Nun se sobresaltó de nuevo con la explosión del crater, se asustó pensando que podría activarse el volcán y provocar un auténtico desastre, fue Suta quien le hizo abandonar tales augurios y se aseguró de que tenía bien enganchado el cinturón de seguridad.
Seguía sentado en el puesto del artillero, vigilando cualquier movimiento sospechoso, si los soldados eran tan amantes de las explosiones podía dárseles por lanzar un pepino a la nave y Nun quería estar preparado.
Suta hizo virar la nave al momento. Si había una explosión, había problemas. Y allí es donde podía encontrarse Sidias y Lucien. El Lekkuan sobrevoló la avenida principal de Kavvarad y recorrió en poco tiempo la distancia.
Un enorme vehículo de tiro había volcado y desparramado su carga por toda la avenida. Una moto deslizadora se había estrellado en su costado, quedando sólo llamas y restos esparcidos. Ese debía haber sido el motivo de la explosión que habían visto momentos antes. La bestia que tiraba del vehículo se revolvía asustada por las llamas, mientras el conductor, ayudado por algunos colonos, trataba de controlarla para evitar daños mayores.
Una nueva explosión volvió a llamar la atención de los tripulantes del Lekkuan.
Más adelante, en dirección al cráter, una moto deslizadora era perseguida y acosada por soldados motorizados. En ella iban Lucien y Sidias, quien disparaba a sus perseguidores.
No di demasiada importancia al choque, lo que sí me llamó la atención fue la persecusión en speeder en la que participaba mi amigo. Claramente debíamos intervenir.
-¡Nun, reventalos a blaster!- comentó el Twi'Lek con una risa violenta y digna de un loco mientras aceleraba hacia los vehículos y hacía al Lekkuan volar a poco más de metro y medio por encima de los techos de las casas y demás edificios.
-Vamos, que tenemos un yedi que transportar-.
Nun se movió como accionado por un resorte cuando vió a los soldados persiguiendo la moto de Sidias y Lucien.
No estaban cerca y eran un blanco en movimiento por lo que Nun se tomó unos instantes antes de accionar el gatillo que disparaba los cañones blaster. Su punto de mira apuntaba hacia un lugar vacío justo delante de los soldados, no apuntaba donde estaba el enemigo si no donde iba a estar buscando así compensar el desfase. Justo en cuanto le pareció que era el momento apretó el gatillo.
-¡Comeros esto!
Motivo: Artillería naval
Tirada: 3d6
Resultado: 11
Motivo: Artillería naval
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 1, 4 (Suma: 7)
Wulryk observaba la escena por el visor de la nave... parecía que estaban por oficiar un rescate Salvador, todavía estaban a tiempo.
La rapidez de las motos deslizadoras no era rival para los motores repulsores de una nave como el Lekkuan. El carguero acortó distancias con los soldados, que quedaron dentro del rango de tiro efectivo de la torreta.
Nun'zacris apuntó y accionó el disparador. Los disparos láser barrieron la zona por delante de las motos perseguidoras, levantando tierra, piedras y humo. La primera de las motos atravesó la nube de escombros, quedando el piloto ciego y desorientado. El soldado trató de reorientarse y recuperar el control con poco éxito. El vehículo fue a estrellarse contra el puesto de uno de los mercaderes instalados en la avenida. A juzgar por la ausencia de explosión, probablemente estaría fuera de combate temporalmente. El resto de los perseguidores, ahora sobre aviso, se dispersó evitando el atanque.
Por delante, Sidias y Lucien se acercaban a los límites del asentamiento, a campo abierto.
Wulryk uso el comunicador.
Si aterrizas delante de Sidas, podemos hacerles subir rápidamente antes que vuelvan a acortar distancia.
La idea del político era válida, y Suta'Raz decidió seguir con aquel plan. Los motores propulsaron a la nave, pasando por bastante a sus aliados. Como frente a ellos había campo abierto no sería un problema aterrizar, pero quizás hacerlo fuese peligroso. Por eso mismo se decantó por activar nuevamente los elevadores de carga una vez la nave estaba levitando quieta a medio kilómetro de Sidias y Lucien.
-¡Subanlos con la speeder y todo, que nos vamos de este pedazo de roca ni bien lleguen!- respondí al Senador.
No sabíamos cuantos soldados había, así que quedarse podía ser muy mala idea.
El senador le comentó a su compañero.
Baxter, todavía esta la chica y el anciano a bordo...
Baker escucha la sugerencia del senador y no es mal plan, rápido y simple, lo mejor para estos casos, así que asintió con la cabeza a la vez que decía -Nun dispara por encima del speeder para hacer que los que les persiguen agachen la cabeza, no importa se les das a los enemigos, solo que no se acerquen-
Baker escucha la pregunta del senador-me temo que no podemos dejarles abajo, acabarían en unas celdas imperiales,
y eso no es una experiencia que no le deseo ni a mi peor enemigo- le responde al senador -lo mejor va ser que
vengan con nosotros de momento y mas adelante se les buscara un sitio seguro donde dejarlos- termina de decir Baker.
Siento el retraso, pero llevo una semana que no para con el trabajo, haber si la semana que viene la tengo mas tranquila y puedo postear mas temprano.
Si, comparto. Simplemente lo mencionaba.
Bien, ¿quieres que de fuego de cobertura mientras manejas la compuerta?
El Lekkuan sobrepasó la posición de Sidias y Lucien, alcanzando el campo abierto al norte del asentamiento, mientras Nun'zacris disparaba la torreta ofreciendo cobertura contra los perseguidores.
Suta hizo que el carguero descendiera hasta quedar suspendido a escasa distancia del suelo de Kavvarad, no sin golpear antes la roca en una maniobra inesperadamente brusca.
Entonces, las alarmas comenzaron a sonar. Habían sido designados como objetivo.
Una nave se acercaba veloz en vector de interceptación, centrando sus armas en el carguero, y se disponía a abrir fuego.
-Nun ocupate de la nave, Wulryk usted y ello cubrimos a Sidias y Lucien, Suta no habra tiempo de asegurar el speeder, en cuanto el speeder este a bordo abre gas a tope y sacanos de aqui- dice Baker mientras prepara el arma y toma punteria contra los perseguidores de Sidias, esperando a que los enemigos esten dentro del alcance del para poder dispara contra ellos.
Parece que esto va ser una situacion explosiva ;).
-¡Oído, Baker!- Confirmó Nun.
Ahora el objetivo de Nun era una nave, orientó los cañones centrándola en su punto de mira y disparó sin pensárselo dos veces. Pero no está del todo concentrado, y los nervios le juegan una mala pasada.
Motivo: Artilleria Naval
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 1, 1 (Suma: 4)
Creo que me acabo de disparar a un pie, si eso fuera posible.
Sin dar mucha atención a los comandos de Baker el Twi'Lek murmura maldiciones por lo bajo al escuchar las alarmas dispararse de aquella forma. Calibro a la nave para que se dispare hacia arriba ni bien nuestros compañeros estén a bordo. Aquella sería la maniobra evasiva más extraña de la historia, pero si lo hacía bien indudablemente pasaría a la misma.
El elevador bajó y estaba listo para sus camaradas, y por primera vez en la vida pensó en que dejar que el speeder quedase allí tirado no sería tan grave.
-Vamos Sidias, rápido- dijo a nadie en particular.
Wulryk se veia venir una brusca maniobra, por lo que guardó el rifle y tomó su pistola, aferrándose a una viga con la otra mano.
- ¡Suta! - la radio cobró vida transmitiendo la voz de Sidias -. ¡Esa maldita nave va a abrir fuego!.
La nave de ataque abrió fuego.
La ráfaga de las armas frontales de la patrullera barrieron el suelo de Kavvarad acercándose hasta impactar en el Lekkuan. Las alarmas de control de daños aullaron anunciando que los escudos habían sido superados. Sin embargo, éstas no eran las únicas armas de la patrullera. Una torrera buscó un segundo objetivo, centrándose en la moto deslizadora de Sidias y Lucien.
Nun'zacris devolvió los disparos, pero su inexperiencia y la pericia del piloto enemigo le jugaron una mala pasada. La patrullera pivotó evitando los disparos del Twi'lek.
Giré la nave, apuntando a nuestros agresores, y decidí realizar una maniobra arriesgada. Poco tiempo para planear solía traducirse en planes estúpidos, pero los valientes solían ser más heróicos que los mesurados. Los motores dieron impulso al Lekkuán y Suta canalizó toda la energía de escudos a la zona frontal de la nave.
-Baker- grité al comunicador -suelta los detonadores térmicos sobre esos infelices-. Los ojos del piloto estaban inyectados en sangre y una mueca de insanidad mental se dibujaba en su rostro.
-¡Hoy el Lekkuan se gradua como bombardero!-.
En resumen, apunto hacia la nave enemiga a toda velocidad y viro hacia arriba unos instantes antes de chocar. En ese momento el soldado suelta una cantidad enferma de explosivos, de ser posible sobre las armas o cabina.
¿Qué es Star Wars sin pilotos locos?
Nun pensó que sería mejor disparar a aquella amenazante torreta pero la inesperada maniobra de Suta lo desconcertó.
Trató un momento en orientarse y buscó de nuevo la torreta, todo indicaba que dispararía sobre la moto en la que iban Sidias y Lucien.
- ¡Wow Suta, menudo pilotaje!,¡voy a intentarlo con esa torreta!.
Disparó los cañones blaster sin pensar en que podrían recalentarse.
Motivo: Artillería Naval
Tirada: 3d6
Resultado: 4, 1, 4 (Suma: 9)
El Lekkuan se elevó y se dirigió directamente hacia la patrullera. La maniobra de Suta hizo que la otra nave dejara de disparar a la moto de sus amigos y se concentrara en el carguero. Ambas naves intercambiaron disparos.
Los láseres se encontraron con los escudos de ambas naves, pero algunos consiguieron superarlos. La patrullera pareció estremecerse bajo los disparos de Nun'zacris, que no alcanzaron la torreta enemiga, pero impactaron en otras zonas no críticas. Nuevas alarmas y avisos aparecieron en las pantallas de control de daños del Lekkuan, pero Suta no varió la ruta hasta el momento que consideró oportuno. Tiró de los mandos y elevó la nave.
El carguero gimió por las tensiones a las que se vio sometido por la brusquedad de la maniobra. Baker, agradeció haberse asegurado con un arnés, de lo contrario habría caído al vacío. Repuesto, soltó los detonadores.
Bien previendo una acción similar o, más probablemente, para intentar evitar una colisión, el piloto de la patrullera ejecutó una maniobra evasiva. Los detonadores explotaron, pero no alcanzaron la nave enemiga por muy poco.
- ¡Vamos al acantilado del cráter! - la radio crepitó con la voz de Sidias -. Id a buscarnos allí con la plataforma abierta para que podamos meternos rápido.