Partida Rol por web

Quizas necesite algunos hombres capaces y equipo de asalto, he oido decir que los twileks son fieros combatientes si se sienten amenazados. Las jedis, estan en Tatooine, ese tal Dash, las llevó allí en su nave, no me fiaria de el. Por lo demas general, hablemos de la recompensa: quiero a la twilek como padawan, y yo me pondre a tu servicio, y quiero fondos para reiniciar la orden Sith. todo eso lo digo seguro de mi mismo, pero convencido que no conseguire ni la mitad de lo que pido.

El general se queda un momento pensando en tus palabras, con una mano donde se supone que esta su barbilla. Al cabo de unos segundos se incorpora y se acerca a ti de nuevo. Luego levanta una mano y unas puertas se abren a los laterales de la sala, dejando salir a unos tipos casi tan altos como el, de unos dos metros, con armadura gris y aspecto fiero. Los ocho soldados forman ante ti, en posicion de firmes.

Te presento a tu nuevo escuadron. Lo de coger a la twi lek como padawan se vera en su momento, pero en principio no creo que haya problema si trabajais con nuestra organizacion. Quieres creditos? Esta bien, dispondras de 10000 creditos para gastar como a ti te convenga. Solo recuerda una cosa, el fracaso se paga con la muerte. Debes traer a la twi lek ante mi presencia viva. No importa si recibe daños si no son permanentes. Si encuentras a alguien que interfiera en nuestros planes... eliminalo.

Claro... ¿realmente nos llevarás a Coruscant? Es un viaje demasiado largo y tendrás que hacer un desvío grande, no puedo permitir que no cobres. ¿Hay alguna forma en que pueda pagarte?

Me levanto y me dirijo hacia la zona de pasajeros pero me detengo mirando al contrabandista hasta que me responda.

Dash te mira y espera a que termines de hablar, luego mueve las manos como para quitarle importancia al asunto.

Nada, tu tranquila. Despues de esta mision tendre una temporadilla de descanso, asi que no me importa hacer un viaje hasta Coruscant, asi podre visitar a un amigo que tengo alli. En cuanto a la forma de pago, con que me ayudes en la nave como copiloto o algo parecido ya me basta. CZ-4 es un poco cascarrabias y no me hace ni caso, aparte de que me fio mas de los reflejos de un jedi a la hora de disparar si nos atacasen.

El piloto sale por la puerta y desaparece de tu vista.

Me introduzco en la cabina de pasajeros y me acerco a mi maestra.

Molaría volar con él... pero las obligaciones...

Maestra, maestra... ya llegamos...

Kael no esta tumbada como la gente normal al descansar. Se encontraba en medio de la habitacion sentada en el suelo, con las piernas cruzadas y los brazos extendidos a los lados, mientras que sus ojos estaban cerrados. Te acercas a ella y la avisas de que habeis aterrizado. Lentamente abre los ojos y se incorpora.

Vaya! El viaje ha sido mas corto de lo que esperaba. Realmente esta nave es muy veloz. Me apetece estirar las piernas, que tal si salimos a dar una vuelta a ver que encontramos? Ademas, si Dash ha traido aqui esos gusanos estaria bien descubrir quien los quiere y si ya tienen un plan estable.

Empieza a caminar hacia la rampa de salida y antes de salir se gira hacia ti.

Te vienes?

Al salir de la base ves que el general no mentia respecto al transporte. Ante ti hay un enorme carguero reluciente, lo suficientemente grande para que tu, el regimiento y los pilotos quepais de sobra. Los soldados te siguen a pocos pasos por detras y se detienen cuando tu lo haces.

Una vez arriba te acomodas y te preparas para el viaje hasta Ryloth. La nave despega en cuanto estais en vuestras posiciones y entra pronto en el hiperespacio a velocidad sub-luz.

Al salir de la base ves que el general no mentia respecto al transporte. Ante ti hay un enorme carguero reluciente, lo suficientemente grande para que tu, el regimiento y los pilotos quepais de sobra. Los soldados te siguen a pocos pasos por detras y se detienen cuando tu lo haces.

Una vez arriba te acomodas y te preparas para el viaje hasta Ryloth. La nave despega en cuanto estais en vuestras posiciones y entra pronto en el hiperespacio a velocidad sub-luz.

Eh... claro Maestra, por supuesto como gustéis.

Parezco algo contrariada, en el fondo me apetecía quedarme charlando con Dash es un tipo muy interesante y... no, soy una Jedi no puedo pensar en esas cosas.

Será interesante buscarlos, pero... ¿no meteremos en un lío a Dash? Por cierto, se ha ofrecido a llevarnos a Coruscant a cambio de que yo sea su copiloto.

Tu maestra te mira entrecerrando un poco los ojos cuando hablas del piloto espacial.

Parece que te ha caido muy bien, el tal Dash. No parece un mal tipo, pero recuerda que trabaja para el enemigo. De todas formas si se ha ofrecido a llevarnos de vuelta a Coruscant no podemos negarnos, aun asi supongo que nos dara tiempo de dar una vuelta mientras acaban de descargar. Tatooine no es precisamente el sitio mas bonito de la galaxia, pero parece que no pasaremos demasiado tiempo aqui. No se lo digas a nadie, pero me muero por llegar a Coruscant!

Empezais a caminar hacia el exterior de la nave. Alli, Dash esta hablando con un gran mientras otros cuatro tipos manejan una grua que descarga las cajas del compartimento de carga. El hangar en el que os encontrais es enormemente amplio y puedes ver varias naves que reposan alli mientras sus dueños pasean por todos lados. La salida es una enorme puerta metalica que esta abierta de par en par sin nadie que la vigile.

Una vez fuera, el barullo es todavia mas intenso que antes. Seres de todas las razas que puedas imaginar, androides, monturas enormes y otras no tanto que se mezclan con varios deslizadores de superficie. El viento hace que el polvo vuele por todas partes haciendo que vuestra vision se torne borrosa, pero no os cuesta demasiado toparos con varios establecimientos, desde tiendas de armas y repuestos hasta bares y cantinas. Parece que en esta ciudad el comercio funciona bastante bien.

Bueno, mi querida padawan, por donde empezarias tu?

Sí, es un chico majo la verdad... además el sólo hace transportes así que técnicamente no trabaja con los malos, la gente tiene que ganarse la vida con lo que puede no todo el mundo tiene una orden para ganarse su sustento.

Me doy cuenta de que quizás estoy defendiendo en exceso a Dash cuando nadie le ha atacado y me quedo unos instantes en silencio.

Me han dicho que en Tatooine hay muy buenas cantinas, por otro lado no es más que un planeta desierto así que no hay más que arena por ver... Maestra...

Me quedo unos instantes en silencio.

¿Es... es posible...? no, supongo que no.

Kael te mira extrañada ante tu ultima frase.

Que es o no es posible, querida? Bueno, vamos a una cantina y me lo explicas mientras nos tomamos algo.

Entras detras de ella en una de las tabernas que hay repartidas por toda la calle. Es como casi todas las cantinas que has visto hasta ahora, un nido de ratas y serpientes, entre los que hay algun buen piloto. Kael se sienta cerca de la barra y te indica que te sientes a su lado mientras pide dos bebidas. La gente a vuestro alrededor habla de muchas cosas y prestando un poco de atencion no es dificil enterarse de los ultimos chismes y cotilleos.

No importa Maestra, supongo que son tonterías por culpa de mi juventud... me preguntaba sólo si sería posible conseguir unas vacaciones o algo así...

Me siento y cojo la bebida mientras estoy atenta a lo que sucede a mi alrededor.

Empiezas a escuchar la conversacion que esta teniendo lugar a tus espaldas. Parece que despues de todo no sera un viaje muy tranquilo.

- De verdad no lo has visto? Dicen que es el lider de una organizacion criminal muy importante, un tipo enorme con una armadura negra. Al parecer esta buscando a alguien.

- Todo eso no son mas que cuentos, aqui en Tatooine no hay nada que valga la pena. No creo que venga nadie a buscar nada, pero vigilare por si acaso. Antes he visto a unos soldados muy raros patrullando las calles.

Maestra... no me preguntes por qué pero me parece que el General nos ha seguido...

Pongo el oído por si puedo escuchar algo más, esta vez sí le derrotaremos.

Quizás esta vez podamos acabar con él.

La cara de Kael empieza a mostrar signos de preocupacion.

Lo he oido, Anen Sei. Ya viste lo poderoso que era el general y los hombres de los que disponia. Creo que lo mejor sera salir de aqui con Dash y avisar al consejo jedi de la situacion. Vamos, volvamos a ver si ya han terminado de descargar la nave.

Tu maestra te coje del brazo y te estira hacia la puerta.

Pero... podemos detenerle Maestra, sabes que puedo con él si en el combate le herí... ademas Dash tiene trabajo.

A pesar de mi protesta avanzo con mi maestra, sé que no va a cambiar de parecer pero no me parece adecuado huir.

Estais a pocos pasos de la cantina cuando dejas de protestar. De repente tu maestra te suelta el brazo, saca su espada laser y la enciende. Ante vosotras se encuentran un par de matajedis apuntandoos.

Demasiado tarde, tal vez tengamos que luchar contra el general despues de todo. El de la izquierda para ti, yo me encargo del otro.

Kael se lanza contra uno de los soldados de armadura gris, pero este es mas veloz y consigue esquivarla sin problemas.

El soldado que acaba de ser atacado levanta su arma e intenta golpear a Kael en la cabeza, pero no consigue acertar cuando la maestra jedi se aparta rapidamente de su lado. El otro matajedis sigue apuntandote con su arma sin inmutarse. Una voz metalica sale de su casco.

No se resistan, tenemos ordenes de no matar a no ser que sea necesario. El general desea verlas y debemos llevarlas ante su presencia.

No es muy cortés el General, yo esperaba otro recibimiento después de lo que hemos pasado juntos.

En un mismo movimiento saco mi sable de luz y con un giro sobre mí misma a la vez que me agacho le dirijo el sable hacia la zona media del cuerpo impactándole de lleno y situándome en un lateral para que le cueste más hacer un contra ataque.