Partida Rol por web

Bueno... ahora que la novata se ha ío a dormir, es hora de que hablen los adúlteros. El Señor de los Filos nos conoce a todos menos a Aida. Creo que debería ser la novata la que llevase la mochila de la patrona, y creo que durante el viaje debemos hacer como que no la conocemos de ná.

Y si me disculpáis... Si es cierto lo que el aerocalesero dijo de Forsyth's, que está llena de extranjeros, merece la pena preguntarles a los otros clientes de dónde son, dónde han estao y cómo han viajao por esos sitios.

Demonfly agarró su jarra y fue a socializar a una mesa cercana para reunir algo de información antes de irse a dormir. Básicamente, podían ir a Rhukaan Draal por territorio de Breland o atravesando el país de los gnomos, que no tenía muy claro Daisy Sue que las acreditaciones de la mochila mágica fuesen también válidas en Zilargo.

Tras ser leida la carta por Fin, todo quedaba bastante claro, ahora sabiamos el motivo de la huida de la dama Cannith. Todos parecian haber aceptado ya la mision, pero el paladin seguia pensando en la suya, ¿la dejaba de momento a un lado y seguia con su, al parecer, nuevos amigos o les decia adios?

El grupo estaba bien formado, pero no podia dejarles solos, primero porque se había propuesto a sí mismo ayudar a todos las gentes de buen corazon, y la dama Cannith lo parecia, y segundo porque estaba cogiendo "cercania" con este grupo tan dispar

-Mmmm.... bien, para llegar alli, necesitaremos un gran suministro de comida y armamento, y teniendo en cueta a los que nos siguen, deberiamos contratar a un explorador que nos lleve por caminos seguros y poco transitados, ¿que os parece?
 

Haces memoria sobre tus conocimientos en heráldica, Casas nobles, conocimientos de historia y chismes de posada para sacar a flote todo lo que sabes sobre la Casa Cannith. Recuerdas que esta era una Casa de fabricantes y artífices. Durante la última guerra los Cannith diseñaron, fabricaron y vendieron armas a los contendientes. Pero cuando Cyre fue destruida por el Día del Luto los dirigentes de la Casa fueron destruidos. Los Cannith quedaron divididos en tres facciones. Cannith Occidental, Cannith Meridional y  Cannith Oriental.

Respecto a Elaydren, no recuerdas que ella os mencionase en ningún momento a que facción pertenecía. Tal vez alguien de la familia Cannith pudiese aclararte este punto. Sobre el tal Failin o sobre el laboratorio Albohogar no sabes nada. Recuerdas que Elaydren habló del Albohogar como un laboratorio secreto en Cyre que funcionó durante la guerra.   

En la soledad de una azotea convocas una bandada de murciélagos. Atas a las patas de algunos de ellos pequeños mensajes y les ordenas partir al vuelo en busca de respuestas. No es un gran medio de comunicación. Puede ser lento y limitado en cuanto al volumen de cosas que pueden transmitirse. Pero confías en que  los druidas puedan darte la mejor de las informaciones sobre las Tierras Enlutadas.

Durante unas dos horas esperas. Las estrellas se alzan en la noche. Queda poco para que amanezca. No duermes y ocupas el tiempo reflexionando. ¿Quién era el bueno y quién el malo de toda aquella historia? Por una parte la dama Elaydren representaba a los Cannith. Buscaba recuperar un antiguo esquema para su casa. Pero al mismo tiempo admitía que habían facciones dentro de la propia Casa que podían usar ese esquema con fines malvados. Los Cannith habían creado a los forjados. Les habían dotado del don de la vida. Pero también era cierto que los crearon con un motivo en mente...enviarlos a la guerra. Miras tus propias manos...No necesitas comer ni beber ni descansar. Tu piel es metálica y podría ser mejorada como la de Ariete con placas de adamantita. Tus brazos son como los de un humano pero sabes de otros forjados que , directamente, tienen mazas por puños o terribles púas en sus antebrazos y espinillas. Si, que duda cabe. Sois soldados perfectos...Forjados para la guerra... 

Sacas un pequeño objeto de tu bolsa. El mensajero definitivo que atrapastes y que, sabes, contiene el último mensaje de Sable. Su legado de vida y muerte. Podrías ponerlo en tu propio pecho y comprender ese mensaje. Pero...por algún motivo no lo has hecho hasta ahora. Tal vez sea porque sabes que le verás morir otra vez aunque esta vez será peor. Le verás morir desde "dentro".

Sable murió por el Señor de los Filos...¿Quién era en realidad ese forjado? ¿Habría combatido en la última guerra a las órdenes de algún general de Cyre? ¿Cuántas veces le habrían llamado cara de lata...? Entonces los ves llegar. 

Uno de ellos lleva una carta sellada y lacrada que deja caer sobre tí. En el interior hay una carta breve escrita de puño y letra por un conocido tuyo.

" Las Tierras Enlutadas son un lugar maldito. Una niebla grisácea cubre sus fronteras. Más allá de la bruma este lugar continúa siendo un macabro recordatorio de la Última Guerra. Un recuerdo que nunca cicatriza. En algunas zonas el suelo se ha convertido en cristal astillado y en otras los cadáveres intactos de soldados cubren los campos de batalla como si hubiesen muerto hace tan sólo unas horas. Allí las criaturas mutan en seres más horribles. Hay tormentas mágicas, muertos animados y toda una panoplia de horrores son posibles. hay quien dice que es el reflejo del infierno en Eberron. Nadie sabe exactamente que sucedió. Lo que si sabemos es que nadie vive allí...excepto los seguidores del Señor de los Filos. Este forjado,loco para algunos y carismático para otros, intenta crear allí un imperio sólo de forjados."

 -Hablo poco mal tu idioma...-te dice mientras bebe otra jarra de cerveza-. Rhuukan Draal lejos muy de aquí. Tu puedes ir. Barco. Lyrandar, barco,  tres...no tres... cuatro días. Si tú oro mucho, mucho más rápido Casa Orien, ehhh... ¿sastyreg?- te dice mientras hace un círculo con el dedo sobre la mesa. Con señales acabas interpretando que se refiere a un portal de teletransporte-. Pero mucho caro. También rayocarril hasta Sterngate...Puertadura...tres días.Luego Marguul, caravana. Montañas difícil.Difícil. Ir con Orien caravana. Doce más. Barco...ehhh...barco shiuuuu...-te hace gestos con la mano como si esta volase por el aire. Luego te señala el cielo- Shiuuuu... No creo barco shiuuu... ¿Tomas copa?

Daisy se acerca a una mesa cercana a hablar con un semiorco algo mayor que ella. Tiene el rostro curtido por el sol y un porte bastante elegante para las horas de la noche que son. Powaqqatsi ha abandonado la mesa y no reaparece por el momento. Adie ha ido a descansar...

En la mesa quedáis Alfrik, Ariete y Finn, el cual permanece sumido en sus pensamientos.

Sastyreg, sí... Te refieres a un bujero de teleportar. Nunca viajé en uno.

Demonfly siguió escuchando, mientras pensaba que lo mejor era usar un teletransporte de la Casa Orien hasta Rhukaan Draal pagado por la linea de crédito que tan generosamente les había extendido su generosa patrona. Luego, la conversación se truncó. ¿En serio quería tomar una copa con ella? Vaya... La pregunta puso a Daisy Sue en un apuro, porque no se había terminado aún su jarra.

Glup... glup... glup... glup...

Ahora sí, la jarra estaba vacía y la semiorca podía tomarse otra copa. Aquel era el semiorco más atractivo que había visto nunca, con esos ojos profundos y el hoyuelo en el mentón, y su pelo rojo como el fuego... O tal vez la cerveza estuviese jugándole una mala pasada a su sentido común.

Tal vez deberían continuar la conversación en el idioma de los orcos...

[Perdona, soy una maleducada: mejor hablar en la lengua de los orcos. Mi nombre es Daisy Sue Demonfly, tomemos esa copa juntos... ¿Pero invito yo, de acuerdo? Y dime... ¿por qué crees que los barcos no van a volar? ¿Te refieres a que no crees que haya ningún barco que haga la ruta Sharn-Rhukaan Draal?]

[Por cierto... ¿a qué te dedicas, ...?]-dejó la frase en el aire, tratando de recordar si el semiorco le había dicho el nombre al principio de la conversación, pero quedó como si quisiese que el extranjero completase la frase diciendo su nombre.

Escribió de regreso a su amigo druida:  Necesito aliados en las Tierras del Luto.  ¿Algunos forjados moderados?  ¿Alguna secta druida trabajando en la restauración de la naturaleza allá?  ¿Cómo contrarresto estas dificultades de la zona?  ¿Que sirve contra la bruma y tormentas mágicas?  ¿Cómo sorteo el terreno cristalizado?  ¿Cual es la mejor defensa contra los no-muertos y contra las criaturas mutantes que podría encontrarme? 

Muchas preguntas.  Envío los murciélagos de regreso.  Luego se quedó pensando:  

Me pondré el mensajero alado de Sable.  Así sabré más del sitio.  A lo mejor puedo hacer un puente con las comunidades de forjados allá, no con los fanáticos, sino con los normales, como Ariete o como yo. 

Buscó a Ariete, a Daisy y a Finn para que estuviera con él cuando lo hiciera.  Confiaba que ellos sabrían qué hacer si pasaba algo raro. 

 Abrió su placa torácica en el lugar donde iría el mensajero.  Lo hizo lento, quitando los seguros uno por uno. Sacó la pieza voladora de su contenedor.  Estaban en un cuarto cerrado, las ventanas tenía sus cubiertas de madera cerradas firmes, así que la pieza no podría salir.  La acomodó en su lugar y ...

-¡Claro!...- te responde en orco seguido de una sonora carcajada-. Disculpa mi falta de entendimiento a estas horas de la noche y con este número de jarras. No hay aerobuques de Lyrandar que vayan a Darguun. Cuestiones de política imagino. Un barco normal , o incluso uno impulsado por elementales de agua, no pasa de la costa...Un aerobuque...podría llegar mucho...mucho "más lejos"...  -te guiña un ojo mientras bebe otra vez de su jarra-. Mi nombres es Rustal. Y me dedico al comercio de ácidos, principalmente entre Darguun y Breland. ¿Y tú, Daisy? ¿Que sueles hacer para ganarte la vida y para entretenerte...?

Finn cierra la puerta del pequeño cuarto. No os ha costado mucho que una de las camareras os dejase reuniros en ese lugar cuando ha visto las tres p.o que le ofrecíais. Ha querido que estuviese también Daisy pero la semiorca parecía tener cosas mejores que hacer. Continuaba con su búsqueda de información

Powaqqatsi ya ha abierto una parte de su pecho separando unas peizas. En su mano derecha tiene el mensajero definitivo que surgió del pecho de sable. Os ha pedido que estuvieseis con él en el momento en el que fuese colocar ese artefacto en su propio cuerpo. ¿Y si tuviese un efecto extraño y dominase al druida durante el proceso? ¿Y si fuese una trampa y explosionase? Bueno...en este último caso sería una muy mala idea el reuniros aquí. De hecho será mejor advertirle de este extremo antes de que sea demasiado...

¡Clack!  El mensajero definitivo salta de la mano del druida al orificio en su pecho como si de hierro que se ha acercado mucho a un imán se tratase.

...¿tarde?

Ves a Alfrik enfurecido frente a ti. Blande su hacha ferozmente. Ves a más gente a tu alrededor. Todos luchan contra ti. Es como ver una película a cámara lenta en la que el contorno está difuminado. De repente un mensaje suena en tu cabeza...

"Sigo en Sharn. Sé donde debo ir. Sé donde se encuentra el esquema.Está en la base de la torre Dorasharn. No te fallaré o moriré en el intento, como hizo nuestra hermana Tajadora y nuestro hermano Puñal. La Cannith ha enviado a un grupo.Ellos son los que los han matado. Entre ellos hay traidores. Entre ellos hay amigos de quienes los crearon para matar y morir. Me dan lástima como te la darían a ti. Siervos, esclavos...han perdonado el daño que hicieron a nuestro pueblo. Les haré pagar por ello.Tienen el esquema, lo han conseguido. En cuanto lo consiga regresaré con vosotros , con mis hermanos."

Es lo último que escuchas antes de ver como Alfrik descarga su golpe contra tí. Un fogonazo, humo, el techo de una gruta. Y luego, nada. 

Desde luego, la conversación en orco estaba siendo mucho más fluída...

Jajaja... para el carro, Rustal. ¿Es asín como impresionas a las jovencitas? ¿Insinuando que tienes tu propio aerobuque?-si no, Daisy Sue había malinterpretado el significado del guiño.

Demonfly empezó a atar cabos. Si no hay aerobuques de Breland a Darguun por razones políticas, ¿que Rustal hiciese esa ruta en un aerobuque significaba que era un contrabandista fuera de la ley? La justiciera se lo podría perdonar por ser tan encantador. Y la verdad, es que aunque con los gastos pagos del viaje tuviesen la oportunidad de hacer un viaje directo por teletransportador, la semiorca estaba reconsiderando la posibilidad de hacer un trayecto más largo si era con Rustal.

Pues la verdá es que prefiero ir en el compartimento de carga de un aerobuque, y pagar el viaje a un camarada mestizo, que ir comodona en un vagón de rayorraíl y que el dinero de mi pasaje acabe en los bolsillos de unos malditos inginieros nomos. Perdona, es que hoy tuve que aturar a una noma muy petarda... son lo peor.

Por desgracia, no depende de mí. Estoy haciendo de niñera de los de esa mesa de ahí-señaló con el pulgar por encima de su hombro-. Dos cara de lata de gran tonelaje y un enano que se marea en aerocalesa no son lo mojó pa viajar por los cielos.

Yo es que soy caz...-no quería poner nervioso al contrabandista con la palabra cazarrecompensas, así que reformuló la palabra-cazurra, me crié en una granja y no suelo relajarme estando en una ciudá. A mí lo que me gusta es estar con las vacas, o las cabritillas, ordeñar lechuzas, y tó lo que viene siendo la vida sencilla de campo. Pero, ah, amigo... hay que ganarse los cuartos y trabajar. No queda otra que venir a Sharn pa hacer dinero.

Me junté con una cuadrilla y hacemos recados para las grandes Casas. Pagan bien, no me quejo, pero a veces es piligroso y hay que repartir algunos mamporros. El último encargo es ir a... ¿cómo se llamaba el sitio? Cantera Carmesí. ¿La conoces? En Rukandral, o como se diga, un tipo llamado Failin iba a ayudarnos a llegar a Cantera Carmesí, pero en realidad Rukandral es solo un sitio de paso, no a dónde la Patrona quiere que vayamos. No sé si Cantera Carmesí tiene puerto para los aerobuques para volar allí directamente... imagino que no.

Cuando Powaqqatsi vino a la mesa que compartían Daisy Sue y un atractivo semiorco, Demonfly agitó la mano como quién espanta moscas para que el forjado se fuese sin contar con ella a hacer lo que quiera que quisiese hacer con un Mensajero Definitivo.

- ¡Esp...!!- Las palabras quedaron ahogadas y sin terminar en la garganta del semielfo mientras miraba cauto a su compañero forjado.

Ahora que lo pensaba con un segundo de reflexión quizá no hubiese sido la mejor de las ideas meterse en un pequeño cuarto con aquellos dos forjados de personalidad tan volátil e ideas aún peores.

No sabía que pretendía el druida, pero su sentido común le chillaba que meterse en el cuerpo un artefacto que pertenecía a quién buscaba su muerte, y que no sabían como funcionaba, no podía acabar bien.

Lentamente se situó al lado de la puerta, mientras seguía observando a su compañero.- ¿Y bien Pow? ¿Cómo te sientes? - Dijo mientras sentía un sudor frío recorriendole por la espalda, y observando el mínimo indicio que le hiciese salir  por patas de aquella habitación.

-¡Ja, ja, ja!- sonríe  Rustal al darse cuenta de tu interpretación del guiño- ¡Vaya! Debo estar perdiendo facultades comunicativas con cada jarra...¡Ja,ja,ja!- ríe de nuevo al tiempo que se enjuaga unas lágrimas de sus mejillas- No. No iban por ahí las cosas. Mucho me temo que soy bastante más pobre de lo que suele ser un propietario o capitán de aerobuque.   Y , sin embargo, mucho me temo que soy bastante más sinvergüenza y descarado de lo que sería un capitán. Apenas  puedo prestarte algún mapa de la zona...-Momentáneamente se pone algo más serio aunque no termina de borrar una medio sonrisa de su cara. Ahora parece mirarte más intensamente a juzgar por el brillo de sus ojos-. No...No puedo llevarte en aerobuque, Daysi.- Pronuncia tu nombre degustando cada uno de los sonidos que lo componen.- Pero si puedo pedirte que me acompañes a mi habitación...y lo de "volar", ya dependerá de lo que suceda allí... 

Con unas pocas preguntas entre los parroquianos averiguas más cosas sobre las posibilidades de viaje a Darguun. Existe una linea de rayocarril que en tres días llega a Puertadura. Este rayocarril parte cada dos días siendo mañana mismo la siguiente salida. Pero a partir de Puertadura  deberíais continuar durante otras doscientas millas por el paso de Marguul. La mejor forma de hacerlo es mediante una de las caravanas que la misma casa Orien lidera. Este tramo os llevaría otros doce días. La buena noticia es que puedes comprobar  los documentos que tenéis son también cartas de crédito por lo que los gastos estarían pagados.  

El teletransporte es otra opción. Pero su precio es exageradamente alto. La Casa Orien puede teletransportar a un viajero por 10mo la milla recorrida. Las quinientas millas hasta Rhukaan Draal se recorrerían en  segundos...a un precio de 5000 mo por cabeza.

Sobre la Casa Lyrandar averiguas que existe un galeón que realiza el trayecto entre Sharn y vuestro destino cada cierto tiempo. Realiza el trayecto en tan sólo cuatro días aunque el viaje puede presentar ciertas incomodidades en base a las condiciones del mar. El próximo galeón zarpa en tres días.

El viaje en aeronaves parece caerse por su propio peso por lo que parecen contarte. No hay capitanes independientes actualmente en Sharn y la Casa Lyrandar no fleta este tipo de embarcaciones a la nación Trasga.

Recuerdas más sobre la Casa Cannith y sobre las facciones. Cannith occidental tiene su base en Buenpuerto, desde donde sirve  a la nación de Aundair, Thrane y los confines de Eldeen. Se encuentra bajo el mando de Jorlanna de Cannith.

Merrix d' Cannith dirige Cannith Meridional y opera desde la propia Sharn controlando las actividades de la casa en Breland, Zilargo y darguun. Cannith Oriental, con base en Korth, opera en Karrnath, los baluartes de Mror y los principados de Lhazaar. está dirigida por Zorlan d'Cannith. La dama Elaydren, si no recuerdas mal, sirve a la Casa de Cannith Occidental.

- ¿Cantera carmesí?- te pregunta a su vez Rustal-. Cantera CArmesí no es nada. Nada que ver allí. Fue antaño un pueblo fronterizo de Cyre. Ahora se encuentra en Darguun, al norte de las ruinas de Lyrenton. Dicen que desde allí , desde sus ruinas,se puede ver la niebla grisácea de las Tierras Enlutadas. Y eso es lo que queda de Cantera Carmesí...nadie va allí.

Daisy Sue sonrió. La de vueltas que da la vida. Ella tenía a Skakan a sus pies, un pretendiente atento que le daba todos los pinchos de carne de rata hervida que podía comer, y a cambio el trasgo solo pedía acurrucarse en su regazo. Sin embargo, ahora mismo estaba ante un guaperas de pelo en pecho que no había hecho nada más por Demonfly que lanzarle un par de sonrisas y guiñarle un ojo.

Dos cosas. Primera: que quede claro que no soy del tipo de semiorca que se mete en la cama de los desconocíos. Segunda: ¡por la Hueste, echemos a volar, Rustal!

La cazarrecompensas se puso en pie y se quitó su amado sombrero para ponerlo sobre ese peinado pelirrojo arrebatador, dispuesta a seguir al mercader a su habitación, o al mismísimo fin del mundo si hiciese falta.

- ¡Que causalidad!- te dice Rustal con fingida sorpresa-. ¡Tampoco soy yo de esos! ¡Tenemos mucho en común! Vamos, pues. Te enseñaré el lugar que me tienen reservado para cuando me hospedo en esta ciudad.

Se levanta de la mesa y deja 4 monedas de plata sobre la mesa. A menos que haya comido y bebido durante días es más que suficiente para contribuir a una más que generosa propina. Le sigues por las escaleras de la posada. ES un establecimiento realmente grande.

-En este primer piso- te señala cuando subís- se hospedan los clientes eventuales. Para mi gusto está demasiado cerca del jolgorio del salón. Pero los que solemos pasar a menudo por aquí tenemos cierta ventaja a la hora de alquilar las habitaciones superiores. 

Llegáis al segundo piso. La escalera en su segundo tramo es más estrecha pero,al mismo tiempo, es mucho más lujosa. Las barandillas están trabajadas en una cara madera y se encuentra pulcramente barnizada. Termina en un pasillo elegantemente iluminada con lámparas de aceite. El suelo está enmoquetado y por el olor a flores deben perfumarla a menudo.

-La ventaja de estas habitaciones- dice mientras abre la puerta- son sus vistas...

 No puedes sino darle la razón en cuanto a lo de las vistas. A través de un pequeño balcón con puertas de cristal, algo poco usual, puedes contemplar una espectacular panorámica de la ciudad. Torres, aerocalesas, cúspides, centenares de ventanas iluminadas, puentes, plazas elevadas...

 - Esta ciudad es demasiado atractiva como para no deleitarse con sus vistas...Demasiado atractiva para no disfrutarla-escuchas su voz a tu espalda-. Que es lo mismo que he pensado cuando te he visto hoy...

Cuando te das la vuelta ves que Rustal se ha recostado en la cama.Te sonríe. Sigue llevando tu sombrero. Lo lleva desde que se lo has puesto en el salón.

       De hecho, es lo único que lleva puesto...