Partida Rol por web

Subes el ritmo y ello le sorprende tanto que ni con la segunda resurrección es capaz de esquivar algunos de tus golpes y mucho menos la devolución de su propio ataue. Por cada corte que le haces sangra reiatsu negro.

- ¿Amistad? ¿Amor? ¿Qué es eso? ¿Acaso no importa nada más que uno mismo y sus propias conveniencias?

Carga la lanza pero está claro que no te la lanzará porque sabe que podrías volver a comértela y él recibiría el daño. Un daño multiplicado y doloroso.

Quiere cortarte por la mitad así que pone más reiatsu en el arma y allá va. Al mismo tiempo usa la cola para agarrarte de la pierna y rompértela con los cuernos con los que pretende atravesártela, cortando tus tendones.

Un salto, esquivo su golpe con la lanza. Un giro, esquivo su cola. Sus cuernos quedan a los lados de mi pie, que lo cuelo entre ellos para apoyarme en su cameza e impulsarme tras él.

Y comienzo a dejar estelas de fuego detás de mí, acelerándo para golpearle incluso más veces que antes. Mi voz, distorsionada por la velocidad, casi podría ser el rugido de un dragón.

-¡Importan mucho más! La verdadera fuerza viene cuando quieres proteger a otro.

El poder...

Va recibiendo tus duros golpes sin poder hacer nada.

de la amistad...

Lo cortas en mil trozos, lo abrasas, lo quemas y él te sigue mirando, escrutándote.

del amor...

Porque quiere saber. Quiere saber cómo te has vuelto tan fuerte.

El orgullo... el honor... querer proteger...

Tus pensamientos te hacen más fuerte.

Yo... ¡también quiero proteger!

En tu último ataque, que lo atraviesas, él reune todo lo que queda de su reiatsu y te ataca. Estás muy cerca. Es muy probable que pueda matarte. Hacerte un buen agujero. Descubrir dónde guardas toda esa iniciativa y todo ese poder. Quiere averiguarlo.

- Quiero saber... quiero sentir...

Tras sus palabras...viene un poderosísimo ataque. De no ser por mis reflejos y que mis llamas desviaron todo ese reiatsu provocando una explosión en la pared, me habría dado de lleno.

-Yammi también me subestimó...es por que yo no peleo solo para mí misma. Lástima que lo aprendas en una situación así.

Veo su número mientras muere.

La cuarta espada...pues es cierto que era más débil que Yammi...al menos menos resistente.

Entro a la habitación de Inoue.

Y allí está Inoue. Tirada en el suelo, con la ropa de arrancar blanca que le han dado rota y algún que otro moratón. Te mira. Pero no se cree que realmente seas tú.

No cree que la hayan venido a buscar. Te mira, como si fueses un fantasma del pasado.

-Vaya pinta Pururun-chan.- la llamo como la teniente Yachiru.

-Creo que le he cortado un trozo de ropa a Ulquiorra antes de matarlo y que no ha desaparecido...igual te sirve para taparte un poco. ¿Aunque no puedes arreglarte la ropa con tu poder? Bueno, y las heridas...a Ichigo le dará algo si te ve así...

Me voy acercando.

-¿Ha sido Ulquiorra quién te ha hecho eso? No parecía de ese tipo de gente...

Se incorpora un poco observándote. Ahora sus ilusiones le hablan. Parece como si Reena Shihöin hubiera aparecido diciendo todas las cosas que le gustaría escuchar.

¿Hablar? ¿Responder a una ilusión? Terminaría de volverse loca. O tal vez ya se había vuelto loca.

- Vete. Por favor... no me atormentes con deseos...- te habla a ti, pero como si fueses producto de su imaginación.

-Pues sí que te han trastornado...cabrones...

Sin más, me la subo a un hombro y comienzo a desandar el camino.

-Oye, voy a correr, no quiero pasarme aquí más tiempo del necesario...no sea que Aizen decida aparecer.

Rumbo al punto de encuentro, donde aparecimos, a base de veloces shunpos. Eso sí si por el camino hay alguien en problemas, o noto reiatsus amigos en problemas...voy a ayudar.

Lo flipa y se sorprende gratamente. ¡La has cogido!

- ¡¡Reena-san!! Eres tú de verdad.- se aferra a ti con fuerza y llegado un momento notas sus lágrimas en tu nuca- Gracias... Reena-san... gracias...

Estáis a punto de llegar al lugar de encuentro. No hay ni rastro de los demás. Estás a punto de lograr tu misión.

- ¡REENA!- te grita entonces Inoue. Ha comenzado a temblar.- ¡PARA! KUROSAKI-KUN... ¿LO NOTAS?

Y al concentrarte percibes cómo la vida se escapa de su cuerpo poco a poco. El reiatsu es mínimo pero sabes que está en la única torre por donde no has pasado.

Inoue tiembla.

-Agarrate Inoue.

Pongo rumbo a esa torre.

-Preparate para curarle nada más llegar.

Acelero al máximo.

Cuando llegáis, la torre está medio destruida y debajo de la mayoría de los trozo de pared está Ichigo con un gran agujero en el pecho sin duda firma de Ulquiorra.

En cuanto lo sacáis de ahí, Inoue utiliza su poder y comienza a curarle. Tiembla y no puede mirarlo.

Ichigo está prácticamente muerto.

Mientras lo cura, Inoue apoya su cabeza en el hombro del chico, agarrando con fuerza su brazo.

Le tiendo una de mis píldoras normales.

-Cuando pueda, que la coma.

Vigilo los alrrededores, no vaya a aparecer algún espada por sorpresa.

- Reena-san.- te comenta mientras vigilas.- los demás. ¿los sientes? Están... están...

El reiatsu de Rukia es mínimo, tu capitán está muy herido pero se mantiene en pie, Kenpachi ha liberado todo su poder y ahora no se mueve, Renji e Ishida están con Kurotsuchi que parece estar bastante fogoso. Nemu está a su lado. Unohana e Isane son las únicas que están como nuevas aunque muy cansadas.

Todos están casi para el arrastre. Moviéndose solo por su orgullo.

-Sí, lo sé. Por Kenpachi no te preocupes. Renji e Ishida están con Kurotsuchi...no diría que a salvo estando con ese hombre...pero no creo que estén en peligro. El capitán y Rukia...tsk...no quiero dejarte sola.

-¡Bakudo nº 77: Tenteikūra! "¡Red blanca y negra! Veintidós puentes, sesenta y seis coronas y cinturones, huellas, trueno lejano, pico afilado, tierra sepultada y oculta en la noche, mar de nubes, linea azul: formad un círculo y volad a los cielos"

-Unohana taicho, Isane Kotaicho, Abarai-baka, Kenpachi Taicho, Kuchiki taicho, Kurostsuchi taicho y kotaicho. Tengo a Inoue y he eliminado al cuarto espada. Estamos con Ichigo, malherido, curándolo con el poder de Inoue. Kuchiki Rukia precisa asistencia médica inmediata. Espero órdenes...o iré junto a mi capitán cuando Ichigo esté recuperado, para que Inoue haga lo suyo en Rukia.

Al cabo de varios minutos Ichigo despierta.

Ichigo:- I-Inoue...

Inoue:- ¡Kurosaki-kun!

Lo abraza más fuerte y él la sujeta. Luego ella se separa, lo mira llorando, él le seca las lágrimas y sin decir nada más se funden en un apasionado beso.

Mientras, el mensaje de tu capitán llega:

Byakuya:- Ve al punto de encuentro y espera a que lleguemos.

Sabía que iba a decir eso....

Cuando Ichigo e Inoue abren los ojos me ven a centímetros de ellos ¬¬

-¿Ya? Anda, dejadlo para luego pareja...que tenemos que irnos.

Sin más los cojo a los dos y de shunpo en shunpo los llevo donde toca.

Llegáis al punto de reunión donde aún no ha llegado nadie. Ante tanta velocidad estos dos se han mareado un poco. Te preguntan si los puedes dejar en el suelo y así Inoue continuará curando a Ichigo que sigue muy débil.

Voz misteriosa:- Me temo que esa mujer nos pertenece y no permitiré que te la lleves, shinigami.

-Es una pena, porque se va a venir conmigo. Ya se lo tuve que explicar a Ulquiorra...¿Quién eres tú? Si vasa hacer que yo, Reena Shihöin te mate, al menos preséntate.

No desenvaino aún, pero estoy más que preparada.

- Arrancar definitivo: Gothensio. Y tú, Reena Shihöin, vas a morir.

Desenfunda sus dos zampakutos. Es muy imponente, con la armadura que le cubre prácticamente todo el cuerpo. Y no parece hablar en broma.

Desenvaino mis zanpakutoh.

-Tsk...tienes pinta de ser fuerte. Ichigo, Inoue apartáos de aquí y cubriós con el shanten kishun. No se me da bien esperar...así que...aquí voy Gothensio.

Y me lanzo a "tope" desde el principio.