Partida Rol por web

Seigaku School

Tras el telón

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11/03/2015, 14:05
Voz narradora

Final del pasillo, salieron fuera y Yukino estaba pisándole los talones. Estaba claro que aquella persona no debía de dedicarse a los deportes porque había bajado el ritmo de correr y se le podía escuchar los jadeos cansados debido a la necesidad de coger aire. Cuando la chica estuvo a menos de un metro, de forma imprevista el otro se dio la vuelta, dispuesto a empujarla con fuerza y apartarla de él con desesperación:

- ¡Menuda molestia eres, Kazehaya!- sin duda la voz era masculina, aunque como estaba difuminada por el cansancio la chica no pudo identificar bien de quién se trataba.

Notas de juego

1d6:

1.- Recibes el empujón y el golpe es tan fuerte que te deja tirada y dolorida. Él escapa.

2.- Recibes el empujón y se aleja nuevamente corriendo. ¡Pero no está perdido! Aún puedes volver a alcanzarle, ¿no?

3,4,5.- Eres capaz de esquivarlo y tienes derecho a intentar una acción. Dependiendo de lo que me digas, te comento.

6.- Esquivas el empujón como si él hubiera realizado los movimientos a cámara lenta e incluso te sale de forma automática el lanzarle una patada que lo dejará tumbado e incapa de continuar corriendo.

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11/03/2015, 14:12
Yukino Kazehaya

Fuera quien fuera empezaba a estar cansado, aunque claro, ella también. Por suerte el entrenamiento físico la hacía mucho más tolerante al cansancio que aquel chico, que parecía estar deseando tumbarse en el suelo. Por desgracia, su treta de hacerle hablar sólo funcionó a medias puesto que el cansancio distorsionó su voz hasta hacerla irreconocible.

Sin embargo aquel no fue el único error que le dio pues intentó propinarle un empujón, algo que Yukino esquivó sin demasiadas dificultades. Aprovechando la inercia tiró de su brazo hasta que ambos cayeron al suelo, ella encima de él, tras se movió rápido hasta colocar sus rodillas sobre el pecho del chico y tiró de la capucha hacia atrás.

- Tiradas (2)
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11/03/2015, 16:49
Voz narradora

Menuda fiera estaba hecha Yukino. Daba igual que hubiera estado dos horas interpretando con los nervios a flor de piel, daba igual que tuviera que correr con vestido y tacones, era lo mismo saltar todo un tramo de escaleras a toda velocidad, esquivar bancos e incluso el ataque de una persona por sorpresa. ¡Daba igual! Allí estaba ella placando con su cuerpecito el de una persona más fuerte y alta que ella, tirándole al suelo y colocándose encima de él.

El objetivo estaba claro y lo consiguió. Tras la capucha... Tachibana Yamato apareció, jadeante y sin fuerzas. Parecía bastante molesto por todo aquel espectáculo:

- Joder, ¡Kazehaya! Eres un monstruo... inhumano... ¿Qué os dan en el club de tenis?

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11/03/2015, 17:13
Yukino Kazehaya

Durante una fracción de segundo se quedó tan sorprendida que no fue capaz de encontrar ni las palabras ni los sentimientos adecuados a la situación. Claro que cuando aquel momento de incredulidad pasó dio paso al enfado y a la ofensa, pues a pesar de los indicios que le habían apuntado Yukino no había querido creer que fuera el culpable.

- ¡Tachibana! ¡¿Qué yo soy un monstruo?! - exclamó con indignación -. ¡Yo no voy por ahí robando a la gente ni dejando notas para que inculpen a otros! - se apartó de encima suyo pero sólo fue para cogerlo con fuerza de la muñeca derecha y tirar de él hacia arriba -. Levántate, nos vamos a ver a Kototsu-sama - cada sílaba estaba cargada de la furia que en realidad sentía.

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11/03/2015, 23:53
Tachibana Yamato

Aún jadeante, se dejó levantar pero no caminó. No estaba dispuesto a pasar por aquello. ¡Ni hablar! Ahora debía de pensar en Yukino como una posible "aliada" por muy poco que le gustara relacionarse con la gente y en concreto con ella. ¡Era tan molesta...!

- Te estás equivocando. Yo no soy el ladrón. Pero él...- dudó una centésima de segundo. Lo cierto es que no tenía otra opción. Suspiró para volver a coger aire. Le dolía el costado debido a la fuerza con que Yukino había ido a por él.- me está chantajeando, ¿vale? No me quedaba otra más que hacerle caso. Tenía que llevar las flores allí, con esa nota y salir de ahí sin que nadie me viera. Si no lo hacía o si me descubrían... haría efectiva su amenaza.
 

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11/03/2015, 23:58
Yukino Kazehaya

Le soltó, molesta por el contacto. Al fin y al cabo, ¿qué podría hacer? ¿Intentar marcharse de nuevo? Yukino podría atraparlo de nuevo y aún si ese no fuera el caso, ahora ya lo había reconocido, no había forma de que ocultara su identidad de ella. Se cruzó de brazos, contrastando vivamente con el aspecto femenino que le daba el vestido.

- Pruébalo. Todo lo que dices suena muy bien y muy conveniente pero obviamente podría decirlo el propio ladrón para salir del paso, ¿por qué tendría que creerte? Si es como dices, ¿sabes quién es? ¿O cómo se pone en contacto contigo? Si no sabes quién es seguro que habrá algún registro de su modo de comunicarse contigo - intentaba pensar rápido, adelantarse a sus posibles excusas o comentarios para salir airoso -. No quise creer los comentarios de la gente acerca de ti pero por lo visto tenían parte sino toda la razón...

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12/03/2015, 00:09
Tachibana Yamato

La expresión de Tachibana no era seria como la de Tezuka, sino grave y mostraba claramente cuánto le desagradaba tener que mantener aquella conversación. Pero si no le enseñaba a Yukino las pruebas para que le creyera y colaborara en eso de mantener el secreto, se vería obligado a mostrar su intimidad a toda la ciudad. Chasqueó la lengua, claramente molesto:

- Entonces ven conmigo. Te enseñaré las pruebas si tanto las quieres.

La miró con rotundidad. Obviamente que no se llevaba las pruebas consigo. Era demasiado arriesgado.

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12/03/2015, 00:14
Yukino Kazehaya

Alucinaba con la cara dura del tío. O sea, le habían pillado en aquellas circunstancias y aún parecía sentirse molesto por la interrupción de sus quehaceres. Por desgracia parecía más o menos dispuesto a colaborar de modo que no podía enviarlo todo al traste por un arranque de mal genio. Se tragó sus palabras iracundas y sacó el móvil.

- Está bien, un segundo - tras lo cual se puso escribir un mensaje con Tezuka de destinatario.

"Emergencia, ya te lo contaré luego aunque creo que deberías venir, esto no me gusta. Tiene que ver con el ladrón. Voy a conectar el GPS para que me puedas localizar y te enviaré las coordenadas GPS".

Cerró la tapa del móvil sintiéndose de repente un poco asustada. ¿Era aquello prudente? No. Por eso había cambiado lo que iba a decirle a Tezuka a la mitad, porque le parecía que si Tachibana era el ladrón aquello podría ser una trampa y ella sería tan tonta como para caer de lleno.

Por favor, ven.

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12/03/2015, 11:06
Tachibana Yamato

Una vez Yukino estuvo de acuerdo, Tachibana se puso a caminar. Iba a la mayor velocidad posible pero era bastante escasa debido al gran esfuerzo que había realizado anteriormente. Además, se llevaba de vez en cuando la mano a la boca del estómago, donde Yukino le había pegado con bastante fuerza.

La mala suerte les acompañó en el camino pues se puso a llover bastante, obligándoles a acelerar el paso mientras Tachibana no paraba de protestar casi para sí. Su pelo, en la mayoría de las ocasiones peinado, ahora caía sobre su cara goteando.

Cuatro manzanas después del comienzo del recorrido llegaron a uno de los barrios más modestos de la ciudad. Yukino nunca antes había pisado esos lugares. En esos momentos no había nadie por las calles a excepción de un par de vagabundos que intentaban cobijarse de la lluvia bajo soportales. Cuando llegaron al portal número dos, Tachibana sacó las llaves y abrió el portal. En el interior olía a comida y humedad. Subió las escaleras a falta de ascensor, sin darle instrucciones a Yukino. En el segundo piso pararon en la puerta con el número 2. Yamato, que no había cambiado su expresión, abrió con otra llave y entró.

- Cierra la puerta cuando entres.

La casa era, como se esperaba, modesta y sin ningún tipo de lujo. La luz era bastante pobre pero los suelos parecían limpios. Un largo pasillo se extendía hasta el fondo permitiendo la entrada a las diferentes salas de la vivienda. A la izquierda había un salón con lo mínimo donde dos niños pequeños hacían los deberes. Más o menos tendrían un par de años más que Kotaro.

Niños:- ¿Oni-san?

Comentaron al ver pasar como una bala a Tachibana. Unos metros más adelante, la puerta estaba a la derecha y daba acceso a la cocina desde donde provenía ruido de cacerolas.

???:- ¿Yamato? ¿Eres tú?

Yamato:- Hai.

Pero no paró. Si Yukino pudo fijarse es que se trataba de una señora más bien joven y agraciada, con un delantal y el pelo recogido en un moño bien elaborado. No tenía rasgos orientales. Junto a ella había una niña, de doce años aproximadamente, que se quedó tan congelada como la madre al ver pasar a una chica junto a Yamato.

Finalmente llegaron a la habitación del fondo a la izquierda. Yamato entró con decisión y encendió una luz igual de pobre que las que había en el resto de la casa. Ni un cuadro, ni una televisión grande, ni ordenador... nada que no fuera esencial para vivir se podía encontrar en aquel lugar.

Yamato:- Cierra la puerta cuando entres.- le ordenó nuevamente.

Sin decirle que se pusiera cómoda, que se sentara o que podía ir al baño a arreglarse un poco, Yamato comenzó a rebuscar algo debajo de su cama.

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12/03/2015, 11:23
Yukino Kazehaya

Bajo la lluvia no tardó en tener frío. El vestido era bonito y voluminoso de modo que ya no sólo estaba el problema de llamar la atención por la calle sino que era imposible que no acabara chorreando con tanta tela para absorber el agua de la lluvia. Además, mojado como estaba se había vuelto pesado y definitivamente incómodo.

A pesar de todo, no se quejó. Siguió caminando en silencio mientras deseaba que Tezuka hubiera recibido su mensaje. ¿Qué pasaría si no lo había leído? Quizás en aquel momento seguía festejando con los de teatro mientras se preguntaban dónde estaba Yukino.

En el fondo no podía dejar de pensar que había tomado una decisión equivocada al acceder en acompañarle, pensamientos que se acentuaron al verse en uno de los barrios más pobres de la ciudad. El enfado había dado paso a una seriedad impenetrable que ocultaba sus miedos mientras subía por la estrecha escalera.

Pero esos miedos se fundieron en una silenciosa sorpresa al encontrarse con la familia de Tachibana, una familia grande y al parecer bastante pobre. No pudo evitar sentir una punzada de lástima por los niños y una tenue comprensión, aunque eso no la hacía sentirse menos recelosa.

Entraron en su habitación, donde se detuvo en medio de la estancia con el vestido goteando en el suelo. No le invitó a sentarse aunque tampoco lo hubiera hecho pues sólo habría servido para mojar la cama y pegar la tela húmeda a su cuerpo.

Aprovechó aquel momento en que Tachibana rebuscaba bajo la cama para encender la grabadora del móvil pero no dijo nada, permaneció callada y a la espera.

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12/03/2015, 11:38
Tachibana Yamato

De debajo del colchón no tardó en sacar un gran sobre amarillo. Después se acercó a Yukino, sacó los documentos que allí había y se los tendió, mirándola desde arriba con expresión de enfado.

- Toma.- Seguía preguntándose si podría ser buena idea todo aquello, pero al mismo tiempo la voz de su interior le repetía una y otra que no le quedaba otra más que confiar. "Mejor que lo sepa una sola persona a que lo sepa todo el mundo"- Échale un vistazo.

Notas de juego

Primera cosa que ves:

Son fotos de la madre de Tachibana. Primero con una gabardina y hablando en una esquina de noche con un señor. La siguiente también. Las cuatro siguientes tienen el mismo escenario. Es una habitación de hotel, la madre de Tachibana está seria, con una mano en cada cortina, dispuesta a cerrar la visión del resto de personas. Lleva una especie de kimono de geisha. Detrás de ella se puede ver a un hombre distinto en cada foto.

Después de las fotos hay notas con recortes de papel:

No queremos que nadie lo sepa, ¿no? A partir de ahora requeriré tus servicios.

Primer encargo: consigue las hojas del castigo de Kunimitsu Tezuka. Quédate con una hoja de esas y las otras las dejarás debajo de tu pupitre de clase. Como te pillen o digas algo, publicaré estas fotos y toda la ciudad lo sabrá.

Segundo encargo: Compra unas flores y deja esta nota entre bastidores. Cúbrete la cabeza con una sudadera oscura. Y te repito, como algo salga mal, no dudaré en deshacerme de ti.

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12/03/2015, 11:58
Yukino Kazehaya

Se quedó mirando las fotos con una honda sensación de pena. La madre de Tachibana era prostituta, era la única explicación a aquellas fotos y podía comprender por qué el chico no quería que los demás lo supieran. Dejando al margen aquello, Yukino personalmente creía que lo mejor hubiera sido aceptar la vergüenza y llevarlo a la policía pero entendía sus motivos.

Cerró los ojos unos segundos, sin querer mirar más aquellas imágenes, asqueada no por la profesión de la madre de Tachibana sino por lo que podría llevar a alguien a dedicarse a aquello y como otra persona podría osar aprovecharse de una situación tan triste. Las gotas de agua de su pelo mojado se deslizaron por su rostro, hasta su cuello. De repente se sentía un tanto abatida, por todo.

- ...lo siento - acabó por decir al cabo de un rato, mirándole a la cara con expresión grave -, no quería hacerte daño, sólo quería comprender por qué esa fijación por Tezuka. ¡Tampoco entiendo por qué te hace esto a ti! - sacudió la cabeza con frustración antes de volver a serenarse -. ¿No sabes nada más? ¿Cómo te llegaron esas notas?

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12/03/2015, 13:01
Tachibana Yamato

Evitaba mirarla a la cara. Su cara de enfado y hastío se había pronunciado si cabía un poco más.+

- Mi padre nos abandonó hace un año. Se fue con otra mujer.- y por eso odio a todo aquella chica que aparece nueva en cualquier lado- Mi madre se quedó sola, sin trabajo y en un país que ni siquiera era el suyo con cuatro hijos a los que alimentar. No ha encontrado otra forma de sobrevivir. Mis hermanos pequeños sufrirían las consecuencias de todo esto si se llegara a saber. Solo yo soy consciente de los esfuerzos que está haciendo mi madre.- contenía la rabia. Odiaba a aquel hombre que dejó de lado a toda su familia y sus responsabilidades.- Las notas me llegan al buzón a mi nombre. No sé nada más.

Para él estaba claro por qué lo habían cogido a él. Ese ladrón necesitaba un ayudante y quién mejor que alguien con un secreto tan importante.

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12/03/2015, 13:07
Yukino Kazehaya

Ella no le había pedido todas aquellas explicaciones a Tachibana pero él parecía necesitar aquella razón, justificar el por qué habían llegado a una situación similar y por qué no le convenía que nadie lo supiera. Por un momento estuvo tentada de ofrecerse para ayudar pero ¿qué podría hacer ella? Sólo ser una entrometida.

- Entiendo - dejó que la mirada vagara por la habitación -. No te va a gustar lo que voy a decirte - acabó por decir aquello con un suspiro, centrando la mirada en él -. Está claro por qué no se lo has contado a nadie, pero si necesitas a alguien que cuide de tus hermanos algún día puedes decírmelo, tengo un hermano pequeño también, o si necesitas el ordenador para algún trabajo... - elevó ligeramente los hombros, totalmente incómoda -...bueno, eso, ya lo he dicho.

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12/03/2015, 13:15
Tachibana Yamato

Era totalmente cierto lo que Yukno había predicho. No le había gustado nada a pesar de que se esperaba que le dijera que iba a contarlo por ahí a alguien. Apretó la mandíbula unos segundos antes de contestar:

- No necesito la solidaridad de nadie.

En cierto modo sí que la necesitaba, pero su orgullo le llevaba a no aceptar ayuda y menos aún de aquella chica. Le había caído mal desde el principio y después de que ahora supiera su secreto la cosa había empeorado. Ahora se sentía a merced de otra persona más y no las tenía todas consigo todavía. Estaba claro que aquella noche no dormiría.

La gente se suele aprovechar de las circunstancias de los demás. Esto no será distinto.

En ese momento la puerta se abrió de golpe y apareció Tezuka también empapado y con cara de pocos amigos. No dudó en levantar a Tachibana sujetándole del cuello de la camiseta empapada del chico y acercó su cara a la de él.

Tezuka:- ¡Cómo le hayas hecho algo te arrepentirás de ello!

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12/03/2015, 13:21
Yukino Kazehaya

La respuesta de Tachibana le hizo poner los ojos en blanco. Vale, lo cierto es que ahora su opinión de él estaba teñida de compasión pero aún así era desagradable, fuera por los motivos que fuera. Estaba empezando a pensar en marcharse de una vez cuando Tezuka irrumpió en la habitación hecho una fiera, sujetando al chico del cuello de la camisa con aire amenazador, en lo que parecía la antesala de una pelea.

- ¡Tezuka! - no pudo evitar que la voz se saliera teñida de alivio aunque eso fue antes de abalanzarse hacia él e intentar que bajara a Tachibana -. No le hagas nada, estoy bien, no me ha hecho nada, cálmate por favor - empezó a tirar de sus brazos para que soltara al chico -. Vámonos por favor.

Lo cierto es que estaba helada y deseaba largarse de ahí antes de que Tachibana volviera a ponerse desagradable y Tezuka acabara por darle el puñetazo que se merecía.

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12/03/2015, 13:27
Tachibana Yamato

A regañadientes, pero por petición de Yukino, Tezuka bajó y soltó a Tachibana que no abrió la boca en ningún momento. Tenía mucha prisa por volver a guardar aquellas fotos antes de que Kunimitsu se percatara de ello. En ese momento apareció la madre de Tachibana junto con la niña. Al parecer Tezuka debía de haber entrado de forma educacda porque no parecían para nada alteradas:

Madre Tachibana:- Yamato, ¿se quedarán tus amigos a cenar?

Amigos. Era la única posible explicación que la familia Tachibana podía encontrar a todo aquel revuelo de gente en la casa.

Yamato:- No. Ya se van.

¡Lo que faltaba! Hacer de anfitriones con la poca comida que ganaban para esos dos.

Yamato:- Les acompaño a la puerta.

Y eso hizo. Les acompañó con unas ganas increíbles de quitárselos de encima. Abrió la puerta y Tezuka dejó que saliera antes Yukino que él. Tachibana fulminó con la mirada a Yukino y Tezuka fulminó con la mirada a Tachibana. Todos amigos.

Ya fuera continuaba lloviendo con intensidad.

Tezuka:- Será mejor que nos demos prisa. No quiero que enfermes.- empezó a caminar rápido pero sujetando a Yukino de la mano, no queriendo perderla ni un momento de vista. Aquel no era un buen barrio.- ¿Qué ha pasado? Solo vi que desapareciste. Te estuve buscando antes de recibir tu mensaje.

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12/03/2015, 13:34
Yukino Kazehaya

Hasta que no salió por la puerta del apartamento no se dio cuenta de lo agobiada que había estado en su interior. Y ahora fuera se sentía simplemente agotada. Los pies le dolían de correr con los zapatos, estaba muerta de frío e incómoda por la humedad del vestido y por si fuera poco después de la larga declamación de la obra del teatro se sentía la garganta reseca e irritada.

- Cuando estábamos saludando vi a alguien dejando flores en una mesa, tapándose el rostro con una capucha y cuando fui a mirar había una de tus notas como la otra vez - andaba mirando al suelo, recordando los detalles -, así que salí detrás de él. Le gané terreno y cuando fue a empujarme lo tiré al suelo y le descubrí la cara y era Tachibana. Quise ir con Kototsu-sama pero no quiso y me dijo que él no era el ladrón, que le estaban amenazando - durante un momento se detuvo a pensar si debía desvelar el secreto de Tachibana pero lo cierto es que no le debía nada y que Tezuka estaba demasiado implicado en aquello como para mantenerlo al margen. Así que le contó lo de las fotos y las notas que había recibido Tachibana, le contó la historia de su familia -. Por eso lo hizo. Me da pena pero es un borde aunque puedo comprenderlo. Eso sí, no podemos decírselo a nadie.

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12/03/2015, 13:42
Kunimitsu Tezuka

Lejos de ponerse como una furia por que Yukino hubiera cometido una locura tras otra, Tezuka asintió comprendiendo cada detalle de la conversación. Su mente trabajaba con rapidez para encontrar la forma de sacar provecho de aquellas circunstancias. Probablemente tuviera que volver a hablar con Tachibana en otra ocasión. Quizás sí que sería útil en el futuro.

- No se lo diré a nadie.- a pesar de la furia que había recorrido su cuerpo ante la idea de que Tachibana le hubiera hecho algo a Yukino, lo cierto es que las tornas habían cambiado un poco. El chico había confiado en ella y al parecer no había hecho más que defenderse. Aunque no restaba el querer propinarle un puñetazo o algo por el estilo en cuanto los vio juntos.- Al menos vivía en un segundo. He tenido que ir puerta por puerta del edificio preguntando. Cogeremos un taxi. Tienes que cambiarte. Estás tiritando.

En cuanto salieron del barrio, Tezuka dio con un taxi libre. Entraron en él y dio la dirección de Yukino. No le soltó en ningún momento la mano y hablaron más bien poco. Una vez que el coche aparcó, cinco minutos después, para dejar salir a Yukino, Tezuka se vio obligado a dejarla marchar.

- Recuerda que mañana tienes que venir a casa a estudiar. Es bueno que no haya clase gracias a la obra de teatro. Cámbiate y descansa, ¿ok?

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12/03/2015, 13:52
Yukino Kazehaya

Echó la cabeza hacia atrás nada más sentarse en el taxi, experimentando una súbita culpabilidad por dejar el coche empapado. En aquel momento, aunque escuchaba las palabras de Tezuka, sólo podía pensar en meterse en la bañera con agua caliente.

Seguramente se hubiera adormilado en el trayecto si no fuera por el frío pero aún así acabó por cerrar los ojos, intentando distanciarse de todas aquellas sensaciones desagradables. Y justo antes de separarse Tezuka colaboró con ella recordándole la sesión de estudio.

Abrió los ojos y le sonrió. Ya habían llegado a su casa.

- Hai. Cámbiate tú también, estás empapado - dudó durante unos instantes antes de darle un rapidísimo beso en los labios -. Hasta mañana.