida e incapaz de moverse.

No entendíais nada de lo que estaba pasando, hasta que finalmente os tocó el turno. - Vamos a acelerar esto, sois muchas personas y cada segundo que pasa sin que el mundo esté sumido en un completo caos es un dolor de culo para mí. - avanzasteis hasta la mesa que os indicó aquella chica, aunque más que por voluntad propia, por miedo.

Dio un martillazo en la mesa y aparecieron al lado izquierdo dos personas exactamente iguales a vosotros, con la diferencia de que tenían los ojos amarillos. - Habéis sido convocados aquí porque vuestra alma inferior va a ser puesta a juicio, si perdéis, estaréis bajo mi mando y os dedicaréis a destrozar todo cuanto os moleste ¡todo! ¿Qué no te gusta la jeta de alguien? ¡Pues se la revientas a puñetazos! Y bueno, si ganáis, pues supongo que os tendré que reventar yo ¡así que más os vale perder! - dijo soltando una gran carcajada. Con miedo mirasteis a vuestras respectivas copias, parece que si no queríais acabar como tantas personas que habían recibido aquél mensaje, debíais defenderos y ganar aquél juicio.

Cargando editor
01/05/2019, 15:32
Eldwin von Richthofen

Lo último que recordáis es que os fuisteis a dormir, pero ahora por alguna razón que escapaba a vuestra comprensión, os encontrabais en un juzgado donde un montón de gente hacía fila para llegar hasta el estrado, lo que más os llamó la atención es que eráis los siguientes, aunque tuvisteis tiempo suficiente para ver que le pasaba a quien tenía el turno justo anterior. El se encontraba en las mesas de la derecha y en la mesa de la izquierda se encontraba alguien exactamente igual, al menos en apariencia, con la excepción de que tenía los ojos amarillos. La juez dio un martillazo que indicaba el final de aquél juicio y la persona con ojos amarillos atacó a su copia, dejándola bastante malherida e incapaz de moverse.

No entendíais nada de lo que estaba pasando, hasta que finalmente os tocó el turno. - Vamos a acelerar esto, sois muchas personas y mi alucinante tiempo es muchísimo más valioso que el de unos siervos como vosotros. - avanzasteis hasta la mesa que os indicó aquella chica, aunque más que por voluntad propia, por miedo.

Dio un martillazo en la mesa y aparecieron al lado izquierdo dos personas exactamente iguales a vosotros, con la diferencia de que tenían los ojos amarillos. - Habéis sido convocados aquí porque vuestra alma inferior va a ser puesta a juicio, si perdéis, empezaréis a trabajar para mi, a ganar dinero para mi y a hacer que nunca me falte de nada ¡seré vuestro amo y señor y cumpliréis todas mis órdenes porque soy maravilloso y genial! ¡HOHOHO! Y ahora venga, entretenedme intentando sobrevivir a este juicio, pero solo con mi genial presencia ya deberíais estar intimidados y listos para lo que se avecina. - dijo soltando una gran carcajada. Con miedo mirasteis a vuestras respectivas copias, parece que si no queríais acabar como tantas personas que habían recibido aquél mensaje, debíais defenderos y ganar aquél juicio.

Cargando editor
01/05/2019, 17:04
Tetsuya Arashi

Tetsuya no estaba realmente asustado por lo que estaba pasando allí, más bien se sentía emocionado de que alguien como él tuviera derecho a salir de la monotonía de su día a día. Cuando vio a alguien exactamente igual a él aparecer, no cabía en si de la sorpresa, le miró curioso y dejó que hablara su sombra primero.

Esta empezó a llorar, algo que el verdadero Tetsuya nunca hacía. - Estoy cansado, cansado de nunca servir para nada, de siempre ser la última mierda, de que nadie me quiera de verdad. - pero de repente, el llanto cesó y se transformó en una risa algo siniestra. - Si lo que dice la juez es verdad, si pierdes este juicio ¡nunca más volveré a sentirme mal! ¡Te mereces morir! Después de todo es culpa tuya que me sienta tan mal, nunca te has esforzado por mejorar, ni por encontrar gente que te quiera.

¡Debes desaparecer, maldito inútil y aceptar la felicidad siendo parte de la legión de la Jueza!

Tetsuya estaba callado, observando el monólogo de su sombra. A medida que hablaba se le veía cada vez más y más molesto. - ¡Basta! - dijo aporreando la mesa, sorprendiendo así a la juez y a casi todos los presentes. - ¿Y tu dices ser algo mío? Si, seré un inútil, pero soy feliz porque puedo vivir sirviendo a otras personas que me parezcan interesantes ¡pero siempre eligiendo con quien estar y decidiendo que hacer!

Si vas a seguir a alguien ciegamente y perder tu capacidad de razonar... ¡Quien debería desaparecer eres tu!

Su propia sombra se amedrentó, haciendo que la juez abriera sus ojos enormemente, era la primera vez en ese juzgado que alguien era capaz de anteponerse a su sombra, a sus miedos más profundos, a su lado más oscuro.

Cargando editor
01/05/2019, 17:50
Momoka Hiraki

Si era un sueño, era de lo más extraño e inquietante. ¿Porqué estaría soñando aquello? Con cierto nerviosismo, vi lo que le pasaba a la anterior persona que había entrado antes que nosotros. Junté las manos sobre el pecho y entré con pasos lentos. Mi habitual carácter animado se veía puesto a prueba ante esta situación, pero no retrocedí. Avancé despacio pero con determinación hacia mi lugar. A mi lado estaba un chico que compartía mi mismo destino. Me sonaba bastante de clase, pero no había hablado mucho con él. 

- Pero... - alcé un poco la voz para dirigirme a la jueza que dirigía el lugar - yo no tengo ni tristezas ni preocupaciones ni miedos de los que esconderme, mi vida es feliz como es - me defendí tratando de convencerla de que no necesitaba de su protección.

- ¿Tu vida es feliz como es? - escuché mi propia voz pronunciar las mismas palabras que yo había dicho pero con un tono burlón y despectivo, una lóbrega versión de mi voz. Giré la cabeza para mirar a la mesa que se encontraba a la derecha y vi que mi copia me miraba con aquellos ojos amarillos que me observaban con desdén - oh, sí, tu vida es feliz, siempre sonriendo, siempre preocupándote por los demás, siempre tratando de encontrar lo bonito de la vida y animando a tus amigos - remarcaba cada frase con retintín guasón y, de pronto, su amplia sonrisa se transformó en un torcido gesto de extremo enfado - ¡Falso! ¡Todo falso! No es más que la máscara para ocultar tu verdadero yo, temerosa de que toda tu amabilidad no sea más que una manera de autosatisfacer tu ego y de que la gente no te necesite. Temes el día en el que no puedas seguir sonriendo, de perderlo todo, y por eso te escudas dentro de ese capullo de amabilidad para protegerte.

- Eso no es verdad - sorprendida traté de defenderme.

- ¡Falsa! - volvió a gritar mi copia.

- Yo no...

- ¡Hipócrita!

- ...soy así...

- ¡Insegura! ¡Cobarde!

- ...no... 

- ¡Perdedora! Inútil... - la última palabra la dijo en un tono suave e hiriente.

¡NO! ¡ESO NO ES VERDAD! - grité con voz firme. Por unos momentos mi determinación se había tambaleado, pero recordé lo que siempre me decía mi madre, "ante las adversidades, mantén la calma y piensa bien lo que haces". Respiré hondo y miré a mi lúgubre copia y, después, a la jueza - es cierto que tengo miedos, temo pensar que mi preocupación por los demás no sea nada más que apariencia, temo perder lo que más quiero y no poder hacer nada para evitarlo. Sí, mi vida no es perfecta, pero no por ello soy infeliz. Quiero mi vida como es y no cambiaría nada, no dejaré que mis inseguridades y mis miedos dirijan mi vida - terminé de hablar lanzando una última mirada de desafío a mi copia antes de volver a mirar a la jueza.

Cargando editor
01/05/2019, 16:28

Me veo horrorizado, con la boca abierta y los ojos en blanco mientras tiemblo.

-¿Esto es real? Pensé que sólo era una broma viral y que lo que les ha sucedido a todos es una enfermedad extraña, ¡que alguien me despierte, debo estar soñando!

Comienzo a pellizcarme pero no funciona, definitivamente estamos en un juzgado de verdad y nuestras almas van a ser puestas a prueba en un juicio injusto, parece que la Justicia tampoco estaría de parte de la joven gótico lolita que estaba representando conmigo el papel de acusados.

-Eh, tú, tienes que decirles que yo no debería estar aquí, esto debe ser un error. Sólo he hecho un par de fotos a los panties de alguna chica, ¡no es suficiente como para que me metan en la cárcel!

Digo refiriéndome a la chica

Cargando editor
01/05/2019, 17:52

-Espera ¿Qué? acaso esto es un sueño- la verdad es que el lugar me daba muy mala espina en especial por que nunca habías soñado  algo así, mire a la persona que se encontraba a mi lado no la conocía en lo absoluto o ¿sí? era difícil de saberlo mi mente estaba confundida, mi mirada se fue desviando hasta la persona frente a mí eramos idénticos salvos por los ojos su tonalidad era amarilla brillante, cuál lobo esperando devorar a su presa.

-Vaya al fin has notado que estoy aquí, te tardaste un buen rato, ¿Podemos acelerar esto? eres un fracasado, incapaz de hacer algo por ti solo, un mono entrenado, para hacer las gracias que se te piden, lo peor es que esa ni si quiera es tu realidad, admite tu vida es una farsa y la odias, de hecho ya eras un cadáver andante, así que el veredicto es culpable y listo ahora solo deja que te elimine y tome tu lugar-  dijo aquél chico frente a mí.

Por un momento me quede en silencio no sabía a que se refería, nunca había considerado mi existencia de esa manera, cierto en algunos momentos me había cuestionado algunas cosas pero no podría considerarme un fracaso, tampoco un cadáver como el decía, parecía que no me conocía  - Mientes esa no es la verdad- quise enfrentarlo - no conoces nada de mi persona.

-Que no conozco nada de ti, bueno te equivocas en eso, tus intentos de ayudar a las personas son un intento egoísta para tener atención, te gusta sentir que la gente te necesita por eso haces el mayor esfuerzo por encajar, realmente eso no es bondad ni amabilidad solo un intento vano de ser quien  los demás acuden, necesidad de atención es lo que veo en ti, recuerdas cuando tu  Ichigo  olvido su dinero, ofreciste pagar su almuerzo solo para que el chico se fijará en ti, querías su atención de manera enfermiza, así como la del profesor, el entrenador, te gusta sentir que eres el centro de atención, tus acciones son vanas, meras ilusiones-  el chico de ojos amarillos enfoco su mirada directa a mis ojos - Recuerdas el torneo de Kendo ahí si mostraste tu verdadero ser, estabas a punto de perder el golpe lo hiciste fue con la intención de romper la mano del otro competidor y lo peor convenciste a todos de que era un accidente, cuando tu lo provocaste- su sonrisa se fue haciendo cada vez mas demente - Sabes bien que tu padre murió por que no quería a un hijo tan patético, o te dijeron que había muerto para no herir tus sentimientos, como sea quien quiere a un perdedor como tú.

Sus palabras cada vez punzaban más, sacaba a flote mis miedos me ponía contra las cuerdas incluso cuando quería dar una respuesta a sus intenciones sacaba a la realidad otros temas y otras cosas - no quiero llamar la atención, solo quería ayudar, tampoco quería la atención del profesor o el entrenador, mi lugar en el equipo es por que me esfuerzo y eso fue un accidente el movió su mano cuando el golpe impactaba no pude detener el golpe de la espada- dije en respuesta.

-Por favor tu abuelo pago para que dijera eso así como pago ese lugar en el equipo, ¿Quién se negaría a atender al nieto de Yamada o quien le negaría al nieto de Yamada el lugar principal? aunque hubiera mejores que tú es preferible que vaya el nieto de Yamada, aún si perdemos el viejo nos dará cosas, eso es lo que dicen, tu mismo lo has oído- argumentó la sombra.

-No.., no.., no es cierto, eso es mentira- varias lagrimas se dibujaban en mi rostro, cierto ese comentario lo había oído en algunos torneos en especial desde el año anterior, algunos chicos de otras escuelas lo mencionaban, pero el entrenador Ryu lo negaba - todo lo que dices es mentira, nada de eso es real.

-Deja de llorar cobarde, al menos se un hombre y admite tu derrota, yo seré mejor ser que tu, pura maldad, que importa si se usa el dinero para esos medios o si se hace trampa, al menos no seré un mojigato llorón como tu, pequeño Eddy- su sonrisa parecía de triunfo.

-No, no pienso dejarte, no pienso permitirte eso - me enfrente a aquella sombra de venenosas palabras - te detendré, no planeo dejar que logres eso -  dije mientras cerraba mis puños.

-Ay que tierno el bebe llorón cree que puede ganarme,  quiero ver que lo intentes- menciono sonriendo y saltando sobre mí, lo que seguiría no se como podría describirlo, salvo por una sucesión de golpes uno al otro donde el que parecía recibir mas daño era yo, sus golpes me dolían y los míos parecía no hacerle mayor efecto, al final me mantenía de pie, mientras el intentaba seguir arremetiendo, podía sentir como el labio me sangraba pero no por ello pensaba permitirle, no le dejaría ganar y no le dejaría verme vencido, en la siguiente arremetidas de golpes fue mas dolorosa que la primera pero esta vez el también lucía cansado.

-Solo acepta tu derrota- me dijo, pero esta vez no sentí sus golpes el que se encontraba en el piso derrotado era el, a pesar de haber recibido todos sus golpes  aun me encontraba de pie.

- no voy a ser como tú dices, yo seguiré mi camino no el que tu quieres- dije en el atril esperando a ver que ocurriría.

Cargando editor
01/05/2019, 19:20
Naoki Kawa

Pero como osáis sublevaros... Yo solo quería protegeros, que nadie os hiciera daño nunca más... - se la veía ciertamente triste, pero enseguida cambió su estado de ánimo. - Pues si no queréis que os cuide... ¡SOLO OS ESPERA LA PERDICIÓN! - dio un martillazo y vuestras sombras se transformaron en unos pequeños monstruos hada que se dispusieron a atacaros.

Pero algo en vuestro interior se iluminó. Donde debía estar vuestro corazón, una luz blanca empezó a iluminarse, hasta que finalmente se hizo tan intensa que explotó como una bombilla, haciendo aparecer frente a vosotros unos monstruos. Por alguna razón sentíais que esos monstruos os eran muy familiares, a pesar de que nunca los habíais vistos en  vuestras vidas. La juez, al ver aparecer esos monstruos, abandonó corriendo la estancia por una puerta que había donde ella se encontraba.

Notas de juego

Empieza la batalla (Es rollo tutorial, por lo que no hay de que preocuparse de momento). El orden es el siguiente:

- Momoka (Navigator)

- Tetsuya

- Pixie A

- Pixie B

Cargando editor
01/05/2019, 19:58
Momoka Hiraki

- Lo siento, querida, pero no nací para ser seguidora de nadie - dije sonriendo y llevándome dos dedos a la frente para hacer un saludo burlón.

Entonces, ante la aparición de las pixies, comencé a sentir algo en mi interior y algo en mi pecho comenzó a brillar intensamente. Sorprendida, miré la luz para luego cerrar los ojos cuando explotó. Al abrirlos, ante mi había un monstruo mirándome.

Por alguna extraña razón, sentía que la conocía, algo en ella me resultaba increíblemente familiar. Aproximé mi mano a ella y lo mismo hizo el monstruo. Nuestras manos se juntaron y un nombre surgió en mi mente.

- Floare...

Me miró, la sonreí y ambas nos volvimos hacia las pixies con sonrisas confiadas.

- Hora de patear traseros - cerré los ojos y pronuncié una palabra como si lo hubiera hecho toda mi vida - scan.

Cargando editor
01/05/2019, 19:45
Saito Kitagawa

Lo primero que pensé al encontrarme en este extraño lugar fue que se trataba de un sueño, aunque precisamente el hecho de haber llegado a esa conclusión era lo que me indicaba que no lo era. De todas formas eso no me evito el alterarme al verme en aquel lugar y de inmediato me mire a mi mismo para ver que iba vestido como unas horas antes, con mis vaqueros negros y la chaqueta verde oscuro que tanto me gustaba. Entonces si que me fije en el proceso al que eran sometidos  los que como yo estábamos en esta fila... No pude evitar relacionar este momento con el mensaje que me había llegado tal vez fuera una pesadilla por miedo a lo que me fuera a pasar o tal vez no...

Finalmente me toco el turno a mi y a otra chica que iba conmigo, tragué saliva y caminé hasta el lugar que nos indicaban, en cuanto dio el martillazo al otro lado apareció mi otro yo, casi idénticos si no fuera por los ojos y por esa sonrisa que distaba mucho de la mía, la suya era totalmente macabra. Mientras hablaba la juez el y yo nos mirábamos fijamente el uno al otro.

¿Quien eres? -le dije a mi copia, la cual de inmediato se acerco mas a mi

Soy tu, pero mejor. Sin esas molestas preocupaciones por los demás. ¿Sabes que? Tu y yo podríamos lograr grandes cosas, tenemos mucho potencial -habla calmado y con un tono muy tentador- Lo único que tienes que hacer empezar a pensar mas en ti mismo.

- Pero no quiero eso...

- ¿Que es lo que no quieres? ¿Darle un cambio a tu vida? ¿Dejar de ser el débil y alzarte? Mira como te ha ido hasta ahora... patético... Te estas desperdiciando... Tu y tu estúpida timidez, incapaz de expresarte como realmente quieres, no has sido mas que un cobarde toda tu vida y ahora que yo estoy aquí y que te ofrezco ir a mejor respondes que eso no es lo que quieres -poco a poco cada vez se le notaba mas agresivo, mas cabreado y apretaba mas los puños- ¿Sabes que? Que te jodan... -me dio un puñetazo que casi me tira al suelo y yo me limite a tocar donde me había golpeado y mirarle con terror- Ni siquiera vas a responder a eso lo que yo digo un maldito cobarde... al menos esto ha sido rápido... -levanto el puño para darme otro golpe

¡No! ¡Cállate! No eres mas que una voz en mi cabeza, siempre has estado ahí quejándote cada vez que hacía algo por los demás que no me beneficiaba tratando de imponerte, tratando de que me comportara como un egoísta -mi copia bajo el puño y su expresión cambio a una de desconcierto- Pero ya me he cansado, si claro que soy un cobarde sobretodo cuando tiene que ver con los sentimientos ¿pero y que mas da? Así es como soy yo ¿Y sabes que? Me gusta como soy y no quiero cambiar... Puede que muchas veces no consiga nada a cambio de mis acciones pero no es lo que busco solo trato de ayudar y hacer las vidas de los demás un poco mas fáciles -la copia retrocedió un paso- Y si eso no te gusta ya puedes ir desapareciendo de mi cabeza, no te quiero mas ¡deja de molestarme ya! El patético no soy yo si no tu... -me erguí y empecé a sonreír

Se había girado totalmente las tornas y eso es algo que mi copia desde luego no se esperaba en absoluto.

- ¿Realmente estás contento? Esa sonrisa tuya no es mas que una mascara, sonríes a pesar de estar aterrado o triste, no tienes razón para ello pero lo sigues haciendo por los demás. Eso es lo que mas odio de ti... Incluso ahora sigues sonriendo. Soy parte de ti se lo que estás pensando tienes miedo pero tratas de mostrarte fuerte solo para que esa chica no este tan aterrorizado como tu, vuelves otra vez a olvidarte de ti mismo. No ves que eso no te llevara a ningún lado si me haces caso podrás llegar muy alto y muy lejos.

Negué a sus palabras.

Prefiero seguir como estoy sin saber a donde me dirijo pero siendo fiel a mi mismo que limitarme a aprovecharme de los demás por mi propio beneficio y en serio lárgate de una buena vez.

La copia ya se había quedado sin argumentos parecía que esperaba aprovecharse de mi miedo para tentarme de hacer cosas que no quería o al menos ahora no quería porque era perfectamente consciente de que miles de veces había estado conmigo me había susurrado cosas al oído cuando nadie mas miraba y había hecho cosas de las que me arrepentía pero eso se había acabado y estaba dispuesto dejar atrás esta sombra de mi mismo de una buena vez.

Cargando editor
01/05/2019, 22:29
Lilie Blutsauger

Lilie no comprendía en absoluto lo que estaba ocurriendo a su alrededor; o mejor dicho el porqué estaba ocurriendo, tenía suficientes problemas por su propia cuenta como para que ahora tampoco pudiera descansar por las noches; con cierto temor miró al juez por un instante y sintió miedo, terror de aquella justicia.

Pese a todo, lo que más impactó en la joven no fue aquel injusto juez, sino aquella otra mujer que se encontraba sentada sobre el atril, meneando ligeramente una copa de vino, sonriendo y mirando con aquellos oscuros ojos a la joven Lielie, su rostro, su cuerpo y su porte, idénticos a la de ella...

No hizo falta que dijera palabra alguna; tan solo quedándose así mirando fijamente a la Lilie original fue más que suficiente como para hacer crecer en el pequeño corazoncito de la joven un sentimiento de angustia, pesar y desesperación que, apenas podía contener, pero aún así se esforzaba para no mostrar debilidad alguna.

Entonces la joven bebió el contenido de la copa de vino...

 

Y Lilie no pudo soportarlo más, y unas lágrimas se resbalaron de sus mejillas.

Si fuera la protagonista de la historia, alguien seguramente vendría a rescatarme.

Pero no tengo a nadie que me rescate.

Cargando editor
01/05/2019, 22:36

Un día agotador. Cansada me fui a la cama, mientras leía un párrafo los ojos me pesaban, y sin darme cuenta me quedé dormida con el libro en la mano y las lentes aún puestas. Sin embargo, al abrir los ojos, no fue la luminosidad del sol lo que vi, ni tampoco mi habitación. Un extraño lugar que me deja perpleja, más aún un extraño hombre con una forma de hablar aún más extrañada, pero inmensamente soberbio, acentúa mi sorpresa inicial.

Abro la boca, sin saber muy bien que decir, pero manteniendo la calma a pesar del miedo. - ¿Juicio? ¿Defenderme? ¿De qué? No…no he hecho nada malo, y en todo caso, ¿no sería el trabajo de un abogado? – Pregunté sin tener la certeza de que recibir una respuesta mientras ajusto mis gafas con un dedo. Un gesto absurdo que delata mi nerviosismo, mi inquietud.

¿Un abogado? ¿Eso es todo? ¿No vas a hacer nada? Vas a esperar a qué otro lo solucione, ¿verdad? Como no. – Una voz ajena interrumpe mis pensamientos, habla con fastidio. Es femenina, y extrañamente familiar. Me giré para ver de dónde proviene. Y otra sorpresa, una chica como sospechaba. Pero era igual a mí. - ¿Quién eres? Te pareces tanto a mí….– Dije aún anonada y casi en un susurro.

Se ríe, sin saber por qué le veo reírse. - Oh, yo soy tú, bueno, debería serlo. Mírate, musitando, esperando, no haciendo nada, para variar. ¿Por qué no desapareces y me dejas a mí? Seguro que lo haré mejor que tú, o al menos no me voy a quedar plantada tan patética. Y seguro que los demás lo agradecen. – Habla y habla sin parar, con palabras cargadas con inquina hacía mí, sabiendo que teclas tocar. Yo no le había hecho nada, y sin embargo veo odio en su mirada. También superioridad, como si yo le molestase, simplemente por el mero hecho de existir.

Aprieto mis delicadas manos con fuerza en mi pecho. Mis labios ejercen presión uno sobre el otro. Y no obstante, no dejo de mirarla, mis ojos azules se fijan en los suyos sin desviarse. Si pretende que sienta odio hacia ella, no lo está consiguiendo en lo más mínimo. Todo lo contrario. Sonrío, con tristeza eso sí. No hay la más mínima señal de rechazo en mí, porque no lo hay.

Ciertamente tienes razón, en parte. Siempre me quedo quieta, sin hacer nada, esperando que suceda lo que tenga que suceder. Aceptando lo que viniese, con el temor de que si actuaba empeorase la situación y hacer daño a aquellos que me importan. – Empiezo hablar con serenidad, cada vez más decidida, cada vez con mayor convicción, muy consciente de mi pasividad hacia lo que me rodea.

Es triste lo que sientes, pero no voy a permitir que me reemplaces. Estoy dispuesta a enfrentarme lo que tenga que venir, incluso a mí misma y a mis dudas. Sé que aún me queda mucho por aprender, pero estoy dispuesta, hasta si tengo que arriesgarme a cometer equivocaciones. Es el primer paso, quiero que los demás sean felices, y yo también. – Añado con total seguridad, con una sonrisa a medio dibujar pintada en mi rostro.

Los segundos transcurren, uno detrás de otro, y mis palabras, mi decisión, parece que causa efecto, porque mi turbio reflejo se mantiene en silencio, sin saber qué decir. ¿Acaso es una victoria? Sin duda. Aún a pesar de mi situación, tengo la sensación de haberme dado cuenta de una parte de mí, dolorosa, pero existente al fin y al cabo.

Lo conseguí…” Cerca, un chico, de edad similar a la mía, tiene el mismo enfrentamiento, con buen resultado. - ¿Lo conseguimos? - Le pregunto, aún incrédula por lo que estaba pasando.

Cargando editor
01/05/2019, 23:59
Eldwin von Richthofen

¿Acaso a un león le debe importar la opinión de unos corderitos a punto de degollar? Venga no os pongáis tan chulos y sed devorados por vuestras sombras. - dijo dando un mazado en la mesa, dando así la sentencia que le salió de... la manga. Con ese golpe, las vuestras sombras se transformaron en unos monstruo-hada que estaba dispuesto a atacaros.

Pero algo en vuestro interior se iluminó. Donde debía estar vuestro corazón, una luz blanca empezó a iluminarse, hasta que finalmente se hizo tan intensa que explotó como una bombilla, haciendo aparecer frente a vosotros unos monstruos. Por alguna razón sentíais que esos monstruos os eran muy familiares, a pesar de que nunca los habíais vistos en  vuestras vidas. El juez, al ver aparecer esos monstruos, abandonó corriendo la estancia por una puerta que había donde él se encontraba.

Notas de juego

Empieza la batalla (Es rollo tutorial, por lo que no hay de que preocuparse de momento). El orden es el siguiente:

- Umi Ryuzaki

- Saito Kitagawa

- Pixie A

- Pixie B

Cargando editor
02/05/2019, 00:57

-Ni siquiera ella te va a contestar, eres demasiado molesto... por eso nadie te quiere ni te querrá, no eres el más popular ni lo serás, sólo eres un niño asustado que necesita a su hermano mayor para que lo proteja; pero no lo has encontrado todavía y nunca lo harás. No vales nada, deberías dejar que posea tu cuerpo, yo nos haré más fuertes, yo te haré popular con las chicas, yo viviré una mejor vida para nosotros, cumpliré nuestro sueño de ser un fotógrafo famoso, sólo tienes que rendirte a nuestro señor Arlek-sama y dejar que invada tu cuerpo, él te devolverá a tu estúpido hermano, hazlo.

La sombra de mí mismo estaba mirándome desde el otro lado del banco, sus palabras se clavaban como cuchillos en todos mis puntos débiles y me derrumbo sobre el estrado pensando que a lo mejor tenía razón y que debería darme por vencido, muchos lo habían hecho antes que yo y si lo hacía no volvería a tener que preocuparme por el trabajo con mi padre en las aduanas, todo está perdido... cierro los ojos dispuesto a dejarme llevar; sin embargo, no es el sonido de mi cuerpo siendo reemplazado lo que oigo, sino una voz dentro de mi corazón.

???:

así que... este es el final... de tu resolución, ¿joven?

Abro los ojos agitado, no, ¡no puedo darme por vencido ahora!

-Sería tan fácil rendirme, ¿verdad? sólo tengo que dejar que me sustituyas, ¿es eso lo que quieres?

¡PERO ME NIEGO!

La única cosa que yo, Kuro Oniwa, aprecia más que a nada en el mundo...es encontrar gente que cree que es la hostia y decirles "NO" en toda la cara.

Doy un fuerte golpe al estrado con las manos en señal de rebelión

-Cuando hables de mi hermano, lávate la boca primero o te la cerraré de un golpe. No te dejes intimidar, condesa, esa cosa de ahí no eres tú, sólo es un estúpido truco del juez, ¡reacciona!

Animo a la chica a decir algo, podemos superar esto si lo hacemos juntos aunque seamos completos desconocidos.

Cargando editor
02/05/2019, 01:07
Director

Momoka tras usar su Scan, puede ver que los enemigos no son muy poderosos, deben estar al mismo nivel que Tetsuya.

Ahora le tocaba al joven poner a prueba su poder.

Cargando editor
02/05/2019, 01:10

Todo había acabado y regresaría a casa con mi familia. Ilusa de mí. El supuesto juez realiza su sentencia desfavorable a nosotros, con su mazo que golpea de forma sonora para reforzar su veredicto. Mis ojos se abren y las sombras se convierten en criaturas sacadas de cuentos y leyendas. - ¿Son hadas? – Musito confusa. Desconcertada. Pero pronto es miedo lo que recorre mi cuerpo cuando las intenciones del par de criaturas son matarnos.

Entonces un brillo de mi pecho, primero tímidamente para después ser cegador. No me queda otra que cerrar los ojos mientras dura el resplandor. Al abrirlos nuevamente y un par de criaturas más. Me fijo detenidamente en la que me es más familiar. Otra criatura que no debería existir fuera de los cuentos. Tiene silueta de mujer, pero es azul, desnuda, y carece de piernas, en su lugar una cola de pez. El miedo retrocede para dejar paso a la calma, a pesar de que es la primera vez que la veo, me transmite seguridad, también familiaridad, es como si la conociese aunque no sé porqué lo pienso.

A mi sombra le dije que me enfrentaría a lo que fuese, y así es. Decidida, observo al par de hadas. El no hacer nada......ni siquiera quiero pensar en lo que pasaría. - Debo, debo luchar. Tengo que hacerlo. - Me digo a mí misma. Y entonces las manos de al supuesta sirena realizan un gesto para terminar apuntando a una de las criaturas hostiles, la que fue mi reflejo, y un haz azul le impacta congelando lo que toca.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Gasto: 4 Sp

Crítico: 1d100 - Suerte (1)

Bufu: Magia (4) + 1d20 + 15

Cargando editor
02/05/2019, 01:07
Lilie Blutsauger

Poco a poco la tristeza y desesperación fueron lentamente consumiendo a la joven, recuerdos del pasado flotaron por su mente, recuerdos que por mucho tiempo trataron de ser aplastados y enterrados, olvidados por un bien mayor, el de la propia Lilie. Pese a ello, ahora volvían a resurgir cuando veía a su "otro Yo" frente a ella. Y al igual que los recuerdos que por fin fueron liberados, las lágrimas de la joven también.

Aquella fatídica noche, la noche en la que se convirtió en la Marquesa Blutsauger; en la que pasó por encima de sus hermanas y hermanos; el día en el que la gran catástrofe ocurrió; el día en el que, de forma cómplice con el mayordomo, decidió esconderse en una maleta para poder ir a la feria que sus padres le habían prohibido ir, el día en el que ocurrió la masacre en la Mansión Blutsauger.

 

Pero una voz irrumpió en sus recuerdos volviendo a traerla en la realidad; traerla de vuelta a aquella corte de la corrupción, traerla de vuelta ante ella misma. Con toda la fuerza que pudo reunir, gritó finalmente las palabras que su febril cuerpo pudieron reunir. Secándose las lágrimas de su rostro, habló:

¡No me rendiré!

Cargando editor
02/05/2019, 01:32
Tetsuya Arashi

No cabía en si de la emoción que sentía ¿de verdad estaba siendo capaz de hacer algo sin pifiarla? Miró a la chica que se quedó atrás suya, por lo visto su "espíritu" no era capaz de luchar, al fijarse más en ella la reconoció. Nunca había hablado con ella pero conocía a toda la gente que era talentosa en su clase y a ella la había reconocido como tal. - Quédate detrás de mi Hiraki-san, yo me encargo de que no lleguen a tocar ni uno de tus pelos. - sintiendo la emoción en su pecho, gritó con todas sus fuerzas e hizo aparecer a su monstruito. - Vamos allá ¡SIGMAR!

Usando su lanza, aquél espíritu atacó a una de las dos Hadas.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Uso Lungue sobre Pixie A. -5HP