Partida Rol por web

Grunyar examina la puerta central, sin detectar magia. Aunque si parece estar bloqueada.
 

Una voz surge detrás de vosotros:

- Tal vez deberías dejar las cerraduras para un experto, amigo enano.

Os dais la vuelta y veis como aparece sonriendo una figura encapuchada, Kelnoz un hábil pathfinder con el que algunos de vosotros habeis coincidido en casa de May Chun.

- Regresé tras algunas pesquisas a Shokuro y cuando me dijeron que habias partido hacia esta mansion abandonada hace siglos de un general del Imperio Lung Wa. Intente alcanzaros, pero me llevabais ventaja. Hasta hace unos instantes, que escuche ruidos de lucha ... y acabo de ver el oso que habeis derrotado a la entrada del patio. Así que aquí estoy, para ayudaos a encontrar los papeles y mapas que esten por descubrir.

Pues quizás seas capaz de leer este pergamino que acabamos de encontrar en la atalaya. Creo que está escrito en Tian... ¿lo hablas o lo sabes leer?

Grunyar nunca ha sido demasiado bueno en los idiomas y siempre había admirado a las personas que hablaban muchos.

Creo que lo lleva Amiri con lo que ¿si quieres echarle un vistazo? 

Sonriendo Grunyar añade.

Y por supuesto, mejor que te encargues tú de la cerradura, ya ves que lo mío no es esto Dice Grunyar nada avergonzado de no saber forzar una cerradura

Tras otra andanada de flechas bien lanzadas, el peludo guardián cae, no era algo que me gustara pero había que hacerlo. No habíamos dado mas que unos pasos en el interior de la mansión cuando un nuevo compañero enviado por la sociedad se unió a nosotros.

- La cosa no ha estado tan mal todas nuestras pesquisas nos han dirigido ha este lugar, donde el oso hacía de guardián. Una vez muerto ya somos capaces de seguir investigando el sitio y siendo tú un experto saqueador ... bueno ya no tendremos ninguna dificultad.

Aparece un personaje misterioso que dice ser de la sociedad Pathfinder.
Si, yo tengo la carta, toma Busco la carta entre mis cosas y cuando la encuentro se la entrego al desconocido
Por cierto mi nombre es Amiri, ¿como te llamas?

Miro a Kelnoz de arriba a abajo con actitud pensativa, índice y pulgar en el mentón. 

Vaya andrajos...

Con un ademán me presento:

Ejem... Mi nombre es Uthurien, encantado. Si nos has visto acabar con el osos seguramente te habrás dado cuenta de la figura que ha aparecido cando éste ha caído al suelo. Deberíamos darnos prisa ya que no sabemos de que puede ser capaz.

Por tu comentario hacia Grunyar asumo que eres bueno con las cerraduras. Si sabes leer la carta... Inclino la mirada con desdén hacia el bosque levantado la ceja derecha ...termina pronto y pongámonos con las puertas.

Miro a mis nuevos compañeros, y les digo, Soy Kelnoz.

Veo que sois buenos combatientes, ya que pareceis bien parados después del encuentro con el enorme oso que acabo de ver ahí atrás.

Cojo y miro la carta que me dan, pero no entiendo nada, Lo siento, no soy muy bueno con los idiomas. Pero veamos que puedo hacer con esa cerradura, parece que he llegado justo a tiempo.

Saco de uno de mis bolsillos interiores unas ganzuas y me pongo manos a la obra con la cerradura,.....Parece buena esta cerradura, es de buena calidad y el que la hizo era buena,  se me está resistiendo...., intentaré darme más prisa

Hola, compañero. Escucha, si la cerradura se te complica tanto, quizás deberíamos usar métodos más... incandescentes... Dirijo una mirada cómplice hacia nuestro buen enano, que se ha ganado mi respeto tras ver como utilizaba fuego en la pelea. 

¿Qué opinas?

Esbozando una sonrisa Grunyar dice.

No tengas prisa Y'h dale tiempo a Kelnoz que no parece que sea una cerradura fácil de desmantelar. Mejor será dejar para más tarde el favor de Sarenrae.

Con la paciencia habitual de Grunyar se sienta esperando a que Kelnoz resuelva la obertura de la puerta.

Me voy a tomar un poco más de tiempo, que prefiero asegurarme y asi no hacer saltar ninguna trampa sino os parece mal

Acto seguido me concentro en el mecanismo de la cerradura y centro toda mi atención en la misma sin que exista otra cosa más

Después de varios minutos Kelnoz abre la puerta.

Veis una sala enorme sucia y descolocada con puertas a ambos lados. En el centro de la sala sobre un maniqui reposa una armadura de samurai que sujeta una katana en la mano.

Inspecciono la habitación desde la entrada, no quiero encontrarme otro oso...

No parece haber nada a simple vista ...
 

Avanzo tras del pícaro al interior de la habitación y apunto hacia la armadura, tenía todas las papeletas para ser otro guardián en este lugar.

- La trampa de la puerta era una chusta, pero la armadura .... al menos seguro sacamos pasta.

En la entrada miro por todas partes a ver si encuentro algo fuera de lugar y me acerco a la armadura para verla más de cerca

Un poco agotado tras el combate con el oso Grunyar toma entra a la habitación. Mirando la sala con una cierta curiosidad se acerca a la armadura con Katana. Siempre le han gustado las armas exóticas y mucho había oído de los samurais y sus legendarias katanas y ahora tenía una delante de él. La tentación de examinarla era grande pero sabía que las armaduras podían dar más sustos que alegrías con lo que de momento se limitó, con hacha en mano, a examinar la katana sin tocarla.

Después de lidiar con la puerta, entro en la habitación, y miro por los alrededores, luego, me acerco a la armadura y la miro con detenimiento a ver si hay alguna trampa o algo raro en ella.

Que habitación tan extraña, ¿cómo es posible que esa armadura siga en en el soporte después de tantos años? Y la forma en la que porta esa espada....

Me fijo más detenidamente en la armadura.

Parece cosa de... ¿magia? Grunyar, ¿has sentido algo?