Partida Rol por web

Sibiriana

Escena I, la novia.

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14/12/2017, 12:41
Director

Salísteis el trovador y tu de la casa de Jimena y fuísteis a oscuras por esos caminos de Dios hasta llegar al castillo. No pasó nada reseñable salvo algún tropezón que otro y el alto quién va del guardia, que seguro no esperaba a nadie a estas horas.

  ¡Alto quién va!.....Ah padre, que susto me han dao. ¿Qué tal anda la Blanca?-lo dice preocupado, es cierto que todos la querían y más de uno la habría querido por esposa, pero estaba claro que ella le hacía ojitos al Fernandito, muchacho joven y bien dispuesto.

El guardia os recogio el caballo y os dió las buenas noches y un que se mejore para la Blanca.

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14/12/2017, 12:54
Director

QUedásteis solas las tres, Blanca moribunda necesitada de tus cuidados y la joven Violante necesitada de tu consejo y guia para salir de este embrollo.

El padre y el trovador salieron, pero con la idea de volver tan pronto como hubieran devuelto el caballo. Sea lo que fuese que tuvieses en mente lo debías llevar a cabo ahora o convertir al padre en cómplice. Y siempre consciente de que la vida de Blanca dependía de tus manos.

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14/12/2017, 14:47
Julian Gallardo
Sólo para el director

La noche es cerrada y fresca. Caminamos calmos hacia el castillo. De los ollares del caballo salen nubecillas de vapor a cada respiración y el sentirlo tranquilo me tranquiliza a mí también, pues bien es sabido que los animales tienen los sentidos más agudos que los hombres, y de haber algún peligro bien seguro que sería el primero en piafar y luchar por liberarse para salir huyendo. No es que Sibiriana suela ser un lugar hostil, pero con las leyendas de maldiciones y la crueldad de nuestros invitados tengo los temores a flor de piel. También es cierto que, siendo realistas, de encontrar problemas seguramente sea por causa de algún lobo que se haya acercado demasiado al pueblo, y este pensamiento tampoco me tranquiliza demasiado.

Regresamos a las murallas de la fortaleza en silencio, yo cavilando sobre males que puedan acecharnos, el joven quizás preocupado por la joven y afectado por la actuación del marqués.

-Somos nosotros hijo mío.-Respondo al guardia que se ha sobresaltado por vernos aparecer de la oscuridad de la noche. -La Blanca sigue inconsciente, pero con la ayuda de Dios se pondrá bien. Ha quedado en manos de la Jimena, si ella no puede curarla es que nadie puede.-

El soldado toma las riendas del corcel. -Buenas noches, vaya con Dios.- Le respondo deseando que tengan calma en el castillo, al menos hasta que salga el Sol.

Mientras volvíamos sobre nuestros pasos, regresando al pueblo en sí, preguntó al trovador:

-¿Tienes algún sitio para pasar la noche?-

Casi seguro estaba preparado, quizás le habían ofrecido cobijo en el mismo castillo, pero también cabía la posibilidad de que tuviese una habitación en la taberna o ninguna de las dos. Desde luego, por mi parte,no pensaba dejarle sin un lugar en el que descansar, pues el joven había demostrado tener un buen corazón.

Notas de juego

Por cierto, ¿quien es Pedrito?
He consultado la gente del pueblo de la escena que hiciste para esto, pero soy fatal con eso de los fernandos, los pacos, los pedros, los juanes.... vamos, lo que se pueden llamar de diferentes maneras, no se si me explico. ^^'

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16/12/2017, 20:02
Arturo Peláez

Volvíais tranquilos a casa de Jimena sin más contratiempos que la oscuridad y la fresca. 

El trovador te contestó-​ Lo cierto es que no tengo dónde pasarla. En un principio iba a dormir en el castillo. Pero dado lo que ha ocurrido prefiero acercarme a la posada que hay camino Luesia. Pero primero quiero ver que ocurre con la muchacha- ​Se le veía preocupado por la muchacha, no la conocía de nada y se le adivinaba nobleza en su linaje, aún así se preocupaba por una plebeya.-​Y con lo que sea salgo mañana al alba.....nada me une a este pueblo y al señor que está durmiendo en el castillo.

Notas de juego

Ups, me colé yo. Fernandito, el pastor. Creo que tuve un viaje a la infancia y lo confundí con el de Heidi

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18/12/2017, 08:38
Jimena

Ponte cómoda y ayúdame. Dijo la curandera mientras se quitaba la pesada capa dejando libres sus brazos para trabajar mejor. Venga, no te asustes, esto es nada. Dijo tratando de tranquilizar a la joven Violante.

Luego se acercó a la moribunda y empezó a reconocer sus heridas poco a poco. Hola Jimena. Veo que no tienes humor para tomar algo ni para prepararnos algo de comida. Tranquila ahora te pondrás bien.  La curandera empezó a usar sus conocimientos sobre la herida tratando de aliviarle el dolor. 

- Tiradas (1)
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18/12/2017, 13:43
Julian Gallardo

El muchacho parecía de noble corazón. Sus maneras también dejaban entrever cierta educación. Julian no conocía al mozo de nada, pero la fe le inclinaba a abrir su corazón y su casa en favor de quienes parecían merecerlo, y aquel joven, hasta el momento, no había hecho nada para despertar desconfianzas, si no todo lo contrario. 

-¿Cómo vais a ir hasta la posada a estas horas?- Neguó el sacerdote con la cabeza -Si os parece bien podemos ir los dos a ver que nos dice la Jimena de la salud de la Blanca, y después, iremos a descansar a la parroquia, allí puedo ofreceros un platico de cocido y una cama. Mañana al salir el sol ya haréis lo que mejor considereis- El trovador había llevado su mano a la empuñadura, presto por defender a Blanca cuando el Marqués estaba descargando su furia sobre ella. 

Él cree que habría sido llevado al cadalso, yo me temo que hubiese encontrado la muerte allí mismo. Sea como fuese el desenlace habría sido el mismo y él lo sabe. A pesar de todo estaba dispuesto a morir por una moza de la que nada sabe ni debería importarle.

Nuestros paso era ligero, nada nos perseguía pero la inquietud por la joven tiraba de nosotros.

Señor, espero que esté mejor y salga adelante.

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22/12/2017, 10:17
Director

Doña Violante te ayudó lo mejor que pudo. Tenía gracia cómo la señora se había convertido ahora en tu ayudante, de mandar a ser mandada. Pero tu arte hablaba sola y no dejaba lugar a réplica. Unas vendas por aquí, unos puntos por allá. Toma un bálsamo que te calmará y poquito a poco parecía que Blanca se encontraba mejor. Después de un rato se despertó. Tosió y escupió un poco de sangre y empezó a llorar. Doña Violante la miraba sin saber que hacer, parecía sentirse culpable, el caso es que ella estaba allí mirando a la muchacha si saber qué hacer. ¿ Qué culpa tenía ella si su padre era una mala bestia? Puede que ninguna, quizás ya había presenciado esto otras veces.....quién sabe.

Entre unas cosas y otras pasó el tiempo y volvió el padre Julián con el trovador a picar a tu puerta.

Notas de juego

Perdón la demora.

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22/12/2017, 10:25
Arturo Peláez

​Sea, padre. Muchas gracias. Vayamos prestos a ver si ha mejorado la muchacha y luego ya pensaremos en dormir.-​Y así lo hicisteis.

Llegasteis a casa de la curandera y allí llamasteis a la puerta. Sólo esperabais que Jimena hubiese logrado salvarla y que no le quedase ninguna secuela. Pero si en algo era buena Jimena era en remendar heridas. Le daba igual persona que animal, tenía un arte natural para ello lejos de las sangrías que aplicaban otros. Ella con sus hierbas y pociones hacía sanar lo que no lograban los barberos charlatanes que se acercaban al pueblo. No era de extrañar que la tuviesen en alta estima. Si alguien podía curar a Blanca , esa era Jimena.

Notas de juego

Perdón la demora.

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22/12/2017, 22:31
Julian Gallardo

Julián regresó a casa de la Jimena acompañado por el trovador, pues habían llevado el caballo de vuelta al castillo y habían vuelto hasta allí preocupados por la Blanca.

*Toc toc* Llamaron a la puerta. Sabía que muy posiblemente podrían entrar directamente, pero no deseaba encontrarse con ninguna de las damas en una situación incómoda. 

-Somos el padre Julián y el muchacho- Anunció para que se le indicase si podían entrar o no. Estaba el párroco algo nervioso por la salud de la muchacha, esperaba que la Jimena hubiese podido estabilizarla, pero por si acaso no se iría a descansar hasta que aquella quedase fuera de peligro, si llegaba el caso quería estar listo para darle la extrema unción y así asegurar el camino al cielo para el alma de la Blanca.

Notas de juego

Tranqui máster, no hay problema ;)

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26/12/2017, 19:26
Jimena

Ahora siéntate y no hables hasta que yo te lo diga ¿Vale? Entonces Jimena se dirigió hacia la puerta, pero antes de abrir decidió dirigirle unas últimas palabras de ánimo a su invitada. Tranquila, no va a pasar nada. Son amigos y nunca te harían daño. Dicho esto abrió la puerta.

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27/12/2017, 08:53
Director

Jimena abrió la puerta. Llorando estaba Blanca, era buena señal pues significaba que había recobrado el conocimiento. Y sentada en una esquina la encapuchada. El padre Julian venía con el trovador.

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27/12/2017, 15:24
Julian Gallardo

Normalmente no era de su agrado escuchar el llanto de nadie, pero en aquel momento los lamentos de la Blanca eran música para sus oídos. La cara del párroco se iluminó al oír llorar a la joven golpeada y miró a la curandera con aquellos ojos más bien pequeños y redondos, y ahora chispeantes de alegría.

-¿Crees que podríamos verla? ¿Podemos ayudar de algún modo?- El padre no prestaba mucha atención a la encapuchada, aunque claramente no era lo más normal del mundo que una joven cubriese su rostro de forma permanente en la sala de espera de la Jimena. Julián temía que no fuese alguna de las muchachas de Sibiriana que, llevadas por el pecado hubiese quedado en cinta. En tal caso sería normal que no desease se conociese su identidad, pero las almas de aquellas gentes eran su responsabilidad, y como tal sabía que tarde o temprano debería hablar con la pobre infeliz para que viese que una vida siempre es un regalo, y que aunque fuese fruto del pecado extirparlo del vientre era un pecado aún mayor. 

La Jimena no ayudaría en una cosa así 

Trató de convencerse. Pero ahora lo primero era lo primero, y eso era ver a la Blanca y serenarla, y de paso poder ver que realmente estaba bien. Tan solo con esa tranquilidad sus huesos reposarían aquella noche, de no quedar seguro sería incapaz de conciliar el sueño, y bien sabía lo que aquello podía significar para él.

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27/12/2017, 19:02
Jimena

Si, Si. Claro que pueden ver. Faltaría más. Dijo Jimena algo nerviosa. Al haber terminado con los cuidados de Blanca, el montón de dudas y cuestiones volvía a su mente. No solo Blanca necesitaba ayudas, ellas y su encapuchada amiga también necesitaban ayudad.

Padre, pase y cierre la puerta. Necesito consejo y esta chiquilla, amiga mía también. Entonces miro a la muchacha encapuchada de la equina. Puedes confiar en él como as confiado en mí. Julian Gallardo es el cura de la iglesia y sabe ayudar a la gente. Espero a que la muchacha comenzara a contar su historia o que le diera permiso para contarla ella misma.

Blanca estaba bien, solo magullada, sobreviviría para contarle la historia a sus nietos.   

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27/12/2017, 19:32
Doña Violante

Cuando Jimena habla la encapuchada se echa hacia atrás la capucha y deja ver su rostro. No es otra que doña VIolante, la mujer del barón don Pedro y señor de Sibiriana.

Le cuesta hablar, mas la confianza que tiene Jimena en el padre hace que empieze a hablar-​Yo......yo......yo no quería casarme. Es cosa de mi padre por que me quedé en cinta de un......joven y buscó a alguien para casarme que no supiese de mis amoríos. Quizás no fuese tan mala idea......pero no soporto al barón y no quiero ser su esposa. He decidido entrar en un convento y dedicar mi vida a Dios.

​Pero no se cómo escapar de mi padre,¿tendríais a bien ayudarme?

​EL trovador mira estupefacto y Blanca se incorpora y cesa su lloro al oír la historia

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27/12/2017, 19:44
Julian Gallardo

El párroco se sintió aliviado al saber que Blanca se repondría sin problemas y al final no le quedarían más secuelas que un mal recuerdo.

Lo que no esperaba era que la curandera le pidiese consejo en ese momento, aunque por supuesto se lo brindaría encantado y más que dispuesto, pues siempre estaba para todo aquel que le necesitaba. Así que entró y cerró la puerta tras de ellos dos, el mismo Julián y el trovador.

-Por supuesto, podéis confiar en mi completamente. Tomaré lo que hablemos ahora en secreto de confesión si así lo deseáis- Miró a ambas mujeres y después al muchacho que había estado todo el tiempo junto a él.

Creía que buscarían la confidencia entre ellos tres, pero la dama encapuchada no tuvo problema en desvelar su identidad e historia con Blanca y el trovador todavía presentes. Aquello cogió al párroco un poco por sorpresa, pero no tenía problema alguno, a fin de cuentas era decisión de la encapuchada hacerlo de uno u otro modo, o incluso de decidir no compartirlo con nadie.

Cuando descubrió su rostro los ojos del párroco se abrieron de par en par,  era la última dama a quien esperaba encontrarse allí, pero pasados esos dos primeros segundos se acercó un poco más a ella, interesado en su salud, pues la última noticia que tenía de ella era que reposaba en su lecho tras el desmayo en la iglesia. Pronto la joven esposa comienza a hablar, lo del embarazo no sorprendió tanto a Julián, pues algo había imaginado aunque no con esa protagonista.

Escuchó lo que dijo y se acercó un poco más para tomar asiento junto a la, ahora, baronesa. 

-Hija mía, podéis contar con mi ayuda, por supuesto. Sin embargo el camino que pretendéis tomar no es sencillo. ¿Amáis a ese joven que debe ser el padre de vuestro hijo?- preguntó en primer lugar. No sería el primer caso en que una dama entrase en un convento huyendo de su vida y no por amor al Todopoderoso.

-¿Habéis hablado con vuestro padre de los sentimientos que tenéis y de vuestras ideas de futuro?- El Barón le parecía un hombre razonable, aunque comprendía que la chiquilla era mucho más joven que él y al parecer su corazón ya estaba ocupado. Sin embargo el marqués era alguien realmente peligroso, porque era despiadado y desalmado a ojos del cura, alguien a quien había que salvar, pero lo cual se le antojaba árduo y complicado.

 

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30/12/2017, 13:37
Doña Violante

​¿Si amo a ese embustero? no, padre, no lo amo. Debíamos encontrarnos en un lugar y huir juntos.....pero el nunca se presentó. Mi amor por el murió aquel día.-dice dolida pero con determinación.

Después agacha la cabeza cuando Julián nombra a su padre y con gesto culpable dice-No, no le he dicho nada a mi padre.....lo cierto es que hasta que la conocí a ella -señala a Jimena-​pensaba en quitarme la vida. -sonríe apenada-​morir de hambre. ja,ja. Dejarme consumir poco a poco por la pena y la rabia.

​Tal vez meterme a monja no sea la mejor solución.....¿pero qué alternativas tengo? Mi padre me ha casado con "ese" animal lujurioso, viejo y borracho-dice con desdén-no tengo otra salida.

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30/12/2017, 21:01
Julian Gallardo

Julian escucha atento las palabras de Doña Violante, sin interrumpirla en ningún momento ni hacer expresión alguna ni de aprobación ni de lo contrario. Su prioridad en aquel momento era comprender la situación de la joven desde el punto de vista de ella misma.

Cuando ella terminó el cura la miró y le habló con expresión amable. 

-Comprendo. Debo preguntaros algo muy personal, pero también muy importante. Si no queréis responderme por ahora no lo hagáis.- Violante debía tener muy claro que era libre de hablar o callar, más estando presentes la Blanca y el trovador, con quienes quizás no desease compartir los detalles de sus asuntos. -¿Habéis consumado el matrimonio? Con el don Pedro-

No era correcto decir que prefería que no hubiese hablado con su padre, aunque sinceramente era así, pues no creía que aquel noble tuviese ningún control sobre sus impulsos y emociones, la Blanca era prueba de ello. Miró a la Jimena agradecido por haber salvado la vida a aquella joven. La tristeza, la desesperanza o el sentirse atrapado sin salida a veces llevaba a las personas a tomar una decisión radical y desesperada.

-¿Cuánto tiempo lleva en ayuno señora?- Preguntó a la recién casada interesado por su salud y la del pequeño que gestaba en su vientre, pues ahora comprendía el motivo de su palidez y su desmayo en la iglesia. Si su debilidad era demasiada podría perder al niño, además el viaje hasta el convento de monjas al que podía llevarla requería que estuviese en ciertas condiciones, la salud era lo primero. -Quizás la Jimena debiese veros a los dos para asegurarnos de que todo esté bien - Dijo a Violante mirándola a los ojos con calma y compasión, esperaba que ella pudiese amar a ese hijo que llevaba dentro.

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01/01/2018, 14:33
Doña Violante

La joven miró fijamente al padre Julián y esperó la pregunta. Se ruborizó un poco pero no tuvo reparo en contestar-​no padre.Jimena intervino antes de...bueno de eso.

Respecto a la otra pregunta se encoge de hombros y responde-​no se.....mi ama me daba pociones extrañas para que durmiese , me relajase y me alimentase. Yo no quería, pero ella insistía y yo estaba débil para negarme.-dice con sentimiento de culpa.- ​¿Cuánto tiempo? no lo sé . Pero jamás volveré a tomar esas asquerosas pociones.

Si eso os deja más tranquilo....que así se haga.-Y esperó a que Jimena la examinara.

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02/01/2018, 01:43
Julian Gallardo

Se quedó un poco pensativo. Si no habían consumado el sello no estaba cerrado, aquello dejaba más opciones a dar alternativas a la muchacha. Además, según ella contaba aquel matrimonio no había sido con consentimiento de ella, y habiéndole dado pociones su ama bien posible era que el desmayo hubiese sido provocado por la misma, pues Violante siquiera había podido decir que acudía por voluntad propia ni dar el sí quiero. Todo aquello tranquilizaba el espíritu del párroco, pues de haber transcurrido la boda con todos los requisitos cumplidos y de haber yacido los novios la unión estaría hecha, y no en vano se terminaba la ceremonia con las palabras "lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre" y Julian tan solo era eso, un hombre, y por lo tanto no debía separar lo unido por el Señor. 

Sin embargo todo apunta a que han intentado engañar a la joven noble y al Todopoderoso, de paso, pero el Altísimo todo lo ve y por eso debe haber ayudado a la muchacha a llegar hasta mí para abrirme los ojos. De este modo, Padre, ¿acaso el mayor temor debe ser cómo presentarle la cuestión al Duque llegado el momento y cómo salir victoriosos ante el Marqués? ¿Acaso no debo velar por la verdad, el amor y cuidar del rebaño?

Ahora Violante era una de sus ovejas, y su fe y su alma estaban en la cuerda floja, huir o morir... así de claro lo había dejado. 

¿Para quien es mi deber? ¿Para Don Pedro o para vos?

Preguntó en su interior conociendo bien la respuesta. Jamás se había encontrado en una encrucijada así. Una cosa era faltar a los hombres, otra muy distinta a su Señor, a su verdadero señor, allá en los cielos, y ahora temía fallarle si tomaba la decisión equivocada.

-Claro hija mía, creo que lo más urgente ahora es que la Jimena pueda verte, y así saber que ambos estáis bien. Sabiendo eso podremos decidir que paso dar después.- Dijo con tono tranquilizador a la joven dama. 
Se acercó entonces a la curandera, para hablarle directamente a ella.

-Habéis sido una bendición para esta muchacha, la luz ilumina vuestro corazón y por eso estoy agradecido, pues habéis salvado no una, si no dos vidas, dos almas. Como favor personal quisiese pediros, si es posible, que averigüéis que tipo de poción le daba su ama, si acaso era calmante o algo más, es importante para mí saberlo, pero no se si tal cosa se puede descubrir.-

Algo en su mente le decía que el ama y el Marqués estaban conchabados en todo aquel asunto. Aquella mujer no había dudado ni por un momento en representar a Violante en la ceremonia. ¿Y si lo primero no era la salud de la joven? Desde luego el Marqués estaba dispuesto a todo por mantener su buen nombre, algo que ensuciaría un nieto bastardo, pero no matar a una sirvienta a golpes. 

 

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02/01/2018, 14:41
Jimena

¡Estúpida impulsiva! Se maldijo hacia sus adentros. Si hubiera sido un poco más meticulosa podría haber cogido alguna de esas pociones para poder estudiarla, pero claro, también se habría arriesgado a ser descubierta. ¿Qué pociones habría estado usando la ama? Seguramente sería un brebaje de plantas sencillo.

Agradezco tu tus palabras Julian. Intentare saber que poción se ha usado pero dudo que esa sea ahora nuestra prioridad, deberíamos de poner tierra cuanto antes entre Violante y el castillo. Cuando el señor descubra que su amada Violante no está seguro que pone el grito en el cielo y remueve cielo y tierra para buscarla. Necesitamos encontrar un convento y alguien que nos lleve a él.

Tranquila niña, como ves todo se va a solucionar. Ahora permitirme. Dijo acercándose a la joven niña para iniciar el análisis, pero antes… Padre, podría esperar en la otra habitación.