Partida Rol por web

La horas iban avanzando y las modelos parecían que aún no estaban en el ayuntamiento. Un problema con el autobús, hizo que estas llegarán tarde.

En cuando bajaron del autobús, el encargado de recibir a las modelos en la entrada, se las llevo inmediatamente a la sala donde Iridessa y su becario les estaban esperando.

Fueron entrando de una en una, a la vez que saludaban al joven Mark. Cuya cara de este era de totalmente alegría.

La gente iba llegando y se iba acomodando en sus asientos, que estaban perfectamente nombrados y enumerados. La música de fondo hacia que todos siguieran esperando hasta que realmente el desfile tuviera el procedimiento de empezar.

Estaba en el baquesteich  me asome haber si llegaban las modelos, y vi. Como las atendía Mark y la dirigía al baquesteich.

Conforme iban llegando las modelos la iba colocando en los asientos, mientras que las maquillaban y las peinaban las de peluquería. A las que estaban arregladas yo las iba vistiendo y les colocaba el vestido bien, y las revisaba para haber si tenia un ves punte por arreglar.

Una vez que estuvieran bien arregladas con los conjunto la íbamos mandando al desfile, que hay estaba el encargado de Amani de presentarlas.

Les decía a las chicas ¡Vamos, vamos todas en posición e ir saliendo por orden de las estaciones del año!.
 

Las modelos iban llegando al Baquesteich. Con la ayuda de Mark las iba vistiendo, mientras que Iridessa se ocupaba de rematar los últimos retoques de los vestidos de cada una de ellas.

Conforme iban pasando una a una, estas se iban rápidamente a la fila de la pasarela para salir a desfilar ante los flases de la prensa y las miradas de todos los curiosos.

La cuenta atrás empezaba, y los nervios de Iridessa a piel de flor...agarró la mano a Mark. Que este se puso colorado, pero para que no se le notara, le dio un apretón en la mano a ella de complicidad.

Entonces las modelos fueron llamadas por el presentador del desfile.

El desfile, iba teniendo color, y éxito ante las miradas de los allí presentes. Ningún fallo, ni ningún roto en zapatos y vestidos.

Todo salió a pedir de boca. Y la alegría de Iridessa cuando fue llamada a escena lo decía todo.

Cuando Iridessa fue llamada y reclamada por las personas de a fuera, le solté la mano y le dí dos besos en las mejillas. Aplaudí con entusiasmo desde la parte de atrás.

Todo había salido tal  y como ella había soñado. Cuando acabó, me acerqué tímidamente hacia ella y le dije.

Mis felicitaciones Iridessa. Al final todo ha salido perfecto, eso de muestra lo gran profesional que es usted señorita.

Me gustaría invitarla a comer, ya que es hora de comer. Me permite que lo haga. Le dijo con carita de niño bueno.

Una vez que salieron la modelos oigo como me nombran y le suelto la mano a mi becario. Esta nerviosa al salir y ver toda la prensa solo quería que hablasen bien de la pasarela.

Cuando termina todo me felicita toda la gente..., estaba muy contenta con el día que había sido. Veo como se acerca mi becario y me da la enhorabuena. Y le digo: -Muchas gracias Mark, me parece buena idea de ir a comer porque así muy a trajeado el día. Ah! pero no te cojas de ir a comer juntos como una costumbre. Le sonríe con cara dulce.
 

Se marchan del ayuntamiento, caminan por las centrales de Galicia, en busca de un bar para comer.

Mark, parece haber olvidado lo tímido que puede llegar a ser, y durante la búsqueda de un buen bar te va sacando conversación. En la que tu encantada le das también conversación.

Cuando llegáis al restaurante escogido por Mark. Es un italiano, al que Mark suele venir a comer y a cenar, ya que le tratan bien y sirven de maravilla.

Mark hace del galán y te abre la puerta del restaurante, pasa justo detrás de él. El camarero os a tiende y os pone una mesa para dos, alejados de los baños y de la puerta de la entrada.

Te retira un poco la silla para que puedas sentarte y cuando te sientas, a continuación se sienta el.

Les sirven un poco de agua a ambos en unos vasos y os dan una tapa junto a las cartas. Se marchan para que ambos puedan pensar con calmar lo que desean tomar.

Mark pega un trago al vaso de agua, y antes de abrir la carta te mira y te dice.

¿Has estado alguna vez en un italiano?, espero no haberme equivocado...y que no me pases hambre, dijo con una risa floja.

Si hay algo que no sepas que es de la carta, no dudes en preguntarme. Cuando lo desees llamaremos al camero para que nos sirva.

Me quede un poco asombrada al ver que Mark era muy educado, y lo caballeroso que era. No me lo esperaba para la edad que tenía. Pero se no taba que sus padres le habían educado bien.

Una vez sentado en la mesa del Restaurante Italiano me pregunto si había estado alguna vez en un italiano... sonreí y le conteste. – Aunque parezca que no haya ido a un italiano. Si que he estado en un italiano alguna vez, lo pasa que llevo tiempo si ir a un Restaurante Italiano. De normal suelo frecuentar otros Restaurantes.

No quería que se sintiese incomodo al decir que solía frecuentar otros restaurantes. Que no eran italianos.

Me puse a mira la lista para haber que elegía, ya tenia claro que elegir, de primero quería una Ensalada verde, de segundo un risotto de champiñones. Mire a Mark y le dije cuando quieras llamamos al camero.
 

Mark llamó al camarero, para que les tomara nota cuando pudiera.

El camarero vino y anotó lo que la señorita Iridessa pidió: 

Primero una ensalada verde, y de segundo un risotto de champiñones.

Mark pidió y anotó el camarero lo siguiente:

Una insalate vei specielle y de segundo un filetto di vitello.

El camarero, se llevó las cartas, le puso un vino blanco en cada copa, y en un instante vino con las ensaladas.

 Una vez que nos trajo el camarero los platos... y estábamos ya casi terminado de comer... me dio el interés de saber mas cosas de él. Le miré a Mark y dije.

-Mark, veo que sabes hablar en italiano, eso es bueno.. ¿Cómo te llamó la atención de estudiar sobre el mundo de la moda?.

-Sabes que en este mundo es muy complicado para llegar a ser un gran diseñador... a mí me costo mucho trabajo en llegar a donde he llegado... Pero por suerte estar de Becario con una de las mejores que te habrán podido recomendar. Le sonríe con una sonrisa dulce y mientras tanto bebe un sorbito de agua.

De lo poquito que lo conocía me trasmitía este chico paz y armonía..., pero había que dejar una cosa claro que yo tenia novio y no quería que se mal interpretase que a mi me gustara los jovencitos.. solo tenia ganas de que llegase en el viernes por la noche para salir de camino a Nueva York..

Estaba pensado en darle a Mark el viernes y sábado libre, después de todo lo que hizo hoy se lo merecía.
 

Estaba terminando de comer el primer plato, cuando nos trajeron el segundo. La comida estaba siendo agradable y con un buen ambiente entre la señorita Iridessa y mía.

Empecé a notar que cada vez se abría más a mi, y empezaba a preguntar sobre mi y mis cosas. A lo que la miré y con una risa pícara en mi rostro le dije.

Los idiomas la verdad que son lo mío. Aparte de saber italiano sé otros cuantos idiomas, además que te puedo decir yo...tu una gran profesional supongo que sabrás más de un idioma para poder triunfar, como triunfas. Sonreí y le guiñé un ojo.

La verdad que me interesé por esta carrera, porque siempre se me han dado bien los diseños y porque me gusta crear mi propia tendencia a la hora de vestir. Mi familia y amigos me animaron hacer la carrera ya que les guiaba siempre a la hora de vestir.

Levanté la mano y llamé al camarero.

Por favor si nos es tan amble de servirnos el postre se lo agradecería. Traiga una bandeja de Bigné para dos y dos capuchinos.

Miré a Iridessa y le dije.

Espero que no te moleste que pida yo el postre, quiero que pruebes algo típico de Italia que no sea el tiramissù ni la panacotta. Y como no un delicioso capuchino.

Le mire atenta a lo que decía que sabía hablar varios idiomas...y le sonreí. Cuando dijo que yo era una gran profesional y que sabia hablar varios idiomas... 
Me llamo la atención cuando dijo que toda su familia y amigos le animaron para estudiar esta carrera... me llamo la atención de que dijo que le gustaba marcar su propia tendencia...
vi. que llamo al camarero y pidió Mark el postre. Y me dijo si me había molestado que pidiera el. Le mire muy alegre y con mi mirado dulce. Le dije.

-Para nada no me molesta Mark que pidieras el postre. Probare el postre porque ese si que no le he catado... me salio una carcajada !jaja¡, que a la vez sonaba dulce.

Mire a Mar y le dije. – Mark me alegro que tus familiares te apoyaran, porque eso es primordial... le mire y continué hablando.

-Y como diseñador que vas a ser tendrás alguna idea de tus bocetos o como te gustaría crear tu propia moda, ¿No? Porque si tu vieras dudas podrías decírmelo que esto para aconsejarte y ayudarte, a que la gente te conozca.
 

Sonreí a las palabras de la señorita, mientras me acababa el postre y el capuchino.

Claro que tengo varios bocetos de mis diseños, un diseñador siempre hace bocetos y los guarda para ir mejorando. Pero aún me queda mucho por aprender, y la verdad que siendo su becario estoy seguro que mejoraré mucho. Y quién sabe a lo mejor en un tiempo nos vemos los dos como diseñadores y competiendo o coincidiendo en algún desfile.

Sonreí nuevamente y alcé mi mano para llamar al camarero.

Por favor, si es tan amable me trae la cuenta. Gracias.

Entregué el dinero al camarero tras traer la cuenta, me levanté de la silla y me puse justo detrás de la silla de Iridessa para facilitarle y ser cortes para que se levantara.

Caminamos hasta la salida del restaurante y le dije.

Bueno le acompaño hasta su coche, no tengo mucha prisa la verdad, no tengo nada que hacer. Solo decirle que me ha encantado ayudarle hoy en este desfile. Espero que la vuelva a ver. Me encogí de hombros y agache la cabeza y le dije.

Si no hace nada...esta noche...quizás...quiera que quedemos para tomar una copa y charlar...

Una vez que salimos del Restaurante, yo estaba cansada ya y tenia ganas de llegar a casa. Para hacer la cosas de mí trabajo y solo pensaba que llegase este viernes por la noche e irme a Nueva York...

Mark me dijo que me acompañaba al coche muy amble por su parte. mientras que nos dirigiamos al coche, me dijo de salir por la noche a tomar una copa. Le sonríe y le dije.
- Lo siento Mark pero me parece que no, aparte no salgo por las noche.Tengo cosas que hacer de los trabajos y contactar con empresarios para confeccionar nuevas telas.Mientras conversábamos llegamos al coche, cocí las llaves de mí bolso y abrí  la puerta del coche con el mando a distancia. Mire a Mark con mi sonrisa dulce y le dije.

-¡Gracias! Por haber me invitado ,pero creo que deberías de con tus amigos, que te lo merece por el buen trabajo que has hecho. y la noche es joven, Pero mañana te quiero a primera hora en el trabajo... ¡Adiós! Mark.

Me monte al coche mire la hora...  Puse el coche en marcha y me dispuse a ir a mí casa ya que me esperaba un largo camino a llegar a Oviedo a mi casa, que estaba apartado de la ciudad... Solo pensaba si tendría un mensaje en el contestado de mi Novio, para poder hablar un ratito con el  decirle que fue bien el desfile, ya que se alegraba que me funcionara tambien mi empresa...
 

Mark se despidió de ti muy educado y con beso en tu mano derecha, se fue encogido de brazos. No se esperaba que le fueras a decir que no querías tomar un copa por la noche con él en plan tranquilo. Por lo que se fue un poco decaído hacia su coche.

Montaste en el coche y fuiste con cuidado por la carretera, ya que era una carretera con peligro. Cuando llegaste a casa, lo primero que hiciste es encender tu ordenador para mirar si tenías algún correo de tu novio. Pero la bandeja de entrada no reflejaba ningún correo de él, tan solo publicidad.

Te preparaste la cena, mientras de tanto en tanto consultabas cosas por internet.

Llegue a casa estaba un poco cansada de el día había sido largo, cuando abrí la puerta, deja el bolso en mi despacho, enchufe el ordenador y mire haber si tenia algún mensaje, de mi novio pero no tenia nada. Estará ocupado en su trabajo este hombre trabaja mucho.

Me fui habitación a ponerme el pijama, después de ponerme el pijama me fui derecha a la cocina a prepáreme la cena, abrí la nevera para coger Lechuga, pechugas, zanahoria, queso, lo coloque todo en el bol grande que tenia para las ensaladas, y abrí la nevera para coger la salsa Cesar, y listo. Me senté en la barra de mi cocina y me puse a cenar, me enchufe la tele y estaba viendo en la divinity el desfile de la Fashion Week.

Una vez que cene me fui a mirara el ordenador las publicidad que tenia, y a consultar en las paginas de moda, las telas que serian mejor.

Después de tanto mirar y consultar las telas, mire la hora de mi reloj y eran la 1:00 de la Noche me fui, a dormir y a esperar a un nuevo día.

Te fuiste a la cama a la 1:00, cuando estabas toda dormida, nuevamente tuviste otro sueño como la primera vez. Pero esta vez no era tu ex.

La persona que te venía a tu sueño era Mark.

Aquella cara con esa sonrisa dibujada en su boca, sus ojos tan abiertos que cuando te mira se puede ver el fuego que lleva dentro. No podías dejar de verle, y había un motivo para todo esto, estabas comparando a tu becario con tu ex.

Eran como dos gotas de agua, tenían muchas cosas en común ambos. Y por eso le tenías tan presente en esta noche, ¿por qué pensar en él?, ¿qué querrá decir todo esto?, ¿quizás sigues enamorada de él? o ¿estas empezando a sentir algo en tu interior por Mark?. Fuera lo que fuera, ibas a empezar a concentrarte en olvidar todo tu pasado, pero no te estaba siendo tan fácil por ahora olvidarlo. ¿Pero cómo podrías olvidarlo? Solo dentro de ti se haya la respuesta...

Cuando los primeros rayos de luz te dan a la cara, te levantas incorporándote en la cama. Pero estas sudorosa y algo confundida por el sueño de ayer noche. No intentas darle vueltas, pero cuando te metes en la ducha te vuelve a venir todo lo de la noche. Intentas encajar esos sueños con aquellas preguntas, pero solo tú tienes las respuesta en tu interior...

Me levanto toda exhausta de la cama y me voy derecha al cuarto del baño, a ducharme y a intentar olvidar el sueño, yo llegaba a entender porque soñé con mi becario... enamorada de él no estaba, porque yo estaba perdidamente enamorada de Alcide Herveaux, él era la persona que me tenia loca y el motivo que me enamore de él. Porque se complementaba a mí y no se parecía para nada a mi ex. Por eso me enamore mi novio...

Salí de la ducha y me fui a vestirme, me dirigí a la cocina para prepararme el desayuno, mientras tanto me enchufe el televisor haber lo que estaban echando y vi. Que estaban poniendo, la moda internacional de Nueva york. Lo deje puesto me puse a preparar mi desayuno, leche, tortitas americanas, un zumo…
 

Tras pegarte tu ducha e intentar olvidar aquel sueño o aquella pesadilla. Bajas hasta la cocina para prepararte el desayuno,  mientras te pones la tele.

Desayunas tranquilamente como todas las mañanas, antes de irte a trabajar. Cuando acabas, dejas todo en el lavavajillas, agarras tus cosas. Y te diriges al coche para ir a tu oficina.

Una vez que desayune dejo la cubertería en el lavajillas, cojo del mueble del fregadero la pastilla de calgonit para ponerlo en el lavajillas lo dejo programado. Porque así cuando llegue de nuevo a casa lo tengo limpio.

Miro la hora y era hora de ponerme en marcha para ir al trabajo, apago la tele, y cojo el abrigo y el bolso, y me dirijo al garaje, me monto en el coche, y voy de camino al trabajo...  estaba la carretera toda despejaba, y me gustaba cuando podia conducir tranquilamente.

Estaba pensando que cuando llegase tenia muchas cosas que hacer y ponerme hacer nuevos bocetos para la nueva campaña de primavera- verano.

Ya me quedaba poco de llegar a mi dulce trabajo. Vi que estaba mi secretaria dentro y estaba muy alegre. Siempre tenía una sonrisa para cualquier momento. Aparco el coche y me dirijo a mi botic de moda. Entro sonriente y le saludo con alegría.
-Buenos días!! Marta, que tal llevas la mañana.