Partida Rol por web

-Gracias Laurana... pero te quedas alguna para ti verdad? Si no es asi reservatela...

Tengo 4 mas, note preocupes... no he tenido necesidad de usarlas gracias a vuestros esfuerzos. Bebela.+lo tranquiliza.

Kurt responde al explorador - Bien Amirov.. quizás lo druidas nos ayuden con las pistas que tenemos, eso si.. - mira medio sonriente como Malrick intenta subir  a un árbol - a no ser que Malrick vea algo..

Mientras espera envaina su arma, y recoge la pesada hacha y la armadura del orco abrochandolo los mas ajustado posible a la mochila y cinto; el bárbaro pronto está dispuesto y listo para partir hacia donde digan los expertos.

- Esto ya lo llevo yo, vosotros diréis.

Me lamento el no poder ver nada claro desde donde estoy, escucho las palabras de Kurt y parecen las más acertadas en estos momentos, quizás con los druidas consigamos respuestas y quizás también una espada a cambio de los arcos que les dejamos antes, porque mi memoria es un desastre y me olvidé de decírselos antes.

Mira el amuleto que tiene Narfolk y niega lentamente.

-Me temo que no estoy tan avanzada en mis estudios para identificarlo sin ayuda. Sin embargo, en cuanto descansemos buscare la guia de mi diosa. Si ella me da el poder, sera cuestion de unos momentos... Por ahora guardalo, mejor.

Al escuchar la respuesta de la Cleriga, lo guardo en mi mochila y le respondo:

 - "Bueno, entonces lo guardaré para más adelante."

Luego me acerco a los hechiceros y comienzo a recoger sus pociones. Luego las miro detenidamente, pero no logro reconocer su magia. Entonces se las tiendo a Laurana y se las entrego:

 - "Laurana, ¿Sabes que pociones son estas?"

Se las entrego y despues saco mis bayas para asi sanarme un poco más.

La joven acepta las botellitas, examinandolas a trasluz con la esperanza de que alguna contenga un conjuro divino que conozca, lo cual facilitaria la tarea... o bien que sean pociones de curar similares a las que ya tiene el grupo. 

Nunca sobran.

-Aunque no tenga gran interes si necesitais una mochila más para meter algo usad la mía.

-Acercame eso Kurt, ya te lo llevo yo.

- Bien Valwyr, coje las lanzas, yo ya estoy en mi peso ideal, jajajajaa!!!

El bárbaro ríe a carcajada limpia  orgulloso, agitando el hacha y el camisote del orco.

Mientras los entendidos en magia examinan lo que llevaban los hechiceros me limito a sentarme en el suelo para descansar de la marcha.

¿Por qué se olvidaran siempre de que al tener mas cortas las piernas me canso mas que ellos y siempre las hacemos como si todos fuéramos humanos?

Todo lo que podiamos hacer en aquel lugar ya habia sido hecho. Era el momento de volver. Ya listo para emprender nuevamente el camino, le hablo a mis compañeros:

 - "Bueno, volvamos al campamento Druidico entonces. Aqui no hay nada más que nos sea util."

Espero a que mis compañeros respondan, por si están en desacuerdo, y comienzo a caminar de vuelta.

Me acerco nuevamente al grupo y escucho las palabras de Narfok, asiento a lo que dice dándole la razón y mi apoyo para ir con los druidas.

Me pongo en pie sin pronunciarme esperando por si alguien opina alguna otra cosa.

 -Espera...Amirov, tu no puedes hacer nada? +inquiere la cleriga al explorador.

El grupo deja el campo de batalla dejando atrás los cuerpos de los Hechiceros y de Krutos. El Bosque era un lugar inmenso y desconocido, a pesar de que Amirov habia echo lo posible para buscar un camino hacia aquellas Ruinas lo mejor era averiguar la dirección por medio de los Druidas, mas que mal, eran ellos los que conocian el lugar.

Habian caminado un buen trecho sin conocer peligro alguno, el sol estaba desapareciendo en el horizonte cuando escuchan aullidos en sus alrededores, detienen la marcha para poner atención, en unos pocos minutos aparecen a los lejos unos lobos, que al ir acercandose crecen y crecen hasta llegar a ser del porte de un caballo.

Las fieras muestran sus colmillos junto con una mirada de ira, por supuesto al igual que las otras criaturas, estas parecen estar dominadas por un poder maligno, los lobos estan listos para atacar.