Partida Rol por web

Gracias al olfato de la leona si...

Una vez analizada la situación, y viendo que la posible situación de peligro ha pasado, enfundo mi arma.

Camaradas Leones, calmémonos y consideremos la situación. No creo acertado perseguir a los dos huidos pues no sabemos ni de quienes se tratan, ni sabemos con certeza hacia donde han huido, ni siquiera sabemos si pueden llevarnos directo a una emboscada. Propongo que alguien vaya a ayudar a nuestro compañero que ya ha ido corriendo hacia donde ha caído uno de ellos y lo traigan aquí para que podamos examinarlo y ver sí podemos determinar su procedencia e intenciones.

Me giro hacia la shugenja.

Por otra parte, shugenja, creo que nos debes una buena explicación para tal puesta en escena.

Me gustaría saber si ella es Akodo Dairuko. ¿Necesito hacer tirada de historia de León o Akodo Dairuko es suficientemente famosa como para reconocerla? Sí no es ella añado:

¿Quién sois vos? ¿Donde está Akodo Dairuko? ¿Qué sabes del motivo de nuestra citación? ¿Quienes son estos espías?

En esos instantes en los que espero una respuesta por parte del desconocido; apenas unos segundos, mi mente ya está analizando todo lo ocurrido y principalmente, a lo que para sorpresa de quien era nuestro anfitrión parece ser una mujer. - Desde luego, el hecho de que pudiese ser Akodo Dairuko ha quedado totalmente descartando... pero... ¿quién es ella? ¿y por qué tiene...? Frunzo mi ceño mientras aunque a oscuras, el percibir todos los rasgos de la shugenja es claro para mí como el día.

Totalmente a cosa hecha busco encontrar mi mirada con la de la mujer; no a modo de enfrentamiento si no queriendo que sepa que estoy totalmente centrado en ella, con cierta desconfianza aun palpable. Pero es el grito de uno de los samuráis que nos acompañaba el que reclama mi atención haciendo que ladee la cabeza hacia él para percibir la escena de la cual nos alerta. - ¿Espías? ¿Asesinos? ¿Ninjas...? No podría decir a ciencia cierta debido a la oscuridad, nisiquiera podría decir si son aliados o no. Solo está claro que el rugido de ese bushi león los ha hecho reaccionar huyendo.

Nuestra anfitriona entonces se levanta y alza su mano hacia el cielo, sorprendiéndome cuando un rayo que surge de su palma vuela impactando a una de las sombras que cae, declarando que la caza del león ha comenzado.

Varios de los samuráis corren en dirección a las figuras que huyen; unos buscando capturar al que ha caído y otros intentando trazar el camino de huída que toman el resto, persiguiéndolos. Kiyoshi, aún a mi lado y muy de su estilo, da ciertas órdenes totalmente acertadas para mi gusto mientras, viendo que está todo bajo control, vuelvo mi mirada a la shugenja que ahora se encuentra de pié frente a nosotros. - Algo no me gusta de esta situación... y no me quedaré tranquilo hasta que identifiquemos al espía rezagado y saber quienes son mis aliados aquí...

- Tened cuidado no intente nada nuestro invitado caído del cielo. No corrais riesgos innecesarios y desarmadlo bien. Sobretodo, no dejéis que él mismo acabe con su propia vida hasta que podamos interrogarlo. Añado a las palabras de Kiyoshi, cruzando los brazos y sin moverme de mi posición mientras escucho como nuevamente se dirije a la Shugenja. - Kiyoshi, no saques conclusiones tan pronto. Aún no sabemos quien es el espía aquí... por otra parte, no se si nuestra anfitriona está capacitada para responder tus preguntas... Digo señalando mis propios labios, indicándole al samurái que observe los de la mujer. - ¿Puedes hablarnos con palabras? Bastará con que asientas o niegues con la cabeza. Depende la respuesta, quizás debamos ir a buscar papel y tinta. Digo con un tono relajado, intentando transmitir tranquilidad en tan tensa situación y ofreciendo mi ayuda en tan peculiar situación mientras vuelvo a mirar fijamente a los ojos de la mujer. - Creo que todo esto tiene un significado mucho más profundo de lo que pensamos y, visto que el lugar "parece" peligroso, ¿deberíamos ir a otro sitio, shugenja?

Tras ver una luz pasar hacia las tres sombras que intentaban escapar e impactar en una que se desploma, Kengu se gira de inmediato y se queda mirando a la shugenja que ya esta siendo "cuestionada" por dos de los guerreros de nuestro grupo.

Tras todo el alboroto y comprobar que la situación esta bajo cierto control me giro hacia uno de los samurais y aserto con la cabeza a su petición de que alguien fuese en busca del samurai que salió corriendo dirección al desconocido caído.

- Lo traeré de vuelta para cuestionar lo que pretendía, y también traeré a aquel que rondaba los tejados. Sonrío tras la broma y salgo siguiendo la dirección del León perdido.

Observó las rápidas reacciones del resto de sus compañeros y se planteó unirse a la persecución. No obstante, viendo que apenas serviría de algo, decidió quedarse también junto a la shungenja, junto con los otros dos bushi. No esperaba que fuera hostil hacia ellos, pero ya se había equivocado dos veces hacia un instante y no pensaba equivocarse una tercera, de forma que se puso en tensión dispuesto a desenvainar y atacarle en caso de que intentara algo que les perjudicara.

Tomo al hombre que habia caido, lo alzo controlando sus manos apra evitar que pudeira hacer cuqlueir cosa, y mi escapa en csu cuello apra que supeira que cualquier tonteria le costaria la vida ... con paso firme lo llevo ante el resto de samurais que me acompañaban.

Al llegar al sitio, observar que aquella figura que había escapado, ahora no es mas que un cadaver... Tras el ataque sufrido, callo del tejado con la mala suerte de que vino a caer de cabeza y deduces ha de haberse quebrado el cuello y en el acto perder la vida. 

Ademas ves una quemadura importante en sus ropajes y su piel supones del ataque de la shugenja...

Notas por último como uno de tus compañeros, llegar un par de momentos después...

Partes en busqueda del compañero León y al llegar a donde esta, lo ves observando el cuerpo sin vida de aquella persona vestida de negro que había sido alcanzada por la magia de la shugenja.

De inmediato la shugenja hace una reverencia y seguidamente un gesto con la mano apuntando hacia su izquierda, como si estuviera abriéndoles el paso o indicandoles a donde ir.

Luego por un instante escuchan en su mente...

No hace falta papel y lápiz, gracias a los kamis puedo comunicarme mentalmente a cierta distancia. Mi nombre es Kitsu Kichi y soy una Sodan-Senzo al servicio de la guardia personal de Akodo Dairuko-dono, quien me ha enviado para ser vuestra guía hasta el punto de reunión, sospechábamos de posibles problemas como el sucedido, afortunadamente hemos contado con la fortuna de que pudieras percibir el peligro.

Por favor seguid el camino hasta la el árbol de cerezo y entrar en la capilla...

La dirección en la que esta indicando en efecto sigue un camino un tanto obscuro, y al final de este unos 100 o 120 metros mas adelante en efecto se ve un árbol, aunque dada la oscuridad no podrían identificar que tipo de árbol es, lo que si es seguro es que no ven (desde aquí) ninguna edificación.

Notas bajo la tela quemada, y alrededor de la quemada en la piel, un tatuaje que se expande por la espalda, no logras verlo en su totalidad pero notas que tiene un fondo negro y como una noche estrellada...

veo algo dentro de la quemaduro y lo abro para ver mejor el tatuaje ... de sefuro seria una pista de quien lo habia enviado con cuidado de no tacrle demasiado por si habia veneno o algo ....

Sabiendo que los otros guerreros tienen la situación con los invitados inesperados bajo control, el samurái centra su total atención en la nueva anfitriona y los gestos indicativos que hace después de lo que pareció ser un interrogatorio por parte de los Leones.

Apunto de volver a pronunciarse, ladea la cabeza hacia el lado izquierdo; tal y como lo hace ahora el dedo de la shugenja, dando un rápido vistazo al lugar más que oscuro y volviendo su mirada a la mujer cuando escucha una voz en su cabeza.

- Hmm... Masculla Shigure al escuchar la voz de la extraña en su cabeza, presentándose e indicando los motivos de sus acciones. - Había escuchado de la habilidad de ciertos shugenjas para hablar directamente a la mente de las personas, pero el experimentarlo es totalmente diferente... me pregunto si esto tendrá que ver con sus labios sellados. Piensa Shigure, llevándose una mano hasta la boca en un gesto que pretende expresar algún tipo de idea.

- Me alegra escuchar que Akodo Dairuko-dono lo tenía planeado, no en vano mantiene con orgullo el rango que ostenta. Muestra una medio sonrisa mientras sus labios quedan aún un poco tapados por su mano. - Sin embargo, tengo una sugerencia antes de que marchemos... Mantiene una pausa de un par de segundos, dando la oportunidad a la shungenja a comunicarse con él nuevamente. - Como podéis observar, varios de nuestros Leones han salido en busca de los supuestos espías y no dudo que, a estas alturas, ya los habrán atrapado. Ladea la cabeza hacia un lado intentando ver un poco el panorama tras de él. - No sería prudente ir hasta el lugar de la reunión sin haber resuelto este problema, así que sugiero, si creeis que nuestro andar puede demorarse un poco, que primero resolvamos la situación que tenemos bajo mano. Dice con un tono seguro, retirando la mano que tapaba sus labios para gesticular su pequeño discurso. - Cuanto menos, y si no podemos atrapar a ninguno vivo para interrogarlo, que mejor qué asegurarnos que no hay más y que se sigue manteniendo el secreto de nuestro punto de encuentro entre nosotros. Llamadme precavido si queréis, pero no estaré tranquilo de ninguna otra manera... Sentencia el samurái.

A pesar de mostrarse rehacio a marchar sin haberse reunido todos los guerreros, no ha dejado de prestar toda la atención que ha podido a la situación y sobretodo al maquino designado, más allá de la oscuridad y de lo que su único ojo funcional puede percibir...

- ¿Cuán importante debe ser todo esto para mantener tanto misterio?

Me acerco de nuevo donde esta el resto arrastrando el cadaver del enemigo que pude dar alcance ... momento despues la arrojo entre medio de nosotros y la shugenjas.

- Creo que seria buen momento para que nos explique que ocurre aqui y para que hemos venido ... parece que es urgente, pero esto me parece mas un entretenimiento que otra cosa .... -