Partida Rol por web

Rapidamente llego al Hangar, donde veo que todos ya están tomando sus posiciones para salir del planeta. A toda velocidad entro en la parte trasera de la lanzadera y me ajusto a un lugar, para no estrellarme en contra de las paredes del vehiculo.

Una vez dentro, veo a quienes me acompañan y los saludo con la mano mientras les hablo:

- "Hola. No han tenido el placer de viajar en esta aerolínea, así que les daré las indicaciones básicas. Afirmense y no griten. Si tenemos turbulencia, las cosas se complicarán, porque solo tenemos dos salidas, la que está en mi espalda y que dirige a una exquisita caída al espacio y la que no tiene puerta y lleva directamente al infierno. Disfruten del vuelo."

Sonrío mientras termino de hablar, aunque no lo notan debajo de mi casco. Reviso el sistema de soporte vital de mi armadura a través de la computadora portátil de mi muñeca derecha para asegurarme de que no me abandonará en el peor momento.

HANGAR:

- Olvidado en un lado del Hangar de la estación, queda el Hammer de Farsight.

NE-DXZA-09 Hammer Super Combat Robot.

Mejor despego antes de que Falcon se pirre por esa otra "armadura" y nos retrase aún más...

Clavijas arriba, luces que se encienden, el sonido de los propulsores haciendo el ruido de cien factorías de montaje... y alehop...

Ruso maniobra atravesando las compuertas y empieza a elevar la nave.

Caballeros... intenten sujetarse al armazón interno del compartimento de carga. El viaje puede ser muy movidito hasta que lleguemos a gravedad cero.

FOOOOOOOOOOOOOOSH...

Y los motores de la Slut Star la hacen ascender hasta convertirse en un puntito en el cielo para las cámaras de vigilancia del complejo científico.

- Utilizando los pequeños postquemadores de maniobra, Ruso saca lenta y cuidadosamente la lanzadera del Hangar, elevándola apenas a un metro de altura sobre el suelo.

- Una vez fuera del hangar y a prudencial distancia, da potencia a los propulsores y la "Slut Star" despega hacia el cielo.

-No se preocupen en exceso -dijo el invaliano cuando se sentó -. Entre sus muchas carencias, Ruso tiene una virtud. Es un excelente piloto. Algo loco, pero excelente. En breve saldremos de la atmósfera y el viaje será más tranquilo y seguro.

Tras aquellas palabras, el in´valiano guardó silencio, sumido en sus propios pensamientos. ¿Qué había estado haciendo Preacher? ¿Cuál era la situación ahí fuera? Equis miró hacia la cabina. A Ruso. A Leonard. A Pelirroja. Después, cerró los ojos y pareció ausentarse de todo y de todos. Pero solo fue un instante.

-Reynolds -dijo -. ¿Qué era lo que fue a buscar a su dormitorio?

Pelirroja le devolvió la mirada a Equis y se sumió en el silencio, pensativa. No le tenía miedo a la maniobra de despegue, tampoco al trayecto hasta la Hidden, pero no tenía ni idea de que era lo que sucedía allí arriba. Pero confiaba en Preacher, si hubiera algún riesgo en el trayecto los hubiera advertido. O eso quería creer.

HORA CATORCE.

- Tras una larga caída, la lanzadera se estrella finalmente en tierra firme.

- Todos los ocupantes pierden el conocimiento por la conmoción.

SOLDADO FALCON:

- Desciendes ágilmente a tierra firme.

- Pasas de Fighter a Guardian a una altitud de cien metros para facilitar el frenado y un aterrizaje vertical.

- Finalmente, el VF-2ss se posa en tierra sin sufrir daños.

- Todos los sistemas están completamente sobrecalentados, por lo que una vez aterrizas, la propulsión se desconecta. El VF no podrá volver a volar en varias horas.

- Los sensores siguen mostrando una amalgama sin el menor sentido. Es obvio que habrá que reinicializar por completo el sistema tras un apagado total.

- El navegador muestra que estás junto a la base Talbot. Después se desconecta y ya no muestra nada.

- La visibilidad del exterior es reducida. Parece que luce el sol y cerca (a menos de un kilómetro) hay una densa columna de humo.

RESTOS DE LA "SLUT STAR":

- Sebiot se reinicia. Sus sensores se aclaran algo y capta imagen, aunque en blanco y negro de momento. Su movilidad está reducida al 50%. El modulador de voz humana está destrozado e inservible.

- Ruso y Equis recuperan la conciencia. Parece que la pericia del piloto les ha salvado la vida.

- La "Slut Star" está destrozada. Las grietas son visibles por todas partes y está deformada, es extraño que no se haya partido en dos.

El hecho de que la lanzadera esté inmóvil y no esté entrando agua por las grietas indica que ha aterrizado en tierra firme y no en el mar.

SOLDADO FALCON:

- Abres la cabina del piloto para tener mejor visibilidad.

- Parece que no hay nadie más cerca de ti. Esto es la estación científica Talbot.

- Centras tu atención en la columna de humo: es la lanzadera, que se ha estrellado.

Xaar Ixval había sido testigo de su inminente muerte, de los intentos de Dimitri Ignasov por evitarla con aquella extraordinaria pericia reñida con su profundo retraso mental y del impacto contra la superficie que había determinado un tiempo de inconsciencia, acerca de cuya duración no tenía dato alguno.

Cuando sus ojos se abrieron, fue testigo del pésimo estado de la lanzadera, prácticamente un inservible trozo de chatarra. De igual forma, su primera pregunta mental se centró en su posible ubicación. Estaban vivos, pero bien podían haber aterrizado en las antípodas de la estación Talbot.

El exoesqueleto de Xaar parecía no haber sufrido daño alguno. Flexionó los metálicos dedos y movió diferentes partes antes de confirmar su operatividad y estanqueidad. Un breve y chisporroteante zumbido le confirmaron que el servo se había reiniciado de forma automática. Dimitri Ignasov, si bien no hablaba, respiraba si atendía al movimiento de su caja torácica.

-Piloto Ignasov, ¿está usted bien? -Xaar se puso en pie en medio de la maltrecha estructura-. Si es así, debemos salir de aquí, pero antes me gustaría que me confirmara si hay algún sistema de la Slut está operativo. Especialmente los sensores.

TENIENTE IXVAL:

- Examinas someramente el panel de mandos de la lanzadera y ves que todo se ha quemado en un tremendo cortocircuito. Te parece que esos sensores no valen ya ni para piezas de repuesto.

No había salido de una situación crítica caundo al momento estaban metidos en otra. la lanzadera chocó contra el planeta a una velocidad vertiginosa y de no ser por Dimitri, tanto Dimitri, como Xaar como él mismo, estarían ahora pulverizados.

Haciendo un esfuerzo denodado (incluso para ser un droide), Sebiot consiguió moverse de su incapacidad. Era todo un logro y pese a que solo se podía mover a un 50 % de sus capacidades, el servo estaba contento, pues hasta hace bien poco solo podía hablar en binario.

- Bliop, pi piop, blop piopip, blip, beeep (Me alegro que estés bien teniente Xaar)- dijo el servo, mientras se levantaba de su sitio y vagaba por la lanzadera para ver la nave y sus posibles reparaciones.- Blopip, pip, booopip, piop bip bip pip, bopip, piiipop (A ver si se despierta Dimitri y vemos si podemos hacer algo por la nave... aunque cero que no)- comentó viendo el detrozo de la misma.

Dejo el VF de forma que se enfríe y así pueda volver a usarlo lo antes posible y, sin perder más tiempo, me bajo de él con mi rifle y mis cosas, y corro hacía la zona donde la lanzadera se estrelló, para ver si hay sobrevivientes y si puedo ayudar en algo.

- El Teniente Ixval se siente capaz de entender el lenguaje servo-mec de Sebiot en aproximadamente un 60%.

- Dimitri Ignasov le entiende al 98%.

- El Soldado Falcon entiende menos del 10%.

SOLDADO FALCON:

- Dejas atrás el VF y corres hacia la lanzadera.

- Al cabo de un rato llegas a ella y ves que está destrozada, aunque dirías que ha aterrizado relativamente bien, por lo que podría haber supervivientes.

- Lo que es seguro es que nunca volverá a volar, y de hecho parece que está irrecuperable y que no hay nada en ella que sea aprovechable.

Al ver la destrozada lanzadera, pero aun en condiciones de llevar gente en su interior, me acerco e intento abrirla (O agrandar algún agujero preformado) para así asistir a los posibles sobrevivientes.

Es inminente que llegarán los Zentraedi desde el espacio, por lo que no podemos relajarnos ahora. No sé donde mierda estará Leonard, por lo que tendré que actuar por iniciativa propia, la que generalmente solo me indica cuando disparar.

- El Soldado Falcon arranca la destrozada compuerta lateral de la lanzadera, la que da a la cabina de pilotaje.

- El brillante sol penetra en el interior de la lanzadera estrellada, iluminando las formas del Teniente Ixval, el Piloto Ignasov y el Servo Sebiot. Todos parecen estar bien, excepto tal vez Sebiot que tiene algunos componentes externos muy chamuscados.

Al ver a mis compañeros ahí y sin moverse deprisa, les hablo a través del sonido, no por radio:

 - "¿Que hacen ahí quietos? ¿Tomando una siesta? Muevan sus culos de una vez que pueden atacarnos en cualquier momento. Salgan de ahí y recojan sus armas. Equis, ahí está el rifle de Doombringer, para que lo tengas tú. Vamos, vamos."

Me alejo de la lanzadera y cubro con mi rifle el cielo, mirando si aparece algún enemigo descendiendo cerca de nosotros.