Partida Rol por web

El club mas selecto de la ciudad, las mejores chicas, el mejor ambiente....

Las noches de diversion siempre asegurada para los varones de la clase alta, acaba de cerrar sus puertas. Es hora de limpiar y dormir mientras el resto de la ciudad comienza a despertar timidamente....

Las puertas se cerraron y por las traseras entraron las mujeres que se encargaban de dejar el local como los chorros del oro para nosotras y para los clientes mañana, pues habia algunos que por un "modico" precio pasaban alli la noche con alguna chica.

Sonrei Andre con una caricia en la mejilla - Puedes ir a descansar querido, no creo que ahora necesite que vigiles mi precioso culo - Le guiñe un ojo con un calido beso en la mejilla pues aque hombre era como un hermano apra mi, demasiados años juntos.

Me dirigi a la barra y entre poniendome una copa de whisky, tras ello di la vuelta y me sente en un taburete con als piernas cruzadas observando el Complex en silencio, me gustaba la paz que habia ahora, ver como als chicas recogian sus cosas, como los camareros ordenaban las barras, y como la vigilancia acompañaba a las que no vivian aqui a sus casas con sus familias.

-¿Estas segura?.- Pregunta como siempre tomando tu mano para besar su dorso cariñosamente.- He oido que "la escoria" esta dando problemas otra vez... me gustaria dar una vuelta por los alrededores, me quedaria mas tranquilo.

- Uff... menuda noche... Otra asi y voy a tener que pedirte la baja, jefa, tengo la espalda echa polvo.. y lo que no es la espalda.- La chica se rie con picardia.- Por lo menos era uno de los guapos y de los pocos que saben como se hacen las cosas bien.

Alison te tiende un fajo de dinero.- Ya se que deberia pagarlo el pero me a dado el dinero para ti, tenia prisa y salio antes de pagar por el servicio. Espero que no te moleste, jefa.

Sonrei poniendo los ojos en blanco - Esta bien... Pero despues vete a descansar y disfrutar de tus horas libres, pasas demasido tiempo aqui sin disfrutar de sus placeres - Le comento mientras doy un trago a mi copa y me fijo en si esta todo como deberia estar en la sala, que no falte nada o sobre alguien, pues a veces quedaba algun borracho bajo una mesa..

- Verte ya es un placer para mi, muchos hombres matarian por mi trabajo.- Andrei sonrie se despide con una pequeña reverencia de todas y toma su abrigo para salir a la calle.

El clima es muy raro, puede hacer frio o calor extrema de un dia para otro...-- Volvere pronto pero no me espereis despiertas, teneis que dormir bien para manteneros hermosas.

Le cogi el dinero a Ali y lo guarde en el liguero dandole un porcentaje a ella - No pasa nada, tomate algo date una ducha y descansa, cuando te despiertes pasa por mi despacho tienes varias peticiones apra esta noche, asi podras escoger lo que mas te guste - Le comento guiñandole un ojo a andrei antes de que saliera por la puerta.

Álex, que se había conseguido colar por una puerta trasera cuando alguno de los empleados salía, se encontraba muy quieta detrás de una cortina. Se esperaría a que todos saliesen para moverse a su aire y ya se buscaría la vida para salir después.

Escucha atenta las voces, esperando que cesen, para encontrar su momento de salir. Oye que se cierra la puerta, y parece ser que no se oyen más voces... decide asomarse, a ver qué ocurre.

Cuando la gatita asomo finalmente la patita se topo conmigo delante mirandola con una ceja enarcada.

En mi mano habia dos copas la que estaba tomando yo y una qu ele puse a ella en las manos - Esto es sencillo rubita, solo puede haber tres razones para que hayas entrado aqui sin permiso, primero que estes muy loca, segundo que seas una suicida y tercero que estes muy desesperada - Ladee la cabeza mirandola con una sonrisa justo antes de subirme de nuevo a un taburete y cruzar las piernas esperando una respuesta mientras daba un trago.

Álex está apunto de salir por patas cuando se queda completamente confusa al ver que le ofrece una copa. La coge, alzando una ceja desconfiada. ¿Encontraba a una polizón en su negocio y la invitaba a tomar algo? Algo no cuadraba.

Camina bordeándola, como si estuviese en un partido de judo. Con la copa cogida con las dos manos, sin acabar de decidirse a beber.

Puede que sean las tres. Se decide a responder finalmente, eso sí, sin quitarle la vista de encima, ni siquiera para parpadear, aún desconfiada.

- Bebe te ayudara a entrar en calor, se que fuera hace frio - le digo observando como se manteia como un felino auteloso y con el bello levemente erizado. - ¿Sabes quien soy? - Pregunto sin mas - Pues si estas loca me parece perfecto yo tambien, si eres una suicida ya puedes poner tu culito fuera de mi local pues dentor de estas parede no muere nadie y tercero, si estas desesperada...¿Que buscabas aqui?

Álex parece en seguir en sus trece de desconfianza. Al fin y al cabo, llevaba años sola y las únicas personas con las que se había relacionado... no eran muy dignas de confianza que digamos.

Pero aún así, le hace caso, y bebe. Tenía demasiada sed y frío como para ponerse gallita ahora.

¿Si dentro de estas paredes no muere nadie, por qué ser una suicida sería una de las razones por las que entraría? Pregunta con lógica. Y me parece bastante lógico lo que buscaba... Dice mirándola a ella, y luego mirándose a si misma. Su ropa sucia y andrajosa, y su estómago no dejaba de rugir.

- Que no mueran dentro de estos muros no quiere decir que no lo hagan fuera - Tras mis palabras termino mi copa y toco un timbre, pocos segundos despues por las escaleras laterales aparece una muchacha joven, demasiado joven quizas unos quince años - Sarah, prepara un baño caliente, una buena cena y ropa limpia para esta chica, en la habitacion 21 - La muchacha subio rapidamente.

- Si quieres trabajar aqui tendras que demostrarme que tienes algo ams que una cara bonita, y los escrupulos de dar tu compañia a ciertos hombres que la pidan, uno de mis chicos te provaria en la cama para saber que puedes dar algo decente a mis clientes, y soy muy exigente, aparte de no tener ninguna enfermedad ni nadie que te persiga y pueda joderme, aqui todos somos una familia y no protegemos entre nosotros, pero para entrar en ella tienes que cumplir esos factores ademas de darme un gran razon para contratarte a ti y no a otra desgraciada de las calles.

Álex se queda totalmente en shock. Finalmente consigue poner los pies en el suelo de nuevo y puede responder.

¿Por qué razón harías eso? ¿Necesitas más gente? Parece que la cosa ya te va bien así... Dice aún, por culpa de la maldita desconfianza. Y bueno, en cuanto a lo de los escrúpulos... el peor que podría encontrarse ahí, sigue siendo mejor que el mejor de los que se ha encontrado fuera. Estoy sola. Dice respondiendo a otro de sus requisitos. Y al parecer, lo dice sin ningun sentimiento. Realmente parecía una muñeca sin vida, sucia, pero una muñeca al fin y al cabo.

No sabé qué razón darle. Ni siquiera sabe si quiere trabajar ahí. Es solo que en pocos segundos esa chica le ha abierto las puertas de su negocio, y le ha ofrecido comida, ropa y cobijo. Realmente sonaba bien. Aunque seguía sin saber respuesta para su última petición.

- Tengo debilidad por las ovejas descarriadas, todas mis chicas estan aqui porque lo necesitan, porque tiene algo, no simplemente porque tengan una cara bonita... - Comento mientras subimos las escaleras hacia "su habitacion" - Puedes llamarme Kat y hasta la hora de comer tienes tiempo par convencerme de que te contrate.

Llegamos delante de la puerta con numero 21 y la chica sale diciendo que ya esta todo listo.

Cuando la puerta se abre, incluso Álex duda en si entrar. Parpadea varias veces y abre la boca sin cortarse ni un pelo.

¡Hacía mucho que no veía un lugar tan elegante y limpio! Desde que vivía con su familia, exactamente.

Uauu... Deja ir observándolo todo. Bueno, no sabía como la convencería para quedarse, pero si esa habitación sería suya siendo contratada, no se lo pensaría. Y bueno, en caso de que al final no la contratase, al menos se habría duchado gratis. ¿Porque cumpliría con su favor de dejarse duchar y cambiar de ropa, no?

Al surgirle esta duda, se dirige al baño y lo señala.

¿Puedo? Pregunta aún asombrada.

Sobre el mueble de la habitacion hay ropa limpia, toda bastante sexy y una bandeja con comida caliente y bebida, en el baño estaba todo listo con sales champus geles y todo lo necesario - Duchate vistete y cena, yo estare abajo, si necesitas algo pideselo a Sarah ella es la que se encarga de las necesidades qie podais tener - Aquella niña era demasiado joven para hacer que vendiera su cuerpo y era el unico trabajo que podia darle para que pudiera mentener a sus hermanos...

Tras ello me despedi dejandole su intimidad.

Sin casi esperar permiso, Álex ya se estaba despelotando, total, gente peor la había visto desnuda.

No tarda en encender el agua y meterse debajo del chorro disfrutando de su calor. Se sentía tan recomfortada que dando por hecho de que estaba sola, empieza a cantar. Hacía bastante que no lo hacía. La primera canción que le viene a la cabeza, es la nana que su madre le cantaba antes de ir a dormir, y precisamente esa canción era la que le venía al pelo ahora mismo.

Se tira bastante rato en la ducha, pero finalmente decide salir o acabaría siendo una pasa. Con el pelo mojado y una toalla alrededor del cuerpo se dirige a la habitación a comer algo, luego se vestiría.

Cuando llega abajo la sala principal esta completamente vacia, simplemente estoy yo sentada en el escenario delante de un piano negro de cola - Canta - Dije simplemente. Esperando que con eso entendiera lo que podia ofrecerme, pues ella aun no sabia qu eestas paredes tenian ojos y oidos siempre.