Partida Rol por web

 Una Aldea con grupos de casas separadas de madera la mayoria bien pero algunas derruidas y derrumbadas por quien sabe si un huracan o humedad. Un aire fresco viene junto con los oleajes; hacia el este del río salado. Una playa de piedras, pasto y arena se mezclan con algunos postes y muelles destartalados. Tambien algunas redes y barcas estan apretujadas o baradas sobre la costa.

 Lo primero que ven al llegar, es una tienda doble con una parte media compartida comunicandose con un deposito pequeño y pequeño pasillo entre las dos tiendas., una mirando hacia un lado y otra hacia el otro. De una de ellas esta aun esta cerrada con unas lonas. De uno de los lados hay una ahumareda y sonido de fuego encendido, cual se mezcla con la brisa. 

 Una mujer de cuerpo menudo con vistas hacia un lado y hacia el otro mete las cucharas, revuelve. Algunos aldeanos lugareños, unos seran pescadores, otros cualquier labor semejante, con gestos de desgano con una pisca de esperanza.  Tal esperanza parece sentirse mejor cuando sonrien cuando la agil cocinera dice comentarios y habla rapido mientras cocina.

 Todos ellos ven sorprendidos a los recien llegados. Incluso parece que rieran y hablan con cierta emoción parecida a la felicidad.

Intento parecer lo más amable posible pero sin dejar atrás mi rostro de impasibilidad. Llego con mi grupo dentro de la carreta y el señor Helmer conduciendo a esta.

Espero a que nuestro conductor nos presente a alguien o nos lleve a algún sitio donde podamos descansar de tan fatigoso viaje.

Observo al horizonte de casa haber si veo algo especial en ellas o cualquier cosa sospechosa.

Oye Helmer, ver como preparan la comida allí me ha abierto el apetito, sabes si podemos hablar del problema mientras comemos algo?

 -"Bueeeno mis queridos transeuntes llegamos, jejeje...! Si podran comer algunas cositas de pesca diaria que prepara Sharlene, aunque ella es un poco loca! Es mas, joven azul, creo que tienen un parecido, jeje! Se habla, se come y se toma lo que haya...! Y si buscan un buen hombre de Fharlangh que quieran algo para sus viajes, aqui estoy!" Dice el palabrerío del buen hombre que baja del carro y se dirige a la tienda contraria, la cual empieza abrir bastante emocionado.

 "Hagan lo que quieran hacer. Si quieren hablar con el señor Melzhor pueden hacerlo yendo donde esta la iglesia multifuncional, en medio de esas casas. Bien, abri mi negocio; si necesitan material de pesca o viaje, ya sabrán! Por Fharlangh son todos bienvenidos!" Helmer les señala mas o menos hacia el norte donde ven unas casas amontonadas a unos pocos metros de la tienda doble. Al rato ven tambien como el dichoso hombre que los trajo abre una tienda llena de sogas, redes, odres y quien sabe mas.  

 "Deja de murmurar cosas SEÑOR HELMER!" dice una voz agradable pero que segun quien podría ser irritante. Es indudable mediana de rulos algo fastidiada de que Helmer diga disparates sobre ella, mientras revuelve de manera algo brusca pero que pareciera común en la cocina. 

 "Ustedes son los que ayudaran a Raus Sool?" dice apenas viendo un poco por el costado, notando que vino gente nueva a la Aldea.

Claro que sí!-salto de la carreta- y con aún más interés si una bella señorita como tú está involucrada ^^ -mientras hago una pequeña reverencia.

"'Usted' querra decir...!" dice con un gesto de ofendida y luego mira mas atentamente "Y por que unos de los familiares lejanos vendria a esta Aldea y por que la piel azul!? En que fechorías estaras... jum!"  le reprocha mirandolo como si fuera un jovencito en plena rebeldia al mediano azulado. 

"bueno, si lo que quiere joven azul es comer algo, sientese y sirvo algo.

 Hoy hay calamares en salsa da calamar o pan duro caliente con anchoas y cebollas.... Para beber: Agua con limón, Vino Aguado o Sidra. Es lo que hay...!" dice en un tono mas amistoso tomando que lo dicho antes podria ser una broma o alguna idea dicho.

 Es asi como pone un plato de madera algo hondo y un cuenco para la bebida

 Algunos lugareños en grupo de 2-3 personas, con toda la apariencia de pescadores o algo semejante estan en amontonados alrededor de la barra directa donde atiende la mediana Sharlene. Muchos hablan y murmullan la llegada de nuevos visitantes.

 Muchos se rien al escuchar a Sharlene aquellos comentarios hacia el nuevo recien llegado. Y es posible que una risotada mas notoria sea nada menos que Helmer. 

Que maneras las mías, soy Toctoroc y sí, aceptaré tu ofrecimiento -me siento- calamares con salsa de calamar y sidra. Chicos, vosotros no teneis hambre?

Cuando llegamos al pueblo salté de la carreta y cogí mi arco y la mochila, tras oír lo que decía Helmer decidí que le iría a hacer una visita a ese tal Melzor, tan pronto como hubiera llenado el estomago con unos calamares en salsa, así que me coloque en la cola tras el chico cianotico.

tras obtener mi comida, le comento mis intenciones de pasada a "Rawdo".

 La tienda de comida donde atiende Sharlene no es mas que una barra general puesta y un techito mas o menos cubriendo a los comenzales y a la cocinera.

Toctoroc esta sentado en unos de esos asientos altos al estilo taberna, pero bien otros podrian comer y beber parados apoyados contra la barra.  Mientras tanto la elfa se coloca detras del mismo.

El hombre musculoso para los viajes conocidos como 'Rawdo' estaría atraido por una casa hacia el oeste que mira con atención.

"Sientese ahi y espere..." le dice Sharlene a Toctoroc.  La mujer revuelve y revuelve con un cucharon de madera. Agarre el plato frente "PLASH!" sirviendo una especie de guiso de calamares. Al instante con su no demasiada fuerza agarra un botellon y le sirve la sidra al mediano azul.

 "Sientesen donde quieran, salvadores de Raus Sool....!" la mediana dice con una ligera emoción.

"¿Comida de mar? No gracias. Me conformaré con unas piezas de pan. Tampoco hay cerveza, genial. Creo que también tomaré un poco de sidra"

Gringam, aunque estaba acostumbrado a alimentarse de todo tipo de fauna y flora que pudiera conseguir, era algo reacio a probar esos desagradables animales de mar. Y viendo que no hay otra cosa más "decente" para él, se sienta al lado del mediano y se dedica a dar pequeños pellizcos a las hogazas de pan que hay en la barra.

"¿Quieres relajarte un poco Rawdo? El viaje ha terminado, por ahora ¿porqué tan tenso? Mejor descansemos un poco y, si quieres, después vamos a buscar algo un poco más fuerte para beber" 

 La mediana ve la actitud algo reacia del enano a lo cual dice: "Cuando hayan mejores tiempos, menos cosas raras y más recurso tendremos tooodo lo que pida el señor enano!"  Con aires a estar algo ofendida por las vulgaridades, le pone un vaso lleno hasta arriba de sidra.

 "espero que los disfrute...!" 

 Tras lo ocurrido, todos los lugareños que serian alrededor de 5 personas en ese momento se rieron a carcajada limpia por el espectaculo de dichas y desdichas.

 Uno de ellos comenta "si supieran las calamidades que pasamos...." y las risas bajan mirandose.

Al llegar a la aldea se nos presenta Sharlene, ella nos ofrece un poco de comida marítima. Acepto toda la que puedo y me lleno la boca con ella, sabe bien pese a su apsecto.

Sigo fijado en la lejanía azarosa. Comparto la opinion con Merewen y se lo comunico. Al ver que Gringam me incita a que me tranquilize y que pruebe un poco de bebida lo hago, pero no por más de dos segundos, después de los cuales sigo pensando en Melzor y en las terribles calamidades que le pueden haber pasado a esta aldea para que tenga este aspecto.

Para matar el rato hablo un poco con los compañeros, sin decir nada más que lo aburrido que fué el viaje, del chofer, de la aldea y de la comida.

Seguidamente le pregunto a Sharlene sobre la aldea y los problemas de esta. - ¿Qué ha pasado aquí y como lo llevais? -

"Ahhggg. Malditos paganos"

Piensa Gringam, al escuchar los dichos y risotadas de los cientes que, por cierto, no le agradó para nada.

"¿Muchas calamidades dicen? Pues se ve que les resulta muy gracioso que su pueblucho sufra hasta su inminente destrucción. Si tienen esos ánimos tan joviales, entonces sálvenlo ustedes mismos"

La ronca y gruesa voz del enano opaca a las de los pueblerinos. Dedica una mirada al chistoso que soltó aquel comentario.

"Mira muchacho, me parece bien que tengas sentido del humor, aún cuando todo tu pueblo se esté cayendo a pedazos. Pero ninguna calamidad es graciosa. Cuando tengas un poco más de mundo quizás lo entiendas"

No tenía intención alguna de armar una trifulca, pero al recordar su nefasto pasado, no puede hacer más que exteriorizarlo. Además, no podía entender como esta gente estaba tan alegre, teniendo en cuenta la desgracia por la que está atravesando su pueblo. O tal vez sería que se encontraban ebrios. O realmente tantas calamidades sufridas les habían arrebatado todo...todo excepto su alegría.  

 Los aldeanos presentes se miraron entre ellos y pusieron una leve sonrisa mas alla de lo amenazante que sea ve el enano.

Sin duda, quien pueda notarlo en sus miradas de risas tristes y penas alegres se entre mezclan con esperanza y desesperanza. Entre murmullos algunos se van yendo, quizas porque se aburrieron, porque se les termino la comida o quien sabra?

 Sharlene viendo que esta menos ajetreada se pone algo comoda cerca del musculoso humano y le contesta "Pffff. Bueno, yo solo me dedico a esto de cocinar y algunos viajes esporadicos. Helmer lleva y trae bienes de todo tipo, tambien pesca como asi muchos de los aldeanos intentan mantenerlo a pie. Lo unico que me acuerdo es que hubieron días donde todo era mas prospero hasta que..."  y se para mirando al horizonte

"Supongo que Melzhor y su ayudante tengan cosas mas importantes que decir. Les recomendaria que lo busquen en la Iglesia Comunal, siempre anda mas por esos lados que por estos.  Tampoco se acerquen mucho al local que ud miraba, ese del oeste El Pirata Borracho. Otros dicen que ven cosas que vienen mas alla de las playas, hacia el este... Ahora mismo no se me ocurre nada mas que contar. Ah si! Ulfgar cada tanto se emborracha y grita vulgaridades por la noche! Si quieren dormir, Helmer les puede dar sacos de dormir o quizas Melzhor y sus dos criados le den cobijo en algunas de esas casas sin nadie" Sharlene habló largo y tendido, información mezclada con chismes y rumores