Partida Rol por web

Asiento con la cabeza y de una carrera me coloco tras Morti para acompañarlo.

Morti, Shura y tú os dirigís al camino del norte, por dónde habíais llegado del pueblo y donde os habíais enfrentado contra los entrenadores.

Allí Shura os miró.

El Torneo de Fuego será esta tarde, he hablado con el entrenador del gimnasio y me ha dejado un pokémon de fuego para enfrentarme a Billy, creo que tiene alguno más y que los presta aunque me ha dicho que me pedirá algo a cambio por el favor. Solo que me lo dirá cuando acabe el torneo.

He decidido que antes quería entrenar un poco, ese Billy parece muy duro verdad. ¿Qué pokémon de fuego tenéis vosotros? ¿Habéis entrado ya en Torre Quemada?

-Yo solo tengo dos pokémon, y ninguno de fuego, pero la verdad es que no me motiva el entrar en la torre si no es con uno de mis propios pokémon, no obtendría ninguna experiencia útil con mis pokémon.

- Ya, pero Billy no deja entrar a nadie que no se enfrente a él con un pokémon de tipo fuego. Si no lo tienes, pueden prestártelo, luchas contra Billy, ganas la PirosBall y entonces devuelves el pokémon al entrenador que te lo dejó. Después vuelves a la Torre y capturas tu propio pokémon.

Billy piensa que un buen entrenador de tipo fuego sabe superar cualquier prueba y que hace todo lo posible por cumplir sus objetivos.

-Puede ser, pero es que yo no tengo especial predilección por los pokémon de tipo fuego... Aunque bueno, supongo que después me pasaré por el gimnasio a  ver si me prestan uno.

Pues yo estoy con Vipe, la idea de conseguir competir es que lo consigas con tus pokemons por el trabajo día a día con ellos, no tiene ningún mérito utilizar el pokemon de otro. - digo rotundo

Yo por lo menos intentaré vencer a Billy con Charmander y participar pero en el caso de que no sea posible pues no participaré y se intentará otra vez.

- Pero para seguir adelante necesitamos la medalla del primer gimnasio o no nos dejarán continuar, y el líder del primer gimnasio me ha dicho que no se enfrentará a nadie hoy hasta que no termine el Torneo de Fuego que se realizará esta misma tarde. Podéis participar o no, pero lo que está claro es que habrá que esperar hasta entonces... Si no queréis participar al menos siempre podréis asistir de espectador, promete estar muy interesante. Aunque a mi no me gusten los pokémon de fuego eso no quita que me interese capturar uno para probarlo en el torneo. Hay que conocer bien a todos los pokémon.

-En eso estoy de acuerdo contigo... Por cierto, ¿cómo decías que te llamabas? - Pregunto a la chica, no recuerdo si me ha dicho su nombre, maldita memoria la mía.

¡Oh Vipe! Te lo ha dicho hace un momento Morti, menuda memoria tienes. Soy Shura, Shura Parkins.

-Perdona, estoy algo nervioso con esto de ser entrenador novel.

Shura, tranquilízate. Acabáis de conoceros, no todos recuerdan los nombres fácilmente.

Pues yo si no os importa chicos, me voy a entrenar a Charmander, antes de que comience el torneo para poder enfrentarme a Billy.

Hasta luego.

Creía que íbamos a entrenar juntos.

Viendo que Morti se marcha por ahí, yo también me interno un poco más en el bosque en búsqueda de pokémon salvajes.

Parece que no hay suerte. No te encuentras con muchos pokémon salvajes ahora mismo...

Tras un rato de búsqueda infructuosa, termino algo frustrado y regreso a la ciudad para ir al gimnasio a pedir ese pokémon ígneo.

¡Hola Vipe! Ya me dijo mamá que estabas aquí. ¿Cuánto tiempo pensabas esperar para venir a verme?

Me quedo sorprendido al ver a mi hermano y unos segundos en silencio.

-Vaya, hola, no esperaba verte por aquí, ¿qué tal?

- Jejeje, lo sé. Le dije a mamá que no te dijera nada. Pues muy bien. Soy el líder del gimnasio de ciudad Ígnea. Pero hasta que no pase el Torneo de Fuego no luchare contra nadie. ¿Te has inscrito ya, Vipe?

Abro un montón los ojos.

-¡¿Cómo?! ¡¿Líder de gimnasio?!

- Bueno, ya sabes que desde pequeñito me encantaban los pokémon de tipo fuego y mira al final, entre unas cosas y otras me hice líder del gimnasio. Así que si quieres ganar la primera medalla tendrás que enfrentarte a mi. Jejeje. Pero todo a su tiempo.