Partida Rol por web

Dieter no parece fiarse mucho y manda a dos de sus hombres a cada extremo del callejón.

El quinto se queda con vosotros y también examinan la escena del crimen.

- Si eran tantos no es seguro que permanezcamos aquí... aunque me parecería raro que siguieran cerca. De todas maneras son un peligro... debemos avisar a algún Príncipe o al primogénito. -

Muchas gracias amigo markus, asi es, la noche es joven, asi que busquemos a otro "traidor" ( Satanas dice la palabra traidor, con recelo, mala ostia ).

Yo os sigo, vosotros mandais....

- Yo me encargare de informarlos, no te preocupes por eso, se lo diré a los príncipes. – William hecho una última ojeada al callejón. -  Creo que tienes razón, estar aquí no es seguro, podríamos tener problemas aun siendo tantos, eras más que nosotros, y los Grangels son peligrosos.

Marcus y los demás comienzan a guiarte por los callejones de Berlín... parece que llevan poco tiempo en la ciudad, como tú, porque tampoco es que se manejen especialmente bien.

Desafortunadamente, vuestras ansias de sangre tienen que retenerse puesto que en las siguientes horas no encontráis a más vástagos...

Cuando empiezan a darlo por perdido uno de los compañeros de Marcus os hace una seña... Marcus te hace un gesto y todos se ocultan en las sombras... Todos menos él y tú.

- Hay delante en ese callejón hay varios vástagos... Quizá deberías acercarte a echar un ojo, si son pocos podemos atacarles y darnos un buen festín. Si son muchos no te verán como una amenaza... eres sólo uno, y puedes volver a reunirte con nosotros y buscaremos en otra parte... ¿cómo lo ves? -

- De acuerdo. Si te piden explicaciones diles que yo investigué el asunto contigo pero que los responsables habían huido... espero que se fíen de que hemos hecho un buen trabajo. - Dieter sigue con los sentidos atentos a su alrededor...

- Pero debemos tener mucho cuidado esta noche... si hay tantos vástagos sueltos capaces de cometer diablerie... no estamos seguros ninguno. - Dieter tiene el semblante serio, no parece especialmente preocupado aunque sí pensativo con todo lo que ocurre. - Quizá el sabbat haya cambiado de táctica y se haya decidido a mostrarse más visible en la ciudad... -

Satanas sonrie y dice:De acuerdo, si digo la frase vais a llorar sangre, es que hay via libre y hacemos una escabechina... sino reculare, si hay problemas por que quieran aprovechar de uno solo, espero que salgais en mi defensa.

Imagino que la tactica sera la misma que la usada con el anterior bastago.

mientras hablo con marcus y voy hacia el callejon, vuelvo a subir todo lo posible mis atributos, en este caso todo lo que pueda en fuerza, luego destreza y resistencia.

- ¿no eres del grupo anarquista? Igual que tú seas el que investigue no le gusta a los príncipes, aunque yo se lo digo, no te preocupes por ello. – William también estaba serio, estaba preocupado por lo sucedido a sus compañeros, pero no iba a mostrar preocupación delante de Dieter.

- Debería irme por esta noche, espero no tener problemas, no me haría ninguna gracia encontrarme con esos vampiros de nuevo. – William empezó a ir a su coche sin decir nada mas.

Apenas diste dos pasos cuando te percataste de que los dos hombres de Dieter del extremo opuesto del callejón estaban haciendo gestos a su líder, al parecer alguien se acercaba. Dieter llamó con la mirada al resto de sus hombres...

Dieter, Erika y otros tres brujah se agazaparon tras unos contenedores a la espera de ver quién se acercaba a los otros dos apostados en el extremo del callejón.

Cuando te acercas a la entrada del callejón distingues mejor las siluetas de dos hombres... con toda probabilidad vástagos.

Ves que llevan en las manos sendas escopetas... no tienes ni idea de por qué van armados o de si es porque te han detectado llegar. Pero tampoco es muy habitual recibir a nadie con una escopeta en la mano.

William no quería causar problemas, y mucho menos delatar a Dieter y sus hombres, asique se oculto también para no quedar a la vista de los nuevos invitados, esperaba que no se complicara demasiado la situación, preparo su arma dispuesto a disparar al mínimo problema.

Escuche atentamente las palabras del primogenito, eran preocupantes cuanto menos y mis "socios" estaban en la primera linea de fuego... Quizas ese Caín me ahorre mucho trabajo sucio.

- El seguramente podrá esconderse pero a los vastagos que esta reuniendo bajo su brazo no... ¿Has descubierto algun lugar de la ciudad donde el numero de vampiros fuera anormalmente superior? Puede que alli se esten concentrando sus huestes y él mismo.

Debemos seguir a los peces chicos para dar con los grandes, asi se hacia en la policia y esos metodos los seguia usando Frank en sus casos.

- Muchos de los nuevos se mantienen cerca de la Iglesia... y otros muchos grupos de desconocidos vagan a sus anchas por las calles de Berlín... mis espías me susurran que no es bueno andar sólo en Berlín estas noches... con la aparición de Caín y sus palabras... parece que la Mascarada ya no importa... ni las leyes ni nada. Caerán muchos vampiros en las noches venideras. Mi consejo Frank: no andes sólo... y si lo haces que no se te vea. No puedes fiarte de nadie estas noches. - el primogénito nosferatu te mira con preocupación.

- Creo que de momento no puedo serte de más ayuda, pero si averiguo algo acerca de Caín te avisaré... de momento no es de fiar... -

Satanas empieza a caminar hacia ellos, mientras dice con voz de yonkie con mono, Hey tios, necesito que me deis un chute de algo, venga estirados...

Desde vuestro escondite podéis observar cómo una figura se acerca a los dos brujah armados con las escopetas...

La figura les dirigió una frase:

"Hey tios, necesito que me deis un chute de algo, venga estirados..."

Aunque tiene la voz ligeramente distorsionada te parece reconocer la voz de Satanas.

William siguió escondido, parecía que el hombre podía ser de sus compañeros, pero no podía arriesgarse a salir, igual era alguno imitando su voz. Algunos vampiros tenían algunas habilidades sorprendentes para suplantar a otros. Se quedo quieto en el sitio esperando ver que podía suceder.

Ambos te dan el alto cuando estas a unos 6 o 7 metros de ellos y te apuntan con las escopetas:

- ¿Quién eres y hace cuánto que estás por aquí cerca? ¿Has tenido algo que ver con eso? - te preguntan dando un rapido vistazo a sus espaldas... al interior del callejón.

No tienes ni idea de qué te están hablando.

- Es mejor que no avances más. - continúa uno de ellos con un tono de voz serio.

Los 2 hombres de Dieter dan el alto al tipo cuando está a unos 6 o 7 metros de ellos y le apuntan con las escopetas:

- ¿Quién eres y hace cuánto que estás por aquí cerca? ¿Has tenido algo que ver con eso? - le preguntan dando un rapido vistazo a sus espaldas... al interior del callejón.

- Es mejor que no avances más. - continúa uno de ellos con un tono de voz serio.

Desde esta distancia estás seguro de que es Satanás quien se aproxima. Parece que sólo se ha percatado de los dos tipos, no del resto que esperan escondidos en el interior del callejón.

William se queda parado, no tenía intención de intervenir si no era necesario, además no quería discutir con Dieter. – Dieter, es mi compañero Satanás, el tipo de ayer, si aprecias la vida de tus vampiros será mejor que detengamos esto, sino morirán. – William susurraba, no quería que Satanás supiera que estaba ahí, al menos no por el momento.