Partida Rol por web

Rantos estaba ilusionado por la boda.... pero no sabía mucho de la doncella. Así que fue a buscar a su madre quien sabría algo más de ella probablemente. El heredero fue a los aposentos de labores de su madre tras el desayuno.

-¿Qué tal madre?-le dio un par de besos y tomó asiento tras cerrar la puerta

-Supongo madre que la boda es idea tuya...Padre tiene muchas cosas buenas pero me extraña que un giro así de los acontecimientos haya salido de él, de todos modos es ya un hecho y debemos de alegrarnos de poner fin a esa hostilidad vacua. -dichos los preámbulos, ahora venía el plato fuerte- ¿qué sabes de mi futura esposa? Yo no la conozco ni sé cuantos hermanos tiene ni como es, ni he oído nada de ella.-ej joven tenía curiosidad por la doncella, pero también por su familia en general.

-Por desgracia tengo que decir que todo esto fue idea de tu padre.- Comento la mujer a su hijo. -Las hostilidades entre las dos casas ya no eran tan importantes y concertar este matrimonio fue una buena forma de "firmar la paz" de una vez.- Agregó
-Bien quieres saber cómo será tu esposa, esa es una inquietud común de toda persona cuyo matrimonio fue arreglado por sus padres. Para tu tranquilidad te diré que la chicas es muy bonita, además también es muy refinada y tiene aprecio a los libros.- Comenzó contando la señora.
-Tiene una hermana menor que también es una belleza pero no han querido que se comprometiera con tu hermano. Aunque si me prometes no contar nada, te diré que estoy hablando con Theomar Smallwood para poder casar a su hija con tu hermano. Si todo sale bien y podemos demostrar prestigio durante tu boda lograre que tanto tu como tu hermano puedan tener tierras nuevas que heredar a sus hijos.

-Vaya... Padre está cambiando para mejor, desde luego es una buena forma de firmar la paz pero algo me dice que no todo está bien, sé que no debería desconfiar Madre, pero algo huele mal-el joven estaba intranquilo-¿no te parece madre?

Posteriormente el joven habló sobre su prometida:

-Me alegra que sea bella, pensaba mantener mis votos igual, pero siempre es más fácil cuando tu esposa es bonita- realmente esperaba cumplirlos, pero tras la vida en Dorne le iba a costar... eso sí, había aprendido algún truco.

Habló de Tristan:

-Hay que darle un papel importante a mi hermano, ya no es un niño, podrías comentarle que estás intentando enlazarlo con la hija de los Smallwood, a mi me habría gustado que se me informara de la unión de los Vance, así que imagino que a él también le gustaría...ya es todo un hombre...y le hará sentirse importante

Lady Katherin pensó unos segundos lo que dijo su hijo y asintió. -Creo que tienes razón. Deberíamos hacer partícipe a tu hermano de este arreglo. Seguramente se pondrá muy contento del mismo, si todo sale bien tanto tu como Trsitan tendrán tierras para gobernar. Y mis nietos serán Lord Kelmstein de descanso de caminante y Lord Kelmstein de torreón bellotas.- Dijo enfatizando la pronunciación de la palabra "Lord".

-¿Quieres que sea yo el que hable de esta noticia con él o quieres ser tu el que se la de? Preguntó aun sumida en la ilusión de sus gallardos nietos.

Rantos meditó unos segundos..deseaba lo mejor para su hermano pequeño y finalmente asintió:

-Tal vez deberíamos ir los dos y decírselo, seguro que se alegra de ver que ambos respaldamos la idea.

Luego del desayuno Lady Katherin y su hijo llamaron a Tristan para comentarle la noticia.

-Hijo.- dijo la señora de la casa dibujando una enorme sonrisa en su rostro. -Tu hermano Rantos y yo tenemos una agradable noticia que darte.- Agregó dándole espacio a su hijo para que continuara.

-¿Si? -respondí mirando a Rantos, haciendo pasar mi preocupación por curiosidad y tratando de no imaginar que el pene de mi hermano estaba lleno de pústulas de sífilis y necesitábamos un nuevo heredero.

¿Otro paso atrás para consolidarme como alguien relevante?

Tristan estaba serio, bueno intentaba mantenerse serio, una risilla de no saber mentirle a su hermano se le asomaba mientras le daba la noticia bromeando:

-Hemos pensado que para mayor gloria de esta casa tomes el Negro y defiendas el Muro y el Reino...-no podía aguantar la risa al saber que había por lo menos captado la atención de tu hermano-

que nooo hermano, no es eso-dijo todavía soriente mientras le ponía la mano cordialmente en el hombro- Madre lleva tiempo intentando cerrar tu enlace con la única hija de Theomar Smallwood... para darle un empujón a la negociación creo que deberías conocer a la doncella. -Hizo una pequeña pausa y miró al vacío para luego seguir hablando-Para ello se me ha ocurrido que le lleves personalmente la invitación de mi boda a los Smallwood y tendrán que recibirte por las leyes de las Hospitalidad como corresponde a tu rango. Tendrás varias ocasiones de conocer a Lady Carellen y de pasar tiempo con ella...aunque la decisión depende de su padre si nota que congeniais y que la vas a tratar bien es más probable que se incline por ti que por otros nobles que solo quieren sus tierras y no a su hija. ¿Como lo ves Tristan? Al ser hija única ya sabes que heredarías sus derechos y tierras-tu hermano te miraba con confianza, sabiendo que lo conseguirías.

Obviamente la broma no ha sido divertida, pero no tengo tiempo de burlarme del comportamiento infantil de mi hermano, porque empieza a hablar de una propuesta asombrosa.

¿Casarme, yo? ¿Con una heredera?

Ahora nada podría disimular la sorpresa. No podía esperar esta propuesta, ni tampoco había pensado seriamente en algo así, dada la poca reputación de mi familia y mi papel en ella.

-¿Pero...? -respondo, confuso, antes de cerrar mi ridícula boca abierta y construir una frase de verdad-. Muy bien, por supuesto que será un honor cortejarla. Pero mi sentido del honor me impide tomarla si no congeniamos.

Después de la respuesta de cortesía, las explicaciones del por qué de esta propuesta, acuden a mi mente. Es horriblemente fea. O retrasada. O ambas cosas. O estéril, o tiene mala reputación, o tiene hijos bastardos del herrero de su minúsculo pueblucho. ¿Donde diablos estaban los Smallwood? No me suenan.

Ladu Khaterin negó con la cabeza. -No creo que sea buen idea que sea el quien lleve la invitación. Los cuervos son más rápidos y formales, además no queremos mostrar desesperación. Aún no he acordado el arreglo con Lord Samllwood, tu boda sea el lugar preciso para cerrar bien todo el trato por eso tiene que ser perfecta.- Dijo a su primogénito

-Tristan, hijo. ¡Estamos hablando de una heredad para ti y para tus futuros hijo! que importa si la chica no congenia con tigo. Yo en muchas cosas no congenio con su padre pero eso no me impide ser su compañera.- Dijo la señora de la casa ahora hablando con su segundo hijo.

-Piensa en tu futuro, podrás administrar las tierras de tu esposa, tendrás tu asentamiento y sus impuestos, decidirás sobre las tierras y podrás tener una vida completamente independiente.- Agregó. Claro, Lady Katherin obvio el comentar que la casa Smallwood era vasalla de los Vance y por consiguiente debería tributar y responder militarmente a su hermano mayor.  

Me mantengo inmutable a la perorata de madre. Ya conocía su habilidad con las palabras. Todo lo contrario a padre.

-Muy bien, madre. Lo consultaré con la almohada y pensaré en lo mejor para nuestra casa.

Haciendo el gesto de levantarme de la silla, me detengo y miro a mi hermano.
-¿Idea tuya, hermano? Gracias por tenerme en cuenta -añado con una sonrisa.

Después de ser excusado por ambos, voy a buscar a Lady Alyse mientras pienso en qué necesito hablar con el maestre.

Rantos miró con cierta preocupación a ti y luego echó una mirada a madre para acabar diciendo:

-No te molestamos más madre, me quedaré con Tristan un rato, quiero hablar con el unos detalles de mi enlace, ¿te parece hermano? - en realidad era una excusa para quedarse sin Madre y poder hablar ambos.

-Por supuesto. Dime, Rantos. ¿Puedo ayudarte en algo?

Vuelvo a una postura relajada, sin intención de levantarme de la silla ahora mismo.

Lady Katherin asintio y se despidio de sus hijos

Primero la zanahoria:

-No conozco a la hija y heredera de los Smallwood, pero ten en cuenta que si no es de tu agrado siempre puedes buscar otros placeres que te llenen. Para algo serás el Señor.- si tu mujer era fea, bueno... había otras mujeres a las que podías casi obligar a que te complacieran siendo el Señor de sus tierras.

-Por otro lado, aunque madre dice que esperes...depende de ti, si quieres verla antes de la boda lo podrías hacer, o bien podrías esperar como dice ella, decide tu..es tu futuro, a mi ni me hicieron partícipe pero espero que a ti si-en este caso su hermano le ofrecia ayuda para convencer a madre, si iban los dos tenían más opciones que hacerlo por separado.

Le escucho hasta el final antes de responder.

-Si, entiendo. Aún asi, prefiero conocerla antes del compromiso. ¿Quién se iba a imaginar que yo era el idealista de la familia, hermano?

Sonrio y suelto una pequeña risa. Tendré que averiguar que clase de dominio tienen los Smallwood.

-Te agradezco que me apoyes en esto, hermano. Muchas gracias, Rantos.