Partida Rol por web

Al volver de la gira todo es alegría y buenas caras, los resultados han acompañado y los nuevos fichajes han deslumbrado, desplazando a jugadores más veteranos y erigiéndose en protagonistas del futuro del equipo.

El mismo día de la vuelta tenéis la sesión libre, no se programa entrenamiento para descansar del viaje. Para el día siguiente hay una sesión de recuperación convocada. Y hasta cuatro días después, domingo, no tenéis partido. Pero éste ya será de liga, de competición oficial.

Mientras trotáis en la sesión de recuperación, Sergio se acerca a vosotros y os mira con detenimiento... Poco después se dirige a vosotros:

- Bueno chicos, es cierto que inicialmente el recibimiento fue algo frío por parte del vestuario. La verdad que estos partidos han servido para conocernos mejor, trabajar y sufrir juntos, y ha comenzado a crear un vínculo entre nosotros. Como capitán, quiero deciros que me alegro de contar con vosotros en el equipo. Creo que podemos obtener buenos resultados esta temporada.

Su semblante se torna serio, y algo apagado

- Normalmente nuestros resultados suelen estar vínculados a evitar descender de categoría nacional, lo cual implicaría un desastre económico para el club. Creo que este año con vosotros podemos aspirar a algo más que evitar el descenso, creo que podemos aspirar a estar situados mínimo en media tabla. ¿Qué os parece?

Rafa miró con gesto de agradecimiento a Sergio.

No dudo que la pretemporada ha ido genial y que sin duda alguna, eso nos ha hecho juntarnos más y acoplarnos con vosotros, los más veteranos. 

Sin embargo y aunque el Club lucha por no descender, a mi personalmente me gustaría ser más ambicioso. No creo que debamos conformarnos con la mitad de tabla, debemos ir a por lo máximo. No sé que pensarán mis compañeros pero yo pienso trabajar para algo más que estar a mitad de tabla.

Iñigo asintió a las palabras de su compañero. Él quizá era más tímido y menos lanzado para expresar sus opiniones y más cuando un veterano hablaba. Sin duda, seguramente Sergio también pensó eso al llegar al equipo...

Sergio, estoy de acuerdo con Rafa, a mi también me gustaría llegar a lo máximo. Sin embargo... tú llevas más temporadas que nosotros aquí. ¿Podrías decirnos qué nos vamos a encontrar? ¿Cómo son los rivales a los que nos vamos a enfrentar?

Adrián se mantuvo en un segundo plano mientras el capitán hablaba con el grupo. Le gustaba que tuvieran en cuenta a los jóvenes como él y lo de los objetivos le sonaba razonable.

- Yo no tengo mucha experiencia en esto dijo pero quizás deberíamos rebajar los objetivos. Primero miremos lo que podemos cumplir con cierta tranquilidad y luego podemos modificarlos para aspirar a mayores metas. También estoy muy interesado en conocer a los rivales. Los jugadores más relevantes y peligrosos. Creo que me va a tocar bregar con más de uno.

Sergio os mira con su seriedad habitual, aunque veis que sus ojos tiene un brillo que otras veces no habéis visto.

No sé, chicos, no sé. Cierto es que hemos sacado buenos resultados contra equipos que, en principio, lucharían por nuestros anteriores objetivos. Y que les hemos ganado con comodidad jugando como visitantes. Por eso creo que podemos aspirar a algo más. Pero creo que no debemos aspirar a más, puesto que aspirar más alto dependerá no sólo de la consistencia de nuestro juego, en la que confío visto los resultados, si no que deberemos dar un salto de calidad que es muy difícil que podamos dar el mismo año que tratamos de integrar tantos cambios en el sistema. Pero eso no quiere decir que no lo vayamos a intentar, sólo que no lo veo probable.

Adrián, no te preocupes. Poco a poco los iremos conociendo, y preferiblemente antes del partido. Por lo poco que conocemos a la entrenadora - Sergio mira hacia el banquillo, donde la entrenadora conversa con uno de sus asistentes -, me he llevado una grata sorpresa.

Al hacer un parón entre ejercicios, Sergio se para y mira al grupo, particularmente a las nuevas incorporaciones...

Iñigo, Rafa, Adrián, creo que estáis sólos en vuestras aspiraciones. Compañeros, ¿no tenéis sangre en el cuerpo? ¿Son acaso estos compañeros los únicos con los que puedo contar para dejarse la piel en el campo? Así desde luego no conseguiremos nada...

Mateo de pronto se revuelve contra el capitán...

¡Maldito Sergio! ¡Ya estás con esas porquerías psicológicas! ¡Sabes que el césped está abonado con la piel de mis piernas y la sangre de mis rivales!

Luego, Mateo se gira hacia el resto...

Pero no por la vuestra, ¡sangre de horchata! Maldita sea, vergüenza me da la juventud de ahora, sin moral, sin valores...¡sin cojones!

Rafa se giró cuando uno de los veteranos empezó a meterse con ellos. Se dirigió hacia él como un rayo y se encaró.

¿Que dices? ¿Que no tenemos cojones? Cuando quieras!!!! Hasta ahora creo que hemos sido los novatos los que nos hemos dejado la piel en el campo y, por cierto, los que hemos marcado los goles que nos han hecho ganar los partidos de pretemporada... ¿Donde estabas tú? Yo te lo voy a decir, en la otra punta del campo para ver si la entrenadora no te recriminaba tu actitud!!!

Iñigo trató de parar a Rafa pero... era tarde... Le habían tocado la fibra sensible y ahora no quedaba más que hacer piña con él así que Iñigo se quedó en un segundo plano apoyando a su compañero y vigilando al resto de veteranos por si la cosa se ponía fea y tenía una pequeña tangana en el entrenamiento.

Iñigo no era un tipo violento pero estaba claro que esta vez no se dejaría amedrentar por ningún comentario despectivo de sus compañeros, por muy veteranos que fuesen...

¡Pero será descarado el novato! ¿Te crees que por sacarme una cabeza y media espalda me vas a amedrantar? ¡Yo mordía bordillos de cemento cuando tú aún te ponías tiritas de Jello Kitty! Y claro que estaba en la otra punta del campo, chaval, ¡por que soy defensa! Tú, como delantero, debes saber quienes son los defensas. De todas formas de tí no hablo, que te dejaste la suela para poder hacer una cobertura contra los flojos de los alemanes...

Mateo se da la vuelta, ignorando a Rafa.

¿Veis? ¡Ésto es de lo que hablo! He aquí alguien que tiene lo que hay que tener: sangre, fuego, pelotas... El capitán, Sergio, es muy correcto, muy psicológico, muy motivacional. ¡Pero eso son monsergas! Para que me mareen la cabeza, lo que hago es ir al loquero. Si tenéis lo que hay que tener, ganaremos, nada más. Y veo que por lo menos, en ese aspecto, cuento con Rafa. ¿Alguno más quiere hablar de psicología con Sergio, mientras Rafa y yo lo damos todo en los partidos?

De pronto, una voz se alza por detrás de vosotros...

¡BASTA YA! Aquí la única que da cera y estopa, soy yo, que para eso soy la entrenadora.

De pronto todo el grupo se gira hacia la entrenadora, que se ha acercado sigilosamente por detrás.

Quiero que esto quede claro para todos, empezando por Sergio, el capitán, pasando por Mateo y llegando a los nuevos. Nuestro objetivo es a ganar a todo el mundo, dejarnos la piel en el campo, y llegar hasta lo más alto. Así que Sergio, nada de conformarse en la mediocridad. Pero Mateo, aquí el único que juzga la implicación y el carácter de los jugadores soy yo, la entrenadora. Ni tú, ni nadie, va a llamar sangre de horchata a sus compañeros.

¿Ha quedado claro?

.-Entendido fuerte y claro entrenadora, estoy seguro de que si dejamos alma vida y corazón en cada partido los resultados llegarán. 

Rafa voltea hacia sus compañeros y con una gran sonrisa les dice:

.- ¿No los motiva el querer dar la sorpresa? Pocos apuestan que estemos peleando los primeros puestos, pero yo pienso que debemos hacer que se traguen sus palabras. Esta temporada debe ser nuestra, la afición se lo merece, ya han tenido que presenciar muchas malas.. Hace una pausa, mira al cielo y dice.-¡Es momento de darles las buenas!

La entrenadora sonrió con satisfacción

- Esa es la mentalidad que me gusta. ¿Alguien tiene algún problema con dejarse la vida en cada partido? Mi forma de ver la vida es muy sencilla: el pasado ya no me afecta, y el futuro está por llegar, sólo viviré el presente. Y para el presente es: debo ganar cada partido.
Ahora, quiero anunciar un cambio en el equipo: Iñigo, quedas nombrado segundo capitán, en lugar de Mateo. Sergio Murillo seguirá siendo el primer capitán, eso sí.

Ahora, seguid entrenando. Hoy al terminar el entrenamiento tenemos una visita de nuestro patrocinador. Seguid con los ejercicios físicos, hoy no tenemos entrenamiento táctico. Recordad que aunque no esté pegada a vosotros, controlo los entrenamientos. Digo más, los grabo y los reviso.

Dicho lo cual, Cornellia hace ademán de retirarse y dejaros entrenando...

Iñigo se quedó impactado tras las declaraciones de la entrenadora. Siempre había pensado que no le caía muy bien pero tras sus palabras todo eso cambió.

Dio un paso al frente y asintió a la declaración de la entrenadora.

Sí, Míster.

La sesión de entrenamiento discurre de forma normal, sin mayores incidentes destacables. Si bien es cierto que el ambiente está un poco enrarecido, puesto que se puede ver una cierta fracción en la plantilla entre los partidarios de Sergio y Mateo. Aún así, no llega a haber ningún incidente, y aunque se nota un cierto distanciamiento en las relaciones, durante los entrenamientos no parece influir. Algunos jugadores de la plantilla se acercan a felicitar a Iñigo, eso sí con cuidado y normalmente cuando Mateo no está atento.

(Si Santi no había abierto la boca hasta ahora es porque no le parecía necesario, sin embargo no dejaría irse al defensa sin una de sus palabras, la frialdad era para evitar las tarjetas así pues al final de la sesión Santiago se acerca al defensa escandalizador)-Oye Mateo...¿acaso no te davergüenza...no te entra nada por el cuerpo?...pedir disculpas por ejemplo..."hablar de cojones"..."abonar el cesped con sangre del rival"..."de pelotas"...podrían haberte escuchado niños que han faltado a clase para ver a sus aspiraciones de futuro...y aunque no fuera así tu entrenadora es una dama y nunca se habla así delante de una mujer...y cuando se trata del fútbol un deporte creado por caballeros se habla de espíritu, corazón, coraje y compromiso...no eres mejor que ninguno de nosotros comportandote como un demente sino saliendo al campo y demostrando lo que vales como cualquier otro...(tras increpar su comportamiento me dedico a responder a sus acusaciones)...yo me dedico a jugar como es debido con mente fría para así evitar las sanciones y por ello no sólo poder darlo todo en cada partido, sino para estar disponible para jugarlos "todos" si así lo ve preciso la entrenadora...y por cierto...¿sabes con que abona el cesped un verdadero futbolista?....con las lágrimas de júbilo en la victoria y con las amargas lágrimas del rival haciendole caer derrotado...por el resultado...(espeto de forma tajante).

Durante unos segundos, parece que Mateo se dispone a arremeter contra Santi, pero entonces algo ocurre en su rostros.

Mateo agacha la cabeza, parece como avergonzado. Sin decir palabra pone un brazo en el hombro de Santi, le mira a los ojos y asiente. Camina después hacia Adrián, al que le dirige unas palabras:

- Será un placer defender la portería a tu lado, si puedo ganarme el puesto de titular a tu lado.

Después, se acerca a Iñigo, y le tiende la mano...

Para después poner rumbo al vestuario, manso como un corderito...

Tras el entrenamiento volvéis a los vestuarios, los cuales han sido remodelados en vuestra ausencia, y os maravilláis de la nueva calidad de las instalaciones.

Las duchas son nuevas, limpitas y grupales.

Después de la ducha, un maravilloso baño en la bañera hidromasaje.

Y luego a vestirse en los vestuarios individuales, para los más tímidos.

Os sorprende además de forma muy agradable el nuevo gimnasio acondicionado que tenéis disponible.

Este primer día de entrenamiento tras la vuelta del la pretemporada, os depara grandes y agradables sorpresas

Iñigo entro en el vestuario junto a sus compañeros. Ya mientras se cambiaban se dirigió a Rafa, Patricio, Santi y Adrián.

Chicos, creo que nos hemos ganado el respeto de los veteranos. No obstante me gustaría saber qué os parece la decisión de la entrenadora de nombrarme segundo capitán...

Sobre decir que prometo defenderos y escucharos siempre que me realicéis cualquier tipo de comentario o sugerencia pero... me gustaría conocer vuestra sincera opinión.