Partida Rol por web

Quimera sacude su pata, aquella que Takara ha estado agarrando, y consigue que la chica tanuki le suelte. Después aletea y se aleja de ella una distancia prudencial, observándola detenidamente.

- Tienes razón, por desgracia. - dice Quimera. - Cuando me encargaron este trabajo, me dijeron que tenían "a la rival perfecta para mí". - admite la chica. - Mi encargada estaba sonriendo. Suele hacer eso. Hacer que me enfrente a gente con características animales, o monstruos con forma de animal directamente. Seguro que a ti también te pasa. - dice, sacudiendo la cabeza. - Es humillante... pero debo cumplir con mi trabajo. No es nada personal, chica tanuki.

Fue un duelo volador intenso entre ambas, pero al final entre enganches y alzando el vuelo, conseguí que la quimera no pudiera entrometerse entre el camino de Dante y Lewis, quedándome con ella a solas en aquella disputa -No es que yo quiera... Pero si necesito frenarte para que no nos interrumpas, será lo que haga- le diría a la quimera. De momento parecía que la "aprendiz de todo" había conseguido frenar a la "experta en vuelo", y así es como tengo que mantenerme a lo largo de esta batalla.

Entonces una vez estábamos las dos, me fue reconociendo que si... Que ambas nos imaginábamos que nuestra rival iba a ser la más "animal" de los respectivos gremios -Ya... En cuanto vi que os habíais colocado en cada piso, ya me esperaba a alguien así como mi rival...- le diría pues yo también me imaginaba que en cuanto alguien pareciera un animal, me iba a tocar a mi enfrentarme a ese rival -El último enemigo que recuerdo ahora fue un pulpo gigante... por lo que si, te entiendo- le comentaría, teniendo esa empatía con ella... aunque tampoco nos íbamos a hacer mejores amigas por ello ni íbamos a no pelear -Yo también tengo un trabajo que hacer, llegar a donde nuestra compañera y salvarla... Por lo que si quimera, no es personal...- le diría... aumentando de tamaño mis piernas, teniendo ahora ambas zarpas de pájaro de gran tamaño, aunque tuviera que batir con más fuerzas mis alas por el aumento -Pero comencemos- terminaría diciendo lanzándome contra ella para atraparla con mis zarpas.

- Adelante. - replica Quimera, quien sigue batiendo sus alas sin inmutarse al ver lo enormes que se ponen las patas y por lo tanto las afiladas garras de Takara. Muy al contrario, ha asentido un par de veces mientras escuchaba las explicaciones de la chica tanuki... así que parece que siente cierta afinidad con ella.

Lo cual, obviamente, no evita que Quimera se lance al ataque con sus patas de león por delante en el momento en que la tanuki hace lo mismo con sus garras mejoradas. Las dos chocan en el aire, pero la potencia de las patas de Takara es ahora muy superior a la de antes y parece que eso toma por sorpresa a Quimera.

Las garras de Takara golpean en el cuerpo de Quimera, y desvían sus piernas hacia un lado. La chica bestia chasquea la lengua, pero es incapaz de evitar que la inercia del ataque haga que salga disparada hacia el suelo de la habitación, aunque por suerte para ella el fallo no es total y consigue recuperarse en el aire después de aletear con fuerza.

Ahora es Takara quien tiene la ventaja de la altura de vuelo.

Parecía que ambas nos habíamos llevado medianamente bien para nuestra sorpresa... Al final sería verdad que solo por ser ambas peleadoras animales ya sería un factor relevante para sentir afinidad entre ambas. En fin, pese a eso, ninguna de las dos olvidó para que estaba en esta torre: Yo para rescatar a Arlene junto a mis compañeros, y ella para impedirlo.

Así que nos pusimos garras a la obra, y en este primer choque yo salí ganando pudiendo empujarla y al final alcanzarla haciéndola caer al suelo -Bueno, primer toque al suelo para mi... ¿Lo tuyo que es? ¿Magia de transformación, herencia, algún objeto...?- comentaría y le preguntaría mientras la veía levantarse del suelo para alzar el vuelo... un poco de "respeto profesional entre animales".

Aunque cuando ya estuviera de nuevo volando y respondiese, trataría de lanzarme otra vez para buscar agarrarla con mis garras por los hombros para lanzarla contra una de las paredes, buscando prepararme para esquivar luego si era necesario.

- Es mi magia. - responde Quimera. - Este es el aspecto que tengo cuando me transformo. Pero no soy como tú, no puedo transformar partes individuales de mi cuerpo a voluntad. O todo o nada. - explica, dando un par de fuertes aleteos para ir a encontrarse en el aire con su rival. - Así funciona la magia. La que te toca, te toca. Es una lotería.

Al final las dos acaban encontrándose en el aire, y la tanuki es la primera en atacar al tener la ventaja de altura. Quimera se ve atrapada por las garras de Takara sin poder evitarlo, aunque la chica de Radiant Dream acaba dándose cuenta de que su rival es más fuerte y pesada de lo que parece y es incapaz de lanzarla contra una pared.

En su lugar aprovecha que la tiene agarrada para clavarle sus garras de águila, y aunque consigue dañarla eso no impide que Quimera se revuelva y le de un buen golpe con sus zarpas de león en el costado, mientras hace una pirueta y aletea para alejarse de ella al librarse de su agarre. Ahora las dos están a la misma altura de vuelto...

Iba escuchando a la quimera mientras que la dejaba recuperar algo de altura para encontrarnos en el aire -¿Y siempre la misma transformación? ¿O puedes cambiar entre diferentes formas completas?- preguntaría... aunque luego negara con la cabeza -Nah olvida la pregunta, dudo que me vayas a decir eso en medio de una batalla, podría chafar la sorpresa... Quien sabe si luego hablamos más. Es como tu dices, cada una tiene la magia que le ha tocado, para lo bueno y lo malo- le terminaría comentando, antes de empezar a pelear otra vez.

La chica pesaba más de lo que esperaba... No la llamaba gorda, es que tenía más fuerza de la esperada y eso redujo el espacio que teníamos entre las dos -¡Agh!- por lo que no pude evitar que de la cercanía sienta sus zarpas rasgándome el costado e hiriéndome, salpicando algo de sangre el cielo hasta que esta gotea en el suelo... aunque por suerte mi pelaje impide que el daño sea más grave. Se libra del agarre y ambas nos volvemos a alejar una de la otra -Tsk... Punto para ti. En cortas distancias juegas con ventaja, yo no tengo manos que usar ahora...- comentaría... Y es verdad, mis brazos eran alas con las que mantenerme en el aire... Aún crear alas totalmente libres era algo que no había dominado. No es lo mismo transformar mi propio cuerpo que añadirle cosas nuevas.

Trataría entonces de dar un fuerte aleteo para ascender encima suya -Creo que entonces vamos a cambiar de terreno de juego- diría entonces, intentando colocarme encima suya... Antes de frenar de aletear completamente, para caer cual bola rosada con el poder de la piedra sobre ella y que con el impulso de mis piernas ambas cayéramos al suelo. Una vez ahí, quitaría mis alas para dejar de usarlas... tenía otras ideas en mente.

- No, puedo decírtelo. - replica Quimera después de las preguntas de Takara. - Después de todo, nosotros sabemos mucho sobre vosotros. - dice. - Ésta es la única forma que puedo adoptar, así que no habrá sorpresas en ese aspecto. Pero una batalla no se gana conociendo los poderes del rival. Lo que debes hacer es superarlo. - sentencia, viendo cómo su rival comienza a aletear para ganar altura.

Es entonces cuando la chica tanuki deshace la magia de sus alas y ataca con un golpe descendiente y potenciado. Por supuesto Quimera ve venir el ataque e intenta apartarse del camino de su rival, pero aunque al principio parece que lo va a conseguir al final Takara consigue golpearla con fuerza. La chica quimera suelta un quejido al recibir el daño... y, ahora, las dos chicas bestia se encuentran descendiendo a una velocidad considerable en dirección al suelo.

Me sorprendió que la quimera decidiera explicarme su magia... Es decir, realmente no tenía necesidad. De hecho ella misma ya sabía mucho de nosotros y podría jugar esa ventaja -Si, lo de la información ya lo se. Tu compañero el niño con gólem ya dejó claro que os sabíais nuestros trucos- le comentaría, antes de que me explicase que solo podía convertirse en esa forma de quimera, aunque luego dijera que conocer las ventajas no haría ganar un combate -Hmmm... Pues gracias. Aunque si, estás en lo cierto... lo importante no es el tipo de magia, sino saber usarla- agradecería la información y le daría la razón... ¿Me estaba cayendo bien esta chica? Creo que si, y hasta parece ser algo mutuo.

Pero bueno, palabras intercambiadas, tocaba continuar peleando, no podíamos ignorar la razón por la que cada una estaba aquí, y yo iba a continuar luchando para llegar a donde estaba Arlene.  La patada descendente le impactó por mucho que ella intentara esquivarlo... Y la verdad es que no me di cuenta de lo alto que estábamos, viendo que me daba tiempo a actuar otra vez antes de caer... Por lo que eso hice.

Tomaría impulso en la caída saltando sobre ella... para encogerme agarrándome las piernas y empezar a girar en el aire por la aerodinámica ganando momento. Entonces me iría envolviendo en mi cola, ganando con ello masa y por lo tanto velocidad hacia el suelo... ¡El Tanuki Roll evoluciona a Tanuki Meteor!

Quimera es incapaz de esquivar el golpe de Takara en el momento en que ésta deshace sus alas, pero tras eso las dos todavía tienen una buena distancia de caída por delante... o más bien debajo, así que la chica tanuki decide convertir ese golpe en algo mucho más potente, ¡tal vez en el golpe definitivo! Takara se apoya en la descendiente Quimera mientras ésta cae al vacío de la sala, salta y se enrolla sobre sí misma cual erizo azul y ejecuta su técnica suprema: ¡el Tanuki Roll evolucionado, convertido en Tanuki Meteor! ¡Un potentísimo golpe descendiente y probablemente definitivo!

Pero obviamente que Quimera no iba a estarse quieta viendo lo que se le viene encima, así que la chica decide apartarse rápidamente y en el último momento, antes de que la bola formada por Takara le caiga encima. ¡Y lo consigue! Quimera aletea en el momento justo, se aparta de la trayectoria de su atacante y la deja caer al vacío a toda velocidad. Y a toda potencia.

Takara acaba impactando contra el suelo con gran potencia... ¡tanto que crea un buen cráter en el mismo! ¡Menos mal que los suelos de este lugar son gruesos, de lo contrario habría acabado atravesándolo! Ah, y también menos mal que no se ha hecho daño, porque podría haberse roto muchos huesos diferentes. Probablemente Quimera esperaba eso, a juzgar por la mirada de curiosidad que le manda desde las alturas.

Mi ataque fue realmente potente... mucho más incluso de lo que yo esperaba, pues literalmente caí al suelo como un meteorito peludo que impactó contra el suelo haciendo un cráter. Que joder, menos mal que al parecer la torre era resistente, porque si no tal vez habría caído encima del enemigo de Valentio o de Erwin.

Pero Quimera lo esquivó al último segundo por lo que no resultó herida. Yo tampoco, pues lo mullido de mi cola había absorbido el impacto y por eso ella podría ver como me desenrollaba y salía de mi bola sin ningún rasguño aparente -No me he roto nada si es lo que quieres ver, mi cola me amortigua de esos impactos...- le comentaría al verla observarme desde arriba, antes de mirar bien el punto de impacto -Coño, menudo cráter. Quizás hasta ha sido mejor que lo hayas esquivado- comentaría... Joder, a saber cuantos huesos le habría roto de haber estado abajo.

En fin... tocaba continuar. Ahora ella estaba arriba y yo abajo... Por lo que a mi manera intentaría igualar esa altura desde el suelo. Y es por eso que me concentraría y trataría de empezar a crecer y hacerme gigante... ¡Así estaremos en igualdad de altura! Ya sea por vuelo o por estatura. Aunque estaría atenta por si me lanzaba algún ataque en este momento y debía de esquivar.

- Sí, ha sido un buen impacto. - replica Quimera observando desde arriba y asintiendo. Muy tranquila ella, casi incluso preocupándose por la salud de su rival, apenas da un par de aleteos para alejarse hacia atrás mientras Takara usa su magia para convertirse en una kaiju tanuki. ¡Menos mal que la sala es muy alta, que si no...! - Hm. Leí sobre esto en el informe, pero impresiona verlo en persona. - comenta Quimera, aleteando para alejarse de su creciente rival.

Eso sí, cuando ve que Takara no va a crecer más se lanza con un par de violentos aleteos contra su hombro, con la intención de clavar sus garras en él. Y lo consigue: sus zarpas se clavan en la carne de la chica... aunque con su tamaño y todo el pelo que tiene casi se queda todo en un arañazo un poco aparatoso.

- A lo mejor es momento de empezar a luchar en serio. - comenta mientras se aleja, llevándose por delante parte del pelaje de Takara.

Iba creciendo en el sitio, evaluando también lo fácil o difícil que sería moverme y atacar en esta sala. Menos mal que era la sala más alta de todas, porque quizás en otros pisos anteriores no habría tenido tanta comodidad como ahora. Y noté como hasta ella misma parecía esperar a que no creciera más para empezar de nuevo a atacarme -Gracias- le agradecería el comentario de que impresionaba más haberlo visto que simplemente leer el informe.

Luego de eso, se lanzaría contra mi, por lo tanto yo busqué defenderme un poco, aunque al final me clavaría sus garras en mi hombro... Lo cual dolió un poco; pero la quimera pronto se daría cuenta que ahora con mi nuevo tamaño, mi pelaje y piel habían aumentado de grosor y por lo tanto era mucho más difícil de hacerme daño en ese estado.

Cuando comentó lo de que era momento de pelear en serio, le asentiría -Yo estoy luchando en serio pese a que me caigas bien, así que no espero menos de ti- le diría a la quimera animándola a ir en serio pues yo iba más o menos igual, antes de lanzar un ataque contra ella con la palma abierta, como si estuviera matando a un mosquito... Pero en lugar de fallar y que el mosquito desapareciera mágicamente, le daría.

- Entendido. - replica Quimera, y en cuanto ve que la gran palma de Takara se le echa encima intenta salir volando para esquivarla... pero no le resulta posible, la chica tanuki es demasiado grande y no demasiado lenta para su tamaño. Quimera se lleva un buen golpe que la hace desviarse unos metros de su trayectoria y caer un poco, pero después consigue reflotar aleteando con fuerza para quedarse estable en un punto. - Entonces, allá voy.

Quimera toma aire, y mientras lo hace poco a poco echa la cabeza hacia atrás justo antes de soltarlo todo en forma de un grito fortísimo que parece el grito de un águila. Cuando lo hace el aire alrededor de Takara parece empezar a vibrar, y poco a poco la chica tanuki ve cómo algunas decenas... no, algunas docenas... ¡no, seguro que un centenar... o más! ¡Un centenar de Quimeras aparecen en el aire alrededor de Takara, y empiezan a volar todas a la vez pero en direcciones diferentes, girando a su alrededor, para confundirla!

Quimera seguramente se esperaba algo menos de velocidad; pero mi palmada gigante mata-mosquitos le impactó de lleno haciéndola caer, aunque luego volvería a reflotar. La verdad es que la chica soportaba increíblemente bien los golpes, porque ambas llevábamos un buen rato pegándonos con mis extremidades potenciadas -Con todos los golpes que nos estamos dando, estás aguantando mucho- le diría, viendo que ella se preparaba para enseñarme como se "ponía en serio" -Adelante- le diría con seriedad.

Entonces desde luego, me sorprendió su forma de actuar... Aquel graznido de águila me extrañó, pensando que no había hecho mucho pese a ser muy fuerte. Hasta que entonces... -¡¿Pero que leches...?! Impresionante...- obviamente ver un montón de Quimeras a mi alrededor no era lo que me esperaba, pero sin duda me impresionó -¡Adelante!- diría al verlas girar alrededor mía... y aunque hiciera eso, yo trataría de... No se, contrarrestarlo de alguna forma. Empezaría a girar yo misma en dirección contraria a las copias, alzando los brazos y batiéndolos... Parecía ser algo absurdo, se veía como una tontería también; pero al menos así me aseguraba golpearla... aunque fuera por accidente... Espero. Si se cruzaba en el camino de mis manos, sería culpa suya.

Todas las Quimeras vuelan sin parar girando alrededor de Takara, e incluso cuando la enorme chica tanuki intenta darle de manotazos se encuentra con que sus enormes zarpas atraviesan a todas las Quimeras que puede abarcar. Esas son falsas, apenas imágenes creadas para confundirla y que gaste sus ataques contra ella mientras la verdadera Quimera planea su ataque escondida en un mar de clones. Unas imágenes que, por cierto, no desaparecen al tocarlas...

- Me toca. - dicen todas las Quimeras al mismo tiempo después de que Takara falle su ataque. De repente todas las Quimeras se detienen en el aire al unísono y se giran hacia su enorme rival, al mismo tiempo que sus garras de águila empiezan a brillar en color verde. ¡El color universal del veneno en animes y videojuegos!

Las Quimeras se lanzan todas al ataque, aleteando y saliendo disparadas contra la gran Takara con sus garras por delante. La chica tanuki da un par de manotazos, pero atraviesa a todas aquellas Quimeras a las que intenta golpear. Parece que el ataque va a dar en el blanco cuando de repente...

¡Una bola de pelo disparada de quién sabe dónde atraviesa el aire y golpea en el estómago a una de las Quimera! Ésta no desaparece, sino que emite un quejido y sale volando hacia atrás, estabilizándose en el aire con sus alas pero en el proceso perdiendo a la gran mayoría de clones que volaban alrededor de Takara.

¿Y quién era esa bola de pelo que ha salvado a Takara de un destino de lo más venenoso? ¡Pues está claro, el gran Takaro!

El pequeño mapache, después de golpear, deja de sujetarse la cola y cae por el aire hasta agarrarse al brazo de Takara, donde alza la cabeza para mirar a su compañera de Gremio.

- ... ¿Estáis emparentados? - pregunta Quimera sin ningún tono de broma en su voz.

Mi ataque había sido al final simplemente... ridículo, simplemente dar vueltas con los brazos abiertos no fue suficiente para golpearla entre tantas copias que había creado. Cuando dijo a ella que le tocaba, me preparé para defenderme... aunque desde luego, el color verde que tomó sus garras no me gustaba realmente demasiado, pues sin duda sería algo venenoso... ¡Esto tenía pinta de que iba a doler y no sabía de quien defenderme!

Todos me atacaron a la vez... intenté defenderme, pero todas eran falsas... Hasta que al final cuando me iba a golpear... ¡Algo peludo y esférico golpeó a la Quimera correcta! Varias de las copias desaparecieron, mientras que ella recuperaba el vuelo. Entonces... no me lo pude creer... -¡TAKARO!- exclamé al verle desenrollarse, extendiendo la mano para que pudiera agarrarse y aterrizar en mi palma y que estuviera a salvo. El mapache se pondría de pie en mi mano, alzando la cabeza para mirarme...

Antes de escuchar la pregunta de Quimera, la cual me avergonzó -No, no lo estamos... Es Takaro, el mapache-mascota de mi gremio... No preguntes por el nombre, no lo elegí yo...- le respondería, antes de mirar al mapache... que fuera coña, me había salvado de un ataque con esa bala de cañón mapachil -Gracias pequeño... ¿Pero como has llegado aquí...?- le diría, acariciándole con un dedo grande suavemente la cabecita.

Pero eso me generaba muchas dudas... ¿Quien lo había lanzado como un proyectil? Porque dudo que él pudiera hacerlo solo. O si incluso realmente no lo había lanzado nadie y lo hizo él... ¿Desde cuando Takaro es capaz de hacer un Raccoon Roll? ¿Y como? Miraría a mi alrededor buscando al responsable... ¿Norman? ¿Algún compañero?

En fin... encontrase al responsable o no mirando a mi alrededor desde la altura de ser gigante... debía de atacar. Ahora había identificado cual era la Quimera original con el golpe de mapache, y al haber ahora menos copias, ahora podía verla mejor... Así que podría dejar a Takaro sobre mi cabeza, agarrándose a mis cabellos... -Me toca- diría entonces... antes de lanzar un puñetazo a la copia que había identificado como la real y esperaba no equivocarme.

Takaro se limita a mirar fijamente a Takara con su expresión apacible habitual, y cuando la maga de Radiant Dream mira a su alrededor no ve a nadie que pueda haber lanzado al pequeño. No, espera... ¿qué es eso? ¿Esa pared se ha movido? ¡No, no es una pared! ¡Es alguien pegado a la pared y tapado muy malamente con una tela, intentando camuflarse estilo ninja! ¡Pero se le nota un montón!

Sea como sea, parece que no quiere hacer daño a Takara, así que ésta procede a darle un buen puñetazo a la Quimera que identifica como auténtica... ¡y lo consigue! Habiendo estado distraída con la aparición de Takara, la enemiga se lleva el golpe de frente y sale volando hasta estamparse contra una pared mientras todas sus copias desaparecen en el aire.

- T-Tsk... - la chica chasquea su lengua, disgustada por el golpe y claramente dolorida. Al apartarse de la pared, varios fragmentos de piedra de ésta caen al suelo, demostrando que el golpe la había dejado bien empotrada. En el buen sentido, malpensados. - Está claro que no me conviene que seas tan grande.

Dicho esto... ¡Quimera abre sus alas y empieza a emitir un nuevo grito! Este grito es realmente agudo y penetrante, distinto al de antes. No hace vibrar el aire, sino que es tremendamente molesto... ¡tanto, que Takara nota que su cuerpo empieza a vibrar! Y... ¡y a encogerse poco a poco! Hasta que al final se encuentra de pie en el suelo, en su tamaño normal, con Takaro a su lado.

¡Su técnica de gigante se ha revertido! Y... ¡no parece que pueda volver a usarla ahora mismo!

Durante unos momentos miraría a Takaro como si el me fuera a responder... pero luego al buscar con la mirada, encontré y mire con cierta incomodidad aquel trozo de tela que alguien parecía querer hacer pasar como pared... inútilmente. Era tan evidente que hasta me daba vergüenza ajena -Gracias... pero se te ve a la legua...- diría agradeciendo que lanzará a Takaro... pero eso no podía dejarlo ignorado como si nada.

En fin... no podía olvidar el combate, por lo que son dudar continúe la pelea con un fuerte puñetazo... ¡Y funcionó! Le impacte y le estampe contra la pared, anotandome otro punto en esta pelea -Bueno, a mí no me conviene que vueles... estamos empatadas en eso...- le diría... aunque entonces...

¡Auuu!- la chica arpía empezó a gritar... y no dolía como tal, ¡pero joder como fastidiaba! Y no sé cómo coño... ¡Estaba encogiendo! Estaba sorprendida -Auch... joder que incómodo... ah... ¡Para tener solo una forma tienes cientos de trucos!- le diría intentando que Takaro no cayera y yo me recomponía del grito.

Joder... ¡¿Y ahora yo que hago?! Me sentía al borde de quedarme sin magia después de tantas transformaciones y de mantenerlas. Podría lanzarle a Takaro... ¡Pero es una mascota, no un arma de destrucción masiva! Y si fallaba se iba a hacer daño. En cualquier momento se me acaba la magia y quedaria calva perdiendo las ventajas... -Quedate ahí Takaro...- le diría para que no se hiciera daño... corriendo hacia los muros para poder escalar lo suficiente para saltar y alcanzarla de un buen impacto con la que lanzarla al suelo y hacer la pelea pareja.

Takaro se queda mirando a Takara con su expresión apacible, mientras la chica empieza a correr rápidamente por la sala como si se creyera una ninja, intentando así compensar su reducción repentina de tamaño. Takara es consciente de que no sólo su poder mágico está bloqueado y sus reservas de maná al límite, también su salud es muy precaria... así que tiene que hacer que su siguiente golpe cuente. La chica es capaz incluso de empezar a correr por la pared para darse impulso e intentar golpear a Quimera en el aire con su puño pero...

- Ahora yo tengo la ventaja. - dice Quimera, esquivando el puñetazo con una pirueta aérea y lanzando un graznido. Takara efectivamente falla el golpe y cae ágilmente en el suelo, justo a tiempo para ver cómo Quimera se abalanza sobre ella. - ¡Ahora que he bloqueado tu habilidad de transformación, no hay nada que puedas hacer! ¡Esto acaba aquí!

Y por un momento parece que así es, cuando las garras de Quimera están a punto de clavarse de nuevo en su rival, pero...

- ¡¿Otra vez...?! - Quimera gruñe por lo bajo, teniendo que apartarse en vuelo con rapidez para que un proyectil no la alcance. Pero esta vez no es Takaro (el pequeño mapache, de hecho, está en el suelo alzando los bracitos con entusiasmo) sino algo más pequeño. Y verde. Giratorio. Es... ¿qué es? - ¿Una... hoja?

Efectivamente, una simple hoja giratoria y bien lanzada es lo que ha hecho que Quimera tenga que interrumpir su ataque. Y como si estuviera teledirigida de alguna forma, la hoja describe un arco en el aire y vuelve sobre sus pasos para acabar en la palma de la mano de Takara. Esta hoja... ¡qué curiosa es! No sólo tiene un olor extrañamente familiar para Takara, sino que... ¡parece estar cargada de energía mágica! Una energía extraña, como... ¡natural!

Después de comprobar que Takaro estaba bien, iría corriendo hacia ella cual intento de ninja peluda. A cada paso que daba sentía el enorme cansancio que se me acumulaba en el cuerpo con tantas heridas y tantas transformaciones seguidos. Pero aún así continuaría luchando hasta que no pudiese más. Intenté alcanzarla, aprovechándome del hueco para encontrar apoyo para conseguir el impulso necesario...

¡Agh!- me quejaría al tener que maniobrar porque fallé para caer más o menos bien y no hacerme daño, rodando en el suelo y volviendo a incorporarme. Jadeaba mientras veía a Quimera -¡No soy solo transformaciones, se pelear a fuerza bruta, por lo que no me pienso detener hasta que no me pueda poner en pie! ¡Adelante ven!- le diría manteniéndome en pie desafiante, preparándome para el impacto que se venía con la intención de no parar incluso si para ello no podía recurrir a las transformaciones por miedo a perder la forma tanuki.

Aunque antes de que me fuer a embestir... De nuevo algo la hizo apartarse del ataque cuando se lo lanzaron y tuvo que esquivarlo. Pero esta vez no era Takaro, quien parecía estar animándome levantando sus bracitos. Entonces me fijé mucho mejor en aquél proyectil... -¿Una hoja...?- preguntaría cuando escuché a Quimera, antes de que esta acabase en mi mano con un cambio ilógico de trayectoria. Miraría hacia la tela mal colocada de ese sujeto que se escondía... claramente extrañada de lo que tenía en la mano. Al principio pensaba que sería Norman o alguien así... pero ahora si que sabía que no era él -¿Como has conseguido esto...?- preguntaría a quien sea que se escondiera, al pensar que reconocía ese objeto -Creo que es... una hoja de tanuki genuina...- le respondería a Quimera, mirándola... ¿Porque me resultaba tan familiar?

De forma instintiva, la usaría poniéndomela en la cabeza... Sintiendo como me cargaba de energía mágica, ¡sintiéndome que me podía convertir en lo que quiera! -¡Con esto aún me queda una transformación más!- diría preparándome, concentrándome en transformarme, cubriéndome de una nube de humo. Aunque cuando se despejó... en principio aparentaba estar normal, sin cambios aparentes... ¿La transformación no había funcionado? Por mi sonrisa desafiante desde algo había hecho -¡Ahora si que no te vas a escapar de mis golpes!- le diría entonces, lanzándome a por ella...

En ese momento se notó que mis movimientos eran mucho más fluidos por todo el cuerpo, y acercándome casi parecía ir rebotando. Entonces le lanzaría un ataque a la arpía; pero cuando esquivase volando hacia atrás o hacia arriba... ¡Vería que mi puño continuaría yendo hacia ella estirándose! Aunque mi transformación no fuera visible de primeras, había resultado... ¡Ahora era completamente flexible como la goma, y podía estirarme y comprimirme como tal!