Partida Rol por web

Como si de un Tetris se tratase, las piezas encajaban en las cabezas. Imágenes de figuras postradas ante el edificio mientras un rayo se proyectaba desde su cúspide hacia un sol sobre la pirámide-zigurat, la mención a un "secuenciador de reacción de masa estelar", una fuente de energía posiblemente geotérmica y una gran instalación de refrigeración y disipación sólo podía significar unas pocas cosas.

Pensaban en las posibilidades al haber encontrado esas estancias, esos conductos y lo que estaban descubriendo.
Muchas ideas y cosas que podrían ser, algunas más locas que otras

- Es posible y sólo posible que esta sea una nave, sea lo que sea es muy importante. También puede ser un centro de teletransporte o comunicación interestelar. Ojalá pudiésemos saber cuantos jaffas hay y quizás podamos sabotearlo momentáneamente.

Andrews pensaba en que si consiguiesen estudiar una fuente de energía como la que tenían en el lugar sería un avance importantísimo ¿podrían pedir ayuda por el portal y capturar el lugar intacto?. Lo descubrirían con un poco de tiempo.

Aquello parecía tener sentido. Era una fuente de energía y al final, el conducto no hacía sino disipar el exceso de calor para que las instalaciones no saltaran por los aires.

Mecánica básica.

Pero eso no nos solucionaba demasiado las cosas pues seguíamos teniendo que salir de allí de alguna manera.

-Normalmente estas naves no necesitan de una gran cantidad de personal. Si consiguiésemos llegar al puente, contando con el factor sorpresa y algún arma que pudiéramos conseguir por el camino, conseguiríamos hacernos con ella. Pero antes hay que llegar y por lo tanto, creo que deberíamos continuar. Estamos en la zona de energía y eso significa que deberíamos ir hacia arriba.

En mi opinión, los sistemas propulsores siempre se encontraban en una zona alejada de los camarotes y el puente principal, por lo que si allí estábamos cerca del origen de la energía, debíamos ascender para encontrar el puente.

Entonces se me ocurrió que aquel lugar también era importante.

-Otra cosa que podríamos hacer es intentar dañar los sistemas, provocar un sobrecalentamiento. Eso haría que alguien bajase a mirar y entonces... podríamos capturarlos y abrir una brecha en la seguridad.

Alan meditó sobre las posibles opciones en base a lo que le comentaban sus compañeros.

- Si esto es una nave y queremos utilizarla no me parece buena idea sabotearla. Ni aunque sea para que vengan a ver qué ocurre. No al menos mientras no sepamos cómo funciona exactamente todo esto y tengamos más conocimiento de esta tecnología. - Comentó. Pero era cierto que si ese edificio era una nave y conseguían llevarla a la Tierra, el avance tecnológico que podía suponer para los Tauri era importante. Muy importante. Su mente militar empezó a evaluar las posibilidades.

- Creo que lo mejor es retroceder a los túneles y seguir avanzando. Busquemos el puente de mando, o algo similar y tomemos esta nave. Como indica Guerrero hay que conseguir armas y utilizar el factor sorpresa. Con suerte todavía no habrán descubierto que no estamos en la celda. - Esperó un momento por si Evans quería añadir algo que cambiase la idea del Mayor. Pero si no era así, el grupo al completo retrocedería hasta los túneles por los que habían escapado y continuarían su avance en busca de otras salidas.

Había llegado la hora de la acción, o eso era lo que pensaba Aldo. Las pesquisas les habían llevado a pensar que aquel lugar donde estaban bien podría ser una nave, sabotearla era una buena opción, pero era mejor opción tomarla prestada, a los ojos de la mayoría, pero...

- Pero si nos hacemos con el control del lugar y, ciertamente, es una nave, es posible que nos logren rastrear - dijo mirando a todos -. Aunque estoy de acuerdo que quizá sea más útil controlar el sitio sin necesidad de sabotearlo, es tecnología de la cual podemos aprender, antes que obligar a nuestros técnicos a reparar algo que no saben ni como funciona, será mejor intentar dárselo intacto, sino la ingeniería inversa será un buen quebradero de cabeza - estaba de acuerdo con Alan, aunque no lo dijera -. Tendremos que volver atrás, pero id pensando un buen plan, si no lo tenemos, puede que nuestro desplazamiento sea de 0, aunque hayamos aprendido algo - añadió alzándose de hombros.

Sin otras opciones aparentemente, el SG-4 volvió sobre sus pasos hasta los conductos de ventilación y reanudó la exploración de éstos. La marcha por el estrecho pasaje continuó hasta que un recodo obligó a los tau'ri a girar hacia el este. En aquella dirección, el conducto continuaba idéntico hasta que alcanzaron el primer pozo que comunicaba con el exterior; la luz del sol lo bañaba y proyectaba sombras de hojas y ramas mientras que raices pequeñas descendían por la superficie metálica de las paredes hasta superar la mitad de la altura. A diferencia de los otros pozos de ventilación que habían encontrado, aquel tenía la turbina rota y el enrejado protector reventado; ambos componentes colgaban frágilmente de una pared lateral, sujetos únicamente por las raices enredaderas, y dejaban vía libre para abandonar el conducto hacia el exterior.

Alan observó por la abertura. Ver la luz del sol le dio ánimos. Miró a sus compañeros de equipo.

- Quizá no podamos hacernos con esta nave, si es que el edificio lo es. Pero ahí tenemos una salida - dijo señalando lo evidente. - Si llegamos al Stargate y podemos avisar a casa sería ideal para que envíen refuerzos y tomemos este lugar. O por lo menos para que estén al tanto de que hay un nuevo jugador entre los Goa'uld. - Un tipo que no sabían si se aliaría con los otros Señores del Sistema, o si entraría en guerra con ellos. Pero un nuevo enemigo para los tauri al fin y al cabo.

- Guerrero. Usted primero. - Indicó a la Sargento. Ella encabezaría la marcha. - Si no hay peligro en el exterior háganos una señal. Evans y Andrews la seguirán. Yo cubriré la retaguardia. -

Aldo acató órdenes colocándose en la posición en la que Alan había mandado, en silencio esperó a que Guerrero realizase su primer avance.

Finalmente, regresamos sobre nuestros pasos y continuamos explorando los conductos de ventilación, con la esperanza de hallar algún camino que en verdad nos acercara más a regresar a casa. Tenía el convencimiento de que tarde o temprano tendríamos que enfrentarnos a los jaffa, por lo que permanecía alerta y pendiente de cuanto me pareciese extraño.

Cuando llegamos a un pozo que parecía abandonado y que comunicaba con el exterior, suspiré aliviada.

-Por fin, una salida -comenté en voz alta, sin esperar respuesta.

El Mayor estableció como prioridad regresar al Stargate y acto seguido, me indicó que encabezara la marcha. Sin dudarlo un instante, le miré y asentí con la cabeza.

-Sí, señor -respondí, mientras apartaba las plantas y salía de la estructura.

La altura del pozo de ventilación no suponía un problema y las raices que crecían abrazadas a la superficie de éste ayudaron en el ascenso de la marine. No tardó más que unos pocos segundos en emerger al exterior y encontrarse rodeada por una espesa maleza. Eran arbustos leñosos, con un tronco grueso del que partían infinidad de ramas tan anchas como pulgares. Las hojas eran ahusadas y carnosas, de color verde oscuro y nerviaciones de un verde más claro. Ramas y hojas crecían con tal profusión que resultaba difícil ver algo a través de ellas que no estuviera a menos de metro y medio de distancia.

Por la posición del conducto de ventilación, la dirección tomada y las vueltas que habían dado, Guerrero debía estar en algún punto del anillo de maleza que rodeaba toda la estructura, con la excepción del camino que conducía a la entrada. Dicha senda debía de encontrarse hacia su derecha, aunque resultaba difícil precisar a qué distancia e imposible verla desde aquella posición. Moverse entre aquellos arbustos tampoco aparentaba ser tarea fácil.

Después de todo cuanto habíamos pasado, conseguir atravesar aquella compuerta no fue nada difícil. Fue todo un alivio salir por fin de los claustrofóbicos conductos y encontrarme con arbustos y ramas, por mucho que aún no estuviésemos en casa. Era lo más parecido a "ir por buen camino".

Sin embargo, los alrededores eran densos y complicados de atravesar. Nos iba a llevar bastante tiempo conseguir atravesarlo. A pesar de todo, era un comienzo y gracias a eso, si conseguíamos orientarnos, existía una buena posibilidad de volver al Stargate. Así que volví a entrar con buenas noticias.

-Despejado, señor. El exterior está lleno de vegetación bastante densa y me temo que nos costará un poco movernos por ella, pero deberíamos poder seguir el contorno de la estructura para alcanzar la entrada principal y orientarnos a partir de allí hacia el Stargate -les comuniqué, una vez me encontré de regreso en el interior -. Sugiero no perder tiempo y empezar a rodearla.

Alan asintió. - Bien, en marcha chicos. - Dijo para los científicos primero, pero para todos en general. 

- Avancen, Guerrero abra la marcha. Yo cubro la retaguardia. - Indicó dispuesto a salir de allí de una vez.

- Cuando lleguen a la entrada principal nos detenemos sin acercarnos. Puede que la tengan vigilada. A partir de ahí ya vemos. - Su impulso guerrero le pedía a gritos que intentara atrapar a alguno de los enemigos para obtener información, pero no estaban ahí por eso, y tenía vidas que proteger. Si los cuatro fueran soldados quizá lo intentaría. Pero siendo dos científicos... y estando desarmados, no tenía sentido.

Habían conseguido salir del lugar, pensaban en la infinidad de conductos que podrían recorrer antes de encontrar algo o incluso caer en las manos de un jaffa cabreado, pero no fue el caso y una vegetación espesa les dio la bienvenida al exterior del edificio.

-Ya tengo ganas de salir de aquí, si conseguimos que nos tomen en serio podríamos conseguir esto, espero que podamos llegar hasta Hammond y que no le aten las manos.

Andrews se movió por el conducto hasta tomar el lugar para salir tras sus compañeros de cabeza, mucha maleza pero más ganas de salir de allí, no veía el momento de respirar el aire fresco del exterior así que con nervios esperaban sus turnos.

El avance entre los arbustos era lento y ruidoso. Ramitas que crujían al paso o se quebraban bajo los pies, hojas secas que chasqueaban al caminar sobre ellas, todo resonaba en los oídos de los tau'ri con un volumen más alto del que sería de su agrado. La marcha sigilosa resultaba aun más lenta. Y la poca visibilidad no ayudaba a disipar la sospecha, o el temor, de avanzar hacia una emboscada de los jaffas. Por suerte, la senda pronto comenzó a ser visible entre el ramaje y las hojas. Parecía desierta.

La observación desde la relativa seguridad del follaje confirmaba esa impresión. En el camino de tierra no se veía nadie. Hacia la izquierda, se dirigía hacia la cañada y ascendía por el estrecho pasaje entre las rocas hacia lo alto de la estribación que limitaba el valle. Por la derecha, el sendero moría en la boca de piedra labrada que servía de acceso a la pirámide-zigurat; más allá de la puerta, la sala de las columnas permanecía silenciosa y débilmente iluminada por los pictogramas fosforescentes de las paredes. No se divisaba a nadie hasta donde las columnas lo permitían.

Volví a salir al exterior, actuando de avanzadilla, apartando los arbustos a mi paso y creando un pequeño sendero que los demás pudieran seguir con más facilidad. El Mayor no tendría demasiadas dificultades pero Andrews y Evans podían necesitar el mayor aclarado posible para continuar avanzando, así que todo era poco para conseguir salir de allí.

Sin embargo, tampoco podíamos ir demasiado deprisa, por si había guardias de alguna clase cerca de la estructura, lo cual no era ninguna locura.

Me detuve un instante al ver lo que nos esperaba, aguardando a que los demás se reunieran conmigo.

-Señor, creo que deberíamos espaciarnos un poco -le dije al Mayor en cuanto llegó a mi posición -. Puedo ir en primer lugar y en el caso de encontrarnos con algún contratiempo, al menos solo me atraparían a mí. Por otro lado, creo que deberíamos dirigirnos hacia la entrada de la pirámide y desde allí ver si hay un camino seguro hacia la puerta.

Salieron al exterior y Aldo se sintió aliviado, no tanto como cuando llegaron a aquel camino y no se encontraron con nadie esperándoles por no haber sido especialmente sigilosos, pero no estar perdido en el interior de aquella estructura era un alivio.

Avanzó agradecido porque Guerrero abría camino entre la maleza, el suficiente como para que ellos pudieran avanzar sin apartar muchas más ramas.

Apartados de la linde del camino, intentando mantenerse ocultos, Guerrero propuso un plan de acción.

- ¿A la pirámide? - preguntó mirando a todos - ¿Al final vamos a intentar recuperar equipo? Yo pensaba que iríamos directamente al Stargate, ya estamos fuera, al fin y al cabo.