Partida Rol por web

Con la boca medio llena de chocolatina me encojo de hombros al no notar nada en el sensor,miro a mi hermano mientras guardo el sensor en mi chaqueta.

No lo se Sam,quizas un Wendigo, un necrofago tal vez? Quizas si volvemos a mirar el diario de papa sale algo,has visto que guapa y joven es la abuela,nos esconderá algo?

-¿Cómo puedes estar pensando en chocolatinas en medio de una investigación? -le pregunté a mi hermano mayor, poniendo los ojos en blanco al oírle-. En realidad, esa criatura podría ser cualquier cosa. No sé si en el diario de papá podamos encontrar algo que nos fuera de utilidad, habrá que mirarlo por si acaso. No creo que Donna sea la responsable de lo que está sucediendo. Una de las víctimas de hace treinta años fue el chico que era su novio por aquella época. Sé que puede resultar extraño, pero, ¿y si la Bestia de Bray Road asesinaba por celos?

Definitivamente no había empezado Sam el día con el pie derecho puesto que no podía encontrar tampoco nada útil en el camino que estaba por aquí. Así como el día anterior con el ordenador, parecía que la suerte no se hallaba de su lado. Era divertido ver como Dean, sin preocuparse tanto, al final había encontrado una cosa, mientras respondía a la pregunta de su hermano.

Era, entre unos arbustos, cerca del suelo, un poco de pelo. Era de color marrón, enredado, con una parte enrojecida. Lo que le hizo notar a Dean esto fue que, junto a ese mechón de cabello corto, se hallaba un anillo.

Era un simple anillo de bijouterie plateada pero que de plata bien podía tener solo el color. Dean no era un experto en estas cosas.

Deberían hacer que lo vea un experto.

Era notorio que el cabello ensangrentado que similaba ser de origen animal estuviera junto a dicho objeto. Sin embargo, si era plata (y eso dañaba a los hombres lobo) no tenía mucho sentido el modus operandi de este. ¿Por treinta años? ¿Sólo hombres? ¿O tal vez sí había atacado a alguna mujer?

Debían seguir contestando a sus preguntas.

-¡Un anillo de plata! -exclamé, sorprendido de que hubiéramos encontrado una joya como esa-. Descartamos con esto que se trate de un hombre lobo... -Miré a Dean, esperando a escuchar alguna posible teoría-. ¿Cuánto crees que llevará ahí el anillo? ¿Treinta años? ¿O un día como mucho?

Decidí agarrar el anillo y guardarlo en uno de los bolsillos del pantalón.

-Tal vez deberíamos llevárselo a un joyero para que lo examine -indiqué, pensativo-. Podría servirnos para determinar a quién pertenece. A veces los anillos tienen las iniciales o nombres de sus propietarios.

Dean se rasca la cabeza señala a Sam como para decir algo y se queda en silencio,se gira,se vuelve a rascar la cabeza y a mirar a Sam.

Pelirrojo y le gustan las joyas, también sabemos que ataca quizas por celos y que es violento, te imaginas que sea un duende irlandés.

 Enarca una ceja y mira a su hermano.

Menciona papa a los duendes en el diarío? Te imaginas un lepr,lepre,chou? Como se diga ... un mini St. Patrick,tu ya me entiendes.

-Sería un puntazo que fuese un leprechaun. Creo que nunca nos hemos enfrentado a uno -comenté, imaginándome directamente al Leprechaun que aparecía en los Simpson-. Aunque creo que será una criatura mucho más bestial, tal vez algún tipo de criatura peluda.

Escucho que Dean menciona que el trozo de pelaje encontrado es rojizo y hago un gesto de negación, observando el cabello de la bestia.

-A mí me parece más bien marrón... -maticé.

Dejemoslo en marròn-enrojecido, de todas formas es un poco raro,por cierto no me has dicho nada de tu conversaciòn con la abuela...ehhh..uuuuuh, Hay que reconocer que tiene un favor la abuela, aunque parece su madre,tia quizás, no se, por un lado me gustaKaren, pero creo que hay algo tras ellas, investigamos su casa mientras trabaja?

-Creo que ya te conté lo que hablé con Donna, Dean -indiqué, haciendo memoria-. Me contó que vio a la Bestia de Bray Road en este cruce y que atacó al que por aquel entonces era su novio, llevándoselo consigo. No dijo mucho más, salvo que todos los desaparecidos habían sido hombres jóvenes. No creo que Karen y su abuela oculten nada raro... Creo que sería mejor si fuéramos al diario en el que trabaja Karen, por si podemos encontrar algo sobre ese tal Joey. Otra opción sería que nos quedásemos aquí, escondidos, haciendo guardia por si ese ser aparece.

Ya se que te contò lo de las muertes y tal, me refiero que si saltaron chispitas, si le gusta el alto fornido con modales de nenaza.

Abre el maletero y saca de su nevera de plastico un pack de 6 cervezas haciendo buena cuenta de una de ellas.

La abuela esta soltera,que fue de su marido? Y de los padres de Karen? Viste alguna foto familiar entre las miraditas qie os dedicabais?

-Dean, ¡si esa señora podría ser nuestra abuela! -exclamé, y no pude reprimir una sonrisa ante la ocurrencia de mi hermano. Adoptando una actitud más seria, añadí-: Pues supongo que después de perder a su novio, se casaría con otro hombre. Aunque es extraño que ni ella ni Karen hayan mencionado en ningún momento a los padres de Karen...

Lanzo una lata a mi hermano para que me acompañe ha beber.

Lo ves como es raro!, creo que tu aventura univertaria  a dormido los instintos que papa nos enseñò, debemos trazar un plan, aunque abuela y nieta sean preciosas igual tienen algo que ver en esto,no digo que maten ellas pero igual el duendecillo borracho lleva años siendo su guardian.

-Entonces, habrá que volver a la casa de Donna -indiqué, pensativo. No creía que Donna y Karen fuesen responsables de los asesinatos, pero, ¿y si la Bestia era alguien muy sobreprotector con ellas?-. No creo que vayamos a encontrar nada que las incrimine, pero al menos así vamos descartando sospechosos.

Donna, que bien suena en tu boca ese D O N N A, esperamos a que salgan de casa y nos colamos, también deberiamos ir al ayuntamiento y ver partida de nacimiento y defuncion tanto de los padres de “mi” Karen como de sus abuelos.

uhhm Donna , que guapa eres Donnnna, que haces trenzas en mi melena de nenaza oh Donna 

Se guardaron “la evidencia” y esperaron  a que la casa de Donna estuviera vacía. Claro que no sabían el horario de la joven abuela, solo el de su bella nieta. Dean no dejó pasar las sugerencias al pobre Sammy, es que su hermano mayor pensaba que divertirse un poco tal vez era una buena manera de superar un poco el dolor de Jess.

Llegaron a la casa de dos plantas y tejado azul sin ver a nadie en la puerta. Pero eso no indicaba que Donna estuviera afuera. Aunque, por otro lado, si el Dinner era de ella, bien podría ser que estuviera allí ayudando a Karen.

Podrían ir a ver si había alguien tocando y saliendo, como en ese juego de niños de ring  y escape, o probar otra manera de ver si había alguien en casa o no. El barrio era tranquilo y solo se encontraban algunas casas más alrededor pero nadie parecía estar.

O no…

A los cinco minutos de que los muchachos estaban esperando qué acción tomar en el Impala, vieron pasar una muchacha de cabellos oscuros. Estaba con su semblante serio, se detuvo de pronto frente a la casa, subio los pocos peldaños del frente y golpeó la puerta.

Dirigí una mirada extrañada a Dean. ¿Quién era esa joven de cabellos oscuros que llamaba a la puerta de Donna a aquellas horas?

-Voy a hablar con ella -le indiqué a mi hermano, pensativo-. Puede que nos proporcione información que pueda resultarnos útil para la investigación.

Dicho esto, bajé del Impala y decidí acercarme hasta la chica.

-¡Disculpe! -la llamé, mientras me aproximaba, para no sorprenderla por la espalda-. ¿Ha venido buscando a Donna?

Antes de que pueda parar a Sam ya a salido del coche.

Mi hermanito lanzado? y hablando con una joven? Esto tengo que verlo.

Me abro una lata de cerveza y pongo la radio,no muy fuerte ya que quiero oir, quiero banda sonora mientras veo como se hunde el barco.

-¡Disculpe! -la llamé, mientras me aproximaba, para no sorprenderla por la espalda-. ¿Ha venido buscando a Donna?

Quiso saber Sam mientras Dean lo observaba desde el Impala como quien ve una trama buena de película y trata de adivinar qué iría a suceder.

-Sí...

Dijo ella mirándolo con desconfianza.

Desde cerca la chica aparentaba tener menos de veinte años, o como mucho 22. Poseía un aspecto de niña atemorizada, ojos redondos y llenos de desconfianza que estudiaban al muchacho con recelo. No había aun vislumbrado el negro coche ni al hermano número dos en el mismo.

-¿Quién es us... usted?

-Mi nombre es Sam Winchester -me presenté, aproximándome a la muchacha-. Mi hermano y yo hemos venido a realizar un artículo sobre las desapariciones que están teniendo lugar en el pueblo. Habíamos hablado con Donna hace un rato... -Me fijé entonces en la expresión asustada del rostro de la chica-. ¿Está bien? ¿En qué puedo ayudarla?

Al ver a la chica un poco asustada salí a la defensa de mi hermano, no sea que nos acusen de intentar algo....

Hola, perdona , yo soy Dean, el Hermano de este chico tan anormalmente alto, estamos aqui por Karen, queremos averiguar y solucionar lo que sea que esta pasando.

Le dedico un guiño y una de mis mejores sonrisas antes de mostrarle el paquete de patatas fritas sabor Ranchero.

Gustas?

La chica mira a Sam que se presenta y explica brevemente lo que está haciendo allí, y luego a Dean quien le ofrece una papa y pone su sonrisa de seductor. No acepta el ofrecimiento salado pero al menos responde:

-Me llamo Alice.

Se frota los brazos nerviosamente.

-Donna  me...  me Aayuuda con mis eestudios.

Explica.

-Iba a estar esperándome ahora, pero pero todavía no está. No está en la casa.

Por como habla, los jóvenes comprenden que la chica tiene algún impedimento de comunicación, o tal vez es que no fue al colegio nunca porque pareciera que le cuesta expresarse fluidamente.